¡°Seg¨²n un estudio reciente, las personas con capacidad f¨ªsica media o alta tienen la mitad de riesgo de hospitalizaci¨®n por coronavirus. De momento, tus acciones son la mejor vacuna¡±. Y no le falta raz¨®n a Marcos V¨¢zquez, creador del blog Fitness Revolucionario. Debemos pensar m¨¢s en qu¨¦ podemos hacer para protegernos.

Y es que, en un escenario repleto de incertidumbre y altamente cambiante en el que no se termina de arrojar luz sobre los mecanismos biol¨®gicos del SARS-CoV-2, y ante la ausencia tambi¨¦n de vacunas y tratamientos efectivos contra la enfermedad que provoca, la COVID-19, es necesario centrar los esfuerzos preventivos sobre aquellos aspectos que s¨ª podemos controlar y que pueden comprometer el buen funcionamiento del sistema inmune y del organismo en la lucha contra las enfermedades infecciosas.

As¨ª lo certifica tambi¨¦n el estudio al que se refer¨ªa V¨¢zquez con anterioridad y que ha sido publicado recientemente en 'Mayo Clinic Proceedings'. El trabajo firmado por expertos del Hospital Henry Ford de Detroit (EEUU) concluye que la capacidad m¨¢xima de ejercicio determinada a partir de una prueba de esfuerzo antes de la infecci¨®n por SARS-CoV-2 se asocia de forma independiente e inversa con la probabilidad de hospitalizaci¨®n por COVID-19. Ni m¨¢s ni menos.

Los investigadores analizaron los datos de aquellos pacientes que se hab¨ªan realizado una prueba de esfuerzo en el hospital entre los a?os 2016 y 2020, y se centraron en los positivos por COVID-19, 246 en total. De estos pacientes, un 36% (89) acab¨® siendo hospitalizado, que se correspond¨ªa precismanete con los que peores resultados hab¨ªan obtenido en el test de esfuerzo en par¨¢metros como capacidad pulmonar, resistencia a la fatiga o en los datos del electrocardiograma. Finalmente un 1% de esos pacientes falleci¨®.

De igual forma, los sujetos que finalmente fueron seleccionados ten¨ªan una edad media de 59 a?os y presentaban problemas de hipertensi¨®n arterial, niveles altos de colesterol, diabetes u obesidad. Las infecciones virales respiratorias, como la que causa el SARS-CoV-2, provocan una respuesta inflamatoria sistem¨¢tica que supone una carga sustancial sobre el sistema cardiopulmonar. Una mayor aptitud cardiorrespiratoria (por ejemplo, la capacidad de ejercicio) refleja una mayor reserva cardiopulmonar y la capacidad del cuerpo para responder a una agresi¨®n, as¨ª como una relaci¨®n inversa con el riesgo de resultados adversos entre las personas diagnosticadas con una enfermedad cr¨®nica.

La condici¨®n f¨ªsica est¨¢ moderada por la edad, la gen¨¦tica y la presencia de enfermedades cr¨®nicas, y est¨¢ fuertemente influenciada por la actividad f¨ªsica, especialmente el entrenamiento con ejercicios estructurados. Adem¨¢s de mejorar la condici¨®n f¨ªsica, el entrenamiento con ejercicios cardiorrespiratorios mejora la funci¨®n inmunitaria, reduce la inflamaci¨®n de bajo grado y reduce el riesgo de infecciones respiratorias.

As¨ª pues, el trabajo de los expertos estadounidenses pone de manifiesto que el ejercicio f¨ªsico regular, unido a otros aspectos importantes como la dieta, el descanso o el manejo del estr¨¦s, incide de manera decisisva en nuestro sistema inmunitario y en la capacidad de defensa frente a infecciones como la COVID-19, que lamentamblemente todav¨ªa estamos lejos de comprender completamente. De ah¨ª que a d¨ªa de hoy, la mejor vacuna, como indica Marcos V¨¢zquez, sean las acciones sobre las que tenemos un m¨ªnimo control.