World of Warcraft: Classic, An¨¢lisis. Regreso al hogar

La eterna lucha entre el bando Horda y el de la Alianza ha vuelto a nuestros hogares con World of Warcraft: Classic. El videojuego original que enamor¨® a millones de personas vuelve tal y como lo record¨¢bamos aunque con algunos cambios que pueden o no gustar pero que llegan, en parte, al ¨¦xito obtenido en su uso en servidores privados, ahora de capa ca¨ªda. El perfecto recordatorio de que un videojuego de hace quince a?os puede seguir entreteniendo al igual que uno actual.

Un mes lleva con nosotros World of Warcraft: Classic y, como os coment¨¢bamos en las primeras impresiones que publicamos aqu¨ª en esta casa, el videojuego ha sido todo un ¨¦xito. Miles de personas han acudido a la poderosa llamada de ambas facciones para volver a revivir aventuras ahora ¡ªen mayor o menor medida¡ª desahuciadas en la versi¨®n retail. Un mes en el que nos la hemos visto y deseado para poder subir de nivel; bien por las importantes colas de espera que hemos sufrido para acceder al reino, bien por la aglomeraci¨®n de jugadores en servidores sobrepoblados. Gracias a la apertura del reino espa?ol, hemos podido llegar al final de este an¨¢lisis que ahora pod¨¦is leer.

Nostalgia cl¨¢sica

Cuatro a?os despu¨¦s de combatir a la Legi¨®n Ardiente, la nueva horda de Thrall se asienta en Durotar junto a la raza Tauren, los Troll y los Orcos. Para sorpresa de todos, los Renegados No Muertos unidos anta?o por Sylvanas son invitados por el l¨ªder cham¨¢n para pertenecer a la Horda. Por otra parte, la Alianza formada por Enanos, Gnomos, Elfos de la Noche y Humanos se percatan de que su l¨ªder Varian Wrynn ha desaparecido, dejando a la Alianza y Ventormenta en serios apuros. Mientras tanto, la lucha entre ambas facciones resucita dejando atr¨¢s ese pacto que les uni¨® para combatir al ej¨¦rcito demon¨ªaco.

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Con menos texto pero de forma similar comenzaba nuestra ¨¦pica aventura en World of Warcraft: Classic, tal y como empezaba hace casi quince a?os. Ahora no es necesario introducir nuestros datos y contrase?a como aquellos d¨ªas pues el cliente se sostiene gracias al lanzador Battlenet, pero todo lo dem¨¢s sigue igual que siempre. La creaci¨®n de personajes, con cuatro razas disponibles para cada bando o las limitaciones a la hora de elegir una clase ¡ªcham¨¢n exclusiva de la horda y palad¨ªn de la alianza¡ª, nada de esto ha cambiado. Tampoco las apenas opciones de personalizaci¨®n disponibles para nuestros personajes; si escoges un peinado y te arrepientes de ¨¦l, lo sentimos mucho, no hay servicio de peluquer¨ªa.

Los inicios suelen ser duros aunque al correr Classic bajo el parche 1.12 este se hace m¨¢s ligero. Ello quiere decir que las habilidades y caracter¨ªsticas est¨¢n m¨¢s balanceadas y algunos enemigos cambiaron su comportamiento con el entorno. Los primeros diez niveles sirven a modo de entrenamiento, para hacernos con el sistema de juego, una vez logrado este primer objetivo se nos abren m¨¢s posibilidades en forma de nuevas zonas neutrales y el sistema de talentos, que vuelve en formato ¡°¨¢rbol¡± y con tres especialidades claramente diferenciadas entre s¨ª.

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Es un gustazo volver a pasear por El Bosque de Arg¨¦nteos, Los Bald¨ªos, Bosque de Elwynn o P¨¢ramos de Poniente y verlos llenos de jugadores realizando misiones, pidiendo grupo para las tareas ¨¦lite ¡ªsobre todo para las asociadas a la Isla de Fenris o la caza de Hogger¡ª y maravillarse con los escenarios que tiempo despu¨¦s tras la llegada de Alamuerte fueron en su mayor¨ªa actualizados. El azote de nostalgia que se vive al recorrer esos parajes es importante y una buena muestra del excelente dise?o de niveles que ha creado siempre la compa?¨ªa californiana. Tal y como los creativos tras World of Warcraft comentaban en un diario de desarrollo publicado hace unas semanas, lo importante en el juego siempre fueron los escenarios, era lo que quer¨ªan que el jugador recordase con el paso del tiempo. Y lo cierto es que el trabajo que consiguieron en su d¨ªa es excelente pues todav¨ªa seguimos recordando escondrijos, atajos y curiosidades en cada zona. Hay lugar todav¨ªa para el asombro pues si hemos jugado a World of Warcraft a partir de Cataclysm visitaremos recovecos que el videojuego ahora mismo no contempla o que no hemos explorado en alg¨²n momento.

