'Invasi¨®n Secreta': el fin de la revoluci¨®n Bendis en Marvel

'Invasi¨®n Secreta' es m¨¢s una conclusi¨®n y el pegamento de una serie de eventos que un evento individual en s¨ª mismo; durante principios del siglo XXI los ejecutivos y creativos de Marvel hab¨ªan llegado a la conclusi¨®n de que muchas de sus colecciones daban s¨ªntomas de agotamiento, as¨ª que trazaron un plan para poner patas arriba ese universo decante y crear un nuevo orden, que inclu¨ªa una manera m¨¢s adulta de enfocar las historias y la presencia de figuras emergentes en detrimento de los grandes cl¨¢sicos de la editorial.

Desde que Bendis diera el pistoletazo de salida al proceso en 2004, una serie de sucesos (eventos) se fueron encadenando hasta llegar a Invasi¨®n Secreta (2008): la disgregaci¨®n de Los Vengadores (Vengadores Desunidos-2004), la locura de la Bruja Escarlata (House of M-2005), el paso a la clandestinidad de h¨¦roes de primera l¨ªnea (Civil War-2006), la muerte del Capit¨¢n Am¨¦rica (2007), el exilio de Hulk (World War Hulk-2007) y la disgregaci¨®n de los superh¨¦roes en mini equipos repartidos por los diferentes Estados (La Iniciativa, 2007). Aunque tratadas como situaciones independientes todas ellas ten¨ªan un denominador com¨²n: la p¨¦rdida de peso de los personajes m¨¢s poderosos del universo Marvel.

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No hay que fiarse de nadie

En este contexto llega Invasi¨®n Secreta, que presenta el ataque a la Tierra por parte de los skrulls, una raza alien¨ªgena capaz de adoptar cualquier forma y que durante a?os se hab¨ªa estado infiltrando tanto en los grupos de superh¨¦ores como en SHIELD. En este proceso ha ido sustituyendo personajes relevantes por agentes durmientes que eran replicas exactas del personajes original. Muchas de las situaciones inexplicables de aquellos eventos encontraban as¨ª un relato coherente ya que formaban parte de un plan trazado por los extraterrestres para minar la resistencia humana.

Para entender el origen de este conflicto hay que remontarse a principios de los a?os 70 a la Guerra Kree-Skrull durante la cual varios superh¨¦roes fueron tomados prisioneros por los ¡®cambiaformas¡¯ y sus poderes, replicados. Desde ese mismo momento los skrulls entienden que la Tierra forma parte de su imperio y su misi¨®n sagrada es liberar al planeta y a sus habitantes de un sistema de gobierno que fomenta el enfrentamiento, es la promesa de una vida mejor? la que mueve los grandes engranajes de una guerra santa de liberaci¨®n.

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Una trama de esp¨ªas

La historia del enemigo infiltrado cuya identidad es desconocida la toma directamente Bendis del cine de los 50-60, que entonces es un espejo de la paranoia que se viv¨ªa en la sociedad norteamericana por la presencia de agentes comunistas en suelo estadounidense. Pel¨ªculas como 'La invasi¨®n de los ladrones de cuerpos' (Don Siegel, 1956) o 'El mensajero del miedo' (John Frankenheimer,1962) reflejan ese miedo a no saber si la persona que est¨¢ enfrente es un amigo o un enemigo. Pero Bendis saca poco partido de este juego ya que apuesta m¨¢s por la acci¨®n que por la intriga, resuelve de prisa y corriendo muchas situaciones que, por ejemplo en manos de Ed Brubaker, hubieran dado mucho juego.

La sensaci¨®n es que Bendis llega a este punto del relato general agotado creativamente y decide solventar por la v¨ªa del KO una historia cuyas piezas hab¨ªa tardado varios a?os en encajar, pasa algo as¨ª como en las pel¨ªculas de Alex de la Iglesia donde el desarrollo suele ser mucho m¨¢s interesante que el desenlace. Hay partes del relato como la motivaci¨®n religiosa que parece impulsar el conflicto o la necesidad de secuestrar a Reed Richards que se dejan sin explicaci¨®n coherente. Por no hablar de la participaci¨®n de muchos personajes que durante mucho tiempo han copado la primera plana y que de repente asumen un rol secundario o son directamente ignorados.

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Una pareja consolidada

En la parte creativa, el dibujante Leinil Francis Yu se hace cargo de los l¨¢pices; el filipino es un viejo conocido de Bendis de su etapa en Los Nuevos Vengadores y resulta el artista ideal para un c¨®mic que apuesta m¨¢s por lo visual que por la narrativo. Yu se mueve bien en las grandes ilustraciones a doble p¨¢gina que presentan acci¨®n a raudales y muchas figuras en la composici¨®n, pero la disposici¨®n de las vi?etas no ayuda a mejorar la narrativa, visualmente las p¨¢ginas son impactantes, pero hay demasiadas vi?etas sin texto y excesivamente grandes¡­ aunque eso es culpa del guionista al 80%.

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Consecuencias

El precio que pagan los superh¨¦roes por Invasi¨®n Secreta no es barato, por un lado, y como es habitual en Bendis, hay muertes y por otro lado la vieja guardia cae en desgracia dando paso a un nuevo orden en el que Norman Osborn (Duende Verde) se hace con el control tanto de la seguridad nacional, a trav¨¦s de HAMMER, como de los vigilantes (Vengadores Oscuros). Se inicia as¨ª Dark Reign, que es la ant¨ªtesis de lo que hab¨ªa significado la Edad dorada de los superh¨¦roes. Ahora los villanos son los encargados de la protecci¨®n, las conspiraciones est¨¢n al orden del d¨ªa y los ciudadanos ceden derechos a cambio de seguridad. Todo ello es un reflejo de una sociedad norteamericana que a¨²n viv¨ªa conmocionada por el 11-S, donde agentes infiltrados hab¨ªan atentado contra EE UU, y por una guerra en Afganist¨¢n en la que organizaciones de contratistas, de dudosas motivaciones, tomaban foco.

Es cierto que Invasi¨®n Secreta no es ni de lejos el mejor trabajo de Bendis, pero tambi¨¦n hay que reconocerle el enorme m¨¦rito de conseguir que los c¨®mics de Marvel se movieran en c¨®digos m¨¢s adultos y pegados a una realidad que, aunque tamizada por la fantas¨ªa, emparentaba con la viv¨ªan d¨ªa a d¨ªa sus conciudadanos.

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