La vitamina D es fundamental en nuestro cuerpo. Y esa necesidad de vitamina D se hace esencial en un momento diferente, en el embarazo y en el proceso de quedarse embarazada, ya sea de manera natural o por tratamientos de fertilidad. 

 Aparte de la infertilidad y los fracasos de la reproducci¨®n asistida, la insuficiencia de vitamina D contribuye a la patog¨¦nesis de diferentes enfermedades del aparato reproductor femenino, incluyendo el s¨ªndrome de ovarios poliqu¨ªsticos, la endometriosis, miomas uterinos y la insuficiencia ov¨¢rica prematura.

El papel de la vitamina D

El papel de la vitamina D, considerada hasta hace poco solamente en relaci¨®n con la salud de los huesos, es muy importante seg¨²n el doctor Jan Tesarik, Director de la Cl¨ªnica MARGen de Granada. ¡°Hoy d¨ªa sabemos que est¨¢ ¨ªntimamente implicada en la funci¨®n del aparato reproductor femenino, y su carencia causa infertilidad, abortos espont¨¢neos y fallos de la reproducci¨®n asistida¡±.

¡°Se estima que m¨¢s que la mitad de las mujeres espa?olas en edad reproductiva tiene las reservas sub¨®ptimas de vitamina D. Los valores normales de la concentraci¨®n de vitamina D en el suero se sit¨²an por encima de 30 ng/ml, se considera una insuficiencia cuando el nivel se sit¨²a entre 10 y 30 ng/ml, y una deficiencia cuando este valor est¨¢ por debajo de 10 ng/ml. Ambas condiciones est¨¢n asociadas con problemas de fertilidad femenina, fracasos de reproducci¨®n asistida y abortos espont¨¢neos. Es importante resaltar que la mujer que quiere procrear tiene que alcanzar un nivel correcto de la vitamina D antes de la concepci¨®n, ya que recuperarla despu¨¦s de la fecundaci¨®n tiene poco efecto¡±, explica el doctor.

D¨®nde obtener vitamina D

La mayor parte de la vitamina D total presente en el organismo, casi un 90%, es producida en la piel bajo el efecto de la radiaci¨®n solar. S¨®lo alrededor de un 10% es aportado de fuentes alimenticios.

Los pescados grasos, como el salm¨®n, el at¨²n y la caballa, son las mejores fuentes de vitamina D, seguidos por el h¨ªgado vacuno, el queso, la yema de huevo y los hongos. Sin embargo el consumo de estos alimentos no bastar¨¢ si la producci¨®n propia en la piel es insuficiente. Pero con el confinamiento, la exposici¨®n a la radiaci¨®n solar ha sido m¨ªnima. La insuficiencia, adem¨¢s, es m¨¢s frecuente en personas con sobrepeso.