Mago, cham¨¢n, p¨ªcaro, palad¨ªn, guerrero, brujo, sacerdote, cazador o druida fueron las clases iniciales de World of Warcraft y las que ahora tenemos disponibles en Classic. Todas ellas han estado desde entonces recibiendo actualizaciones en forma de mejoras o correcciones pero en el t¨ªtulo que hoy nos ocupa estos cambios se detienen en el parche 1.12. As¨ª por ejemplo los ¨¢rboles de talentos son diferentes a como fueron en su concepci¨®n y algunos hechizos y habilidades se ajustaron para mejorar su utilidad o reducir su potencia. Aunque todas sus especializaciones cuentan con sus diferencias la predilecci¨®n por una u otra rama siguen vigentes como anta?o. No es lo mismo un potente mago conocedor del elemento fuego que un estudioso del fr¨ªo que tiene m¨¢s posibilidades de sobrevivir ante encuentros m¨²ltiples o en JcJ. No obstante quince a?os da para mucho y el conocimiento que existe actualmente sobre las clases hacen que cada una de ellas en sus diferentes ramas de talento sean ¨²tiles para casi cualquier escenario posible aunque la experiencia de subida de nivel sea diferente seg¨²n qu¨¦ camino de especializaci¨®n escojamos.

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El funcionamiento de todas ellas sigue siendo el mismo aunque a nuestro parecer se ha mejorado la jugabilidad de todas ellas. Lo que queremos decir con esto es que hemos notado que se ha afinado el timing entre la sucesi¨®n de hechizos o habilidades que se lanzan uno tras otro eliminando ese tiempo muerto que quedaba entre medias. Ahora esta secuencia parece m¨¢s fluida y natural. Puede que sea una impresi¨®n nuestra pero lo cierto es que no record¨¢bamos que fuera as¨ª en su d¨ªa.

Sobreviviendo al entorno

Da igual qu¨¦ clase escojamos en World of Warcraft: Classic, ninguna se salva de los peligros que acechan a cada paso que damos. El mundo de Azeroth es peligroso per se, m¨¢s a¨²n si nos adentramos en las zonas donde ninguna facci¨®n domina el territorio. Ya seas un mago poderoso, un escurridizo p¨ªcaro o un imbatible guerrero, en Classic no podemos atraer a enemigos en masa hacia nosotros o nuestra barra de vida se vaciar¨¢ r¨¢pidamente. Hay clases que no sufren tanto como otras como es el caso del mago, quien se ha beneficiado del paso del tiempo para perfeccionar su modus operandi contra grupos de enemigos y que la mayor¨ªa de sus usuarios han puesto en pr¨¢ctica.

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Sin embargo incluso la tarea m¨¢s sencilla de completar puede ponernos en un aprieto. Una mala decisi¨®n atrayendo a un solo enemigo y podemos vernos inmersos en una batalla contra otros tres o cuatro m¨¢s que acuden en su ayuda. La supervivencia es el pan nuestro de cada d¨ªa y es ah¨ª donde las habilidades ¨²nicas de cada especializaci¨®n entran en juego, algo que con el paso del tiempo se ha ido perdiendo. El CC o la incapacitaci¨®n de enemigos vuelve a la palestra en WoW Classic otorg¨¢ndoles su raz¨®n de ser principal y es algo que muchos a?or¨¢bamos. Aunque su mayor uso sea en mazmorras no hay que temer de ellas fuera de las mismas pues resultan ser imprescindibles para muchas situaciones.

