WWE 2K Battlegrounds
- PlataformaSTD5.7PC5.7XBO5.7NSW5.7PS45.7
- G¨¦neroAcci¨®n
- DesarrolladorSaber Interactive
- Lanzamiento18/09/2020
- Editor2K Games
WWE 2K Battlegrounds, an¨¢lisis. La lucha libre nos vuelve a romper el coraz¨®n
A falta de WWE 2K21, analizamos la ¨²nica propuesta de wrestling de este a?o, un juego alocado, exagerado y divertido, pero tambi¨¦n muy pobre y simpl¨®n.
Superar una ruptura lleva tiempo. Nunca es f¨¢cil. Y si llevas casi veinte a?os con tu pareja, pues imag¨ªnate. Que se lo digan si no a 2K Games, que en 2019 puso fin a su relaci¨®n con Yuke's, la desarrolladora japonesa que ven¨ªa encarg¨¢ndose de los juegos de la WWE desde aquel m¨ªtico WWF SmackDown! del a?o 2000. No sabemos qui¨¦n rompi¨® con qui¨¦n, ni tampoco los motivos, pero s¨ª conocemos sus consecuencias. Porque todos hemos tenido alguna ruptura tras la que hemos fingido estar bien delante de nuestros amigos. Hemos hecho como si no pasara nada y nos hemos lanzado a llenar el vac¨ªo de nuestro coraz¨®n con otras personas. El que invent¨® la dichosa frasecita de que ¡°hay m¨¢s peces en el mar¡± deber¨ªa estar entre rejas. Cuando aceptamos que s¨ª, que en realidad pasa algo, estamos tristes y necesitamos tiempo, a menudo ya hemos dejado varios cad¨¢veres por el camino. Para entonces ya hemos hecho da?o a terceros y nos hemos sumergido en un par de relaciones insulsas que nadie terminaba de entender. Y eso es justamente por lo que est¨¢ pasando 2K Games.
Un divorcio traum¨¢tico
El a?o pasado, la compa?¨ªa sac¨® WWE 2K20 como si no hubiera sucedido nada. Como si a¨²n estuviera con Yuke's, o como si creyera que cualquier otro estudio pod¨ªa sentarse a los mandos de la serie, hacer una entrega en menos de un a?o y obtener un resultado parecido al habitual. Cuando 2K Games acept¨® sus verdaderos sentimientos ya era tarde. Los consumidores nos hab¨ªamos comido un t¨ªtulo mediocre como ¨¦l solo, con m¨¢s bugs de los que somos capaces de contar y fen¨®menos paranormales a su alrededor, como el extra?o caso de un apartado gr¨¢fico que iba hacia atr¨¢s como los cangrejos y se ve¨ªa peor que el de la entrega de 2018. Aquello era digno de Cuarto Milenio. La conclusi¨®n de nuestro an¨¢lisis fue clara, ¡°la f¨®rmula se ha agotado¡±, y las valoraciones de los usuarios en Metacritic hablan por s¨ª solas. O m¨¢s que hablan, suman, y suman un 1.5 de nota media. La situaci¨®n encima tuvo su intr¨ªngulis, porque la desarrolladora que 2K eligi¨® para sustituir a Yuke's era la principal colaboradora de ¨¦sta, Visual Concepts, quien ven¨ªa ayudando en los juegos de la licencia desde WWE 2K14. Para m¨¢s de uno, 2K Games le puso los cuernos a Yuke's con su mejor amiga.
