Va a m¨¢s el 'debate Kyrie': ?otro destino, mismas conclusiones?

El debate no cesa. Kyrie Irving vuelve a estar, una vez m¨¢s, en el ojo de un hurac¨¢n del que no termina de salir. Su fichaje en verano por Brooklyn Nets para unirse a Kevin Durant, lejos de cerrar los comentarios sobre su cuestionada figura, los ha aumentado. La lesi¨®n de hombro, que le mantiene apartado de las pistas hasta nuevo aviso, ha provocado la mejora del r¨¦cord de su equipo y de sus compa?eros, que aumentan sus n¨²meros cuando la estrella est¨¢ ausente. Una constante en la carrera de un jugador cuyo talento es directamente proporcional a su mala cabeza y que desde que se fue de los Cavaliers para escapar de la alargada (alargad¨ªsima) sombra de LeBron para liderar un proyecto en solitario, sigue en entredicho.

No es la primera vez que vemos como las cosas mejoran en ausencia de Irving. Ya pas¨® en los Celtics, donde nadie parece echar de menos a un jugador con el que frenaron la excelente progresi¨®n que el proyecto de Brad Stevens llevaba desde que Danny Ainge pusiera al t¨¦cnico de Indiana al frente de la hist¨®rica franquicia. En 2017, un a?o antes de que Kyrie llegara a la ciudad de Boston, el equipo se clasificaba para las finales del Este por primera vez en cinco temporadas. Lo mismo hicieron la campa?a siguiente, con el base, lesionado a mitad de temporada, viendo a los suyos quedarse a las puertas de las Finales. En la 2018-19, los verdes part¨ªan como favoritos, pero los problemas internos rompieron la qu¨ªmica y el equilibrio espiritual inherente tradicionalmente a la franquicia y todo estall¨® en playoffs, donde fueron arrollados por los Bucks de Antetokounmpo en semifinales del Este.?

El proyecto parec¨ªa romperse entre los rumores que situaban a Kyrie fuera de Boston. La plantilla, desmadejada por los focos que asum¨ªa el base, hizo p¨²blicas sus quejas, desde Jaylen Brown ("no est¨¢bamos preparados para tanto circo") hasta Terry Rozier ("he sacrificado mi talento al lado de Irving").? Los analistas deportivos echaron cuentas y llegaron a la conclusi¨®n de que en los dos a?os que el jugador hab¨ªa estado en Boston, disput¨® 136 partidos (127 en temporada regular y 9 en playoffs) ganando 83 y perdiendo 53. Apenas un 61% de victorias. Sin ¨¦l en pista, el equipo ha jugado 56 duelos sumando la regular season y las eliminatorias por el t¨ªtulo. De esos choques, los Celtics han salido victoriosos en 37 y han perecido en 19. Un 66% de victorias. M¨¢s que con Irving en pista.

Otra de las cosas que se pusieron en evidencia en la franquicia verde, era la poca capacidad de Kyrie para hacer mejores a sus compa?eros. Los? que m¨¢s necesitan el bal¨®n son los que m¨¢s bajaron sus n¨²meros: Rozier en concreto, uno de los m¨¢s perjudicados por compartir posici¨®n en cancha, ascend¨ªa a los 13 puntos por partido cuando ¨¦l no estaba (promedi¨® 9 en temporada regular). Tatum, que no est¨¢ directamente perjudicado por la presencia de Irving como lo est¨¢ Rozier, es m¨¢s efectivo sin el Irving en pista y se iba casi a los 19 puntos por partido (15,7 en todo el a?o). Jaylen Brown, reci¨¦n renovado por los Celtics, tambi¨¦n sub¨ªa sus n¨²meros (de 13 a 15).

Finalmente, la estrella hac¨ªa buenos los rumores que le situaban en la Gran Manzana, aunque escogi¨® los Nets por delante de los Knicks, y los an¨¢lisis se quedaban en meras an¨¦cdotas mientras todo el mundo observaba con incertidumbre el nuevo destino de la estrella y esperaba para saber si las conclusiones que se sacaron de su etapa en Boston eran puntuales... o sin embargo se trataban de hechos consumados.

La historia se repite en los Nets

No parece que las cosas hayan cambiado. La expectaci¨®n ha confirmado lo que todo el mundo sab¨ªa: que Kyrie es un jugador ¨²nico pero que, de momento, no consigue mejorar ni al equipo ni a sus compa?eros. Recordemos que el movimiento de los Nets para hacerse con Irving y con Durant ya fue cuestionado y que muchos resaltaron el riesgo que un equipo en construcci¨®n y con buenos resultados en los ¨²ltimos tiempos podr¨ªa tener para realizar una revoluci¨®n interna y hacerse con dos jugadores que, por muy buenos que fueran, generaban dudas. El base por su car¨¢cter y el alero por una la lesi¨®n en el tend¨®n de Aquiles que ha supuesto una losa enorme para su talento y qui¨¦n sabe si tambi¨¦n para su carrera.?

Irving empez¨® como un cicl¨®n su nueva aventura. 50 puntos en su debut y exhibiciones individuales sucesivas que le dejaban con su mejor promedio en puntos (28,5), rebotes (5,4), y asistencias (7,2)... pero con un r¨¦cord de 4-7 para un equipo que cambi¨® su estilo colaborativo del a?o pasado para basarse en un modelo personalista del juego, con su estrella asumiendo mucho bal¨®n y sin que el resto de la plantilla estuviera involucrada.?

