Harry Potter y la C¨¢mara Secreta
Harry Potter y la C¨¢mara Secreta - D¨ªa Uno
Bienvenidos al maravilloso mundo de Harry Potter. En este segundo curso de su estancia en Howards, tendr¨¢ que soportar muchos m¨¢s peligros de los que nunca hubiera pensado tener que afrontar. Tendremos que usar nuevos hechizos, conocer a nuevos personajes del Universo Harry Potter y sobre todo, vivir una nueva aventura que nunca podr¨¢ olvidar.
D?A UNO
Objetivos:
Una vez en el vest¨ªbulo, efectivamente, Ron estaba all¨ª. ?Por qu¨¦ no bajo la Gran Escalera con nosotros? En fin... Una vez en los exteriores de Howards, Neville est¨¢ justo a la derecha nada m¨¢s saliendo del enorme port¨®n. Tiene un par de propuestas para nosotros en forma de juego. Mejor dejarlo para despu¨¦s. Madam Hooch nos espera para su clase de vuelo.
Harry Potter y la C¨¢mara Secreta (PC) |
?Qu¨¦ camino coger? Muy sencillo. Hacia la izquierda vamos hacia el Estadio de Quidditch, de frente al Invernadero de Herbolog¨ªa de Tercero, y hacia la derecha, efectivamente, hacia las Pr¨¢cticas de Vuelo. ?All¨ª vamos!
Montar el escoba es realmente sencillo. Las primeras lecciones son casi intuitivas. El Stick de Control mueve a Harry seg¨²n la direcci¨®n que lo pulsemos. Arriba, mueve a Potter para arriba, abajo para abajo, etc. Si queremos que el vuelo sea invertido, es decir, que pulsando hacia arriba Potter baje y viceversa, tendremos la opci¨®n una vez que acabe la clase, entrando en el men¨² Opciones. Os lo aconsejo.
El bot¨®n A ser¨¢ para propulsar a Harry a la m¨¢xima velocidad que pueda llevar a alcanzar nuestra querida Nimbus 2000. Para probar nuestra magestr¨ªa con la escoba, nos propone un peque?o reto: Cuantos aros somos capaces de atravesar en un tiempo determinado. Algunos de ellos se mover¨¢n o se har¨¢n m¨¢s peque?os. En funci¨®n del n¨²mero que consigamos, nos pondr¨¢ la correspondiente nota.
La nota influir¨¢ en los puntos que se les otorgue a nuestra casa para ganar la Copa de las Casas. As¨ª que, si no estamos satisfechos con la nota, podemos repetir hasta la saciedad. Una vez superado esto, s¨®lo nos queda volver a nuestro dormitorio para acabar el d¨ªa.