Sale el sol: la decisi車n de Ricky y el despegue de Phoenix Suns
Con Devin Booker ya confirmado como gran estrella, los Suns han maravillado en la burbuja de Florida. Se han quedado sin playoffs in extremis, pero han ganado un futuro.
Sobre la bocina, en el Nets-Blazers que cerraba la pen迆ltima jornada de seeding games (el ap谷ndice de la Regular Season) en la burbuja, Caris LeVert fall車 un buen tiro (frontal, bien posicionado) que, si hubiera entrado, habr赤a dado la victoria a su equipo (que no se jugaba nada, se las ver芍 con los Raptors en playoffs) y habr赤a transformado el mapa del Oeste. Los Blazers salvaron el pellejo, lo que han hecho durante la 迆ltima semana colgados de un Damian Lillard sobrehumano, y se unieron a los Grizzlies en el play in. Por un camino en el que ya hab赤an quedado Pelicans (con todo su hype), Kings (con todas sus miserias) y Spurs (con toda su m赤stica) se qued車 tambi谷n Phoenix Suns. El equipo de burbuja, el primero en la historia que acaba una fase regular (una muy at赤pica, eso s赤) con ocho victorias seguidas y no juega playoffs. La franquicia de Arizona no pisa las eliminatorias, de hecho, desde 2010. Antes hab赤an faltado tres veces desde 1988.
Pero la temporada ha sido un gigantesco paso adelante para una franquicia que ven赤a de una inestabilidad deportiva y una disfuncionalidad estructural que resultaban preocupantes. Del caos, la birria, ha surgido un proyecto de futuro que pint車 bien de octubre a marzo y ha pintado excelentemente bien en el reinicio de Florida. Ese 8-0 ha llevado a un 34-39 final (el mismo balance que los Grizzlies, las mismas derrotas que los Blazers que acabaron 35-39), un 46,6% de victorias que deja atr芍s cuatro a?os sin llegar ni siquiera al 30%. La llegada de Monty Williams (un tipo excelente, adem芍s) ha sido la primera buena noticia par el banquillo desde Alvin Gentry, que se fue en 2013. La llegada a los despachos del exjugador James Jones (un habitual en los equipos finalistas de LeBron James en Miami y Cleveland), en octubre de 2018, ha sido una revelaci車n.
James Jones, el arquitecto inesperado
Con fama cada vez? m芍s de taca?a bajo el mando de Robert Sarver, la antes orgullosa franquicia del desierto parec赤a dar otro palo de ciego con Jones, que adem芍s escuch車 burlas cuando traspas車 envi車 a Indiana Pacers a TJ Warren (otro que ha explotado en la burbuja) a cambio b芍sicamente de dinero y margen salarial para renovar a Kelly Oubre. Y, sobre todo, cuando en el 迆ltimo draft intercambi車 el n迆mero 6 con los Wolves. Se llev車 a Dario Saric y un n迆mero 11 que invirti車 en Cam Johnson. Este, un tirador fino pero sin mucho m芍s arsenal de juego, llegaba despu谷s de cinco a?os de universidad tras pasar de Pittsburgh a North Carolina. Con 23 a?os, era un rookie mayor que Devin Booker, la estrella del equipo que inici車 esta temporada con 22 a?os# y era ya la quinta en la NBA para 谷l (n迆mero 13 en 2015). ?Pero qu谷 demonios hacen los Suns? A cuestas llevaban, claro, a?os de patinazos graves en el draft. Una reconstrucci車n que no llegaba nunca: en 2016 y 2017 gastaro dos n迆meros 4 en Dragan Bender y Josh Jackson, dos jugadores que ya no est芍n en Arizona y que sufren para seguir en rotaciones NBA. En 2014 su lottery pick fue TJ Warren, regalado a los Pacers el pasado verano, en 2013 el n迆mero 5 fue para Alex Len, ya otro trotamundos sin mucha gloria# ?pero qu谷 hacen los Suns?
Pues, b芍sicamente, los Suns (James Jones) estaba construyendo un proyecto inteligente y con sentido alrededor de los cimientos que ya ten赤a. Booker, un anotador voraz minimizado por el caos que lo rodeaba, y DeAndre Ayton, el gigante que fue n迆mero 1 del draft en 2018 (el primero en la historia de la franquicia), el a?o de# Luka Doncic (n迆mero 3). Saliera bien o mal (y est芍 saliendo bien, o eso parece) Jones (que hizo carrera como especialista tirador) ten赤a un plan: con la estrella anotadora y el p赤vot capaz de continuar los bloqueos hacia el aro, hac赤an falta amenazas exteriores que abrieran la pista, no amasaran posesi車n# y defendieran, algo que ni Booker ni Ayton hac赤an con demasiada energ赤a. Por eso los Suns aprovecharon las urgencias de los Wizards para llevarse a Kelly Oubre Jr (24 a?os ahora) de Washington a cambio de Trevor Ariza (35 a?os). Por eso la criticada operaci車n por Cam Johnson y por eso, un a?o antes (draft de 2018), le dieron a los Sixers a Zhaire Smith (pick 16) y una primera ronda protegida a cambio de Mikal Bridges, n迆mero 10 del draft. Se buscaban 3+D, aleros de brazos largos y polivalencia defensiva y buen tiro exterior.
