Seguramente leas este texto en un atasco camino de la playa, en un tren llegando a tu casa, o en el avi¨®n si tu destino es un lugar paradis¨ªaco. Sea como fuere, te espera un fin de semana de playa maravilloso, y nosotros queremos que con estos cinco sencillos pasos descubras si te est¨¢s deshidratando. No queremos que salgas de la toalla si no es necesario, que muchos est¨¢is buscando el mejor bronceado desde hace meses y hay que cumplir objetivo.

Eso s¨ª, evitando mareos, cansancio o una baja presi¨®n arterial. Hay que hidratarse por dentro y por fuera, estar en el agua y en la toalla s¨ª, pero cuidando nuestra salud.

Antic¨ªpate a la sed

El mismo ritual de echarnos protecci¨®n solar deber¨ªa existir para beber agua. Es importante no tener sed, ya que es un s¨ªntoma de deshidrataci¨®n. Ten siempre a mano una bebida fresca.

Come productos hidratantes

Comer fruta ayuda a mantener los niveles de hidrataci¨®n adem¨¢s de combatir el hambre. Mel¨®n, sand¨ªa, uvas o cerezas son perfectos. Las fresas, el coco, son productos de verano frescos y muy hidratantes

No te olvides del potasio

Estar en movimiento (jugando en la arena o en el agua) bajo un sol intenso provoca la p¨¦rdida de potasio, un mineral que tiene funciones fundamentales en la hidrataci¨®n corporal. Por eso es aconsejable incrementar su consumo en situaciones en las que el cuerpo pueda perder agua, con alimentos como la chirimoya y el aguacate. Los pl¨¢tanos son una gran fuente de potasio (no has visto a Nadal tomar siempre pl¨¢tanos en los descansos en los partidos).

Sombrilla, sombrero, gorra

Siempre, c¨²brete la cabeza. El calor nos deshidrata y sudar es una muestra de ello. Estamos perdiendo l¨ªquidos. Estar bajo la sombrilla es una manera de reducir la sensaci¨®n de deshidrataci¨®n a corto plazo y de evitar un inc¨®modo golpe de calor.

No confundir hambre con sed

Los ingleses lo llaman ¡®hirsty¡¯, una mezcla entre sediento y hambriento. A veces la sed parece hambre. Puedes comprobar qu¨¦ te ocurre si tras haber comido hace una hora y media antes parece que tienes hambre de repente. Prueba a beber un vaso de agua, y si en los siguientes 10 minutos se ha pasado, era sed. Si no, vuelve a comer.

Con estos consejos, adi¨®s a la deshidrataci¨®n, hola al disfrute m¨¢ximo en la playa.