Hablando de mazmorras; adi¨®s piedra de invocaci¨®n, adi¨®s utilidad Buscar Grupo. Los jugadores de World of Warcraft: Classic deben de buscar a mano a los miembros del grupo con los que desea hacer la mazmorra y caminar hasta ella si quieren que se lleve a cabo. La invocaci¨®n desde la Piedra de Encuentro se a?adi¨® en The Burning Crusade as¨ª que la susodicha solo sirve para lo que significa, para quedar all¨ª con el resto del grupo. Las instancias para cinco jugadores suelen ser duras y largas, lo suficientemente densas como para ocuparnos varias horas de juego, especialmente las de m¨¢s alto nivel. Adem¨¢s, la mayor¨ªa de ellas y en contra de los conocimientos que ten¨ªamos previamente pueden soportar un total de diez jugadores en lugar de cinco. ?Lo negativo? Que al estar en grupo de banda las misiones a desarrollar en este tipo de lugares cerrados no pueden ser completadas.

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Dieciocho mazmorras disponibles para grupos de cinco jugadores m¨¢s otras dos para un total de 40 son las que se han incluido desde el principio. M¨¢s tarde se a?adir¨¢ la mazmorra de grupo restante ¡ªen la fase 2 La Masacre¡ª y las siguientes raids ¡ªen la fase 3 se a?adir¨¢ Guarida de Alanegra, en fase 4 Zul¡¯Gurub, en la quinta Ahn¡¯Qiraj y en la sexta y ¨²ltima Naxxramas¡ª. Todo ello en formato epis¨®dico para intentar emular lo m¨¢ximo posible el plan de contenido originario de 2005. Hemos disfrutado en la gran mayor¨ªa de ellas en la medida de lo posible puesto que ahora es m¨¢s dif¨ªcil que antes encontrar grupo. ?La raz¨®n? Una peligrosa moda que se ha impuesto en los servidores con la que se pretende completar cada una de ellas lo m¨¢s r¨¢pido posible para ganar experiencia r¨¢pida.

Spellcleave o meleecleave son dos palabras que vais a leer constantemente en el chat de B¨²squeda de grupo. Significa hacer la instancia propuesta a base de ¨¢reas gracias a las habilidades de los guerreros o magos. Si no eres una de esas dos clases tendr¨¢s bastante dif¨ªcil encontrar grupo a menos que quer¨¢is montarlo vosotros, aunque esto no asegura nada. Arruina la experiencia de juego en pos de rapidez burlando el dise?o de las mazmorras y adem¨¢s vuelve elitista a los jugadores dejando a un lado la mayor¨ªa de roles, quienes se sienten apartados porque nadie quiere llev¨¢rselos de mazmorras. De hecho incluso existen grupos donde los cinco integrantes son magos, nada de guerreros con escudo o sanadores.

Con grupos normales hemos experimentado la misma magia que desprend¨ªan hace m¨¢s de una d¨¦cada y, a¨²n conoci¨¦ndolas al dedillo, hemos ido con cautela para no morir en nuestra empresa. Ya solo caminar hasta la entrada de la mazmorra elegida significaba correr el riesgo de morir antes de llegar pues sol¨ªan rondar enemigos ¨¦lite por la zona y en WoW Classic est¨¢n ah¨ª, afilando sus espadas sedientos de sangre. Nadie quiere morir por un pull mal realizado, los cementerios son escasos y suelen estar en la otra punta del mapa, al contrario que en la actualidad. Morir no significa que nuestra barra de experiencia reduzca pero s¨ª implica un castigo como el de volver sobre nuestros pasos para recoger nuestro cuerpo y un descenso en la durabilidad de nuestra armadura.

Las mazmorras de banda Guarida de Onyxia y N¨²cleo de Magma, aunque puedan suponer un problema para algunos clanes, ya no son tan duras como cuando las visitamos hace quince a?os. Ya han sido completadas por muchas guilds tanto espa?olas como extranjeras y la raz¨®n es simple; todo el contenido se basa en el parche 1.12. El n¨²mero de prejuicios que podemos aplicar a un jefe de banda se ha aumentado de ocho a diecis¨¦is, el equipo obtenido en mazmorras de alto nivel es superior en estad¨ªsticas ¡ªno todos¡ª, los talentos est¨¢n altamente mejorados con respecto a c¨®mo eran cuando se intentaba derrotar a Ragnaros o a la hija de Alamuerte, lo mismo ocurre con los hechizos y, adem¨¢s, ambas bandas fueron retocadas para ser m¨¢s accesibles durante los dos a?os que permaneci¨® el juego a la venta sin expansiones. Durante este primer mes de vida ha sido habitual ver c¨®mo abat¨ªan a ambos enemigos con niveles por debajo del m¨¢ximo y con equipaci¨®n incluso verde, sin resistencias elementales. Todo esto cambiar¨¢ a partir de Ahn¡¯Qiraj, donde su cercan¨ªa con el parche 1.12 har¨¢ las cosas m¨¢s dif¨ªciles. O al menos eso creemos¡­

