Runaway 2: El Sue?o de la Tortuga
Runaway 2: El Sue?o de la Tortuga, gu¨ªa completa
Te ayudamos a rescatar a Gina.
El intento de Ben de acercarse al oso ha sido un fracaso, pero seguramente el perfume que usaba no era el correcto, nosotros se lo hemos cambiado y estamos seguros de su ¨¦xito, as¨ª que insistimos en que deber¨ªa volver a intentarlo. Evidentemente, ahora el oso lo recibe de otra manera, ambos se hacen "amigos" y el camino queda libre. Sin duda, toda una lecci¨®n de amor.
Nos dirigimos de nuevo al r¨ªo helado, esta vez veremos que una de las garras que utilizaba Ben ha quedado sobre el hielo. Utilizamos el stick para recuperarla y recordamos que los osos usan sus extremidades para pescar en el r¨ªo. Antes de utilizar la pezu?a animal hay que intentar pescar con el stick, si no no funciona y no nos dejar¨¢ hacer nada. Una vez hecho esto utilizamos la garra y el bast¨®n de hockey y con el nuevo artilugio ahora s¨ª podremos pescar.
Tenemos salm¨®n, tenemos sustituto de alga, volvemos a la caba?a de Ben y veremos a su entrada que hay un hacha sobre una base de madera. Usamos el le?o con el hacha y obtenemos los palillos. Ahora subimos las escaleras y nos fijamos en que en la puerta interior hay un letrero hecho de bamb¨². Lo cogemos y por fin podemos llamar a Archie utilizando el silbato que nos dio sobre el resquicio sobre el que apareci¨® la primera vez.
Una vez preparado el plato Joshua da buena cuenta de ¨¦l y se pone como loco al descubrir que ha recuperado la memoria y la lucidez. ?ltimos coletazos del cap¨ªtulo, la alegr¨ªa de Joshua ha generado un ¨²ltimo problema que habr¨¢ que solucionar. Fuera de la caba?a estaba el mecanismo de arrastre, hay que abrir la furgoneta y percibir que efectivamente no funciona. Parece un problema del motor.
Abriremos el cap¨® y usaremos el stick de hockey para sujetarlo, ahora inspeccionando el motor observamos que no tiene buj¨ªas, utilizaremos la que lleva incorporada la motosierra y para extraerla usamos el cuchillo oxidado a modo de destornillador. Colocada la buj¨ªa en el motor este arranca y el resto es autom¨¢tico, tras una larga secuencia muy aclaratoria nos llega la conclusi¨®n del cap¨ªtulo, vayamos ahora a por el n¨²mero cinco.