Si eres fumador o eres capaz de ejercer cierta influencia sobre alguno, te interesa saber que dejar atr¨¢s el tabaco tiene unos beneficios asociados pr¨¢cticamente desde el instante en el que le das la ¨²ltima calada a un cigarro. Y no solo porque aumente el riesgo de padecer alg¨²n tipo de c¨¢ncer. Tambi¨¦n porque afecta al buen funcionamiento del sistema cardiovascular.

Seg¨²n la Fundaci¨®n Espa?ola del Coraz¨®n (FEC), una persona fumadora multiplica por dos o por tres el riesgo de sufrir un infarto, mientras que siete de cada ocho muertes s¨²bitas cardiovasculares se produce en fumadores. Por ello, dejar atr¨¢s las m¨¢s de 4.000 sustancias t¨®xicas que contiene un cigarrillo tiene consecuencias inmediatas: a los 20 minutos de la ¨²ltima calada la presi¨®n arterial baja hasta normalizarse. Pero hay m¨¢s:

¡¤ Tras 8 horas el mon¨®xido de carbono reduce su tasa sangu¨ªnea a la mitad.

¡¤ En poco tiempo mejora la frecuencia card¨ªaca y el control de la tensi¨®n.

¡¤ Disminuye el riesgo de arritmias.

¡¤ A los 7 d¨ªas los bronquios van recuperando su tono, por lo que el ex fumador empieza a respirar mejor y reduce las posibilidades de infecciones broncopulmonares.

¡¤ La capacidad para el ejercicio f¨ªsico aumenta.

¡¤ Al a?o, quien ha sufrido un infarto y ha dejado de fumar, reduce a la mitad el riesgo de sufrir otro.

¡¤ Se reduce notablemente el riesgo de ateroesclerosis, un proceso de degeneraci¨®n de las arterias que puede derivar en trombos que producen infartos.

¡¤ Transcurridos 5 a?os desde el ¨²ltimo cigarrillo, el riesgo de enfermedad cardiovascular disminuye enormemente.

¡¤ Si se deja de fumar antes de los 40, tras cinco a?os el ex fumador tendr¨¢ un riesgo cardiovascular similar al de una persona de su edad que no haya fumado nunca.

¡¤ A medida que se retrasa el cese, el riesgo no llega a igualarse al de un no fumador pero s¨ª hay una importante mejor¨ªa de salud.