La d¨¦cada de los 70 quiz¨¢ sea la m¨¢s oscura de la historia de la Selecci¨®n. Sus ¨¦xitos se reducen a partidos amistosos y a la victoria en la 'Batalla de Belgrado' que abri¨® la puerta al Mundial de 1978.
La Selecci¨®n transita por los a?os 70 coleccionando decepciones. Fracasa estrepitosamente en todos los objetivos propuestos. No alcanza la fase final en los Mundiales de 1970 y 1974. Tampoco en la Eurocopa de 1972, donde queda eliminada en la primera ronda de clasificaci¨®n. Adem¨¢s, en el partido decisivo de la fase clasificatoria para el torneo continental, ante la URSS, la Selecci¨®n protagoniza una chapuza federativa que, de haberse clasificado, podr¨ªa haber supuesto su descalificaci¨®n. Durante la Eurocopa de 1976 muestra una notable mejor¨ªa, hasta que Alemania le priva de jugar la semifinal. Consigue, por fin, estar presente en el Mundial de 1978, pero un nuevo infortunio aguarda. El inesperado empate ante Austria en el debut hace imprescindible ganar a Brasil para superar la fase de grupos. En un mal partido de ambas selecciones, Espa?a tiene la mejor oportunidad de gol, pero Carde?osa falla a puerta vac¨ªa y los espa?oles tienen que hacer las maletas a las primeras de cambio.
Kubala insta a la afici¨®n sevillana a ser ¡®El jugador n¨²mero 12¡¯
Un partido amistoso ante la Alemania subcampeona del mundo motiva a que el seleccionador, Ladislao Kubala, arengue a la afici¨®n sevillana. Su idea obtiene un gran respaldo popular. El p¨²blico lleva en volandas a los nuestros al triunfo final.
Tras el fracaso en la fase de clasificaci¨®n para el Mundial de M¨¦xico 1970, dolorosa derrota incluida con Finlandia, la Federaci¨®n espa?ola busca dar un golpe de tim¨®n. Decide nombrar seleccionador a Ladislao Kubala: llevaba casi 20 a?os en suelo patrio, hab¨ªa sido un gran jugador, se hab¨ªa nacionalizado¡ todo apuntaba a que la elecci¨®n era m¨¢s que adecuada. As¨ª, Kubala debuta ante Finlandia en el ¨²ltimo partido de la fase clasificatoria en La L¨ªnea de la Concepci¨®n, el mismo d¨ªa que Gento disputa su ¨²ltimo encuentro con la Selecci¨®n.
Kubala quiere comprobar el nivel real de sus jugadores, y decide disputar un amistoso con Alemania, subcampeona mundial. Escoge Sevilla como sede del encuentro y se propone agitar a la afici¨®n: capaz de contagiar optimismo (¡°Chicos bien, moral ¨®ptima¡±, es su lema), insta a edificar una identidad com¨²n entre Selecci¨®n y afici¨®n (el Club Espa?a), y reclama un gran ambiente: ¡°Quiero que Espa?a juegue con doce, quiero que el p¨²blico sevillano sea el jugador n¨²mero doce¡±.
Hasta entonces, la Selecci¨®n hab¨ªa jugado ocho encuentros en la capital sevillana: siete victorias y un empate, con 26 goles a favor por tan solo tres recibidos. Y s¨ª. La afici¨®n cumple con creces. Su entusiasmo hace volar a los espa?oles, que ganan con goles de Arieta II. Aunque el gran protagonista es el sevillista Lora: punzante en ataque, bullicioso para recuperar el bal¨®n, logra anular al cerebro germano Netzer. Todo se traduce en una fiesta y deja el poso para que posteriormente se conociese a la afici¨®n sevillana como 'El jugador n¨²mero doce'. En el siguiente partido que jugar¨¢ la Selecci¨®n en el S¨¢nchez Pizjuan, contra la URSS, ning¨²n jugador portar¨¢ el dorsal 12 con el fin de agradecer el apoyo brindado.
