Espa?a rompe con su maleficio y conquista su segunda Eurocopa 44 a?os despu谷s del gol de Marcelino a la URSS y 26 de la final de Par赤s con el tanto de Platini a Arconada.
Llegaba la Espa?a de Luis Aragon谷s, es decir La Roja, como el propio t谷cnico la bautiz車, a la final del Prater despu谷s de un partido plet車rico en las semifinales contra Rusia. Posiblemente su mejor actuaci車n en muchos a?os, aunque los m芍s euf車ricos y veteranos llegaron a hablar incluso de las 迆ltimas d谷cadas, un par de ellas.
Ese 'partidazo' ante los rusos no hab赤a sido sino el pen迆ltimo gui?o del destino. Desde el primer encuentro, esa Eurocopa no dej車 de hacer insinuaciones a Luis y sus hombres. En el primer encuentro ante Rusia fueron los tres goles de Villa. En el segundo, contra Suecia, el tanto tambi谷n del asturiano en la prolongaci車n. En el tercero contra Grecia, ya clasificados, lleg車 el aviso en forma de confirmaci車n de que los te車ricos suplentes estaban a la altura de las circunstancias.
Tres veces se dio el parpadeo embaucador en los cuartos de final. Con los dos penaltis parados por Casillas y el transformado por Cesc. Y en las semifinales ya mencionadas las sensaciones fueron tan buenas que m芍s que el pen迆ltimo gui?o parec赤a un 'tic' tras otro. Demasiados p芍lpitos para caer en la final. Y as赤 lo interpret車 el equipo que sali車 convencido por las palabras de un Aragon谷s contumaz. Alemania era grande, fuerte y alta, pero no invencible.
Luis comenz車 el gran desaf赤o con el mismo once que acab車 la semifinal. Pruebas las justas. Ese once y su manera de entender el juego le apasionaba. Estaba convencido de la victoria. No era una pose. La ma?ana del partido pude estrechar su mano.
-Suerte m赤ster# aunque no le guste que se la deseen.
Pensaba que me iba responder con una frase muy suya. "La suerte para los malos toreros", pero estaba concentrado en sus cuitas internas. Respondi車 a su manera.
"Ha pasado el tiempo y hemos madurado. Si ahora tuvi谷ramos que volver a jugar contra Francia el partido del Mundial 2006, no perder赤amos. Este equipo se hubiera replegado en su campo con la ventaja, no se hubiera vuelto loco y desde el bal車n hubiera sabido defenderse y rematar su victoria".
La 迆ltima charla del t谷cnico antes de la final fue esclarecedora. "Del subcampe車n no se acuerda nadie, nadie, nadie (tres veces). Somos mejores y les vamos a ganar. Estas finales las gana el equipo que est芍 seguro de lo que tiene que hacer y nosotros lo estamos. No perdemos el autocontrol".
La responsabilidad y la concentraci車n se ven reflejadas en la salida de los jugadores hacia el c谷sped. Uno por uno. Iker Casillas con su brazalete de capit芍n y el bander赤n protocolario, Sergio Ramos, Torres, Xavi, Marchena, Capdevila, Senna, Puyol, Iniesta, Cesc, Silva# Todos forman para escuchar los himnos. Luis se mueve como un sabio enjaulado por la zona t谷cnica.
El arranque del encuentro fue un tanto descorazonador. Los de Low salieron versi車n rodillo. Le quitaron el bal車n a Espa?a y le arrinconaron en su campo. Los presentes m芍s cercanos nos miramos entre nosotros. Fueron quince minutos de presi車n alta y de demostraci車n f赤sica. No marc車 Klose tras un error de Ramos, porque los gui?os no se hab赤an acabado. Xavi y Cesc no ve赤an el bal車n. Luis mand車 a Iniesta y Silva cambiar de banda. Entonces apareci車 Senna, el m芍s teut車n de los espa?oles, aunque naciera en Sao Paulo, para poner orden. De su capacidad t谷cnica, f赤sica y t芍ctica se vali車 el equipo para ganar metros. Tanto como para que Torres cabeceara al poste un centro de Sergio Ramos.