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Sobre el componente JcJ tan solo podemos comentar que est¨¢ m¨¢s vivo que nunca. Hay una gran cantidad de jugadores que prefieren asesinar a aquellos que juegan con personajes de la facci¨®n contraria sin importar la zona donde se hallen o el nivel que tengan. Todav¨ªa no est¨¢ implementado el Sistema de Honor, har¨¢ aparici¨®n en la Fase 2, pero esto no implica que los jugadores huyan de la posibilidad de realizar escaramuzas entre ellos.

?Volvemos realmente al pasado?

La respuesta que todos esperamos leer es que s¨ª, que nada ha cambiado y que las mismas sensaciones que tuvimos en nuestra primera toma de contacto con el juego hace m¨¢s de una d¨¦cada volveremos a revivirlas. La respuesta real es; a medias. Los veteranos llegamos a World of Warcraft: Classic con algo m¨¢s que un pan debajo del brazo y es imposible perderlo por el camino. Muchas de las misiones del juego las conocemos al dedillo y mucho m¨¢s las mazmorras, el equipo que necesitamos para adentrarse en las que son de banda lo mismo y nuestra habilidad en el uso de hechizos y habilidades est¨¢ m¨¢s que entrenada con tantos a?os de juego a nuestras espaldas. Hay pocas cosas que puedan sorprendernos en Classic, si acaso lo comentado p¨¢rrafos atr¨¢s, zonas que no hayamos explorado en su d¨ªa.

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No obstante s¨ª hay algo que nos ha hecho volver al pasado y es el aspecto social y el de progresi¨®n del personaje. En Classic no se regalan armaduras ¨¦picas por abrir cofres semanales o se suben puntos de destreza en profesiones de dos en dos ¡ªo de cinco en cinco¡ª, de hecho pr¨¢cticamente cualquier objeto fabricado a mano es mejor que los que podemos obtener en misiones salvo excepciones donde nos premian con una armadura o arma de calidad azul. No podemos montar en nuestro caballo hasta nivel cuarenta y obtenerlo tampoco es tarea f¨¢cil ya que hay que ahorrar dinero para comprar habilidades necesarias para afrontar nuevos retos. O componentes para hechizos.

Cada nuevo objeto de equipaci¨®n obtenido en una mazmorra os har¨¢ esbozar una sonrisa tan grande que os har¨¢ pensar que, ahora s¨ª, sois invencibles. Quiz¨¢s solo se¨¢is nivel 20 pero creednos que lo pensar¨¦is. Toda ayuda cuenta en Classic y eso que hablamos solo de objetos de calidad verde, ya ni mencionar los morados, tambi¨¦n llamados ¨¦picos. Y si cog¨¦is una misi¨®n que la recompensa sea un objeto azul, ir¨¦is a completarla antes de que caiga el Sol.

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El sistema de progresi¨®n de World of Warcraft: Classic es igual que el original y desde su concepci¨®n est¨¢ excepcionalmente bien dise?ado. Sin llegar a ser demasiado exigente para el jugador pero tampoco f¨¢cil de progresar. El jugador puede conseguir todo lo que se proponga jugando tan solo unas horas al d¨ªa siempre que tenga a mano un grupo de jugadores dispuestos a blandir su arma junto a ¨¦l, al menos en lo que concierne a equiparse con el equipo necesario para las mazmorras de alto nivel. El sistema de profesiones tambi¨¦n necesita de cierto tiempo para poder avanzar en su progresi¨®n pero como recompensa obtenemos nuevos objetos ¨²tiles para poder subir de nivel cada cierto tiempo.