- Espa?a: Iribar; Sol (85¡¯ Melo), Gallego, Eladio, Costas; Uriarte, Lora, Amancio, G¨¢rate (70¡¯Ufarte); Arieta II, Rojo, (Entrenador: Kubala)
- Alemania: Manglitz; Vogts, Schulz, Schnellinger, Weber; Netzer, Libuda, Seeler; M¨¹ller, Haller, Grabowski, (Entrenador: Schon)
- ?rbitro. Ren¨¦ Vigliani, franc¨¦s. Anul¨® un gol a Grabowski (53¡¯).
Los jugadores espa?oles ven c¨®mo el disparo de Arieta II (entre Schulz (5) y Amancio, a la derecha) se introduce dentro de la porter¨ªa germana. Es el segundo gol del partido. Los subcampeones del mundo caen derrotados en un encuentro que para ellos es preparatorio para el Mundial de M¨¦xico, mientras que para los de Kubala es una exigente prueba superada.
Espa?a consigue en Cagliari una victoria de enorme prestigio
El combinado de Kubala logra en su visita a Italia un triunfo de gran valor. La ¡®squadra azzurra¡¯ es la actual campeona de Europa, es subcampeona mundial y lleva diez a?os y 31 partidos sin conocer la derrota en su territorio.
La Selecci¨®n tiene un d¨ªa de gloria en su visita a Cagliari. La prueba es may¨²scula. Italia llega al encuentro como actual campeona de Europa (t¨ªtulo conquistado en la Eurocopa celebrada en su pa¨ªs en 1968), subcampeona del mundo (obtenido en el Mundial de M¨¦xico 1970) y llevaba diez a?os y 31 partidos sin caer derrotada como anfitriona. Desde que el 22 de mayo de 1961 Inglaterra la derrotase 2-3, pasaron por territorio italiano potencias futbol¨ªsticas como Argentina, la Rep¨²blica Federal Alemana y la Democr¨¢tica, Brasil... Ninguna consigui¨® vencer.
El triunfo espa?ol no es ni mucho menos fruto de la casualidad. Los de Kubala llegan con una racha de seis partidos sin perder y pronto se ver¨¢n los motivos. El seleccionador prepara un planteamiento perfecto, con una obsesi¨®n principal: neutralizar el juego de 'catenaccio' y contragolpe que tan bien dominan los italianos. Para ello intenta ser fuerte en el centro del campo y, a partir de ah¨ª, buscar el equilibrio en todas sus l¨ªneas. El plan sale a la perfecci¨®n. La primera mitad de Espa?a es impecable. En el 35¡¯, Pirri coloca el primer gol en el marcador. Solo cinco minutos m¨¢s tarde, Uriarte aprovecha un buen centro de Claramunt para conseguir el siguiente tanto. En la segunda parte, la Selecci¨®n baja un punto su atrevimiento, consciente del gran valor de un triunfo en suelo italiano. De Sisti se aprovecha de una falta de coordinaci¨®n de Iribar y Sol para reducir distancias. Pero Espa?a apenas sufre y sale de Cerde?a con la sensaci¨®n de tener un seleccionador muy estratega y un grupo de jugadores capaces de plantar cara a cualquiera.
- Italia: Zoff; Bet, Facchetti, Burgnich (46¡¯ Ferrante), Rosato; Bertini, Rivera, De Sisti, Mazzola; Boninsegna, Prati. (Entrenador: Valcareggi)
- Espa?a: Iribar; Sol, Tonono, Gallego, Costas; Claramunt, Pirri, Uriarte, Amancio (68¡¯ Marcial); G¨¢rate (75¡¯Arieta II), Churruca. (Entrenador: Kubala)
- ?rbitro. Robert Frauciel, franc¨¦s.
La Selecci¨®n dirigida por Kubala convence a todos en Cagliari. Italia es la actual campeona de Europa y subcampeona del mundo. La victoria ante un conjunto tan potente cargar¨¢ de moral a toda Espa?a. En la foto, Gallego despeja el bal¨®n ante Boninsegna.
Espa?a, fuera de la Eurocopa y con chapuza federativa
La Selecci¨®n se qued¨® sin opciones de estar en la Eurocopa con el empate sin goles ante la URSS en un partido marcado por la inveros¨ªmil situaci¨®n que vivi¨® en la porter¨ªa con los ¡®Rodris¡¯. De haber ganado, podr¨ªa haber sido descalificada igualmente.
