JFK ha sido uno de los presidentes de Estados Unidos que m¨¢s fascinaci¨®n provoc¨® durante su mandato, y su asesinato no hizo sino acrecentar una leyenda que le ha convertida hoy en h¨¦roe. En Deporte y Vida lo que vamos a analizar es su salud, p¨¦sima, llena de dolores y operaciones, que consigui¨® sobrellevar gracias a las drogas y al sexo, al que era adicto.

?Fue deportista? Tal y como cuenta su mujer Jackie Kennedy en el libro ¡®Conversaciones hist¨®ricas sobre mi vida con John F. Kennedy¡¯, hac¨ªa ejercicio todas las noches con un oficial de la marina. Jugaba tres veces a la semana al golf, nadaba, caminaba por la playa¡­ hasta que fue nombrado presiente. Ah¨ª lleg¨® la tensi¨®n, el sedentarismo, los problemas de salud. M¨¢s si cabe.

La tabla de ejercicio de JFK

Y es que una vez lleg¨® al cargo, y tras comprobar que los dolores constantes de espalda no cesaban ni con la novoca¨ªna (droga a la que era adicto), el doctor Hans Kraus cre¨® una tabla de ejercicios para potenciar la musculatura: ¡°levantarse, tratar de tocarse los pies, tumbarse en el suelo, estirar las piernas, levantarlas, estar boca abajo¡­¡± Hasta la llegada de Kraus, JFK era casi un ¡®lisiado¡¯ en palabras de su mujer. Y es que la mala salud de Kennedy se deb¨ªa fundamentalmente a la falta de ejercicio.

Su mujer recuerda que el ejercicio que hac¨ªa era de apenas 15 minutos, y que nunca llegaba a tocarse los pies. ¡°No pod¨ªa bajar las manos m¨¢s all¨¢ de las rodillas. Antes ni siquiera pod¨ªa ponerse los zapatos ni inclinarse¡±. Tras estar con el doctor durante dos meses, empez¨® a poder llegar al suelo.

Las enfermedades de JFK

La salud de JFK era m¨¢s que una cuesti¨®n de estado. Sus problemas de espalda y sus dolores constantes no eran sino el reflejo de algo m¨¢s.

S¨ªndrome poliendocrino autoinmune tipo 2: se trata de una afecci¨®n de varios ¨®rganos endocrinos asociados a una enfermedad auto inmunitaria. Kennedy fue diagnosticado de ambos tipos de patolog¨ªas: enfermedad de Addison e hipotiroidismo.

Enfermedad de Addison: se caracteriza por la destrucci¨®n progresiva de las gl¨¢ndulas adrenales, cuyos s¨ªntomas son fatiga, debilidad, anorexia, n¨¢useas, v¨®mitos, p¨¦rdida de peso, pigmentaci¨®n de la piel y de las mucosas, hipotensi¨®n e hipoglucemia.

Hipotiroidismo: se produce por una cantidad insuficiente de hormonas tiroides circulantes, debido generalmente a que la gl¨¢ndula tiroides no funciona como deber¨ªa. Sus s¨ªntomas suelen ser somnolencia, p¨¦rdida de pelo, depresi¨®n, aumento de los niveles de colesterol, entre otros.

Cuando era peque?o pas¨® la escarlatina, sarampi¨®n y malaria.

Las adicciones de JFK

Seg¨²n los informes abiertos de la Casa Blanca de su historial cl¨ªnico, tomaba hasta 10 pastillas al d¨ªa:

-vitamina C

-corticoides

-hormonas tiroideas

-antiem¨¦ticos

-f¨¢rmacos para los problemas gastrointestinales

-10 mg de testosterona (lleg¨® a tomar hasta 25 mg).

Adem¨¢s, las inyecciones formaban parte de su vida diaria:

-los m¨¦dicos le inyectaban gammaglobulina contra las infecciones que iba encadenando.

-a veces recib¨ªa hasta ocho inyecciones con sedantes antes de una rueda de prensa o un acto p¨²blico.

-esteroides, para paliar los dolores intestinales.

La osteoporosis fue uno de los grandes lastres, especialmente la sufr¨ªa en la espalda de ah¨ª sus dolores.

Tal vez sea leyenda, pero las migra?as fueron una constante en su vida. Algunas biograf¨ªas le han atribuido la frase ¡°tengo tal nivel de migra?as que o echo un polvo a diario o no lo soporto¡±. Los beneficios del sexo los conocemos, especialmente la relajaci¨®n, liberaci¨®n de la hormona de la felicidad, etc¡­

Pero si analizamos el historial m¨¦dico de JFK casi resulta dif¨ªcil entender que el sexo fuera una salvaci¨®n y no le supusiera m¨¢s problemas f¨ªsicos y dolores. O quiz¨¢ s¨ª, y sus amantes nunca contaron la verdad.