Testimonios: c¨®mo ha evolucionado la cultura del crunch en Jap¨®n

El crunch, periodos de trabajo donde las jornadas se alargan hasta l¨ªmites en ocasiones desconocidos con el fin de alcanzar los plazos estimados, no es exclusivo de la industria del videojuego; es una condici¨®n que se aplica a cualquier pr¨¢ctica laboral donde los empleados alargan su jornada hasta horarios intempestivos de manera habitual.

Adem¨¢s, la plantilla no se ampl¨ªa necesariamente sino que se alargan las jornadas en muchos casos sin compensaci¨®n econ¨®mica. A pesar de la insistencia de aplacar estos abusos laborales, en Jap¨®n la filosof¨ªa de trabajo no es tan discordante con esta forma de proceder, tal como relatan m¨²ltiples desarrolladores e incluso directivos.

Desde GamesIndustry han podido charlar con Manami Matsumae con motivo de la Game Connect Asia Pacific acerca de las jornadas de trabajo por encima de lo estipulado como norma, como algo habitual, en el pa¨ªs con mayor cantidad de editoras del planeta, Jap¨®n.

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Matsumae conoce bien la industria. Desde la d¨¦cada de 1980 particip¨® en la composici¨®n de las bandas sonoras de obras de Capcom como Mega Man, aunque en el presente tambi¨¦n encontramos en su curr¨ªculo participaciones en Shovel Knight o Mighty No. 9.

Encadenar desarrollos, impedimento para tomar descansos

¡°La mayor¨ªa de las grandes compa?¨ªas han planeado sus estrategias de marketing y ventas por adelantado, por lo que es muy dif¨ªcil hacer cambios a una fecha determinada, igual con las fechas de entrega, despu¨¦s de haber sido decididas¡±, comienza diciendo. ¡°Cuando estaba en Capcom tuve que trabajar entre tres y cuatro juegos al a?o¡±, ampl¨ªa, para justificar su siguiente argumento. ¡°En Capcom, nadie pod¨ªa trabajar en el apartado sonoro de ning¨²n juego hasta que el desarrollo no hubiese alcanzado el 50% del total¡±, comenta, un aspecto que no depend¨ªa del equipo de sonido y que, en caso de retrasos, implicaba que ellos comenzar¨ªan a trabajar m¨¢s tarde de lo previsto y¡­ se quedasen sin periodos de vacaciones como la Navidad, inamovible en el calendario.

¡°Es esta la raz¨®n por la que no pude tomarme un respiro hasta que el juego estaba finalizado; porque cuando el proyecto estaba al 80% el siguiente estaba ya en proceso. Me ve¨ªa abocada a migrar al siguiente juego nada m¨¢s terminar, sin pausas¡±.

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No termina aqu¨ª Matsumae, que deja claro que ¡°cuando trabaj¨¦ en Capcom termin¨¦ dedicando un mont¨®n de horas; pero en aquel momento, durante aquella ¨¦pica, no hab¨ªa una concienciaci¨®n real de que pudiese a llegar a ser algo perjudicial¡±. La gente asimilaba que no hab¨ªa horarios, hab¨ªa un trabajo determinado que hacer, sin pensar en las consecuencias vitales, sociales o familiares de ese sobreesfuerzo.

¡°Capcom me permit¨ªa tomar vacaciones si lo necesitaba, o d¨ªas libres si ten¨ªa que hacer algo¡±, asume, pero ¡°en aquel momento, mi perspectiva era que el trabajo me ten¨ªa tan ocupada que no pod¨ªa permitirme tomar esas vacaciones¡±.

La compositora reflexiona sobre la evoluci¨®n de esta metodolog¨ªa, actualmente no tan r¨ªgida. ¡°La gente ya no est¨¢ tan dedicada a sus trabajos en lo que a horas trabajadas se refiere. La gente est¨¢ empezando a cambiar¡±, contin¨²a.

Uno de los motivos que han propiciado ese cambio es la escena independiente, que ha venido acompa?ada de la implantaci¨®n de las tiendas de distribuci¨®n digital como Steam y la App Store, donde hay m¨¢s empleados aut¨®nomos capaces de trazar l¨ªmites por s¨ª mismos y no por lo que venga dictaminado por los jefes.

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Cu¨¢nto est¨¢s dispuesto a sacrificar

Para ampliar la informaci¨®n y contextualizar estas declaraciones podemos acudir a las palabras de Hokuto Okamoto y Takeshi Uchikawa, productor y director de Dragon Quest XI, respectivamente, quienes en declaraciones para VICE el pasado mes de noviembre confesaron que el sacrificio era especialmente notable en ¨¦pocas clave del desarrollo de sus videojuegos, aunque lo dec¨ªan entre risas.

¡°Lo sobrellevamos¡±, coment¨® Okamoto. ¡°Una de las cosas de las que soy plenamente consciente es que el producto no va a ser todo lo que quer¨ªamos de la A a la Z. As¨ª, en el proceso de creaci¨®n le digo a mi equipo ¡®estas son las cosas que no podemos dejar fuera¡¯, y m¨¢s all¨¢ de eso dejo al resto del equipo tomar las decisiones que consideren oportunas¡±, conscientes de que no pueden tener todo perfecto. No en vano, eso no exige jornadas de trabajo interminables.

Uchikawa expuso en este encuentro que ¡°hubo momentos donde no paramos incluso tras 12 horas. Nos aseguramos de que la gente fuese a casa, pero para nosotros comprobar el estado del juego es lo que m¨¢s tiempo nos demandaba, y eso requer¨ªa una inversi¨®n de tiempo muy grande¡±.

Por tanto, desde Square Enix, seg¨²n palabras de ambos creativos, es importante que los empleados puedan descansar las horas necesarias y no echen horas de m¨¢s, aunque reconocen al mismo tiempo que ellos no lo siguen a rajatabla: si no est¨¢ todo como esperaban, no se marchan.

Hideo Kojima es otro ejemplo protagonista de esta filosof¨ªa de trabajo. El pasado mes de agosto, el padre de Death Stranding, actualmente inmerso en el desarrollo del primer t¨ªtulo bajo su propia empresa, Kojima Productions, reconoci¨® que estaban en periodo de crunch. ¡°Estamos dando lo mejor de nosotros mismos para poder ofrecer el producto en su lanzamiento este 8 de noviembre. Todav¨ªa estamos en fase de crunch¡±, coment¨®.

Con todo, la situaci¨®n de crunch sigue presente tanto en Jap¨®n como en Occidente, donde han sonado recientemente casos de grandes estudios como Naughty Dog, Sony Santa Monica, Bungie, Blizzard, Rockstar, NetherRealm¡­

Fuente | GamesIndustry, VICE, Hideo Kojima, Eurogamer