Maurice Herzog dijo tras conquistar el Annapurna: "Una nueva vida comienza. En la vida de los hombres siempre habr¨¢ otros Annapurna". El mensaje, como buen alpinista, trasciende m¨¢s all¨¢ de las monta?as. En nuestras vidas siempre habr¨¢ retos por los que luchar. Por los que so?ar. Cada uno los viste de una forma, pero en la mayor¨ªa de los casos responden a una necesidad interior de encontrarle sentido a la vida. ¡°Cuanto m¨¢s se bebe, mejor se vive¡±, sosten¨ªa Charles Bukowski que, para hollar sus particulares ¡®Annapurnas¡¯ en forma de escritura, necesitaba ingerir litros de cerveza: ¡°Si algo malo pasa, bebes para intentar olvidar; si algo bueno pasa, bebes para celebrar; y si nada pasa, bebes para hacer que algo pase¡±. No traigo aqu¨ª a Bukowski para escribir una loa a su alcoholismo sino para compartir mensajes como el que nos dej¨® con poemas como el de ¡®?As¨ª que quieres ser escritor?¡¯. Un paralelismo sobre el sentido de la vida. La escritura (para otros la monta?a) como excusa para poner sobre la mesa algo m¨¢s trascendental: ?as¨ª quieres conseguir el ¨¦xito en tu vida? Para contestar a esa pregunta habr¨ªa que definir un concepto tan subjetivo como el del ¨¦xito. John Carlin reflexionaba en su d¨ªa, en El Pa¨ªs, sobre el ¨¦xito de un reportero, que descansaba, fundamentalmente, en una materia prima llamada entrevista, un objetivo especialmente indigno si se trataba de entrevistar a futbolistas: ¡°Conseguir una entrevista con un jefe de gobierno o con un l¨ªder guerrillero no es f¨¢cil, pero es un juego de ni?os comparado con el calvario de intentar conseguirla con un chaval de 20 a?os que es millonario gracias a su especial habilidad para patear una pelota¡±. Parafraseando a Bukowski, ¡°a no ser que salga espont¨¢neamente de tu coraz¨®n y de tu mente y de tu boca y de tus tripas arrastrarte por una entrevista, no lo hagas / Si est¨¢s intentando escribir como le gustar¨ªa a un departamento de prensa, olv¨ªdalo¡±. As¨ª que sin Annapurna a la vista, ni cerveza de por medio para este periodista, lo ¨²nico que sali¨® espont¨¢neamente de m¨ª fue dar al ¡®play¡¯ de las recomendaciones del Youtube a una entrevista de David Broncano a Carlos Soria en OhMyLOL (2015). Sab¨ªa que estaba procrastinando, pero me pareci¨® interesante ver el papel serio de entrevistador de Broncano (y muy bueno), m¨¢s all¨¢ de La Resistencia. Y en la charla sali¨® el nombre de Carlos Su¨¢rez, cuando hablaron de la modalidad de Free BASE (escalada integral en roca sin ning¨²n dispositivo de seguridad m¨¢s que un paraca¨ªdas). Fue el primero en introducir en nuestro pa¨ªs esta modalidad, que a¨²na el salto BASE (del acr¨®nimo formado por los t¨¦rminos en ingl¨¦s Building, Antenna, Span y Earth) y la escalada integral (sin cuerda). Y ah¨ª es cuando sali¨® rugiendo de m¨ª la posibilidad de ir a por esa materia prima llamada entrevista. Hablar con alguien que tenga mucho que decir, porque adem¨¢s es uno de esos conferenciantes que se dedican a motivar a personas y trabajadores rollo V¨ªctor K¨¹ppers. Su deporte no consiste en jugar con una pelota sino con su propia vida. Aun sabiendo que este reportaje ser¨¢ sepultado por otros art¨ªculos con cientos de miles de usuarios ¨²nicos y que ser¨¢, incluso, rechazado por lectores que verdaderamente tengan un ¨®ptimo conocimiento de la materia, fue tan f¨¢cil acceder al protagonista como ir a la nevera y abrirse una cerveza. Son oportunidades que nunca hay que dejar escapar. No hace falta irse al Annapurna para sentirse pleno ya que muchas de nuestras mejores oportunidades pasan por delante de nuestras narices sin darnos cuenta, lo que pasa es que hay que desprenderse de la mochila del saco de prejuicios que llevamos encima. Eso es un riesgo. Para algunos un riesgo es tirar un penalti a lo Panenka jug¨¢ndote una Eurocopa; para otros, escalar 200 metros de pared vertical y luego tirarte en paraca¨ªdas; y para otros, decirle no a un jefe. La acepci¨®n del riesgo es tan variada como la del ¨¦xito. Por eso traemos hoy la figura de Carlos Su¨¢rez. La monta?a como excusa para reflexionar sobre asuntos m¨¢s trascendentales. Pinchen en el trailer de Free Base en Riglos y luego continuamos.
