Los retoques de medicina est¨¦tica cada vez son m¨¢s demandas, no s¨®lo en mujeres, sino tambi¨¦n en hombres. Ya lo vimos cuando entrevistamos a la doctora Gloria Santomauro, los hombres han cogido el relevo a los retoques y algunos empiezan a pasarse.

¡°Hace unos a?os solo el 20 % de los hombres afirmaba cuidarse, pero hoy eso ha cambiado, llegando a ser un 43 % aproximadamente¡±, afirman las doctoras Mar Mira y Sof¨ªa Ruiz del Cueto que, cada a?o, ven como sus pacientes masculinos aumentan. ¡°Cuando un hombre recurre a un retoque est¨¦tico quiere ¡®que no se note (a¨²n m¨¢s que las mujeres)¡¯, ¡®que parezca que no se ha hecho nada¡¯: no le gusta que su c¨ªrculo sepa que han pasado por la aguja¡±.

En muchas ocasiones se ha hablado de se?ores que han feminizado tanto su rostro que han perdido sus facciones, esa masculinidad que les caracteriza. Maradona, Paul McCartney, Steven Tyler de Aerosmith, Tom Cruise, o Camilo Sesto son solo algunos ejemplos de esta feminizaci¨®n de los rasgos del hombre cuando se hacen retoques.

Para evitarlo, las expertas siguen una serie de claves espec¨ªficas de la medicina est¨¦tica facial masculina indispensables para que los hombres no pierdan ni un ¨¢pice de su virilidad y cumplan a?os como aut¨¦nticos se?ores.

El hombre es mucho m¨¢s anguloso que la mujer. ¡°El hombre tiene la frente m¨¢s recta y hacia atr¨¢s, mientras que la de la mujer es mucho m¨¢s redondeada. Es decir, el hombre tiene los rasgos mucho m¨¢s definidos. Por esta raz¨®n, no es lo mismo tratar un rostro femenino que un rostro masculino, de ah¨ª que haya que prestar mucha atenci¨®n a las diferentes ¡®partes¡¯ de la cara para hacer las infiltraciones forma muy diferente en ellos para evitar feminizar al hombre¡±, apuntan las expertas.

Las siete claves de la medicina est¨¦tica facial masculina

Frente

¡°La frente del hombre debe mantener marcados el reborde orbitario y las l¨ªneas temporales. Adem¨¢s, nunca se deber¨ªan eliminar todas las arrugas, ya que, en los hombres, en su justa medida, resultan muy atractivas y una frente demasiado lisa feminiza la regi¨®n¡±.

Cejas

¡°Jam¨¢s hay que afinar, arquear ni levantar las cejas de los hombres con b¨®tox. El retoque est¨¦tico debe realizarse para que queden gruesas, bajas y planas¡±.

Nariz

¡°El retoque de la nariz es uno de los m¨¢s sensibles a la hora de masculinizar o feminizar un rostro. Para que el resultado del retoque est¨¦tico sea ¨®ptimo, hay que tener en cuenta que la nariz del hombre suele tener la punta m¨¢s marcada y algo m¨¢s baja que la de la mujer, y tienen las fosas nasales un poco m¨¢s abiertas¡±.

Mejillas

¡°Suelen ser m¨¢s angulosas que las de la mujer, y esto se debe al desarrollo muscular y la grasa, que en el hombre hace que se acent¨²en dando lugar a rasgos m¨¢s marcados en ellos y m¨¢s redondeados en ellas. Para tratarlas siempre hay que hacerlo evitando que se proyecte m¨¢s all¨¢ de la mand¨ªbula para que no d¨¦ lugar a un desequilibrio facial y, por ende, a una feminizaci¨®n del rostro¡±.

Boca

¡°Mientras que cuando se trata a una mujer buscamos la armon¨ªa cuidando la proporci¨®n de la boca con la forma de la cara, en el hombre se ha de buscar que la boca mantenga la proporci¨®n con la nariz y el ment¨®n; as¨ª, con una nariz grande, los labios admiten m¨¢s grosor; y, siempre, con una nariz peque?a los labios deben ser finos¡±.

Ment¨®n

¡°Debe mantener las caracter¨ªsticas propias del hombre: m¨¢s ancho, de forma cuadrada, con base plana, mucho m¨¢s proyectado, con la l¨ªnea entre la barbilla y el cuello inclinada y tan ancho como sus labios, ni m¨¢s ni menos; mientras que el ment¨®n de la mujer debe ser tan ancho como su nariz¡±.

Mand¨ªbula

¡°Los hombres tienen el ¨¢ngulo m¨¢s cerrado que la mujer. Por ello, a la hora de tratar su mand¨ªbula, hay que tener en cuenta que es m¨¢s cuadrada y m¨¢s ancha, con el masetero m¨¢s pronunciado y en l¨ªnea con el p¨®mulo. El retoque de esta zona facial del hombre nunca deber¨ªa transformar estos rasgos.

¡°Si la belleza femenina ideal, en cuanto a facciones y armon¨ªa es Angelina Jolie, la versi¨®n masculina es David Gandy. Es cierto que las comparaciones son odiosas, pero es un buen lienzo en el que fijarse para poder ¡®empezar a pintar¡¯ y convertir un rostro de hombre cansado, o con se?ales de cansancio, o edad¡­ en una ¡®obra de arte¡¯, sin feminizar los rasgos¡±, se?alan las doctoras.