El acuciante calor puede ser un enemigo complicado de combatir en verano. Las altas temperaturas que se instalan en los hogares, edificios p¨²blicos, comercios u oficinas, e incluso en veh¨ªculos, suelen provocar que recurramos al aire acondicionado como acto reflejo. Pero un aliado tan valioso tambi¨¦n puede entra?ar riesgos para la salud porque el exceso de aire fr¨ªo puede desembocar en cuadros catarrales, laringitis, faringitis o procesos bronqu¨ªticos, entre otros.

El aire acondicionado reduce la temperatura del ambiente, pero a la vez tambi¨¦n provoca una disminuci¨®n del la humedad del aire. ¡°Puede ocasionar resequedad de mucosas y s¨ªntomas como irritaci¨®n ocular, dolor de garganta, cambios en la voz, resequedad de la piel e incluso empeoramiento de algunas alergias. Algunos estudios han demostrado que las personas que trabajan en espacios con aire acondicionado excesivo incluso pueden presentar dolores de cabeza cr¨®nicos y sensaci¨®n de fatiga¡±, explica la doctora Daniela Silva, especialista en Medicina Interna de Vithas Internacional de Madrid.

Adem¨¢s, es importante que aquellas personas con patolog¨ªas pulmonares, como asm¨¢ticos o pacientes con enfermedad pulmonar obstructiva cr¨®nica, extremen las precauciones. ¡°El exceso de aire fr¨ªo puede provocar una inflamaci¨®n de la mucosa del ¨¢rbol bronquial, lo cual act¨²a como un factor de riesgo para el desarrollo de infecciones respiratorias y de exacerbaci¨®n de crisis asm¨¢ticas y episodios de bronquitis¡±, indica la doctora Silva.

Otro de los aspectos fundamentales a tener en cuenta en relaci¨®n al aire acondicionado es el referente a su mantenimiento y limpieza. Puede parecer un tema balad¨ª pero lo cierto es que as¨ª se evita la colonizaci¨®n de bacterias, como la legionella. ¡°Una de las infecciones m¨¢s graves es la legionelosis, un tipo de neumon¨ªa causada por la Legionella pneumophila, una bacteria que tiene su nicho ecol¨®gico natural en aguas superficiales y que encuentra en los sistemas de aire acondicionado un reservorio id¨®neo¡±, advierte la especialista.

Recomendaciones b¨¢sicas para el uso del aire acondicionado

Llegados a este punto, la doctora Silva ofrece unas recomendaciones para poder disfrutar de temperaturas adecuadas y disminuir el posible impacto en la salud del uso del aire acondicionado:

• Ajustarlo a una temperatura razonable; lo m¨¢s adecuado ser¨ªa entre 22 y 25 ?C.
• Evitar una exposici¨®n directa en la medida de lo posible.
• Mantener un buen nivel de hidrataci¨®n. Para ello es importante beber un m¨ªnimo de 1,5 litros de agua al d¨ªa.
• Tambi¨¦n puede resultar ¨²til el uso de lubricante ocular para hidratar los ojos, sobre todo en personas que pasan muchas horas delante de un ordenador.
• Igualmente ocurre con la piel: usar una crema hidratante evitar¨¢ la resequedad.
• Realizar descansos durante el d¨ªa, pero evitando un cambio s¨²bito de temperatura.
• Comprobar el estado del aparato sobre todo antes de su puesta en marcha si ha pasado mucho tiempo desde la ¨²ltima vez que se utiliz¨®.
• Seguir las recomendaciones del fabricante o del instalador sobre su mantenimiento.
• En caso de presentar s¨ªntomas respiratorios, acudir inmediatamente al m¨¦dico de familia, que valorar¨¢ la situaci¨®n.