CENTENARIO DE LA SELECCI?N

Tras no lograr ninguna victoria en la Eurocopa de 1980, Espa?a acoge el Mundial de 1982 con ilusi¨®n, pero acaba protagonizando otra actuaci¨®n bochornosa. Solo gana a Yugoslavia y se despide en la segunda fase. Una vez superada la decepci¨®n, afronta la Eurocopa de 1984, a la que llega tras el milagroso 12-1 a Malta. Con Maceda como gran protagonista en cuartos y semifinales, Espa?a se planta en la final, donde cae contra Francia. Ha faltado poco. M¨¢s lejos queda el ¨¦xito en la cita mundialista de 1986. Pese a debutar con derrota ante Brasil, al no conceder el ¨¢rbitro un gol de M¨ªchel, la Selecci¨®n avanza a cuartos gracias a la gran actuaci¨®n de Butrague?o en octavos. Sin embargo, B¨¦lgica acaba con el sue?o espa?ol en la tanda de penaltis, continuando una maldici¨®n que costar¨¢ romper. La Eurocopa de 1988 cierra el c¨ªrculo con el que comenz¨® la d¨¦cada. Nuevo fracaso, como en 1982. Espa?a se estrena con una gran victoria ante Dinamarca, pero Italia le impide superar la fase de grupos.

La Selecci¨®n espa?ola gana por primera vez en su historia en Wembley. Inglaterra es una aut¨¦ntica ¡®bestia negra¡¯ para Espa?a en aquella ¨¦poca y nadie apuesta por la victoria visitante en aquel partido. Satr¨²stegui y Zamora fueron los goleadores.

La Selecci¨®n espa?ola consigue una meritoria victoria en Wembley por primera vez en su historia. Falta a?o y medio para que el Mundial se celebre en Espa?a y un buen papel en uno de los estadios m¨¢s m¨ªticos del f¨²tbol europeo cargar¨ªa de moral al grupo de Santamar¨ªa de cara a dicha cita mundialista. La presi¨®n cae claramente del lado ingl¨¦s. Las casas de apuestas de la ¨¦poca dan por hecha una c¨®moda goleada local. A la tensi¨®n habitual de un partido contra una gran potencia se la suma una carga emocional: Quini est¨¢ secuestrado desde el 1 de marzo.

Pero el f¨²tbol no se puede predecir. El partido es todo lo contrario de lo esperado. Santamar¨ªa da con la tecla y la primera parte de Espa?a es imperial. Juanito se adue?a del encuentro y lanza contragolpes veloces. A los cuatro minutos, Inglaterra se ve con un gol en contra, obra de Satr¨²stegui, que finaliza un letal ataque en la l¨ªnea de gol. Sin embargo, las dudas se apoderan de la Selecci¨®n cuando, en el minuto 27, a pesar de la clara superioridad espa?ola, Hoddle pone las tablas en el marcador, con un fuerte derechazo. ?Habr¨ªa sido solo un espejismo la superioridad mostrada hasta entonces por Espa?a? No esta vez. Cinco minutos despu¨¦s, otro veloz contraataque lo culmina Zamora con un disparo cruzado que Clemence no detiene. El 1-2 ya no se mover¨ªa. Un seguro Arconada y una zaga firme se bastan para detener las acometidas inglesas.

Al final del partido, los jugadores conocen una noticia esperad¨ªsima y mejor que la propia victoria obtenida en tan magno escenario: la Polic¨ªa hab¨ªa logrado liberar a Quini en Zaragoza. La victoria es para ¨¦l.

• Inglaterra: Clemence; Neal, Osman, Butcher, Sansome; Hoddle, Robson, Brooking (70¡¯ Wilkins); Mariner, Keegan, Francis (84¡¯ Barnes). (Entrenador: Greenwood)
• Espa?a: Arconada; Camacho, Maceda, Tendillo, Gordillo; Joaqu¨ªn, V¨ªctor (68¡¯ Montero), Zamora, Juanito (84¡¯ Dani); Satr¨²stegui, Marcos. (Entrenador: Santamar¨ªa)
• ?rbitro. Walter Karel Echweiler, alem¨¢n. Amonest¨® a Maceda.