La lesi¨®n de hombro contra los Nuggets apartaba a Irving moment¨¢neamente del equipo, ya con t¨ªmidas quejas sobre el comportamiento del base al inicio de la campa?a. Desde entonces, todo parece ir como la seda en Brooklyn, que ha ganado 12 de los 18 partidos que se han disputado desde la lesi¨®n de la estrella y han recuperado el sentido del juego que Kenny Atkinson consigui¨® imponer, con mucho trabajo, en sus jugadores. La realidad es que los neoyorquinos han empezado a practicar un muy buen baloncesto y que han salido del preocupante pozo del que se encontraban a inicios de curso para lucir un balance de 16-13 que, aunque insuficiente (todav¨ªa) para estar con los mejores, convence m¨¢s que el que ten¨ªan en esos 11 primeros choques.

Eso s¨ª, el hecho de que los Nets carburen no ha provocado otra cosa que la continuaci¨®n del debate que muchos llevan poniendo en relieve desde el tumultuoso paso de Irving por los Celtics. Igual que pas¨® en Boston, la franquicia no carbura con ¨¦l en pista. Han pasado de un 112 de rating defensivo a un 109 y aunque tambi¨¦n bajan ligeramente en ataque (de 118 a 114) consiguen ser m¨¢s fiables ante los rivales m¨¢s fuertes de la competici¨®n. De las cuatro victorias que consiguieron en los primeros 11 partidos, solo la lograda ante los Rockets corresponde a un equipo contender. En los 18 siguientes, Brooklyn ha vencido a Celtics, Nuggets o Sixers dejando muy buenas sensaciones. Victorias que han reforzado el trabajo de Atkinson y que no hablan precisamente muy a favor de Kyrie.

La ausencia del base tambi¨¦n mejora (como tambi¨¦n pas¨® en los Celtics) a sus compa?eros. Y de qu¨¦ manera. El ejemplo m¨¢s claro es el de Dinwiddie, que ha pasado de promediar 17 puntos con un 41% en tiros con Irving al lado irse a los 26 por choque en los ¨²ltimos 18 duelos, siendo en todos ellos titular. Y con un 45% en tiros. Nada mal para un hombre que ha dado un paso adelante y que es lo m¨¢s destacado del equipo en la presente campa?a. Y que ya veremos si disputa el All Star. N¨²meros est¨¢ teniendo para ello.?

No es el ¨²nico caso. Joe Harris ha pasado de 13 a 16 puntos por partido; Jarret Allen de 9+9 a 14+12; Garrett Temple de 7,5 a 13,1 puntos; Incluso DeAndre Jordan, un p¨ªvot ya veterano, mejora su producci¨®n ofensiva (de 7,5 a 8,7 puntos) sin Irving en pista. Solo Taurean Prince baja ligeramente sus prestaciones (de 13 a 12), aunque parece m¨¢s en sinton¨ªa con el resto del grupo desde que Irving ve los partidos desde el banquillo. Hechos que no dejan de ser curiosos y que siembran la duda sobre c¨®mo funcionar¨¢ el equipo cuando Kyrie vuelva y, sobre todo, cuando lo haga tambi¨¦n Durant en el pr¨®ximo curso baloncest¨ªstico. Mucha estrella para un solo bal¨®n y mucha intendencia funcionando correctamente sin alguien como ellos al lado.?

La perspectiva no es halag¨¹e?a. No podemos olvidar que Irving es un hombre que fue clave en la consecuci¨®n del anillo de los Cavaliers de LeBron en 2016 (ese triple...) y que tiene un talento inconmensurable. Pero tambi¨¦n es cierto que todav¨ªa no ha demostrado ser una primera espada fiable para una franquicia ganadora. Mientras se recupera de su lesi¨®n, el playmaker est¨¢ viendo como Kemba Walker, su sustituto en Boston, se ha adaptado perfectamente a la qu¨ªmica grupal y a la idiosincrasia de la ciudad. El ex de los Hornets es m¨¢s efectivo que nunca y tiene un PER de 23,51, mejorando el anterior (21,72) y que tambi¨¦n se supera en true shot porcentage (el combinado de las tres distancias) de 57 a 59, el porcentaje de triples (de 39,9 a 41,1) y de tiros libres (de 86 a 88). La eficiencia, eso tan poco valorado pero a lo que tanta atenci¨®n presta Stevens, no fue lo que m¨¢s trabaj¨® Kyrie en unos Celtics que no parecen echarle de menos.?

Las dudas se resolver¨¢n cuando Irving vuelva a jugar. Ah¨ª es d¨®nde se ver¨¢ si el base, que ha hecho autocr¨ªtica tras ese fat¨ªdico paso por lo Celtics ("fall¨¦ a mis compa?eros") ha aprendido de sus errores y consigue producir estad¨ªstica y hacer a su equipo ganar a la vez. Mientras tanto, la sombra de LeBron y la de sus propios fantasmas seguir¨¢ persigui¨¦ndole. Nadie duda de que es uno de los mayores talentos de los ¨²ltimos a?os. Ni de que es un jugador especial, de esos que pueden marcar una era. Pero...