?Recorrer Azeroth a pata hasta nivel 40? As¨ª es, en World of Warcraft: Classic, como en su d¨ªa, el jugador deb¨ªa de esperar cuatro decenas de niveles para poder utilizar una montura y, a¨²n as¨ª, requer¨ªa de al menos 90 monedas de oro para poder hacerse con una. Ni qu¨¦ decir tiene que el jugador valorar¨¢ enormemente el placer de tener uno de estos equinos a su disposici¨®n y poder pasear su melena al viento. Conseguir dinero en Classic no es tan f¨¢cil como en la versi¨®n actual ¡ªaunque existen gu¨ªas y m¨¦todos para conseguirlo f¨¢cilmente¡ª as¨ª que hacernos con la licencia para montar estos animales costar¨¢ sudor y l¨¢grimas. Truco: desuello combinado con sastrer¨ªa dan mucho dinero.

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Cualquier logro conseguido en World of Warcraft: Classic es objeto de ser celebrado, s¨ªmbolo de que el sistema de progresi¨®n del juego sabe recompensar pero tambi¨¦n penalizar. No es ni era el mmorpg que m¨¢s horas requer¨ªa para poder llegar a ser algo en la vida virtual ¡ªsalvo completar las mazmorras de banda muchas veces, que eso s¨ª requer¨ªa horas¡ª pero su sistema de recompensas es lo suficientemente efectivo como para tener al jugador enganchado gracias a ello.

En lo social hemos visto que los jugadores vuelven a pedir ayuda para completar misiones, nos otorgan beneficios a nuestras estad¨ªsticas sin pedirlo, el chat de grupo se usa mucho m¨¢s, el comercio entre jugadores est¨¢ a la orden del d¨ªa y vuelve a haber personas que solo quieren vivir aventuras sin importar cuando alcanzan el m¨¢ximo nivel, est¨¢n ah¨ª para disfrutar del entorno y las hostilidades de los mismos.

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Para terminar correctamente este ladillo hay que decir que quince a?os dan para muchos estudios sobre el videojuego. No volvemos al pasado al jugar a Classic por lo mencionado en el primer p¨¢rrafo y por esto ¨²ltimo. No es lo mismo jugar ahora, con muchos m¨¢s recursos y con un internet lleno de informaci¨®n acerca del t¨ªtulo que a c¨®mo era anta?o. Hay gu¨ªas de clases, trucos, rotaciones, teorycrafting y las estad¨ªsticas de los personajes se entienden mucho m¨¢s. Todo eso ayuda a exprimirlo desde el minuto uno y elimina la carencia de informaci¨®n del pasado. Es decir; el juego es muy diferente para nosotros, pero sigue siendo el mismo.

Viejo por fuera, nuevo por dentro

World of Warcraft: Classic se ha lanzado con actualizaciones gr¨¢ficas que en su d¨ªa no estaban. El juego corre bajo una versi¨®n modificada del cliente Legi¨®n y, por ende, muchas de las opciones gr¨¢ficas que estaban presentes en la pen¨²ltima expansi¨®n de World of Warcraft se pueden usar en Classic. Y no solo hablamos de opciones que podemos activar o desactivar, tambi¨¦n de caracter¨ªsticas que saltan a la vista. Por enumerar alguna de ellas tenemos texturas de mayor calidad, aumento del contraste, m¨¢s vegetaci¨®n, mejor iluminaci¨®n y una optimizaci¨®n de bandera. Sobre este ¨²ltimo punto tan solo hace falta mirar los requisitos m¨ªnimos para ver que echar una partida en WoW: Classic solo requiere de un ordenador Intel Core 2 Duo y una tarjeta gr¨¢fica de 512mb. El propio juego, adem¨¢s, se inicia con una configuraci¨®n por defecto que establece los gr¨¢ficos del mismo a c¨®mo se ve¨ªa hace quince a?os.

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Las nuevas opciones gr¨¢ficas a?adidas son el SSAO ¡ªiluminaci¨®n avanzada¡ª , aumentar la calidad del agua para que se aprecie como el cliente actual, poder elegir cual de nuestras tarjetas gr¨¢ficas usar para el juego, calcular el valor alfa del multimuestreo, nuevas opciones en la configuraci¨®n de la calidad de las sombras y de los rayos de sol y modificar la distancia de visionado y detalles del suelo. Esto ¨²ltimo ya se pod¨ªa retocar o bien dentro del juego original o mediante comandos en el archivo de configuraci¨®n pero aqu¨ª, el jugador, puede ver aumentada la flora del entorno y adem¨¢s interactuar con ella.