Satr¨²stegui pone los cimientos de la haza?a con su tanto a los cuatro minutos. En la imagen el propio delantero de la Real Socieadad celebra la consecuci¨®n de este primer tanto del encuentro. Espa?a logra de esta forma una victoria internacional de gran prestigio.

Tres d¨ªas despu¨¦s de empatar con Honduras, Espa?a logra su ¨²nico triunfo en un nefasto torneo. Para el recuerdo queda la jugada del penalti pitado a Alonso (una falta fuera del ¨¢rea). Juanito lo transforma. Saura decide en la segunda parte.

El Mundial de 1982 hab¨ªa empezado para Espa?a con un mazazo muy premonitorio. Empatar con Honduras no entraba en los planes y al anfitri¨®n le tocaba ir a remolque. El segundo escollo es Yugoslavia y ya no valen medias tintas: ganar o jug¨¢rsela en el ¨²ltimo partido, a saber con qu¨¦ necesidad. Santamar¨ªa anuncia cambios, aunque luego solo meti¨® a S¨¢nchez por Joaqu¨ªn, a quien mand¨® a la grada.

La afici¨®n de Valencia se vuelca una vez m¨¢s con la Selecci¨®n, a quien pronto se le pone el partido cuesta arriba: a los diez minutos, Gudelj remata de cabeza (los espa?oles piden mano) completamente solo. Alonso se convierte en el l¨ªder que necesita Espa?a y en el protagonista de una de las jugadas m¨¢s recordadas del torneo: arranca con el bal¨®n desde el centro del campo y, fuera del ¨¢rea, es derribado por Zajec. Lund-Sorensen pita penalti. L¨®pez Ufarte lo lanza fuera, pero el ¨¢rbitro vio que Pantelic se adelanta y ordena repetirlo. ¡°Lo tiras t¨² ahora¡±, le dice L¨®pez Ufarte a Juanito, que no falla.

Tras el descanso, los revulsivos. Entran Quini y Saura y, tres minutos despu¨¦s, a la salida de un c¨®rner, el primero no acierta en su remate, pero el segundo toca lo justo. ?Gooool! ¡°?Campeones, campeones!¡±, vitorea la afici¨®n. El triunfo debe dar paso a una mejor¨ªa, pero nada m¨¢s lejos de la realidad. La Selecci¨®n no volver¨ªa a ganar en todo el torneo. Se estrellar¨¢ ante Irlanda (1-0). En la segunda fase, en Madrid, Alemania le deja sin opciones (2-1) y, ya con solo el honor en juego, la Selecci¨®n suma un p¨ªrrico empate a cero ante Inglaterra... Un Mundial para olvidar.

• Espa?a: Arconada; Camacho, Tendillo, Alexanco, Gordillo; S¨¢nchez (63¡¯ Saura), Alonso, Zamora, Juanito; Satrustegui (63¡¯ Quini), L¨®pez Ufarte. (Entrenadores: Santamar¨ªa)
• Yugoslavia: Pantelic; Krmpotic, Zajec, Stojkovic, Jovanovic (74¡¯ Halilhodzic); Gudelj, Sljivo, Surjak, Petrovic; Vujovic (83¡¯ Sestic), Susic. (Entrenador: Miljanic)
• ?rbitro. Lund-Sorensen, dan¨¦s. Amonest¨® a Stojkovic (35¡¯), Sljivo (78¡¯), Zamora (80¡¯) y Gordillo (87¡¯).

Juanito se encarga de transformar el penalti que el colegiado dan¨¦s Lund-Sorensen ha se?alado, pese a que la falta a Alonso hab¨ªa sido fuera del ¨¢rea. L¨®pez Ufarte hab¨ªa fallado el lanzamiento, pero el ¨¢rbitro hab¨ªa mandado repetirlo.

Es una noche prodigiosa para el f¨²tbol espa?ol. Hay que ganar a los malteses por 11 tantos de diferencia para acudir a la Eurocopa de Francia-1984. Pese a los problemas iniciales, la gesta se realiza tras una extraordinaria segunda parte.