La visita de la URSS al S¨¢nchez Pizju¨¢n levanta una gran expectaci¨®n. El estadio se llena por completo para animar de nuevo a la Selecci¨®n. Los sovi¨¦ticos ganaron el duelo que disputaron ambas selecciones unos meses antes en Mosc¨², en el que fue considerado ¡®el partido del siglo¡¯, y llegaban como l¨ªderes del grupo. Un empate les basta para clasificarse como l¨ªderes. Por eso, se meten en su campo con marcajes individuales y apenas dan trabajo a Reina. Espa?a, sin embargo, tiene que ganar s¨ª o s¨ª. Y pone todo su empe?o en ello, jugando al ataque en todo momento. Pero es un quiero y no puedo constante que acaba mal. Los sovi¨¦ticos logran su empate y la Selecci¨®n, pese a quedar dos partidos contra Chipre e Irlanda del Norte, se queda sin Eurocopa.
Probablemente, esta eliminaci¨®n evit¨® que la URSS o la UEFA denunciaran a la RFEF por alineaci¨®n indebida o suplantaci¨®n de identidad. La lesi¨®n a ¨²ltima hora de Iribar, portero titular, hace que Reina le tenga que sustituir y que sea necesario otro meta en el banquillo. Pero, hay un problema. Aunque se inscribieron tres, solo viajan dos y el tercero, el colchonero Roberto Rodr¨ªguez Aguirre, m¨¢s conocido por ¡®Rodri, est¨¢ en Madrid. Ante la posibilidad de que no llegue a tiempo, la Federaci¨®n llama finalmente al ¡®Rodri¡¯ del Sevilla, Jos¨¦ Rodr¨ªguez Dom¨ªnguez, sin el permiso de la UEFA, y lo sienta en el banquillo pese a no estar inscrito. Quiz¨¢ los sovi¨¦ticos se han percatado de esta inveros¨ªmil situaci¨®n, incluso el ¨¢rbitro y la UEFA. Pero nadie dice nada al respecto, ni en el momento ni despu¨¦s. Y nunca se sabr¨¢ qu¨¦ habr¨ªan hecho en caso de una victoria espa?ola que mantuviera sus posibilidades de clasificaci¨®n.
- Espa?a: Reina; Sol, Tonono, Gallego, Ant¨®n (Marcial 76¡¯); Lora, Claramunt; Amancio, Quino, Quini y Churruca. (Entrenador: Kubala)
- URSS: Rudakov; Dzodzuashvili, Shesterniev, Istomin, Jurtsilava; Kolotov, Muntian; Dolmatov, Fedotov (Kiselev 83¡¯), Bishovets e Ishtoian (Shevchenko 62¡¯). (Entrenador: Nikolaev)
- ?rbitro. Norman Burtenshaw (Inglaterra).
Remate de cabeza de Quino que no lleg¨® a perforar la porter¨ªa.
Katalinski deja a Espa?a sin Mundial
La fase de clasificaci¨®n irregular de Espa?a y una sospechosa victoria de Yugoslavia sobre Grecia provocan que el pase al Mundial se resuelva en un partido de desempate entre espa?oles y yugoslavos. Katalinski es el verdugo de la Selecci¨®n en ese duelo.
Espa?a emprende el camino hacia el Mundial de 1974 con el fin de enmendar sus fracasados intentos de clasificarse al Mundial y la Eurocopa anteriores. Cae en un grupo con Grecia y Yugoslavia. Hay una gran confianza en los jugadores de Kubala. Pero ¨¦stos pagaron su falta de contundencia. Result¨® insuficiente que puntuaran en los cuatro partidos, con dos empates ante Yugoslavia y dos victorias contra Grecia. Todo qued¨® pendiente del duelo entre griegos y yugoslavos. La victoria de estos ¨²ltimos por 2-4, tras una sospechosa actuaci¨®n del portero griego, deriv¨® en un partido de desempate.
