PLAYOFFS NBA | LAKERS 117 - 107 NUGGETS (4-1)
Leyenda: Un imperial LeBron reclama su corona y gu¨ªa a los Lakers a las Finales de la NBA
LeBron mostr¨® su versi¨®n m¨¢s dominante (38+16+10) y disputar¨¢ sus d¨¦cimas Finales de la NBA. Los Lakers, las primeras desde 2010. Denver dice adi¨®s a una temporada hist¨®rica.
Una cosa est¨¢ clara: LeBron no es Kawhi, Anthony Davis no es Paul George y los Lakers no son los Clippers. El enfrentamiento que todo el mundo esperaba no se ha producido, y las similitudes entre una serie y otra han sido notables, con una peque?a diferencia sustancial: unos han ganado y otros no. Los Nuggets ganaron uno de los tres primeros partidos, se colocaron con un 3-1 adverso que hab¨ªan remontado en las dos rondas anteriores y amenazaron con dar la vuelta al marcador en una noche que parec¨ªan tener perdida pero a la que, una vez m¨¢s, se aferraron con todo lo que ten¨ªan. O, m¨¢s bien, con lo poco que les quedaba. Sin embargo, esta vez el rival no colaps¨® ni hizo gala de p¨¢jaras inexplicables, o de una sequ¨ªa anotadora que diera alas a un equipo que no las necesita para volar ni hincharse de un bien merecido orgullo para tirar adelante, sea el que sea el que se ponga. Tampoco las estrellas se borraron del mapa y dijeron adi¨®s cuando m¨¢s se les necesitaba. Esta vez, los Lakers impusieron la l¨®gica y derrotaron a lo racionalmente inexplicable, un grupo de j¨®venes con un futuro en el que no se atisba un techo que estaban muertos en primera ronda pero, por lo que sea o por muchas cosas, han llegado hasta la ¨²ltima del Oeste. De esa Conferencia imposible en la que han tenido que jugar 19 partidos, sucumbiendo cuando a punto estuvieron de hacerlo en tan solo cinco. Pero claro, ni los Jazz ni los Clippers eran los Lakers. Ni, por supuesto, ten¨ªan a LeBron.
El Rey se ha desengrasado tras cuatro partidos en los que hab¨ªa cedido el protagonismo a Anthony Davis. El mundo entero se preguntaba si no era ya demasiado tarde para ver a un jugador que en diciembre cumple 36 a?os mostrar su versi¨®n m¨¢s dominante en playoffs, esa de la que ha hecho gala en la ¨²ltima d¨¦cada y que le hizo ascender a un puesto ya casi inalcanzable del Olimpo en las Finales de 2016 o los playoffs de 2018. 24,3 puntos, 9 rebotes y 8,8 asistencias eran sus promedios en la serie, algo que ser¨ªa ingrato relacionar con una mala actuaci¨®n pero que no deja de serlo para ¨¦l, acostumbrado a mucho m¨¢s. Y s¨ª, al final result¨® que ese ser monstruoso segu¨ªa vivo y dejaba claro (una vez m¨¢s) que no sigue luchando por encontrar su sitio definitivo en la historia mientras ignora el paso del tiempo y de los cad¨¢veres que va dejando por el camino. El ¨²ltimo de ellos, en forma de proyecto, eran unos Rockets a los que dijo adi¨®s en semifinales; los Nuggets, due?os de la fuente de la juventud, se pueden despedir de una temporada de sobresaliente en unos playoffs en los que se han reafirmado y han apuntillado una idea que se encuentra en su principio y no en su final y que, claro, no cuenta dentro de los proyectos acabados del Rey, por encontrarse temporalmente en la pubertad y haber demostrado que lo que viene es mejor que lo que han dejado atr¨¢s. Y eso, si el pasado reciente es tan bueno como el suyo, siempre es positivo.