Aquella primera fase del duelo pas¨®. Hubo disculpas por la calidad del juego y hasta se improvis¨® un programa de reembolsos. Entonces 2K Games empez¨® a echar de menos a Yuke's. Dej¨® de recordar que los t¨ªtulos de ¨¦sta se hab¨ªan estancado y que nunca terminaron de alcanzar el nivel de otras franquicias deportivas. Olvid¨® que Visual Concepts es la principal art¨ªfice de la saga NBA 2K y que uno de los motivos de su elecci¨®n era subir el nivel de los juegos de wrestling y equiparar ambas licencias. En la memoria de 2K solo hab¨ªa espacio para los buenos momentos. Para esos m¨ªnimos de calidad m¨¢s que aceptables y esos notables entre los que siempre se mov¨ªa la WWE en las valoraciones de prensa y p¨²blico. La desarrolladora crey¨® que nunca m¨¢s volver¨ªa a encontrar el amor y cancel¨® WWE 2K21. Pero esta segunda fase de depresi¨®n y autodestrucci¨®n tambi¨¦n qued¨® atr¨¢s. La compa?¨ªa entr¨® as¨ª en la tercera, la cual puede adoptar muchas formas distintas y depende de cada persona. Unos se apuntan al gimnasio y otros a yoga, cursos de baile o cocina. El caso es que en ella todos quieren reinventarse, redescubrirse, probar cosas nuevas y hacer aquello que siempre tuvieron en mente, pero para lo que nunca sacaron tiempo. Desean demostrar que han cambiado, que son mejores y que la otra persona se lo pierde. Pero est¨¢ todo tan forzado, tan impostado y su objetivo final es tan triste (que la otra persona se entere de su transformaci¨®n y se arrepienta), que a menudo lo que en realidad se hace es el rid¨ªculo.
Reinventando el modo de entender la WWE
Para 2K Games esta tercera fase ha tomado la forma de WWE 2K Battlegrounds, un juego radicalmente distinto al de los ¨²ltimos a?os. Una prueba, un experimento. Un t¨ªtulo que grita con tanta fuerza sobre su transformaci¨®n que hasta parece sospechoso. Adi¨®s a los gr¨¢ficos realistas y hola a los mu?ecos y escenarios de aspecto cartoon. Los combos y la ambici¨®n de ser un simulador ceden paso a un enfoque mucho m¨¢s arcade y tremendamente simpl¨®n, pero que por ejemplo permite locuras como manejar cabras por radiocontrol y alimentar con nuestros rivales a los cocodrilos de un pantano. Se acab¨® ese modo carrera en la l¨ªnea de FIFA y NBA 2K, nada de secuencias entre bambalinas y por supuesto ni hablar de tener que afrontar situaciones realistas, como conversaciones con la prensa y sesiones de fotos. Ahora el modo campa?a es un c¨®mic en el que manejamos a nuevos y desconocidos luchadores con pintas de superh¨¦roe. Con ellos lo ¨²nico que hacemos es luchar, luchar y luchar. Volvernos de piedra, rodear nuestros pu?os de fuego y lanzar rayos como si fu¨¦semos Zeus. La propuesta es tan diferente que uno no puede evitar echar un vistazo a qui¨¦n la firma esta vez. Se trata de Saber Interactive, en cuyo cat¨¢logo encontramos la mejor analog¨ªa posible: NBA Playgrounds. Aquel fue a NBA 2K lo mismo que Battlegrounds es a WWE 2K. Un hijo rebelde, un hermano peque?o atractivo y peligroso que tiene empapelada su habitaci¨®n con p¨®steres de WWE Legends, juego al que tambi¨¦n recuerda y evoca.
Gym y contacto 0
De esa obsesi¨®n por demostrar que lo has superado y que eres una persona completamente nueva se pueden rescatar algunas cosas. Al fin y al cabo salir a correr, apuntarse a clases de pintura o empezar un huerto en la azotea tambi¨¦n tiene sus ventajas. En busca de una nueva identidad, WWE 2K Battlegrounds est¨¢ lleno de novedades, pero muchos de sus cambios eran necesarios y le han sentado bien a la marca. Quiz¨¢s el precio reducido sea el m¨¢s evidente, pues el juego sale de lanzamiento a 40€. Despu¨¦s vendr¨ªa ese simp¨¢tico look cartoon, que nos presenta a los luchadores como figuras de acci¨®n y los rodea de escenarios muy variados y coloridos. El Unreal Engine envuelve a los personajes con toda clase de efectos y por momentos hasta parecen transformarse en saiyans, con auras de colores el¨¦ctricos flotando a su alrededor. Le sienta de maravilla. En tercer lugar mencionar¨ªamos su nueva jugabilidad, mucho m¨¢s sencilla y desenfadada. La diferencia entre una mano experta y una reci¨¦n llegada se ha recortado enormemente. Cualquiera puede hacer un movimiento especial y al poco de subirnos al ring ya estaremos dando guerra. Realizar agarres, contraataques y poner en marcha las habilidades es tan f¨¢cil como pulsar un bot¨®n o girar levemente el joystick derecho. En ese sentido es un juego muy agradecido en cooperativo local. Cualquier invitado a nuestra casa pillar¨¢ los conceptos en cuesti¨®n de minutos y aceptar¨¢ el desaf¨ªo encantado. Es accesible e intuitivo. Pero sin duda lo m¨¢s destacado es su conversi¨®n a hip¨¦rbole con patas. El juego es la exageraci¨®n de algo ya de por s¨ª exagerado como es la lucha libre. Lleva cada rasgo al extremo y roza la parodia, pero es gracias a ello que resulta fresco y divertido.