Fr¨¢ncfort es el terreno neutral que alberga dicho duelo. Los 62.000 aficionados que acuden al Waldstadion, entre ellos numerosos espa?oles emigrados, son testigos de c¨®mo Katalinski aboca a Espa?a a un nuevo fracaso. Kubala alinea de inicio a Iribar; Sol, Benito, Jes¨²s Mart¨ªnez, Ur¨ªa; Juan Carlos, Claramunt, Asensi; Amancio, G¨¢rate y Valdez. Est¨¢n ilusionados los espa?oles. Sin embargo, el partido se tuerce pronto: en el minuto 13, Yugoslavia lanza una falta desde la derecha. El bal¨®n cruza por alto el ¨¢rea espa?ola y en el pico del ¨¢rea peque?a del segundo palo salta Katalinski para cabecear a placer. Iribar rechaza el esf¨¦rico como puede, con la desgracia de que vuelve a Katalinski, quien, con Iribar a¨²n en el suelo, remata con el pie y marca. El partido se pone entonces cuesta arriba para Espa?a, que no puede con el muro yugoslavo. Ni la entrada de Juan Carlos y Amancio o la expulsi¨®n del seleccionador yugoslavo sirven de ayuda. Katalinski ha resuelto el choque con su ¨²nica incorporaci¨®n al ataque, dejando otra vez a Espa?a sin Mundial.
- Yugoslavia: Maric; Buljan, Katalinski, Bogicevic, Hadziabdic; Oblak, Karasi, Acimovic; I.Petkovic, Surjak y Dzajic. (Seleccionador: Miljanic)
- Espa?a: Ir¨ªbar; Sol, Benito, Jes¨²s Mart¨ªnez, Ur¨ªa; Juan Carlos (Marcial 73¡¯), Claramunt, Asensi; Amancio? (Quini 73¡¯), G¨¢rate y Valdez. (Seleccionador: Kubala)
- ?rbitro. Vital Loraux (belga).
Katalisnki, el defensa yugoslavo, remata de cabeza un saque de falta. Ir¨ªbar lo rechaza a sus pies y el posterior derechazo de Katalinski echa a Espa?a del Mundial.
¡®La furia espa?ola¡¯ resurge en Glasgow con un doblete de Quini
En un Hampden Park repleto y con muchas bajas por lesi¨®n, la Selecci¨®n de Kubala da una lecci¨®n de f¨²tbol y garra. Iribar detiene un penalti con 1-0 en el marcador y el punta marca dos goles. Espa?a se acerca a la Eurocopa de 1976.
¡°Quienes jueguen deben estar dispuestos a sufrir¡±. El seleccionador Ladislao Kubala le daba vueltas al equipo que se medir¨ªa a Escocia en el Hampden Park de Glasgow. El escenario impone (acuden m¨¢s de 100.000 aficionados), los puntos en juego se antojan vitales para el liderato de grupo y las bajas preocupan mucho. El seleccionador tiene lesionados a sus cuatro mejores medios: Asensi, Claramunt, Pirri e Irureta, y otras piezas clave como G¨¢rate. Por contra, tambi¨¦n hay caras nuevas: Migueli, Planas, Camacho y Miguel ?ngel.
Escocia, en 1963, hab¨ªa ganado 2-6 a Espa?a en el estadio Santiago Bernab¨¦u y aquello a¨²n dol¨ªa. Once a?os despu¨¦s, a Kubala le inquietan Jordan, el conflictivo Bremner, Johnstone, que hab¨ªa brillado meses antes ante el Atl¨¦tico de Madrid, y el clima. El t¨¦cnico prepara en Madrid sesiones a la escocesa: embarrando el campo. ¡°Aquello no ser¨¢ Torremolinos o Marbella¡±, explica. Forma con una medular in¨¦dita (Costas, Villar y Planas) y tres delanteros (Rexach, Mart¨ªnez y un cuestionado Quini: un gol en 12 partidos con la Selecci¨®n). Iribar iguala los 46 partidos de Ricardo Zamora, aunque el capit¨¢n es Rexach porque ¡°sabe ingl¨¦s¡±, Kubala 'dixit'. Pronto, Bremner marca el 1-0. Escocia intenta imponer su dureza. En el 21¡¯, Cap¨®n comete penalti por mano (muy discutido), pero Iribar detiene el tiro y hace resurgir la furia espa?ola. Quini empata de cabeza tras una jugada de Villar y Roberto y, despu¨¦s, logra el 1-2 asistido por Planas. A¨²n marcar¨ªa un tercer gol, mal anulado. Gran triunfo para Kubala, que gan¨® la porra de la prensa: 1-2, y sus 'boys'.
