"Ten¨¦is una hora... o Michael Jordan se marchar¨¢ a jugar a los Knicks"
En el verano de 1996, la NBA pudo cambiar para siempre. Los Knicks hicieron una oferta hist¨®ria a Michael Jordan apoy¨¢ndose en la cadena de hoteles Sheraton.
Muchas leyendas de la NBA se retiraron sin anillo por culpa, b¨¢sicamente, de Michael Jordan. Charles Barkley, Karl Malone y John Stockton... y, claro, Patrick Ewing, que lider¨® a unos Knicks formidables, nada que ver con la broma que llevan siendo ya demasiados a?os, pero que no pudieron superar esa barrera definitiva del Este. Es cierto que, sin Jordan, jugaron dos Finales y las perdieron: en 1994 contra los Rockets y despu¨¦s de tener un 2-3 a favor (4-3 final) y en 1999 contra los Spurs (4-1). Pero entre 1989 y 1998 cayeron en playoffs cinco veces contra unos Bulls a los que derrotaron precisamente en 1994, el a?o sin Michael Jordan. Una de esas derrotas (1993) fue en una final del Este. Un a?o antes (1992) fueron el ¨²nico equipo junto a los Pacers de 1998 que llevaron a los Bulls de los seis anillos a siete partidos en una serie, esta vez en segunda ronda.
Los Bulls fueron una tortura para los Knicks y ambas franquicias protagonizaron una rivalidad tremenda en un Este en el que ascend¨ªa el equipo de Chicago, que no hab¨ªa tenido peso hist¨®rico hasta la llegada de Jordan, n¨²mero 3 en el drafr de 1984. Un a?o despu¨¦s, en 1985, fue n¨²mero 1 un Patrick Ewing que ya hab¨ªa mantenido duelos descomunales con Jordan en College (Georgetown vs North Carolina) y que comparti¨® equipo con ¨¦l en dos oros ol¨ªmpicos: Los Angeles 1984 y Barcelona 92, el inolvidable Dream Team. Pero... ?y si hubieran jugado juntos en la NBA? La posibilidad existi¨® y solo sus protagonistas saben c¨®mo de real fue. Pero existi¨®, y es uno de los cap¨ªtulos de la carrera de Michael Jordan que no se tocaron en el documental de The Last Dance: Air Jordan pudo jugar en el Madison con la camiseta de los Knicks.
En el verano de 1996, Michael Jordan dej¨® atr¨¢s lo que primero fue un contrato rompedor y finalmente una ganga. Efectivo a partir del curso 1988-89, los Bulls le dieron un nuevo acuerdo de ocho a?os y 25 millones de d¨®lares. Parad¨®jicamente, la bonanza que el propio Jordan llev¨® a la NBA dej¨® ese contrato en pr¨¢cticamente una broma a medida que avanzaba la d¨¦cada de los 90. Jerry Reinsdorf, el propietario de los Bulls, hab¨ªa cambiado un contrato en vigor por primera vez con Jordan y no quer¨ªa hacerlo una segunda vez. Y eso no gust¨® al 23, que lleg¨® al verano de 1996 sin haber ganado nunca m¨¢s de 4 millones en una temporada (de contrato con los Bulls). S¨ª hab¨ªa percibido casi 8 durante las casi dos campa?as que estuvo ausente en su primera retirada, entre los dos threepeat.
Jordan solo gan¨® en contratos deportivos 93 millones... y m¨¢s de 60 los acumul¨® entre 1996 y 1998, sus dos ¨²ltimos a?os con los Bulls: 30,1 y 33,1. As¨ª se llev¨® los dos ¨²ltimos de sus seis anillos, los seis que ha ganado en su historia una franquicia que en aquel verano de 1996 pens¨® en ofrecer a su gran estrella una cifra cercana a los 20 millones. Cre¨ªa que nadie llegar¨ªa a 15 siquiera y que con eso se asegurar¨ªan su continuidad y compensar¨ªan un poco esos a?os de salarios muy por debajo de su mercado. A Jordan no le gust¨® que los Bulls pensar¨¢n en t¨¦rminos de cu¨¢nto y c¨®mo le podr¨ªan ofrecer otros, y no barajaba nada que no estuviera por encima de los 18 millones que acababa de cobrar Patrick Ewing, el tope hist¨®rico en una sola temporada NBA por entonces.
Pero entonces lleg¨® el movimiento sorpresa de los Knicks: con 12 millones de margen salarial (los acabaron usando en Allan Houston, Chris Childs y Buck Williams), fueron a por Jordan con una oferta de m¨¢s de 25 millones por esa temporada 1996-97. Su jugada era aprovechar el conglomerado empresarial de ITT, una de las firmas que era due?a de la franquicia y del Madison Square Garden. ITT ten¨ªa la cadena de hoteles Sheraton, as¨ª que los Knicks pensaban sortear el salary cap con 12 millones de contrato y otros 15 ¨® 16 a trav¨¦s de un acuerdo que convertir¨ªa a Jordan en el rostro de Sheraton. Los Bulls, cuando se enteraron, pusieron el grito en el cielo y se enzarzaron con el comisionado David Stern.
Pero la oferta exist¨ªa, los Bulls sab¨ªan que pod¨ªa concretarse y Jordan hab¨ªa sugerido que al lado de Patrick Ewing no tendr¨ªa problema en ser campe¨®n. As¨ª que acabaron poniendo sobre la mesa los 30,1 millones de d¨®lares que cobr¨® Jordan por la temporada 1996-97. Antes, lo cont¨® Sam Smith en el Chicago Tribune, la leyenda dice que David Falk, agente de Jordan, llam¨® a los Bulls y les dijo que ten¨ªan "una hora o como mucho ese d¨ªa natural" para evitar que Michael Jordan hiciera las maletas y se fuera a la Gran Manzana. Absolutamente conscientes de que no pod¨ªan consentir algo as¨ª, se vaciaron los bolsillos. Si fue una medida de presi¨®n o era una opci¨®n real, solo lo saben Falk y el propio Michael Jordan, que acab¨® resentido porque hab¨ªa esperado m¨¢s cari?o de su equipo en ese verano de negociaci¨®n.
OTRAS HISTORIAS SOBRE MICHAEL JORDAN:
Len Bias: la coca¨ªna se llev¨® al "gran rival de Jordan"
El oscuro primer adi¨®s: la sombra de las apuestas, el asesinato de su padre...
'Jordan Adidas': su madre cambi¨® el negocio de las zapatillas para siempre
Horace Grant: "Jordan es un mentiroso. Si quiere, lo arreglaremos como hombres"
LaBradford Smith, el enemigo de Jordan que nunca quiso serlo
"Era como un vampiro": salvajes rutinas durante el rodaje de Space Jam