Tras unas cuantas partidas, a nadie le extra?ar¨¢ que nos subamos a un helic¨®ptero, nos vayamos volando del escenario y ejecutemos un ataque a¨¦reo desde el cielo. Tampoco que metamos la mano debajo de la lona y saquemos una Harley Davison con la que golpear a nuestro rival. Y por supuesto, el pan de cada d¨ªa ser¨¢n los enfrentamientos en los que, en lugar de un malet¨ªn con dinero en el centro del escenario, estemos rodeados de una valla electrificada de la que cuelgan fardos de billetes que debemos recolectar. Es normal que el cuadril¨¢tero se rompa y venga abajo, que aparezcan animales en mitad del la batalla y que podamos usar barriles explosivos como arma. As¨ª son las cosas en WWE 2K Battlegrounds. Los movimientos y las normas se retuercen y exageran. Randy Orton nunca salt¨® tan alto, Andr¨¦ el Gigante nunca peg¨® tan fuerte y el Enterrador nunca estuvo tan cerca de abollar el ring con la cabeza de sus adversarios.
Las famosas reca¨ªdas
El gran peligro de esta ¡°fase tres¡± posterior a una ruptura es que todo parece positivo, pero no lo es. Porque te apuntas al gimnasio, es cierto, pero por la noche te metes un bol de helado de chocolate y lloras viendo un nuevo marat¨®n de pel¨ªculas rom¨¢nticas. Te montas un huerto urbano, s¨ª, pero te olvidas de ¨¦l a los dos d¨ªas y los tomates se ahogan con la primera lluvia. Vas a clase de pintura, correcto, pero solo a la sesi¨®n de muestra, la gratuita, la que no te obliga a pagar por los pinceles. Despu¨¦s cambias el ¨®leo por el bar y la cerveza. Parece que lo est¨¢s superando, pero no. Tropiezas una y otra vez. A WWE 2K Battlegrounds le pasa igual.
Sale a precio reducido, pero viendo que est¨¢ a rebosar de micropagos y que tiene mucho menos contenido que las anteriores entregas, la reducci¨®n se antoja peque?a. Tiene menos modos, luchadores y opciones que de costumbre y su formato recuerda al de algunos free to play. Cuenta con un atinad¨ªsimo aspecto cartoon, pero admit¨¢moslo, es mucho menos exigente y por eso no entendemos que ni a¨²n as¨ª se haya conseguido una tasa de im¨¢genes por segundo estable. Hay tirones, petardea y no siempre va fluido. Por no hablar de los continuos fallos en el sistema de colisiones, la nula inteligencia artificial y ¡°los teletransportes m¨¢gicos¡± que protagonizan los personajes para colocarse en el sitio adecuado cuando ejecutamos un movimiento especial. Los recortes incluso se han llevado por delante los combates con m¨¢s de 4 personas (antes los hab¨ªa de 5, 6 y 8). Bueno, se han llevado eso y la expresividad y correcta recreaci¨®n de algunos miembros de plantel, sobre todo femeninos. Con la jugabilidad sucede parecido. Es m¨¢s accesible e intuitiva, pero al cabo de unas horas se le ven las costuras. Carece de cualquier tipo de profundidad y acaba siendo un machacabotones. M¨¢s que un juego de lucha parece un brawler. Uno de ritmo m¨¢s bien tirando a lento y bastante tosco en animaciones. Para un par de partidas cuando los amigos vienen a casa est¨¢ muy bien, cumple, pero online y en solitario no aguanta el tipo. Casi todos los personajes son id¨¦nticos. Apenas se diferencian en fuerza y velocidad, rasgos que se intuyen en base a su altura. Los m¨¢s altos cogen objetos pesados que los otros no pueden y los m¨¢s bajitos saltan m¨¢s. Punto. No existen muchas m¨¢s diferencias a pesar de que tienen distinta valoraci¨®n y se dividen en varias categor¨ªas (superstar, campa?a, altos vuelos, t¨¦cnico, especialista, camorrista y poderoso). Seg¨²n pasan las horas vemos que todas sus novedades y mejoras tienen trampa.
