Uno de los casos m¨¢s famosos de la historia de dopaje, si no el que m¨¢s, el del artleta canadiense de origen jamaicano Ben Johnson, vuelve a la actualidad 30 a?os despu¨¦s tras una investigaci¨®n de Mary Ormsby, periodista del Toronto Star, que ha sacado a la luz el informe del laboratorio que sepult¨® la carrera de Ben Johnson tras proclamarse campe¨®n ol¨ªmpico en Se¨²l 88 en la prueba de 100 metros en la que no solo bati¨® a Carl Lewis, el ¡®hijo del viento¡¯, sino que adem¨¢s pulveriz¨® el r¨¦cord del mundo con una marca de 9,79 segundos.

Aquel episodio de la historia del atletismo supuso un verdadero terremoto. Primero, por la inapelable victoria de Ben Johnson rebajando su propia plusmarca lograda en Roma un a?o antes (9,83) y la dolorosa derrota infligida a su enemigo ac¨¦rrimo, Carl Lewis. Despu¨¦s, por el informe del laboratorio que se?alaba al canadiense como un tramposo al detectar la presencia de estanozolol, un esteroide anabolizante, en las muestras de orina del atleta pero, ?y si el laboratorio manipul¨® el informe de Ben Johnson en Seul¡¯88?

El positivo de Ben Johnson

Un trabajo de investigaci¨®n llevado a cabo por Mary Ormsby apunta en esa direcci¨®n tras haber tenido acceso a aquel famoso informe, de 31 p¨¢ginas, elaborado por el laboratorio del Comit¨¦ Ol¨ªmpico Internacional, que est¨¢ salpicado irregularidades que contemplan revisiones manuscritas no firmadas, omisiones inexplicables, signos de interrogaci¨®n, pruebas de orina ¡®en blanco¡¯, c¨®digos de laboratorio modificados y, sobre todo, una aparente confusi¨®n sobre qu¨¦ esteroide emple¨® Ben Johnson. En el informe figura oxandrolona mientras que el positivo, oficialmente, fue por estanozolol. Curioso cuanto menos.

Sea como fuere, m¨¢s all¨¢ de las dudas ante estas nuevas evidencias, lo que est¨¢ claro es que el atleta canadiense utiliz¨® sistem¨¢ticamente anabolizantes a lo largo de su carrera ya que aquella no fue la ¨²nica ocasi¨®n en la que dio positivo y el propio Ben Johnson reconoci¨® su uso en lo que se conoce como ¡®The Dubin Inquiry¡¯, una comisi¨®n de investigaci¨®n llevada a cabo en Canad¨¢ en la que se recogieron cientos de testimonios durante meses para desenmascarar el sistema de dopaje existente en aquella ¨¦poca.

Ria Van Landeghem: otro caso de irregularidades

Pero el positivo de Ben Johnson en los Juegos Ol¨ªmpico de Se¨²l 1988 no fue el ¨²nico sobre el que existe una sombra de sospecha ya que el diario canadiense tambi¨¦n informa de que una atleta maratoniana belga, Ria Van Landeghem, que ten¨ªa opciones de medalla en la cita coreana, fue enviada a casa antes de competir por, supuestamente, haber consumido, aqu¨ª s¨ª, oxandrolona. La atleta belga, que en la actualidad tiene 61 a?os, siempre sostuvo su inocencia y un nuevo an¨¢lisis de las muestras recogidas en Se¨²l, efectuado en 2015, parece indicar que no hab¨ªa presencia de la sustancia detectada en su momento.

Carl Lewis, en el ojo del hurac¨¢n

El caso es que Ben Johnson fue demonizado hasta la saciedad y sometido a escarnio p¨²blico, no sin raz¨®n, en una ¨¦poca en la que es dif¨ªcil determinar el n¨²mero exacto de casos de dopaje que se produjeron. No en vano, una denuncia a cargo de Wade Exum en 2013, el doctor que dirigi¨® casi un decenio la oficina antidoping de Comit¨¦ Ol¨ªmpico de EEUU, apuntaba a que el mism¨ªsimo Carl Lewis y otros 113 atletas que dieron positivo fueron encubiertos. Exum facilit¨® a Sports Illustrated 30.000 p¨¢ginas con los documentos que, seg¨²n ¨¦l, prueban c¨®mo el comit¨¦ dio todo tipo de facilidades a 114 deportistas entre 1988 y 2000, a los que se avisaba de posibles controles o directamente se obviaban sus positivos. No es oro todo lo que reluce.