¡°?Once goles a m¨ª? ?Imposible! ?Ni a m¨ª ni a nadie!¡±. La frase ¡ªtodo un desaf¨ªo¡ª de John Bonello, el joven meta malt¨¦s en los d¨ªas previos indica un alto nivel de autoestima. El reto es conseguir derrotar a Malta por 11 goles de diferencia. A esta cifra se hab¨ªa llegado para ganarle por diferencia final de goles a los Pa¨ªses Bajos, rivales en el Grupo 7 de clasificaci¨®n para la Eurocopa de Francia 1984. La tarea es ardua: hay que marcar un gol cada cinco minutos considerando el tiempo real de juego.

Pero el partido comienza y... Espa?a sale hecha un torbellino: a los dos minutos, se se?ala penalti por una ca¨ªda en el ¨¢rea maltesa. Lo lanza Se?or... y pega en el palo. Jarro de agua fr¨ªa. Rinc¨®n se pelea hasta con su sombra, pero es Santillana quien abre el marcador. Ya falta menos. En una acci¨®n desafortunada, un tiro de Degiorgio toca en Maceda, descoloca a Buyo y entra. 1-1. Toca empezar de cero. Los espa?oles no desfallecen. Santillana, por dos veces, eleva el marcador a 3-1 al descanso. Hacen falta nueve goles en 45 minutos. Los jugadores salen revolucionados. Rinc¨®n, con dos goles en 10 minutos, enciende la mecha. La explosi¨®n llega con tres goles seguidos en apenas cinco minutos. Faltan cuatro goles con 25 minutos por jugar. La oleada no cesa: Santillana, Rinc¨®n, Sarabia... Todo se aprieta. De repente, tras un barullo, Se?or alcanza un zapatazo que se cuela como un ob¨²s. Un grito convertido en gallo por Jos¨¦ ?ngel de la Casa inunda todos los televisores: ¡°?Goooooooool de Se?or!¡±. La proeza se hab¨ªa realizado. ¡°?S¨ª, s¨ª, s¨ª Espa?a va a Par¨ªs!¡±, se cantaba por doquier. Y, s¨ª, Espa?a fue a Par¨ªs.

• Espa?a: Buyo; Se?or, Goicoechea, Maceda, Camacho; V¨ªctor, Sarabia, Gordillo; Carrasco, Santillana, Rinc¨®n (87¡¯ Marcos). (Entrenador: Mu?oz)
• Malta: Bonello; E. Farrugia, Tortell, J. Holland, A. Azzopardi; Buttigieg, Demanuele, Fabri, R. Farrugia (72¡¯ M. Farrugia); Degiorgio, Spiterigonzi. (Entrenadores: Scerri, Dobrev)
• ?rbitro. Erkan G?ksel, turco. Expuls¨® a Degiorgio (77¡¯). Amonest¨® a Tortell, Fabri, Gordillo. Bonello y Maceda.

Rinc¨®n celebra uno de los 12 goles que marc¨® la Selecci¨®n espa?ola.

Uno de los grandes protagonistas de la Eurocopa de Francia 1984 es la Selecci¨®n espa?ola. Tras dos partidos flojos, y yendo de menos a m¨¢s a lo largo del torneo, los de Mu?oz dan la campanada al eliminar a los vigentes campeones europeos.

Par¨ªs. Parque de los Pr¨ªncipes. Lleno. 35.000 espectadores acuden al estadio parisino para presenciar el ¨²ltimo encuentro perteneciente al Grupo B de la Eurocopa de Naciones que se celebra en Francia. Se miden Espa?a y Alemania, vigente campeona europea. Los espa?oles tienen la obligaci¨®n de ganar para disputar las semifinales del torneo a la vez que ambas selecciones est¨¢n pendientes del otro encuentro del grupo: Portugal-Ruman¨ªa.

Los alemanes salen en tromba y as¨ª estar¨¢n todo el partido. Llegar¨¢n a disparar tres veces a los palos de la meta defendida por Arconada. A falta de dos minutos para el descanso, Christov, colegiado checoslovaco, se?ala penalti en una ca¨ªda de Salva tras entrada de Stielike, pero el disparo de Carrasco es detenido por Schumacher. Todo se complica.

