El Grupo F estuvo repleto de sorpresas y emoción. Las dos selecciones más humildes y, a priori, fáciles acabaron siendo revolucionarias. Hungría, que llegaba a la Eurocopa tras 40 a?os de ausencia, se clasificó como líder gracias a la diferencia de goles. Islandia, debutante en una competición continental, fue segunda gracias a su sólida defensa y sus jugadas de estrategia. Las cenicientas rechazaron aceptar su papel y se rebelaron para acabar ocupando las mejores posiciones. (Foto de apertura: El defensa húngaro cabecea el balón durante el encuentro ante Islandia).

Las favoritas suspendieron

Portugal pasó a octavos, pero dejó mucho que desear. Era la selección mejor posicionada para liderar el grupo y tuvo que conformarse con el tercer puesto tras empatar todos sus encuentros. Los jugadores de Santos acusaron su falta de gol y mantuvieron la incertidumbre sobre su andadura en la Eurocopa hasta el último encuentro, en el que se clasificaron con mucho sufrimiento. Austria, que hizo una gran fase de clasificación y era candidata a hacer algo grande, también decepcionó. Quedó última, sin conocer la victoria (dos empates y una derrota) y siendo capaz de marcar solo un tanto.

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Volvió Szalai

Storck decidió confiar en Adam Szalai como su delantero, pese a que llevaba un a?o y medio sin marcar, ni con su equipo ni con la selección húngara. El delantero le devolvió este gesto marcando el primer gol de Hungría en su debut. Con un toque con la puntera, el ariete mandó el balón a la red acabando con 41 partidos de sequía. Al tanto le sucedió la expulsión de Dragovic por doble amarilla y todo fue más fácil para los húngaros. Stieber puso el 0-2 definitivo a falta de tres minutos para el final al culminar de manera brillante una contra. El combinado magiar fue superior y se llevó los tres puntos ante la sorpresa de los espectadores.

Kiraly, jugador más veterano

El portero de Hungría, Gabor Kiraly, se convirtió ante Austria en el jugador más veterano que disputaba una Eurocopa. A sus 40 a?os y 75 días le quitó el récord al mítico centrocampista alemán Matth?us (39 a?os y 91 días). El portero húngaro era conocido por vestir pantalones largos de color gris en lugar de pantalones cortos en casi todos sus partidos. Vestimenta que se hizo internacionalmente conocida tras su participación en el torneo. Cuando finalizó la competición continental, Kiraly anunció su retirada de la selección.

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Dulce debut de Islandia

Después del aviso del islandés Sigurdsson al comienzo del encuentro, Portugal reaccionó. La selección lusa hizo una buena primera parte y metió el miedo a su rival hasta que en el minuto 30 Nani remató con la derecha en el primer palo un pase de André Gomes. Los portugueses pudieron hacer más goles pero el descanso llegó con el 1-0 en el marcador, algo que pagarían en la segunda mitad. Tras la reanudación, se vinieron abajo y llegó el histórico empate de Islandia. Bjarnson remató en boca de gol, y sin marcaje, un centro de Gudmundsson. Un tanto que será recordado siempre con cari?o en Islandia por ser el primero de la selección en una Eurocopa, por marcarlo ante uno de los equipos más fuerte del grupo y porque dio comienzo a un bonito sue?o.

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Empate justo

El choque entre las dos revelaciones del torneo se saldó con empate a uno. Hungría llevaba el peso del partido pero Islandia mostraba una mayor voracidad ofensiva cuando tenía el balón. Y fueron los de Lagerback quienes se adelantaron en el marcador antes del descanso gracias al tanto de penalti que marcó Sigurdsson. Tras su paso por vestuarios, los húngaros fueron superiores y encontraron el premio en el minuto 88. Nikolic centró al área y Saevarsson, en un intento de despeje, se marcó en propia puerta, dejando prácticamente clasificada a Hungría y frustrando el sue?o de su selección, aunque seguía teniendo opciones.

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Portugal chocó con Almer y los palos

Sin hacer un partido redondo, la selección dirigida por Santos hizo méritos para llevarse la victoria ante Austria, especialmente en la segunda mitad. Nani y Cristiano remataron asiduamente, pero se toparon con Almer, que desbarató todas sus ocasiones. Y luego apareció el palo para frenar también a Portgual. Cristiano lanzó al poste un penalti en el 77. Minutos después le anularon un gol por fuera de juego. Estaba claro que esa tampoco era la noche. Ni desde los once metros, ni teniendo a uno de los mejores goleadores de la historia como capitán. A los portugueses se les seguía negando el gol y eso les había costado complicarse la Eurocopa. Ahora se lo tendrían que jugar todo en el último partido.

Un Cristiano de récord

A pesar de ser una noche muy amarga, Cristiano Ronaldo volvió a cumplir algún récord individual, como de costumbre. Se convirtió en el jugador con más internacionalidades para Portugal, con 128, e igualó a Thuram y Van der Sar como futbolistas con más partidos en una fase final de la Eurocopa al disputar su encuentro número 16. Además, después de que todas las selecciones disputaran ya sus dos encuentros, el capitán luso era el que más había rematado a portería con veinte disparos. ?l sólo superaba los intentos de gol de selecciones como Albania, Hungría, Austria, Gales, República Checa, Turquía, Rumanía, Rusia, Irlanda del Norte, Suecia o Islandia. Era por eso que, a pesar de seguir fallando de cara a gol, su seleccionador, sus compa?eros, los aficionados y medios portugueses seguían teniendo fe ciega en él.

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Traustason certificó la proeza

Los de Lagerback empezaron fuertes, dejando claro que la especulación no servía para estar en octavos. Le arrebataron la pelota a Austria y su dominio acabó en gol. Arnason peinó un saque de banda de Gunnarson para que B?dvarson controlara y rematara dentro del área ante la pasividad de la defensa. El tanto obligó a Austria a cambiar su planteamiento conservador para remontar y comenzó a asediar a Islandia. Los centroeuropeos pudieron poner las tablas en el marcador de penalti, pero Dragovic mandó el lanzamiento al palo. Tras el descanso, la agonía islandesa fue en aumento, especialmente con el empate. Sch?pf regateó bien a un defensa en la frontal y fusiló con un tiro cruzado a Halldorsson. El sue?o se le escapaba a la selección nórdica. Pero, tras una magnífica contra, aprovechando que todos los jugadores austriacos estaban en área islandesa, Traustason confirmó la haza?a y desató la alegría islandesa. Nadie podía esconder su emoción en ese histórico momento.

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Bendito caos

La primera parte estuvo dominada por Portugal, aunque Hungría golpeó primero por medio de Gera. Con el gol, los lusos se vinieron arriba y antes del descanso Nani empató el partido. Con 1-1 el empezó la locura. Un doblete de Dzsudzsak y otro de Cristiano, convertido ya en el jugador con más partidos en una fase final de Eurocopa, protagonizaron los quince insólitos minutos que se vivieron nada más comenzar la segunda mitad. Espectacular. No daba tiempo a reaccionar, celebrar o lamentarse. Cualquier cosa podía pasar. Tras este intenso momento, el partido se calmó, fue controlado por Portugal y murió con un empate a tres satisfactorio para todos, ya que clasificaba a ambas selecciones.