Despu¨¦s de ver este video recuerdo lo insignificante que es uno cuando el verano pasado le preguntaba a mi hermano de cordada, Alberto Llerena, sobre la fiabilidad de la cuerda o el arn¨¦s antes de empezar una trepada en roca de 10 metros tras revisarme el nudo de ocho. ¡°T¨² sube y mejor no te caigas. Y si falla, tu familia se podr¨¢, al menos, hacer un buen chal¨¦ con la indemnizaci¨®n¡±, me dec¨ªa. Del nivel 1 de riesgo, aventura o perfeccionamiento hasta el 10 aparece un denominador com¨²n: siempre habr¨¢ alguien mejor que t¨². El ¨¦xito simplemente puede ser aceptar tu nivel para no asumir m¨¢s peligros de los que persigue tu yo interior. Parte de la adrenalina del deporte se basa en esa capacidad de superaci¨®n, pero sin llegar a destruirte por el camino (literal o figuradamente). Todas esas etapas de superaci¨®n (y ego) las quem¨® hace mucho tiempo el madrile?o Carlos Su¨¢rez (1972), que fue campe¨®n de Espa?a de escalada deportiva en la modalidad de velocidad en tres ocasiones (tiene un grado de 8A y 8B+ trabajado), equipador de rutas, escalador de grandes paredes, paracaidista en el Himalaya donde en el Laila Peak (6096 m.) y Torre Sin Nombre (6251 m.), as¨ª como en multitud de otros picos m¨ªticos. Ha participado en cinco pel¨ªculas y ha escrito cuatro libros. En definitiva, un t¨ªo de la escuela ¡®old¡¯ del alpinismo y la escalada, que como cientos de personas en los 80 se engancharon a este mundillo con las historias de Al Filo de lo Imposible (cuando antes en la TV no viv¨ªa bajo el yugo del share de audiencia, que ahora dominan programas como Hombres, mujeres y viceversa o la Isla de las Tentaciones, porque seg¨²n los reyes de los datos es lo que la gente quiere ver). ¡°Cuando estaba a punto de cumplir 14 a?os me castigaron mis padres un fin de semana sin salir por estar viendo el programa. Aquello me enganch¨® porque nos descubri¨® el mundo de las monta?as. Luego, con 19 a?os, tuve la oportunidad de participar en el formato pel¨ªcula ¡®Tras las huellas¡¯ escalando en solitario la cara oeste del Naranjo de Bulnes (Picos de Europa) y luego descender en parapente con Laureano Casado¡±, rememora. De alguna manera segu¨ªa los pasos de Jean-Marc Boivin (1951-1990), que fue la primera persona en volar en parapente desde la cima del Everest y un pionero de los deportes extremos (muri¨® por las heridas sufridas luego de que BASE saltara del Salto ?ngel en Venezuela, la cascada m¨¢s alta del mundo). Ya no bastaba con escalar paredes sin cuerda, sino tambi¨¦n volar. ?Qu¨¦ es lo que buscan personas como Carlos Su¨¢rez en las monta?as y en las alturas que a¨²n no haya encontrado a¨²n? ¡°En el fondo es una b¨²squeda de la perfecci¨®n. Te metes en una espiral que no tiene fin. Un equilibrio con una serie de ingredientes: encontrar un lugar ¨²nico, que sea algo aut¨¦ntico al tipo de aventura que buscas, que tenga cierta est¨¦tica y que sea m¨¢s interesante que extremadamente dif¨ªcil¡±, analiza.
Pero muchas veces para alimentar los sue?os hace falta dinero. Seg¨²n datos del anuario de la Federaci¨®n Espa?ola de Deportes de Monta?a y Escalada, se han pasado de 73.541 licencias, en 2005, a 119.251, en 2019. Ocupa la quinta posici¨®n en Espa?a en el r¨¢nking de federados por detr¨¢s del golf (269.743), caza (335.474), baloncesto (385.635) y f¨²tbol (1,1 millones). El hecho de que en los pr¨®ximo Juegos Ol¨ªmpicos de Tokio veamos la escalada (en tres modalidades diferentes: velocidad, b¨²lder y dificultad para un solo conjunto de medallas en la prueba combinada) es una muestra de este auge deportivo. ¡°Es un hecho hist¨®rico que va a cambiar parte de la escalada. Alpinismo y escalada en pared van a seguir coexistiendo, aunque no de deja de ser un poco extra?o que ahora parezcan deportes totalmente diferentes¡±, piensa Carlos. La escalada se va colando en la l¨ªnea mainstream del deporte, pero vivir de ella se antoja sumamente dif¨ªcil, y m¨¢s en la d¨¦cada de los 80 cuando apareci¨® Carlos Su¨¢rez, que hoy en d¨ªa trabaja para Adidas. ¡°Mi experiencia personal dice es que cuando tu abandonas todo para vivir con una fuerza de lo aut¨¦ntico, lo que eres por encima de todas las cosas, eso siempre trae consecuencias. Siempre he querido vivir de la escalada. Se puede vivir durante algunos a?os, como lo hice yo siempre que tengas tus necesidades b¨¢sicas