En la segunda parte, Arconada detiene todos y cada uno de los ataques rivales. A falta de diez minutos para el final, una noticia sacude el recinto parisino: los portugueses acaban de marcar. A Espa?a ya s¨®lo le sirve ganar. Y se lanza al ataque, pero el gol no llega. Hasta que, en el ¨²ltimo minuto del partido, Littbarski, verdugo espa?ol en el Mundial 1982, comete falta sobre Francisco. ?ste saca, enviando el bal¨®n a la banda derecha, donde aparece Se?or, que centra al segundo palo. All¨ª emerge la figura de Maceda, cabeceando con toda su alma y en plancha al fondo de la red. ?Gooooooooool! ?Espa?a pasa a semifinales! Es, adem¨¢s, la primera vez que la Selecci¨®n derrota a Alemania en partido oficial y lo ha hecho con sus armas: rabia, fuerza y velocidad.

• Alemania: Schumacher; B. F?rster, Stielike, K. F?rster, Briegel; Matth?us, Meier (59¡¯ Littbarski), Allofs, Brehme (74¡¯ Rolff); Rummenigge, V?ller. (Entrenador: Derwall)
• Espa?a: Arconada; Se?or, Maceda, Goicoechea (25¡¯ Salva), J. Alberto (75¡¯ Francisco); V¨ªctor, Gallego, Camacho, Gordillo; Santillana, Carrasco (Entrenador: Mu?oz)
• ?rbitro. Vojtech Christov, checoslovaco. Amonest¨® a Goicoechea (25¡¯) y Meier (58¡¯).

El remate de Maceda se incrusta en las redes de la porter¨ªa que defend¨ªa el guardameta alem¨¢n Harald Schumacher.

Tras derrotar a Alemania, solo un escal¨®n separa a la Selecci¨®n espa?ola de poder disputar una nueva final de la Eurocopa de Naciones, algo que no ocurr¨ªa desde 1964. El rival es Dinamarca, un equipo temible y la otra gran sensaci¨®n del torneo.

Solo queda un pelda?o. Espa?a se ha ganado a pulso el paso a las semifinales de la Eurocopa 1984 tras derrotar a Alemania, y est¨¢ a 90 minutos de jugar una final europea dos d¨¦cadas despu¨¦s de haberse proclamado campeona de Europa. Ese escal¨®n tiene nombre: Dinamarca. Una selecci¨®n at¨ªpica para la ¨¦poca, ya que 14 de sus 20 integrantes jugaban en ligas diferentes a la danesa, donde brillan Elkjaer, Arnesen, Lerby y Morten Olsen, mientras asoma un joven Michael Laudrup. Son los comienzos de la llamada ¡®Dinamita Roja¡¯.

El partido se disputa en Lyon, donde se llena el estadio Gerland: 47.000 personas. Pronto, los daneses se adelantan en el marcador: un remate de Elkjaer es detenido en primera instancia por Arconada, pero el rechace le cae a Lerby, que fusila la meta espa?ola. Los de Mu?oz, en vez de derrumbarse, sueltan toda su garra, todo su esfuerzo. Pero, como en el partido ante Alemania, el gol se le resiste... hasta que, mediada la segunda parte, un barullo en el ¨¢rea danesa finaliza con un trallazo raso y duro de Maceda. El h¨¦roe ante Alemania repite milagro. ?l y Arconada, que sigue bajo inspiraci¨®n divina. Tras los 90 minutos reglamentarios, todo prosigue en tablas. La pr¨®rroga finaliza con el mismo marcador. Llega el turno de la tanda de penaltis. Y en ella, ninguno falla. Toca el turno de Elkjaer. Quiere ajustar tanto su tiro que lo manda por encima del larguero. Sarabia, mientras, lanza un duro tiro imposible de detener para Qvist. ??Par¨ªs ya aguarda a Espa?a!! La sensaci¨®n de alegr¨ªa se extiende por todo el pa¨ªs.

• Espa?a: Arconada; Se?or, Salva (102¡¯ Urquiaga), Maceda, Camacho; J. Alberto (60¡¯ Sarabia), V¨ªctor; Gallego, Gordillo, Carrasco; Santillana. (Entrenador: Mu?oz)
• Dinamarca: Qvist; Sivebaek, Busk, M. Olsen (113¡¯ Brylle), Nielsen; Arnesen (68¡¯ J. Olsen), Lerby, Bertelsen, Berggreen; M. Laudrup, Elkjae. (Entrenador: Piontek)
• ?rbitro. Courtney. ingl¨¦s.

