La palabra ¡®Rusia¡¯ fue sin¨®nimo de felicidad para Espa?a en la UEFA EURO 2008. Dos enfrentamientos, dos goleadas. Contra la selecci¨®n rusa comenz¨® su sue?o y contra ella lleg¨® a la final por la puerta grande.

El equipo de Luis Aragon¨¦s debut¨® contra los rusos ganando con un contundente 4-1 que hac¨ªa presagiar algo grande. En las semifinales, la Selecci¨®n roz¨® la perfecci¨®n y volvi¨® a someter a Rusia, esta vez con un 0-3. El conjunto de Hiddink no pudo hacer nada por cambiar el desenlace. Despu¨¦s de 24 a?os, y muchas decepciones, Espa?a volv¨ªa a estar en la final de una Eurocopa. En ella le estaba esperando ya Alemania, que el d¨ªa anterior hab¨ªa eliminado con muchas dificultades a una Turqu¨ªa que se despidi¨® de la competici¨®n con la cabeza bien alta y dejando una imagen estupenda. (Foto de apertura: Xavi Hern¨¢ndez celebrando su gol, el primero de Espa?a contra Rusia)

 R¨¢pida reacci¨®n de Alemania

La selecci¨®n liderada por L?w comenz¨® dominando el encuentro, aunque sin ocasiones. De hecho eran los turcos los que m¨¢s peligro creaban. La mejor oportunidad les lleg¨® con un disparo seco de Kazim desde la frontal que se estrell¨® en el larguero. Diez minutos despu¨¦s el delantero volvi¨® a mandar el bal¨®n al travesa?o. Esta vez Boral estuvo oportuno para aprovechar el rechace y mandar el esf¨¦rico al fondo de la red. Pero poco le dur¨® la alegr¨ªa a los turcos. Cuatro minutos despu¨¦s una internada por la banda izquierda de Lukas Podolski acab¨® con un centro que remat¨® a la red Schweinsteiger. Los germanos respiraban despu¨¦s del comienzo fulgurante de su rival. Pero Turqu¨ªa volvi¨® a la carga, esta vez sin fortuna.

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Lahm decidi¨® el partido

Conscientes de que cualquier error pod¨ªa ser letal, ambos equipos salieron con miedo tras el descanso. Los alemanes se encontraban m¨¢s c¨®modos esperando un error turco, que lleg¨® en el minuto 76. Rustu se comi¨® un centro lejano y Klose, cabeceador profesional adelant¨® a Alemania. Quedaban diez minutos y Turqu¨ªa consigui¨® empatar. Semih remat¨® una excepcional jugada por banda de Sabri. Parec¨ªa que el conjunto de Terim volver¨ªa a hacerlo, pero esta vez no pudo obrar el milagro. Justo cuando se iba a acabar el tiempo reglamentario, Lahm impuls¨® a su equipo a la final. El lateral recibi¨® un bal¨®n de Hitzlsperger dentro del ¨¢rea y bati¨® por el palo corto a Rustu. La m¨¢quina alemana volv¨ªa a estar engrasada y lista para la final.

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Turqu¨ªa, plagada de bajas

Joachim L?w afrontaba al partido con todos sus efectivos disponibles. Sin embargo, Fatih Terim se vio obligado a reconstruir su equipo, pues tuvo que hacer frente a seis bajas, algunas de gran consideraci¨®n como las de los sancionados Volkan Demirel, Arda Turan y Tuncay ?anl?, o el lesionado Nihat Kahveci. Pero si este conjunto se caracteriz¨® por algo fue por saber sobreponerse a cualquier obst¨¢culo. Como demostr¨® aquella noche. No logr¨® la clasificaci¨®n para la final pero plant¨® cara y luch¨® con sus opciones intactas hasta el ¨²ltimo momento.

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 Dominio absoluto de Espa?a

?Qui¨¦n dijo que el amarillo daba mala suerte? Que se lo expliquen a la selecci¨®n espa?ola, que pas¨® a la gran final de esta Eurocopa vestida con ese color. Despu¨¦s del partido frente a Italia qued¨® claro que no habr¨ªa superstici¨®n o hechizo que pudiera con los de Luis Aragon¨¦s.