LeBron vuelve a unas Finales que pr¨¢cticamente podr¨ªan llevar su nombre y que ha pisado en nueve de los ¨²ltimos diez a?os. Y, ante de la racha de ocho consecutivas fue el a?o 2010, en el que los Lakers las disputaron por ¨²ltima vez. Los angelinos encuentran, por fin, el camino de regreso a casa tras una b¨²squeda llena de infortunios y caos estructural, pero que iniciaron una nueva era con el fichaje de LeBron, el mayor cr¨¦dito que tiene como ex jugador un Magic Johnson que sali¨® por la puerta de atr¨¢s y dej¨® a Rob Pelinka hacerse due?o de la estabilidad directiva de la que goza hoy la franquicia, que deja atr¨¢s la peor ¨¦poca de su historia y vuelve al lugar que le corresponde y que ha pisado hasta en 32 ocasiones, m¨¢s que nadie en la historia. Dos historias de amor, las de los Lakers y LeBron, que han ido de la mano, ya sea para buscar la salvaci¨®n (la franquicia) o la confirmaci¨®n (el jugador). En el quinto partido ante Denver, LeBron no se anduvo con rodeos y rechaz¨® cualquier tipo de especulaci¨®n, sabiendo de primera mano que dar alas a los de Colorado era sin¨®nimo de inmolaci¨®n, y que su resiliencia era solo comparable a su ya consabido pundonor. El Rey silenci¨® los intentos de remontada, que llegaron de nuevo como en el partido anterior, y sum¨® 38 puntos, 16 en el ¨²ltimo cuarto, 16 rebotes y 10 asistencias. Es su triple-doble n¨²mero 27 en playoffs por detr¨¢s de, vaya, Magic Johnson, otro jugador de los Lakers que fue adem¨¢s el que le visit¨® en su casa y le convenci¨® para cambiar Ohio por Hollywood. Un mundo de casualidades y nombres hist¨®ricos a los que LeBron alcanza con cada haza?a que hace.
La versi¨®n sobrehumana de LeBron
Son 10 las Finales que LeBron, primer jugador en conseguirlo desde Kareem y cuarto en la historia tras el p¨ªvot, Sam Jones y Bill Russell. Jam¨¢s en la era moderna, un jugador hab¨ªa conseguido algo as¨ª, sumando adem¨¢s ocho temporadas consecutivas en esa ¨²ltima ronda que ha perdido, todo hay que decirlo, en seis ocasiones. Tres son los anillos que lucen en sus vitrinas, que podr¨ªan ser cuatro a final de curso, con todo lo que puede conllevar, incluido un debate tan irrisorio como recurrente sobre qui¨¦n es el GOAT, ese mejor jugador de la historia. Y que tiemblen Jordan, Jabbar y compa?¨ªa, que quiz¨¢ un nuevo entorchado le d¨¦ a LeBron un reinado eterno y, cuando deje de ser una realidad andante, un recuerdo imperecedero. Ante Denver, el alero, reconvertido en base, apareci¨® cuando ten¨ªa que hacerlo, aunque realmente nunca se fue del partido. Ya en el segundo periodo realiz¨® cuatro penetraciones consecutivas en una zona despoblada de un Jokic que llevaba tres faltas (igual que Anthony Davis) y se encontraba en el banquillo. Su ausencia perjudic¨® a unos Nuggets que resistieron en un primer cuarto loco, en el que se sumaron seis empates y nueve cambios de direcci¨®n, antes de que James tomara la directa y se pusiera a anotar en la pintura: 16+7+6 al descanso y LeBron en estado puro, en modo leyenda, por primera vez en unos playoffs en los que no ha dejado de jugar bien pero en los que no ha llegado a jugar tan bien. Al menos, no en esa versi¨®n adimensional que ha destrozado equipos y forjado su leyenda.