El m¨¢s claro y doloroso de sus espejismos reside en el men¨² del juego. De primeras impresiona y parece tener modos para aburrir, pero si lo comparamos con anteriores es f¨¢cil sonrojar a WWE 2K Battlegrounds. Y no solo en n¨²mero, sino tambi¨¦n en cuanto a calidad de los mismos. Su modo historia, por ejemplo, se nos vend¨ªa como una de las grandes bazas del t¨ªtulo y en el fondo es poco m¨¢s que un tutorial. Vamos probando todos los tipos de combate, los distintos escenarios y los nuevos luchadores que 2K se ha inventado espec¨ªficamente para esta entrega. La dificultad va subiendo poco a poco y entre pelea y pelea podemos leer varias p¨¢ginas de c¨®mic a trav¨¦s de las cuales se nos narra la historia. Una historia anecd¨®tica, olvidable y un tanto rid¨ªcula. Consta de 120 eventos, que parecen muchos, pero ese n¨²mero es otra trampa, pues a veces un evento es solo la lectura de un c¨®mic y los hay que consisten ¨²nicamente en darnos una recompensa. Nosotros los hemos completado todos en apenas un par de tardes. No pasar¨¢ de las tres, cuatro horas. Est¨¢ a a?os luz del extinto modo ¡°Mi Carrera¡±. Sus protagonistas se han hecho para que juguemos con todos los tipos de personaje (hombres; mujeres; altos, resistentes y fuertes; peque?os, saltarines y r¨¢pidos). Entendemos la decisi¨®n, pero habiendo tan pocas diferencias, carece de sentido y le resta toda la gracia al editor de personajes. Porque seguimos contando con la opci¨®n de crear a nuestro propio heredero al cintur¨®n, pero ¨¦ste solo sirve para jugar al modo ¡°Desaf¨ªo de Battleground¡± que consiste en combate tras combate contra la IA para ir subi¨¦ndole las estad¨ªsticas. No hay historia ni contexto, tampoco variedad. Es repetitivo, aburrido y luego encima no lo podemos usar online, as¨ª que pierde la gracia. Esto ¨²ltimo se repite con el editor de escenarios, con el a?adido de que adem¨¢s en su caso solo podemos crear un m¨¢ximo de tres canchas.
Por lo dem¨¢s, nada de repetir los eventos hist¨®ricos de la WWE, nada de un modo campa?a espec¨ªfico de la WWE femenina y nada de torres de desaf¨ªos centradas en cada tipo de partida. Hemos pasado de alrededor de 50 armas a solo cuatro o cinco de ellas (y perdiendo su respectivo editor por el camino). De igual manera, y como dec¨ªamos, nos hemos quedado sin modos para 5, 6 u 8 luchadores al mismo tiempo. Tambi¨¦n sin las partidas con h¨¢ndicap. No se pueden juntar g¨¦neros, no existen modos Extreme Rules, ni Ladder, ni Table, ni TLC, ni Fall Counts Anywhere, ni tantos y tantos otros que hab¨ªa en el pasado. La cifra de luchadores ronda los 70, y teniendo en cuenta que muchos son poco m¨¢s que skins, no entendemos c¨®mo no se ha alcanzado la de a?os pasados, muy por encima del centenar de ellos. Incluso las voces de los comentaristas (en ingl¨¦s sin subtitular) repiten cada dos por tres los mismos comentarios, tal y como pasa en los men¨²s con las pocas canciones que hay, m¨¢s machaconas que la banda sonora de una tienda de ropa. Si uno saca la lupa el recorte es demencial. Es como aquel cap¨ªtulo de Como conoc¨ªa a vuestra madre (serie a evitar tras una ruptura) en el que su protagonista se niega a ir a los restaurantes en los que podr¨ªa coincidir con su pareja... y acaba no pudiendo ir a ninguno de Nueva York. En 2K Battlegrounds sucede lo mismo. Vale que no quieras heredar nada de tu etapa cerrada. Vale que no quieras coincidir y que busques algo nuevo y propio, pero si eso supone perder tant¨ªstimo contenido, variedad y profundidad, pues lo mismo es como para pens¨¢rselo dos veces. Habr¨¢ quien crea que no es justo comparar este spin off arcade con la saga principal, con los WWE 2K, pero es que Battlegrounds no aguanta la comparativa ni siquiera con los juegos de su estilo, como NBA Playgrounds 2 y WWE All Stars.