El rendimiento del videojuego incluso con todo activado es fabuloso. Con un i5 6600, 8GB RAM DDR4 y una tarjeta gr¨¢fica GTX 1050TI hemos obtenido velocidades de 180fps en su m¨¢xima configuraci¨®n posible, y eso usando una gran cantidad de addons que siempre consumen bastante memoria RAM.

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Lo ¨²nico que no se ha retocado es la m¨²sica la cual sigue conservando las enormes pistas que ayudaron a que el t¨ªtulo fuera todo un ¨¦xito. Y si lo pensamos bien es en Classic donde m¨¢s protagonismo tienen pues todas y cada una de las composiciones encajan perfectamente dentro del mapeado donde se reproducen ayudando as¨ª a que la interacci¨®n con el entorno sea lo m¨¢s ¨¦pica posible. Un solo ejemplo puede serviros: Ashenvale y su m¨ªtica pista de audio. Eso s¨ª, la traducci¨®n al castellano que soporta el cliente de juego es la primera de todas, una que la compa?¨ªa sac¨® en versi¨®n beta poco antes del lanzamiento de la primera expansi¨®n y en la que los propios usuarios reportaban errores y ayudaban a corregir la localizaci¨®n. Es desastrosa, sin rodeos, y hay errores en la gram¨¢tica bastante graves o incluso fallos como que dos o m¨¢s objetos se llamen de la misma forma.

Con respecto a c¨®mo ha manejado Blizzard el gran c¨²mulo de jugadores que se han decidido a jugar a World of Warcraft: Classic ya le dedicamos un tiempo en las primeras impresiones que publicamos aqu¨ª har¨¢ unas semanas pero podemos confirmar que el sistema de layering sigue presente en los servidores m¨¢s poblados. Ahora, en lo que concierne a los jugadores espa?oles, este sistema de capas pr¨¢cticamente se ha abolido y apenas hay con respecto a otros reinos. Mandokir, el servidor espa?ol, tiene una fuente de jugadores bastante elevada aunque no como Firemaw o Shazzrah, donde jugamos pr¨¢cticamente la mitad del tiempo empleado para este an¨¢lisis.

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Quiz¨¢s lo m¨¢s importante lo dejamos para el final; c¨®mo han llevado la versi¨®n 1.12 a World of Warcraft: Classic utilizando el motor de Legi¨®n. Por lo que hemos visto todo funciona a la perfecci¨®n, o lo que es lo mismo, las mec¨¢nicas antiguas funcionan de igual manera en el cliente cl¨¢sico. Han habido problemas con algunas trampas del Cazador o habilidades que antes no se comportaban de la misma forma en Vanilla con el Guerrero ¡ªentre otras¡ª pero todo lo dem¨¢s sigue igual. Hemos hecho mil y una mazmorras y todo ha ido como deb¨ªa ser, tanto en la inteligencia artificial de los enemigos como en el sistema de despojo y los objetos que sueltan al matarlos.

Blizzard podr¨ªa haber usado el cliente referencia y lanzarlo tal cual solucionando algunos problemas por el camino pero el juego, con la tecnolog¨ªa de ahora, era muy vulnerable y no pod¨ªan permitirse eso. Desde los propios addons que ahora utilizan un lenguaje m¨¢s complejo, pasando por la ¨²til mensajer¨ªa del programa Battle.net, hab¨ªan muchos elementos que los desarrolladores deb¨ªan de abordar si quer¨ªan llevar la vuelta de este cl¨¢sico a lo m¨¢s alto. Para ello han implementado toda la base de datos del original as¨ª como los recursos gr¨¢ficos en el cliente de Legi¨®n y ajustado para que todo fuera como hace quince a?os. Han utilizado servidores privados para comparar sus ajustes, han acudido a grandes streamers que conoc¨ªan el juego al dedillo para ver si X habilidad hac¨ªa ese da?o realmente, han colaborado con el equipo del servidor privado Nostalrius e incluso se cre¨® un equipo interno dedicado ¨²nica y exclusivamente para llevar a cabo World of Warcraft: Classic. Ha sido un ¨¢rduo trabajo de ingenier¨ªa inversa utilizando la tecnolog¨ªa de ahora. Y no les ha salido nada mal...