Los Nuggets, envalentonados por un Mike Malone que empez¨® siendo cuestionado y se ha convertido en el mejor entrenador para el proyecto, no se dieron por vencidos y llegaron a empatar en el tercer cuarto (84-84) una diferencia que hab¨ªa sido de -16. Un triple de Davis (27+5+3+2) a pase de LeBron cerraba el tercer cuarto, y los Lakers disputaron el ¨²ltimo sin ponerse nerviosos a pesar de la cercan¨ªa del rival. Tomaron ventaja, pero Millsap desde la personal (13 puntos) y Jokic (20+7+5, ensombrecido por Howard y por las faltas) remaron hasta el 103-99. Hasta ah¨ª llegaron: asistencia de LeBron para el triple de Danny Green y aparici¨®n del propio LeBron en modo Kobe, ese ser que ha venido a reemplazar en una franquicia que le a?ora y que se mueve por su recuerdo: tiro en suspensi¨®n, tiro en suspensi¨®n, tiro en suspensi¨®n, triple y adi¨®s. Cuatro canastas consecutivas, nueve puntos en total y la aclamaci¨®n total y absoluta de unos compa?eros rendidos a sus pies. Con Rondo en una versi¨®n humana (8+4+3, sin jugar en el ¨²ltimo cuarto), Howard demostrando que puede ser una pieza fundamental, 11 puntos de un Caruso que fue de m¨¢s a menos y una buena defensa que siempre obligaba a los Nuggets a dar un paso m¨¢s, a correr hasta una extenuaci¨®n que ya ten¨ªan. Que se lo digan a Murray, que dej¨® de mostrar esa cara il¨®gicamente estelar y hoy, problemas en la rodilla derecha mediante, se qued¨® en 19+4+8 con 0 de 4 en triples, 0 de 7 si sumamos los dos ¨²ltimos partidos.
Los Nuggets se despiden con sobresaliente. Murray se consolida como una estrella y deja atr¨¢s a ese jugador mol¨®n pero irregular, pasando a ser el jugador franquicia. Puesto que compartir¨¢ con Jokic y con una plantilla en la que nadie pasa de los 30 a?os excepto Millsap. Grant, 20 puntos, es otro de los que ha demostrado ser parte de ese futuro que les espera a los Nuggets, y tiene una opci¨®n de jugador de 9 millones de d¨®lares que puede rechazar para salir al mercado, un problema que los de Colorado, que har¨¢n lo que sea por mantenerle (deber¨ªan) pueden encontrarse en el pr¨®ximo mercado de fichajes. Tambi¨¦n tendr¨¢n que decidir qu¨¦ hacen con Torrey Craig o con un Dozier que cobra menos de 200.000 d¨®lares, una ganga por lo visto en unos playoffs en los que ha destacado y ha tenido grandes momentos. Y con la mirada puesta en un Michael Porter Jr. que, si mejora en defensa, tiene potencial de estrella. De una forma u otra, el futuro est¨¢ asegurado y solo queda por saber si lo de este a?o ha sido un accidente (bendito accidente) motivado por una situaci¨®n at¨ªpica o fruto de una trabajo estructural que ha dado sus frutos justo cuando ten¨ªa que hacerlo, en un momentum ideal que permite al proyecto dar un paso claro y rotundo en la direcci¨®n correcta.
?Y los Lakers? A las Finales. Eso bastar¨ªa para definir una temporada impresionante, que han trabajado de principio a fin, en la que han creado una qu¨ªmica grupal y se han identificado con un estilo Frank Vogel avanza m¨¢s all¨¢ que nunca en su carrera, Howard pisa una ronda a la que no llegaba desde 2009 con los Magic (vaya, en Florida) y Rondo, desde 2010 y con los Celtics, el eterno rival al que se podr¨ªan medir en las Finales. Davis disputar¨¢ sus primeras Finales (igual que Caruso, Markieff), gente como J.R Smith se podr¨ªan encontrar con un campeonato (para ¨¦l ser¨ªa el segundo) sin comerlo lo beberlo y LeBron podr¨ªa ser el primer jugador de la historia que gana el MVP de las Finales con tres equipos distintos y el tercero que gana con esa misma variante tras John Salley y Robert Horry, un honor que pude compartir con un Danny Green que ya lo ha hecho en Spurs y Raptors. Eso s¨ª, como ha dicho Rob Pelinka y ha recordado m¨¢s de uno al final del encuentro, "el trabajo no est¨¢ hecho". Quedan cuatro victorias. Y falta la corona de LeBron. Falta el anillo de los Lakers. Falta la gloria.