Maceda establece el empate en el marcador con un poderoso disparo con su pierna derecha tras encontrarse el bal¨®n sin due?o en el ¨¢rea.

Par¨ªs, la Ciudad de la Luz, acoge la final de la Eurocopa de 1984. Espa?a, en un viaje de h¨¦roes, ha llegado a la meta, donde le espera la selecci¨®n anfitriona. Ahora aguarda otro viaje para valientes, aunque a veces la diosa Fortuna no se presente.

27 de junio. Final de la Eurocopa de 1984. A un lado, Espa?a. Al otro, Francia. Para los de Mu?oz, el hombre del que dec¨ªan que ten¨ªa una flor en el culo, el camino no ha sido f¨¢cil: empates con Ruman¨ªa y Portugal, victoria in extremis ante Alemania, victoria en la tanda de penaltis ante Dinamarca... En definitiva, un viaje de h¨¦roes, para h¨¦roes y con h¨¦roes. Pero el rival es Francia, la anfitriona del torneo. Una selecci¨®n dirigida por Michel Hidalgo, ¡®El espa?olito¡¯, como era conocido en su colegio, en el banquillo, y por Michel Platini, su extensi¨®n en el c¨¦sped. ¡°Es genial y colectivo. El l¨ªder natural que necesitamos¡±, se?ala Hidalgo. Rode¨¢ndole, un grupo de 11 jugadores que hab¨ªan acudido al Mundial de Espa?a 1982: un esqueleto completo, fruto de ocho largos a?os de trabajo.

Espa?a sale torera, no se impresiona y ataca. El plan de Mu?oz es inc¨®modo para los franceses. Les cortocircuita. Santillana ve c¨®mo un remate suyo es despejado en el ¨²ltimo momento por el defensa franc¨¦s Battiston. Al descanso se llega con empate. En la segunda parte, los galos salen con m¨¢s br¨ªo. De pronto, una falta dudosa. Platini coge el bal¨®n, lo mima. Dispara. El bal¨®n supera la barrera, pero Arconada se lanza. Detiene el chut, pero el bal¨®n se escurre bajo su cuerpo y entra en la porter¨ªa. ¡°No te da tiempo a reaccionar¡±, explicar¨ªa despu¨¦s. La desesperaci¨®n hace mella en los espa?oles, que se lanzan desbocados en busca del empate. El tiempo pasa. En el ¨²ltimo minuto, Tigana lanza a Bellone, que certifica el triunfo 'bleu'. La fortuna planta a sus h¨¦roes en el momento menos indicado. ¡°La flor se ha marchitado¡±, dir¨ªa Mu?oz.

• Francia: Bats; Battiston (72¡¯ Amor¨®s), Le Roux, Bossis, Domergue; Giresse, Fern¨¢ndez, Tigana; Platini; Lacombe (80¡¯ Genghini), Bellone. (Entrenador: Hidalgo)
• Espa?a: Arconada; Urquiaga, Salva (85¡¯ Roberto), Gallego, Camacho; Se?or, V¨ªctor, Francisco, J. Alberto (77¡¯ Sarabia); Santillana, Carrasco. (Entrenador: Mu?oz)
• ?rbitro. Christov, checoslovaco. Expuls¨® a Le Roux (84)¡¯. Amonest¨® a Fern¨¢ndez, Gallego y Carrasco.

El momento cumbre del partido: Michel Platini ejecuta una falta muy cerca del ¨¢rea espa?ola. El bal¨®n supera a la barrera de jugadores. Arconada, en un primer momento, detiene el tiro, pero el bal¨®n se le escurre por debajo de su cuerpo. Es el primer gol franc¨¦s.

A la s¨¦ptima es la vencida. Tras ser citado para acudir a la Eurocopa de Francia 1984, Emilio Butrague?o, nuevo ¨ªdolo del f¨²tbol espa?ol, debuta en Sevilla ante Gales. En menos de un a?o hab¨ªa pasado de jugar en Segunda a ser internacional.