bien cubiertas. Yo hice trabajos verticales, recog¨ªa la basura con un cami¨®n por las noches, estudi¨¦ tres a?os de Pol¨ªticas, me centr¨¦ en el estudio del ingl¨¦s... Todo lo que hice fue para no hipotecar mi libertad. Ni por asomo cuando empec¨¦, por ejemplo, pens¨¦ que una marca como Adidas se iba a fijar en m¨ª. Ahora he hecho tres M¨¢sters MBA para conocer mejor el mundo de la empresa y c¨®mo traspasar los conocimientos que me aport¨® la monta?a. Adidas me empez¨® patrocinando y al final acab¨¦ trabajando para ellos. Los sue?os en el mundo del alpinismo son siempre tan grandes que nunca tienes recursos suficientes¡±, confiesa. Aparece aqu¨ª otro de los riesgos no visibles del alpinismo, como en otros muchos deportes: la supervivencia econ¨®mica. Primero hay que tener unas condiciones f¨ªsicas m¨¢s que privilegiadas, ser un aut¨¦ntico toro para cumplir aquel dicho de ¡°si est¨¢s delgado y no es de hambre es que est¨¢s m¨¢s duro que un alambre¡±. Fuerza y resistencia porque en la escalada es m¨¢s importante la potencia en las piernas que incluso en los brazos. Carlos Su¨¢rez, que complet¨® corriendo junto al atleta de monta?a Luis Alberto Hernando el Espol¨®n de los Franceses, Horcados Rojos y Sur Naranjo de Bulnes en menos de seis horas, fue el primero en Espa?a en encadenar v¨ªas de octavo grado sin cuerda para pasarse luego al Free BASE, que en EE UU lo implant¨® Dean Potter en su querido Yosemite (hace ahora justo seis a?os del fallecimiento de su amigo, al que conoci¨® en la Patagonia y le ense?¨®, entre otras cosas, el slackline). ¡°El Free BASE consiste en escalar en solitario, sin cuerda, con el paraca¨ªdas a la espalda, para abrirlo en caso de ca¨ªda. Uno de los problemas de esta idea est¨¢ en que, en los primeros metros, hasta que coges una altura de ochenta metros aproximadamente, el paraca¨ªdas no te sirve para nada. Cuando ya decides saltar empiezas en una velocidad cero, donde podr¨ªas escuchar a alguien hablar hasta que desaparece su voz. que comienza con una velocidad cero y alcanza a los diez segundos la velocidad terminal, una rapidez que supera los 100 km por hora¡±, detalla. Un deporte tan caro como peligroso: ¡°Hay que hacer un curso de paracaidismo que cuesta una media de 1400 euros. Despu¨¦s hay que hacer un m¨ªnimo de 250 saltos de avi¨®n antes de prepararte para tu primer salto BASE. Si tu nivel de conciencia es alto, est¨¢s acostumbrado a ciertas situaciones de riesgo y no est¨¢s loco del todo, se pueden reducir estos saltos sensiblemente con un buen entrenamiento espec¨ªfico. Se recomienda hacer saltos dirigidos hacia el salto BASE, esto es bas¨¢ndose en la precisi¨®n al aterrizar, hacer muchas derivas tratando de concentrarse en la m¨¢xima distancia en la que uno se puede trasladar, apertura del paraca¨ªdas¡¡±. Del salto base pas¨® tambi¨¦n a la modalidad del wingsuit (con traje de alas), pero hace ya casi siete a?os que un suceso le hizo replantearse la cuota de riesgo que deb¨ªa seguir asumiendo en su vida: ¡°Fue en el momento que falleci¨® Dario Barrio. Era muy amigo m¨ªo y estamos muy unidos con diferentes planes de futuro. Ah¨ª hubo que dar marcha atr¨¢s a todo esto y replantearnos el tipo de aventura, que es algo m¨¢s personal y depende de cada uno. Siempre el juego es interesante probarlo y ser lo suficientemente inteligente para parar. El hecho de jugar con nuestra vida no creo que tenga mayor o menor m¨¦rito. Hay mucho escalador arriesgando inconscientemente. Lo interesante es no dejarse arrastrar mucho por tu propio ego y aportar algo a esta sociedad. No me considero nadie especial por haber hecho lo que he hecho. Dec¨ªa Jorge Egocheaga que el recuerdo de una persona dura como mucho dos generaciones. Estoy 100% de acuerdo con ¨¦l, como con Jordi Corominas que dice si en la monta?a es c¨®modo probablemente no sea alpinismo¡±. El ¨¦xito, en este caso, es seguir vivos. Poder contarlo. Para Carlos, en sus conferencias. Para el que escribe, en esta ventanita. Que hayan le¨ªdo hasta aqu¨ª fue nuestro particular Annapurna. Si se han saltado los tres p¨¢rrafos, habr¨¢n sido inteligentes para no caer en otro terrible riesgo como es el aburrimiento, pero no se vayan por favor sin pinchar este ¨²ltimo v¨ªdeo con los altavoces de su m¨®vil o PC con volumen...
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