La compra de frutas cortadas en supermercados y fruter¨ªas es bastante com¨²n, bien sea porque ofrece la posibilidad de ver el estado del alimento en su interior o para adquirir solamente la cantidad que se necesite. Sin embargo, Beatriz Robles, experta en seguridad alimentaria y nutrici¨®n, advierte de los riesgos que implican esas compras.

Seg¨²n la experta, citada por 20 Minutos, al cortar las sand¨ªas y los melones, se rompe la protecci¨®n natural del interior de la fruta frente a posibles contaminaciones externas, que bien pueden ser microorganismos, pat¨®genos de la piel, contaminaci¨®n de los utensilios con los que se cortan o la propia persona que lo hace.

La manera correcta de hacerlo, dice Robles, es lavar la fruta antes de cortarla, y una vez obtenidos los trozos, refrigerarlos. Si no se hace as¨ª, se favorece el crecimiento de microorganismos, y no hay un tratamiento posterior que pueda mejorar su higiene.

La soluci¨®n

La soluci¨®n que sugiere la experta es comprar los trozos en alg¨²n lugar donde los refrigeren, pedir que corten la fruta en el momento de contarla o comprar la pieza completa y usar los sobrantes en otras recetas.