- Escocia: Harvey; Jardin, McQueen, Forsyth; Bremner, Burns; Johnstone, Sounes, Deans (65¡¯ Lorimer), Jordan, Hutchison (65¡¯ Dalglish). (Entrenador: Ormond)
- Espa?a: Iribar; Castellanos, Benito, Migueli (73¡¯ Sol), Costas, Cap¨®n; Villar, Planas II; Roberto Mart¨ªnez, Quini, Rexach. (Entrenador: Kubala)
- ?rbitro. Erich Linemayr, de Austria. Amonest¨® a Villar (14¡¯), Migueli (18¡¯), Jordan (72¡¯), Rexach (88¡¯) y Planas II (90¡¯).
Quini, que jugaba su encuentro n¨²mero 13 con la Selecci¨®n, y lograba su primer doblete, acaba de marcar en la porter¨ªa escocesa, mientras el portero escoc¨¦s Harvey parece pedir explicaciones a sus compa?eros de selecci¨®n.
Un gol de Rub¨¦n Cano da la victoria en la batalla de Belgrado
En 1977, Espa?a puede ir de nuevo a un Mundial tras caerse de M¨¦xico 70 y de Alemania 74. El pasaporte depende de Belgrado, donde Yugoslavia prepar¨® el escenario como una batalla: patadas, la grada agresiva... Rub¨¦n Cano lo liquid¨®.
Durante la d¨¦cada de los 70, se fue tejiendo una fuerte rivalidad hispano-yugoslava, que iba en aumento por los sucesivos choques en competiciones oficiales. Ya durante la fase clasificatoria del Mundial de Alemania 74, un gol de Katalinski hab¨ªa apeado a los espa?oles de la cita germana. Cuatro a?os m¨¢s tarde, ambos volv¨ªan a jugarse un puesto para Argentina 78. El ¨²ltimo encuentro se dirimir¨ªa en Belgrado. El fatalismo recorre el pa¨ªs. Se recuerda lo sucedido tiempo atr¨¢s, y solo Kubala, siempre con su lema optimista (¡°Chicos bien, moral ¨®ptima), y sus jugadores ven factible la haza?a.
Un equipo con oficio llega a la capital yugoslava, donde espera un aut¨¦ntico campo de batalla. Desde el saque inicial se prev¨¦ un partido tremendo. Juanito es cazado en el mismo c¨ªrculo central; en diez minutos, Pirri es cazado tambi¨¦n violentamente por Kustudic sin poder seguir. Le suple Olmo, que realizar¨¢ un extraordinario encuentro. Los espa?oles, bajo un clima hostil, desarrollan su juego que va a m¨¢s, con un centro del campo de valientes. A falta de 20 minutos para el final, Juanito pasa a Carde?osa, que centra al segundo palo. All¨ª surge Rub¨¦n Cano, que remata... y ?gol! Todos se funden en un abrazo. Luego se ver¨¢ que Rub¨¦n Cano ha golpeado el bal¨®n con la espinilla: ¡°Si le doy con el empeine la mando a la grada¡±, explicar¨ªa. Pero no acaba ah¨ª el drama: al ser sustituido, Juanito hace la se?al del pulgar hacia abajo. La respuesta es un botellazo que le deja sin sentido y debe ser retirado en camilla. Es el alto precio de una imponente victoria.
- Yugoslavia: Katalinic; Hatunic, Muzinic, Stojkovic, Boljat; Trifunovic, Sead Susic (64¡¯ Halilhodzic), Surjak; Popivoda (64¡¯ Vukotic), Kustudic, Safet Susic. (Entrenador: Valok)
- Espa?a: Miguel ?ngel; Marcelino, Pirri (13¡¯ Olmo), Migueli, Camacho; San Jos¨¦, Leal, Asensi, Carde?osa; Juanito (76¡¯ Dani), Rub¨¦n Cano. (Entrenador: Kubala)
- ?rbitro. Mr. Burns, ingl¨¦s. Amarilla a Marcelino (34¡¯), Rub¨¦n Cano (41¡¯), Juanito (42¡¯), Boljat (42¡¯), Carde?osa (81¡¯) y Muzinic (84¡¯).