Hasta entonces, hab¨ªa sido un a?o muy intenso para Emilio Butrague?o. En apenas ocho meses hab¨ªa pasado de despuntar notablemente en el filial madridista a ser titular con la Selecci¨®n absoluta en un encuentro importante. Atr¨¢s quedaba su debut, sus goles en C¨¢diz con el primer equipo madridista y su convocatoria para la Eurocopa gala, aunque cabe resaltar que no jug¨® un solo minuto. Pero Miguel Mu?oz no se hab¨ªa olvidado de ¨¦l. As¨ª que con motivo del primer encuentro valedero para lograr la clasificaci¨®n para el Mundial de M¨¦xico es citado. Lo que nadie se espera es que fuese titular. Sangre nueva llegaba a la Selecci¨®n y se iba a notar.

El juego pausado, pero punzante de Butrague?o, con el ¡®9¡¯ a la espalda, da sus frutos. Participa para que Rinc¨®n inaugure el marcador a los siete minutos del comienzo y ¨¦l mismo se ocupa de colocar el tercer tanto espa?ol en el marcador instantes antes del final: recibe un bal¨®n, controla con el pecho, avanza, recorta a Jackett, y ante la salida de Southall, le bate de tiro raso con pasmosa tranquilidad. ¡°?El gol? Fue muy f¨¢cil ya que recib¨ª un pase magistral de Gordillo¡±, explicar¨ªa con cara de ni?o bueno al t¨¦rmino del encuentro.

Pocos debutantes con la Selecci¨®n hab¨ªan estrenado as¨ª su casillero. La afici¨®n sale exultante del partido. La Selecci¨®n parece haber olvidado su mala suerte en Par¨ªs tres meses antes perdiendo la final de la Euro. 'La Furia' iba a dejar paso a un f¨²tbol menos racial, pero m¨¢s ordenado: menos coraz¨®n y m¨¢s cerebro. El primer paso ya est¨¢ dado.

• Espa?a: Arconada; Se?or, Maceda, Goicoechea, Camacho; V¨ªctor, Francisco (33¡¯ Roberto), Gordillo; Carrasco, Butrague?o, Rinc¨®n (79¡¯ J. Alberto). (Entrenador: Mu?oz)
• Gales: Southall; Slatter, Ratcliffe, Charles, Jackett; Nicholas, Phillips, James, Thomas (59¡¯ Vaughan); Hughes, Curtis. (Entrenador: England)
• ?rbitro. Fredriksson, sueco. Amonest¨® a Carrasco (62¡¯) y a Ratcliffe (78¡¯).

La creciente popularidad de Butrague?o era imparable. Tras quedarse a las puertas de jugar en la Eurocopa de 1984, su debut ser¨ªa ante Gales. Con su visi¨®n de juego participa activamente en la obtenci¨®n del primer gol y marcar¨¢ el ¨²ltimo.

Espa?a debuta en el Mundial de M¨¦xico 86 frente a la poderosa selecci¨®n brasile?a. En el minuto 53, una fabulosa volea de M¨ªchel se estrella en el travesa?o, cae y bota dentro de la porter¨ªa. Pero Bambridge, un ¨¢rbitro australiano, no lo ve.

¡°Tengo un buen recuerdo de nuestra presencia en M¨¦xico 1986 y hasta de aquel gol que, sin serlo, ha sido m¨¢s famoso¡±, as¨ª valora M¨ªchel lo ocurrido en ese Mundial con la tranquilidad que da el paso del tiempo. Sin embargo, en el momento, no lo vivi¨® con tanta serenidad. Espa?a afronta un debut muy complicado ante Brasil. La Selecci¨®n controla al rival bien en la primera mitad y a los ocho minutos de la segunda, con 0-0 en el marcador, V¨ªctor Mu?oz bota un c¨®rner. En el segundo palo, Maceda pone el esf¨¦rico en la frontal, donde M¨ªchel, tras controlar con el pecho, conecta una volea que se estrella en el larguero. La pelota cae y bota dentro de la porter¨ªa brasile?a. ?Es un golazo! Pero Christopher Bambridge, ¨¢rbitro australiano del encuentro, no lo ve as¨ª. Considera que el bal¨®n no ha superado la l¨ªnea y no concede el tanto. M¨ªchel no tiene dudas: ¡°Fue un buen gol, s¨ª... Vi que entraba claro tras pegar en el larguero y botar detr¨¢s del portero (el brasile?o Carlos), que cay¨® sobre la l¨ªnea. Y el que m¨¢s me lo confirm¨® fue V¨ªctor Mu?oz, que hab¨ªa sacado el c¨®rner y lo vio perfectamente¡±.