La Roja ya estaba dentro. Y se meti車 hasta el fondo cuando tras una larga circulaci車n, de esas que siempre tienen un objetivo, Xavi encontr車 un hueco y all赤 mand車 el bal車n. Torres corr赤a con Lahm, que jugaba fuera de su posici車n original, en el lateral izquierdo. Parec赤a que el 'rubito' alem芍n llevaba ventaja, pero el 'rubiazo' espa?ol meti車 el turbo, gan車 la posici車n por fuera y cuando vio que el mastodonte Lehman se lanzaba a sus pies, le pic車 el bal車n por encima con la derecha.
Ninguno supimos entonces el valor de ese gol, pero era el aviso, el parpadeo, la advertencia, la insinuaci車n casi definitiva de que ese t赤tulo ten赤a due?o y no era otro que la Selecci車n. Tras soportar el pen迆ltimo arre車n germano se lleg車 a un descanso que Luis utiliz車 para multiplicar el ego de todos sus jugadores.
Cuentan que fue Luis en estado puro. Primero, como era su costumbre, dej車 a los jugadores tomar aire cinco minutos. "Descansen, descansen#" Despu谷s un mon車logo mientras paseaba. ?nimos, consejos, detalles con alg迆n jugador en determinado.
El equipo volvi車 enchufado. Entre los minutos 52 y 55 cre車 tres ocasiones. Y entre el 67 y el 69, otras tantas. Unas m芍s claras que otras, pero todas amenazantes. Hijas del dominio, de la intuici車n y talento que esos jugadores llevaban dentro. Espa?a debi車 ganar por m芍s goles. Cierto es que Alemania peg車 coletazos hasta el 迆ltimo pitido de Rosetti, pero la Selecci車n hab赤a sido superior.
Ese 29 de julio ya no era en el santoral el d赤a de San Pedro y San Pablo, era el d赤a de San Luis Aragon谷s y San Fernando Torres y as赤 lo ser芍 por resto de los tiempos. Lo que no nos pod赤amos imaginar que lo vivido en ese Prater a la sombra de la gigantesca noria era simplemente el principio de una trilog赤a gloriosa.
Michel Platini, presidente de la UEFA, estaba preparado para la gran ceremonia y cerrar un ciclo. Un gol suyo a Acornada el 27 de junio de 1984 apart車 a la Selecci車n del sue?o de ganar su segunda Eurocopa, despu谷s de aquella del 64. Ahora, 24 a?os y dos d赤as despu谷s, entregaba a Casillas la Copa que posiblemente ten赤a que haber levantado el propio Arconada en el Parque de los Pr赤ncipes de Par赤s. Y para celebrarlo, Palop, el tercer portero, luc赤a la camiseta del portero vasco.
Los h谷roes celebraban el triunfo como en las grandes ocasiones. No era para menos. Todos pod赤an estar orgullosos de su final y de su Campeonato. Casillas sum車 su tercer partido consecutivo sin recibir un gol y demostr車 que en el juego por alto hab赤a mejorado como para que los alemanes no le intimidaran. Sergio, que entonces era un lateral de largo recorrido, se comi車 su banda y se acrecent車 en el bombardeo a谷reo. Puyol, plet車rico, empeque?eci車 a Klose. Marchena se convirti車 en el 'kaiser' con Beckenbauer en la tribuna. Capdevila pareci車 estar en el patio de su casa. Senna, ?ay Senna!, achic車 hacia atr芍s, hacia delante, abarc車 campo# y todo a un ritmo impropio de un brasile?o.
Xavi fue Xavi. Todo est芍 dicho. El mejor socio de todos y cada uno de sus compa?eros. Cesc fue tan 迆til como siempre. Iniesta se movi車 mejor por la izquierda que por la derecha y desafi車 el v谷rtigo con sus regates inveros赤miles. Silva tir車 diagonales y aguant車 las tarascadas con la cabeza alta#
#Y Torres# Fernando se acord車 del himno de su Liverpool de entonces y nunca camin車 solo, Marc車 el gol de triunfo, pudo marcar un segundo y viaj車 en una velocidad distinta a la de los dos centrales alemanes, Mertesacker y Metzelder, incluso a la de Lahm.