Y se buscaban veteranos para que el vestuario cuajara y el equipo creciera: Ricky Rubio firm車 por tres a?os y 51 millones de d車lares y Aaron Baynes lleg車 en la noche de draft de 2019. El segundo era un seguro del hogar mientras crece Ayton (que abri車 su segunda temporada con una sanci車n de 25 partidos por consumo de sustancias prohibidas, adem芍s), el primero un base multiusos que ayudar赤a a quitar presi車n a Booker en la creaci車n de juego y que conectar赤a puntos en pista hasta crear rutas de cauce ofensivo: lo que mejor hace Ricky. Al espa?ol, que estuvo muy cerca de los Pacers (un proyecto de playoffs, como eran los Jazz de los que sal赤a) se le critic車 por volver al caos, la disfunci車n y la reconstrucci車n aparentemente confusa. Y a los Suns se les critic車 por darle 51 millones. La uni車n ha resultado un 谷xito. Ricky (en octubre cumplir芍 30 a?os: tempus fugit) ha sido visiblemente feliz, su equipo ha jugado visiblemente bien y su rol le ha revalorizado a los ojos de la NBA, si es que hac赤a falta tras su MVP del Mundial. Ha promediado 13 puntos, 4,7 rebotes y 8,8 asistencias. Y en la burbuja, adem芍s, ha metido el 46% de sus triples.
Los Suns llegaron a la burbuja con Baynes y Oubre lesionados. Y han ganado sus ocho partidos con un nivel excelente: el s谷ptimo mejor ataque y la segunda mejor defensa# dos datos dif赤ciles de sostener pero prometedores. En su rotaci車n de Florida solo hab赤a un jugador de m芍s de 26 a?os: Ricky. Ayton tiene 22, Booker y Bridges 23, Johnson 24 (los mismos que Oubre) y Saric (otro engranaje entre presente y futuro) 26. Puestos a que todo vaya bien, han aportado en el backcourt el duro Jevon Carter (24 a?os: deber赤a hacer carrera como base defensivo) y Cam Payne, un jugador al que (26 a?os) se le estaban agotando las oportunidades NBA.
Booker ha debutado como all star este a?o (le quedan muchos por delante) ha sido el jugador m芍s determinante en la burbuja de todos los que no se llaman Damian Lillard. Sus medias en las ocho victorias han sido de 30,5 puntos y 6 asistencias. En la temporada, 26,6 y 6,5 con un 61,8% en true shooting percentage (el medidor de lanzamientos que pondera los tiros desde todas las posiciones). Solo el propio Lillard y James Harden superan esos n迆meros en este curso completo. Booker ha demostrado, un paso esencial, que es m芍s que un s迆per anotador y que puede ser un verdadero jugador franquicia. Mientras, Ayton ha seguido dejando detalles de su enorme potencial (18,2 puntos y 11,5 rebotes de media) entre despistes defensivos y algunas desconexiones (de cabeza y manos) en ataque.
Alrededor de sus dos armas j車venes, Monty Williams no ha dejado de buscar, modelar: construir. Empez車 (sin Ayton) con Ricky-Booker-Saric-Oubre-Baynes como quinteto. Despu谷s de introducir a Ayton, sac車 a Saric para dar minutos a Bridges. Finalmente, la lesi車n de Oubre introdujo a Cam Johnson y los Suns formaron el quinteto que ha maravillado en la burbuja: Ricky-Booker-Bridges-Johnson-Ayton. La evoluci車n de Cam Johnson ha sido fascinante, mejor de lo previsto como pasador y defensor, ha abierto la pista con su tiro y comprendido su rol: 13,3 puntos, 5,9 rebotes en la burbuja con once compa?eros tocando la bola m芍s que 谷l y solo 0,6 segundos de cada posesi車n en sus manos. Y Bridges se ha confirmado, ven赤a avisando, como el perfecto 3+D para jugar junto a Booker y Ayton: eficacia en ataque (12,8 puntos, 35% en triples) y unos brazos inacabables en defensa. Con Oubre, un tremendo talento, en un rol similar, los Suns pueden incluso plantearse de cara al futuro quintetos con Booker y Ayton rodeados por los tres: Oubre, Johnson y Bridges. Un plan lleno de aleros y, por eso mismo, absolutamente adaptado a la NBA actual. Y uno que aprovechar芍 la creciente capacidad de Booker como playmaker: sus problemas y errores en pasadas temporadas le han servido para, en un sistema por fin estructurado, crecer much赤simo como base real en muchas jugadas de ataque. Ricky, mientras, hace su labor a la perfecci車n: mueve y se mueve en ataque, conecta puntos, construye caminos.
Los Suns de la burbuja no son una casualidad. Los pasos de James Jones, que parecieron un galimat赤as cuando todav赤a no hab赤a camino, han hecho senda hacia un futuro que vuelve a ser prometedor en Arizona. La apuesta por Monty Williams (al que tentaron los Lakers) ha funcionado. El contrato de Ricky parece ahora un acierto rotundo, la rotaci車n tiene mucha juventud, mucho talento# y el sentido que le faltaba en pasadas temporadas. Y Booker tiene, definitivamente, trazas de l赤der que decidir芍 series de playoffs. A no mucho tardar. Por fin, despu谷s de a?os de eclipse, vuelve a salir el sol en el Pac赤fico.