Espa?a perder¨¢ ese partido por 0-1, con gol del doctor S¨®crates. La posibilidad de comenzar con victoria ante una de las favoritas se esfuma por un error arbitral, pero la Selecci¨®n se repondr¨¢, vencer¨¢ a Irlanda y a Argelia en los dos encuentros siguientes y se clasificar¨¢ para octavos. ¡°Fue un revulsivo. Nos fortalecimos en la idea de que pod¨ªamos jugar bien ese Mundial¡±, asegura M¨ªchel. Luego llegar¨ªan los cuatro goles de Butrague?o a Dinamarca, pero ese es otro momento.

• Espa?a: Zubizarreta; Tom¨¢s, Maceda, Goicoechea, Camacho; V¨ªctor, Francisco (83¡¯ Se?or), M¨ªchel, Julio Alberto; Butrague?o, Salinas. (Entrenador: Mu?oz)
• Brasil: Carlos; Edson, Julio C¨¦sar, Edinho, Branco; Elzo, Alemao, Junior (78¡¯ Falcao); S¨®crates, Casagrande (66¡¯ Muller). Careca. (Entrenador T. Santana)
• ?rbitro. C. Bambridge, australiano. Amonest¨® a Julio Alberto (4¡¯) y a Edson (82¡¯).

M¨ªchel acaba de soltar un derechazo que, seg¨²n se ve en la imagen, ha golpeado en el larguero y en su ca¨ªda ha entrado dentro de la meta defendida por el guardamenta brasile?o Carlos. Era un gol claro, pero el colegiado australiano Bambridge no lo concedi¨®.

Butrague?o sobrevuela el c¨¦sped de Quer¨¦taro y marca cuatro de los cinco goles de Espa?a ante Dinamarca. En Madrid la afici¨®n se echa a la calle y se da cita por primera vez en la Cibeles: ¡°?Oa, oa, oa, el Buitre a la Moncloa¡±!, se gritaba.

Estadio La Corregidora. Quer¨¦taro. Mundial de M¨¦xico 1986. Espa?a y Dinamarca se enfrentan en octavos de final en busca de un puesto en cuartos. Los espa?oles van perdiendo, al haber transformado Jesper Olsen un penalti cometido por Gallego sobre Elkjaer. Apenas faltan unos minutos para llegar al descanso cuando el autor del gol dan¨¦s intenta un pase horizontal hacia su portero Hogh. ?ste, mal colocado, no se espera el bal¨®n. En ese momento, Emilio Butrague?o, sin saber ni c¨®mo ni por d¨®nde, aparece para situar el esf¨¦rico en la red. Espa?a iguala el marcador, pero esa jugada es la verdadera presentaci¨®n de Butrague?o en el Mundial azteca.

Hasta entonces, el 'Buitre', como era conocido en Espa?a, apenas hab¨ªa despuntado en el campeonato. Aquel d¨ªa parece tocado por una varita m¨¢gica. Si la primera aparici¨®n ha significado el tanto del empate, en la segunda mitad su vuelo sobre el c¨¦sped es majestuoso. Se descubre por los lugares que menos sospechan los zagueros daneses y as¨ª poco a poco van cayendo los goles a favor de Espa?a, y del propio Butrague?o: el segundo, aprovechando un remate desviado de Camacho en jugada de estrategia. El tercero, forzando un penalti que transformar¨ªa Goicoechea. El cuarto, rematando una jugada que hab¨ªan elaborado entre M¨ªchel y Eloy. El quinto y ¨²ltimo, enga?ando a Hogh al anotar de penalti una jugada suya que el colegiado decret¨® pena m¨¢xima. En Madrid, la gente se tira a la calle en una noche calurosa. El punto de cita es la Cibeles por primera vez. Las elecciones pr¨®ximas sugieren un c¨¢ntico a la afici¨®n: ¡°?Oa, oa oa, el Buitre a la Moncloa!¡±.