La lluvia ca¨ªa con la misma intensidad que las ocasiones de Espa?a. A los seis minutos ya estaba avisando. Villa pas¨® a Torres, que desde dentro del ¨¢rea dispar¨® para que Igor Akinfeev despejara con el pie. Cinco minutos despu¨¦s, fue el turno al goleador del torneo con un potente disparo desde la frontal que despej¨® de nuevo el meta ruso. A los 15 minutos Torres pidi¨® penalti de Ignasevich por un agarr¨®n, que el ¨¢rbitro no vio. Los rusos no sab¨ªan c¨®mo parar el vendaval. Aunque Pavlyuchenko amenaz¨® con un potente disparo que Casillas despej¨® a c¨®rner con la yema de los dedos. Rusia trat¨® de aprovechar la pasajera confusi¨®n que viv¨ªa Espa?a, por el cambio de sistema al entrar F¨¢bregas por el lesionado Villa. Pero los futbolistas espa?oles se repusieron perfectamente.

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Segunda parte de ensue?o

En la segunda mitad Espa?a despleg¨® un juego extraordinario y en ella se vieron los tres tantos. El primero, obra de Xavi Hern¨¢ndez, lleg¨® pronto, en la primera acci¨®n. Con la ventaja en el marcador los aficionados espa?oles se volcaron con su selecci¨®n, que devolvi¨® el apoyo realizando un f¨²tbol maravilloso. Entre ol¨¦s en las gradas, Espa?a tocaba como mejor sab¨ªa, a ida y de vuelta, hasta que la desesperaci¨®n venc¨ªa al rival. Ya se ol¨ªa el 0-2. Este lleg¨® en el minuto 73 con una gran conexi¨®n entre F¨¢bregas y G¨¹iza, que acab¨® con gol de este ¨²ltimo. Espa?a estaba intratable y Rusia hab¨ªa perdido todas sus fuerzas. El equipo de Luis Aragon¨¦s sigui¨® tocando, elaborando a las mil maravillas. En ese trance lleg¨® el tanto definitivo, de Silva. Los minutos finales fueron una fiesta para jugadores y aficionados de La Roja.

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La lesi¨®n de Villa conmocion¨® a Espa?a

En el minuto 28 Villa lanz¨® una falta y se dio cuenta de que estaba lesionado. Aguant¨® unos minutos en el terreno de juego, pero sus gestos de dolor obligaron a Luis Aragon¨¦s a sustituirle cinco minutos despu¨¦s. Los servicios m¨¦dicos enseguida confirmaron que se trataba de una microrrotura del b¨ªceps femoral de la pierna derecha.

Al ser sustituido, el jugador asturiano se march¨® entre l¨¢grimas. Ni siquiera el apoyo de F¨¢bregas pudo consolarle. Sab¨ªa que se perder¨ªa la final. Y Espa?a entera llor¨® con ¨¦l. Acababa de perder a su m¨¢ximo goleador. El futbolista que despert¨® la ilusi¨®n en el debut y dio la clasificaci¨®n ante Suecia. Todos eran conscientes de lo dura que iba a ser su ausencia. Pero ¨¦l quiso tranquilizar los ¨¢nimos mostrando su confianza en el equipo: ¡°Juegue quien juegue, esta final la vamos a ganar¡±, afirm¨® contundente.

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Un pa¨ªs unido por el f¨²tbol

Nervios, confianza, entusiasmo, alegr¨ªa¡­ Antes de que se desatara la euforia, fueron muchas las emociones que vivieron el 26 de junio en la Plaza Roja las 30.000 personas que se reunieron en Col¨®n para animar a Espa?a. La mayor¨ªa de los aficionados nunca hab¨ªa visto a la Selecci¨®n en una semifinal, solo hab¨ªa vivido decepciones. No importaba si era Mundial o Eurocopa, siempre acababa mal. Pero Luis Aragon¨¦s y sus jugadores se hab¨ªan ganado la confianza y el coraz¨®n de todos los espa?oles.

Con su excelente juego y su compromiso, la selecci¨®n espa?ola fue congregando aficionados en todos los lugares del territorio nacional y provocando que cada vez m¨¢s espa?oles se desplazaran hasta los pa¨ªses organizadores de la competici¨®n para estar m¨¢s cerca de su equipo. Consigui¨® paralizar un pa¨ªs entero cada vez que jugaba. Que todos los espectadores se olvidaran de qu¨¦ club eran y vibraran con todos los jugadores que compon¨ªan ese hist¨®rico equipo.