Assassin's Creed II
Assassin's Creed II, gu¨ªa completa - Tumbas de Asesinos
Te ayudamos a consumar la venganza en Ezio.
Las tumbas son seis pruebas de habilidad repartidas por todo el juego en las principales construcciones de los escenarios. Al encontrarlas, recogeremos los sellos de los Asesinos hist¨®ricos para colocarlos en la sala subterr¨¢nea de la casa de Mario. Es la ¨²nica manera de conseguir la fabulosa armadura de Alta?r. El orden es irrelevante aunque lo normal es ir completando estas fases a medida que aparecen en el mapa.
- El secreto de Novella: esta tumba est¨¢ dentro de la propia historia principal del juego as¨ª que es obligatoria para todo el mundo. (Ver Misi¨®n principal)
- El secreto de Santa Maria del Fiore: la entrada est¨¢ en un lateral de la bas¨ªlica de Florencia. Dentro no hay nadie y es bastante f¨¢cil escalar hasta la c¨²pula para encontrar la tumba del Asesino Iltani.
- El secreto de la Torre Grossa: es la que est¨¢ en la Toscaza. La entrada est¨¢ a pie de calle, en una pared. Dentro, a diferencia de la anterior, hay algunos enemigos. Subir no es para nada complicado. En lo m¨¢s alto encontraremos la tumba de Wei Yu.
- El secreto de Rivaldino: la entrada a la tumba del castillo de Forli est¨¢ en un peque?o muelle en el foso que rodea a la estructura. Dentro tambi¨¦n hay enemigos y es algo m¨¢s complicado que el anterior secreto. El sarc¨®fago pertenece a Qulan Gal.
- El secreto de la Visitaci¨®n: bastante corto y f¨¢cil ¨¦ste, uno de los dos secretos de Venecia. Esta en uno de los laterales del campanario. Despu¨¦s de una carrera para atrapar a un soldado que huye, tendremos que superar contrarreloj un interesante escenario. Le damos a la palanca (consultad m¨¢s adelante el secreto del calamar gigante pues es aqu¨ª donde est¨¢) y tenemos que recorrer la habitaci¨®n usando un salto especial que consiste en saltar justo despu¨¦s de trepar por la pared. Si lo hacemos bien llegaremos a la tumba de Leonio.
- El secreto de San Marco: en la segunda tumba de Venecia se entra por la azotea. Es mi preferida, tanto por su elaboraci¨®n como por su belleza. Consiste en llegar al altar y activar los cuatro pedestales del mosaico del suelo. Hay que posarse sobre cada uno y superar las pruebas de agilidad contrarreloj. Cuando hayamos completado el mosaico descendemos a la cripta y cogemos el sello de Amunet.