El agujero de ozono sobre la Ant¨¢rtida, cuyo descubrimiento en 1985 condujo a la aprobaci¨®n del denominado Protocolo de Montreal y, por lo tanto, a la prohibici¨®n gradual de los clorofluorocarbonos, parece cerrarse lentamente ya que incluso en 2019, alcanz¨® su menor extensi¨®n en unos 30 a?os.

De hecho, una investigaci¨®n publicada esta misma semana en la revista Nature conclu¨ªa que el Protocolo de Montreal para la protecci¨®n de la capa de ozono estratof¨¦rico ha estimulado su recuperaci¨®n y generado cambios en los patrones de circulaci¨®n a¨¦reos del Hemisferio Sur.

La investigaci¨®n, desarrollada por cient¨ªficos de Estados Unidos, ha demostrado que las variaciones se han estancado y podr¨ªan, incluso, ser revertidas debido al llamado Protocolo de Montreal de 1987 que limit¨® el uso de sustancias que da?an la capa de ozono.

"Este estudio se suma a la creciente evidencia que muestra la profunda efectividad del Protocolo de Montreal", ha subrayado la profesora de la Universidad de Colorado (Estados Unidos) Antara Banerjee, investigadora que trabaja en la divisi¨®n de Ciencias Qu¨ªmicas de la Administraci¨®n Atmosf¨¦rica Oce¨¢nica Nacional (NOAA).

Seg¨²n la experta, principal responsable del an¨¢lisis, el Tratado "no solo ha estimulado la curaci¨®n de la zapa de ozono, tambi¨¦n ha estimulado los recientes cambios observados en los patrones de circulaci¨®n a¨¦reos del Hemisferio Sur".

?Un nuevo agujero?

Sin embargo, en este escenario de aparente recuperaci¨®n, Markus Rex, jefe del departamento de f¨ªsica atmosf¨¦rica del Instituto Alem¨¢n Alfred-Wegner, asegura haber detectado el primer agujero en la capa de ozono sobre el Polo Norte.

Rex explica que en las ¨¢reas donde el grosor de la capa de ozono es m¨¢xima, la p¨¦rdida es de alrededor del 90%, un ¨¢rea equivalente a tres veces Groenlandia. Si bien, en total se ve afectada un ¨¢rea de 20 millones de kil¨®metros cuadrados, o 10 veces el tama?o de Groenlandia, a pesar de que la p¨¦rdida de ozono a veces es menor.

Esto se debe, seg¨²n Rex, a un v¨®rtice polar especialmente fuerte este invierno y a las bajas temperaturas en la estratosfera, donde se encuentra la capa de ozono.

"En este momento, esas masas de aire todav¨ªa est¨¢n encerradas sobre el ?rtico central, por lo que la gente en Europa no necesita preocuparse por quemarse con el sol m¨¢s r¨¢pido de lo habitual", afirma. Sin embargo, es una posibilidad que esas masas de aire se alejen del ?rtico central y hacia Europa en abril.

La producci¨®n de clorofluorocarbonos que da?an el ozono fue prohibida hace mucho tiempo, pero tal y como advierte Rex, las sustancias son muy duraderas.