Los cambios de Luis parecieron m芍s oportunos que nunca. Xabi Alonso porque fue una inyecci車n de oxigeno y saber estar cuando m芍s era necesario. Cazorla porque se apropi車 de la banda derecha y por all赤 respir車 el equipo y Guiza porque hizo todo lo que le mandaron y estuvo cerca del gol.
Todos se fundieron en un abrazo con los que no jugaron la final, pero se pod赤an sentir tan campeones como ellos. Solo Palop se qued車 sin jugar. El resto hab赤a tenido su partido de gloria contra Grecia (2-1): Reina, Arbeloa, Albiol, Juanito, Fernando Navarro, De la Red y Sergio Garc赤a.
Luis Aragon谷s llegaba a la Eurocopa 2008 con una idea preconcebida en su cabeza. Estaba convencido de que la Selecci車n jugaba mejor con una referencia arriba que con dos. Es decir, con un centrocampista m芍s y un delantero menos. Esa disposici車n t芍ctica era un traje a medida. El mejor escenario posible para los 'locos bajitos'. M芍s control, circulaciones m芍s largas, r芍pidas y fluidas. Una boya muy m車vil y llegadas desde la segunda l赤nea. Incluso lo explicaba para aquel que le quer赤a escuchar.
"Nos guste o no, cuando mejor jugamos es con uno arriba. Yo ten赤a esa idea en la cabeza porque con ella nos clasificamos, pero Villa acab車 la temporada enorme y en el primer partido hace tres goles; ?Qu谷 hago, le quito? Cesc lleg車 de veinte d赤as sin hacer nada porque se lesion車 con el Arsenal y jugu谷 con Villa m芍s arriba, pero viniendo a recibir. Creo sinceramente que as赤 somos m芍s nosotros mismos, los cuatro del medio se adue?an del bal車n y no hay quien se lo quite; ajustan los pases, los cuatro tienen una visi車n de juego muy buena. Si el rival no tiene el bal車n, se cansa mucho".
Y por uno de esos azares del destino, Villa se lesion車 en las semifinales contra Rusia. Curiosamente en un lanzamiento de falta que no le correspond赤a lanzar porque Luis desde la banda se desga?itaba pidiendo a Senna que la rompiera. Con el asturiano fuera de combate Luis se encontr車 con su '11' de gala y no dud車 ni un segundo en alinearlo contra los alemanes.
La Copa# y un pu?ado de premios
La Roja no solo gan車 el t赤tulo de campe車n, tambi谷n acapar車 casi todos los premios individuales de la competici車n. La muestra m芍s concluyente de que fue el mejor y m芍s completo equipo del Campeonato en todas las facetas. Repasemos: David Villa, m芍ximo goleador con cuatro tantos y Xavi Hern芍ndez, 'mejor jugador del torneo'.
Nueve jugadores fueron incluidos en el 'mejor equipo' del torneo y seis en el 'once inicial'. Entre los 23: Casillas en la porter赤a; Puyol y Marchena entre los defensas; Senna, Xavi, Cesc e Iniesta, centrocampistas; Villa y Torres, delanteros. En el 'once': Casillas, Puyol, Marchena, Senna, Xavi y Villa.
Los hombres de Luis tambi谷n acapararon los reconocimientos al 'vip' de cada partido que jugaron. Pleno. Seis de seis. Villa fue nombrado mejor jugador en los encuentros contra Rusia (tres tantos) y Suecia (gol del triunfo en la prolongaci車n). Xabi Alonso en el tercero del grupo contra Grecia. Casillas, en los cuartos contra Italia (detuvo dos penaltis en la tanda final). Iniesta fue proclamado en las semifinales contra Rusia (exhibici車n de pases, controles y regates#) y Fernando Torres (gol) en la final contra Alemania.
Adem芍s de todo lo citado, los espa?oles encabezaron los rankings de estad赤sticas m芍s convencionales. Fue la selecci車n m芍s realizadora (12 tantos) y la segunda menos goleada (3), solo superada por Croacia que recibi車 dos, pero disput車 dos partidos menos; Villa fue el l赤der en remates (12) y Cesc comparti車 el primero puesto con Sneijder en la clasificaci車n de pases de gol.