• Espa?a: Zubizarreta; Tom¨¢s, Goicoechea, Gallego, Camacho; M¨ªchel (84¡¯ Francisco), V¨ªctor, Calder¨¦, Julio Alberto; Butrague?o, J. Salinas (46¡¯ Eloy). (Entrenador: Mu?oz)
• Dinamarca: Hogh; Busk, M. Olsen, I. Nielsen, Andersen (60¡¯ Erikssen); Berggreen, Bertelsen, J. Olsen (71¡¯ Molby), Lerby; M. Laudrup, Elkjaer. (Entrenador: Piontek)
• ?rbitro. Keizer, holand¨¦s. Amonest¨® a Goicoechea, Andersen y Camacho.

Butrague?o corre a celebrar uno de sus cuatro tantos a Dinamarca. En Madrid la afici¨®n festej¨® el triunfo por primera vez en la Cibeles, a modo de s¨ªmbolo de todos.Una de las grandes tardes de Butrague?o tiene a Dinamarca como rival. Para el futbolista espa?ol es su decimoquinto encuentro internacional. Marca cuatro tantos que suponen una explosi¨®n de alegr¨ªa y la consolidaci¨®n del 'Buitre' como mito espa?ol.

La derrota espa?ola contra Italia en el segundo partido de la fase de grupos min¨® la moral de los jugadores espa?oles, que cayeron eliminados definitivamente tras perder de nuevo contra Alemania.

Espa?a hab¨ªa ganado 2-3 a Dinamarca en el debut de la Eurocopa. A Jan Heintze le result¨® imposible cumplir su misi¨®n de parar a M¨ªchel, que hizo el primer gol y encarril¨® el partido. Butrague?o y Gordillo volvieron a dar ventaja a los espa?oles tras el empate dan¨¦s. Povlsen acort¨® distancias, pero no evit¨® la derrota. Con el aumento de moral que aporta un estreno as¨ª llega la Selecci¨®n a su segundo partido, ante Italia. Pero poco duran la alegr¨ªa y la ilusi¨®n. El duelo ante los transalpinos en el Waldstadion no va como se esperaba. La 'azurra' ha acordonado su porter¨ªa para que no lleguen los espa?oles y el plan funciona. Italia es superior. Todo se complica m¨¢s para Espa?a cuando el joven Maldini, de 19 a?os, lesiona a M¨ªchel, uno de los referentes del equipo. Casi sin tiempo para asimilar la p¨¦rdida del centrocampista, los espa?oles ven c¨®mo Vialli se deshace con facilidad de Tom¨¢s para batir con comodidad a Zubizarreta en el minuto 73. La Selecci¨®n apenas tiene un cuarto de hora para reaccionar, y no es capaz. Una Italia rejuvenecida acaba de vengar aquella final de la Eurocopa sub21 de dos a?os atr¨¢s en la que Espa?a les arrebat¨® el t¨ªtulo en la tanda de penaltis. Los ¨¢nimos est¨¢n ahora por los suelos.

Resta un partido de la fase grupos, contra Alemania. Pero los jugadores entrenados por Franz Beckenbauer no dar¨¢n ninguna opci¨®n a Espa?a. V?ller sentenciar¨¢ el encuentro con un decisivo doblete (min. 29 y 51) y los esfuerzos espa?oles por dar la vuelta al marcador ser¨¢n en vano. Alemania sabr¨¢ conservar su ventaja para despachar definitivamente a los de Miguel Mu?oz de una Eurocopa que se acabar¨¢ llevando Holanda tras imponerse en la final a la URSS.

• Italia: Zenga; Bergomi, Ferri, Baresi, Maldini; De Napoli, Giannini, Ancelotti Donadoni; Vialli (89¡¯ De Agostini), Mancini (68¡¯ Altobelli)
• Espa?a: Zubizarreta; Tom¨¢s, Sanch¨ªs, Andrin¨²a Soler; M¨ªchel (73¡¯ Begiristain), V¨ªctor, Gallego (68¡¯ Mart¨ªn V¨¢zquez), Gordillo; Butrague?o, Bakero. (Entrenador: Miguel Mu?oz)
• ?rbitro. Fredriksson, sueco. Amonest¨® a Zenga y a Maldini.

Gordillo es desequilibrado por el italiano Bergomi.

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Los partidos clave de Espa?a de los a?os 50'
Los partidos clave de Espa?a de los a?os 60'
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Los partidos clave de Espa?a en la d¨¦cada de 2000 (Parte 1)
Los partidos clave de Espa?a en la d¨¦cada de 2000 (Parte 2)
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