Un pase en profundidad de Juanito a Carde?osa es recogido por ¨¦ste antes de que el bal¨®n salga por la l¨ªnea de fondo. Centra al segundo palo, donde llega Rub¨¦n Cano, que remata el esf¨¦rico. ?Gol!
Un 'no gol' de Carde?osa condena a Espa?a
El inesperado tropiezo con los austriacos hizo que fuera decisivo el desaf¨ªo con los brasile?os. Carde?osa tiene la mejor oportunidad del partido, pero falla a puerta vac¨ªa de forma inexplicable y Espa?a no logra pasar del empate a cero contra Brasil.
La sorprendente derrota de Espa?a ante Austria y el empate de Brasil contra Suecia en sus anteriores partidos de la fase de clasificaci¨®n provocaron que ambas selecciones salieran al c¨¦sped con el firme prop¨®sito de no perder. Especialmente delicada es la situaci¨®n espa?ola tras perder, por lo que la victoria se antoja necesaria. Brasil, aunque quedar¨¢ tercera en el Mundial, no est¨¢ en su mejor momento, por lo que la Selecci¨®n tiene ante s¨ª una oportunidad perfecta para reconducir la fase de grupos. Kubala deja a Pirri y Rexach en el banquillo. El partido es malo en l¨ªneas generales. Ning¨²n equipo brilla. Ambos se mueven con lentitud y apenas gozan de ocasiones de gol. Los 'canarinhos' pueden adelantarse en un despeje de Olmo que se estrella en el larguero de la puerta espa?ola, pero la mejor oportunidad la tiene Carde?osa en sus botas a la media hora de juego. Ur¨ªa bombea sobre el ¨¢rea. Santillana, en prodigioso salto, cabecea dejando el bal¨®n a Carde?osa. Este, con el guardameta brasile?o fuera de su marco, tiene la porter¨ªa pr¨¢cticamente vac¨ªa ante s¨ª. Intenta asegurar el control, pero acab¨® mandando el bal¨®n al ¨²nico sitio donde hab¨ªa alguien, el defensa Amaral, que ha llegado a tiempo para rechazar el esf¨¦rico cuando ya se cantaba el tanto. Este ¡°no gol¡± ser¨¢ siempre una mancha en la trayectoria de Carde?osa y perseguir¨¢ tambi¨¦n a la Selecci¨®n durante mucho tiempo.
Tras el empate ante Brasil, la Selecci¨®n vencer¨¢ a Suecia por 1-0 con tanto de Asensi. Una victoria que fue en vano, pues no le servir¨¢ para superar la primera fase, donde quedar¨¢ tercera. Brasil ganar¨¢ a Austria en el ¨²ltimo encuentro, clasific¨¢ndose ambas para octavos.
- Brasil: Le?o (c); Nelinho (Gil 71¡¯), Amaral, ?scar, Edinho; Cerezo, Zico (Mendon?a 83¡¯), Dirceu; Toninho, Reinaldo y Batista. (Entrenador: Coutinho)
- Espa?a: Miguel ?ngel; Marcelino, Migueli (Biosca 51¡¯), Olmo, Ur¨ªa (Guzm¨¢n 79¡¯); San Jos¨¦, Carde?osa, Leal; Juanito, Santillana y Asensi. (Entrenador: Kubala)
- ?rbitro. Gonella (Italia).
El ¡®no gol¡¯ de Carde?osa que pasar¨ªa a la historia como uno de los grandes errores de la historia de la Selecci¨®n.
Los partidos clave de Espa?a de los a?os 20'
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Los partidos clave de Espa?a en la d¨¦cada de 2000 (Parte 1)
Los partidos clave de Espa?a en la d¨¦cada de 2000 (Parte 2)
Los partidos clave de Espa?a en la d¨¦cada de 2010 (Parte 1)
Los partidos clave de Espa?a en la d¨¦cada de 2010 (Parte 2)