?Party game o juego servicio?
Pero la mayor contradicci¨®n reside probablemente en el enfoque de su propuesta. Si WWE 2K Battlegrounds es un party game que brilla con amigos y cuando jugamos partidas cortas y muy dilatadas en el tiempo, ?por qu¨¦ los luchadores m¨¢s famosos (los que querr¨¢n usar nuestras visitas) est¨¢n bloqueados de primeras? ?Por qu¨¦ hay que farmear en solitario para desbloquearlos? Bueno, es eso o pagar Golden Bucks, que es la moneda que hay dentro del propio juego. Un nuevo eufemismo para decir micropago. Carece de sentido insistir en el singleplayer cuando es el apartado m¨¢s pobre. Siendo la IA tan justita y las partidas tan simples y repetitivas, el t¨ªtulo tendr¨ªa que apostarlo todo al multijugador, no solo local sino tambi¨¦n online... ?pero sin embargo Battlegrounds carece de matchmaking en muchas de sus secciones! Si queremos disfrutar del multijugador en un tipo de partida en concreto tendremos que hacerlo o de manera local o con alguien de nuestra lista de amigos a trav¨¦s de invitaci¨®n. El matchmaking solo est¨¢ disponible para un modo llamado ¡°torneos¡±, que son partidas con las normas predefinidas y que van rotando y cambiando cada d¨ªa. Es una pena porque la mayor parte de las veces los torneos son solo de partidas 1 vs 1. Son poco vistosos, cansinos y a menudo desigualados. En vez de realzar el caos y la exageraci¨®n de su propuesta nos mete en escenarios cerrados, sin elementos externos y para combatir a ¡°nivel profesional¡±, que es lo mismo que spamear lanzamientos una y otra vez hasta cargar el superpoder. Adem¨¢s el online ha eliminado los rangos de prestigio, las placas laterales y la opci¨®n de usar a nuestras creaciones y luchar contra otras. Es decir que no hay ning¨²n tipo de sensaci¨®n de progresi¨®n. Solo hay una hoja de estad¨ªsticas que marca cuantos torneos ganamos. No existen demasiados motivos para engancharse, por m¨¢s que se nos haya prometido a?adir m¨¢s de 60 nuevos luchadores v¨ªa DLC en el futuro. ?Por qu¨¦ convertir esto en un juego - servicio y no dejarlo en una cana al aire y centrar todos los esfuerzos en la entrega del a?o que viene?
Coraz¨®n part¨ªo
Dir¨ªamos que no entendemos la raz¨®n de muchas de estas decisiones, pero en el fondo s¨ª que lo hacemos. Porque, como dec¨ªamos al principio, superar una ruptura lleva tiempo. Nunca es f¨¢cil. Y si llevas casi veinte a?os con tu pareja, pues imag¨ªnate. La WWE est¨¢ aprendiendo a vivir sin Yuke¡¯s y al principio puede ser dif¨ªcil, lo sabemos. Pero estos palos de ciego son necesarios. A¨²n con nuestras innumerables reservas, nos alegramos de tener a 2K Battlegrounds entre nosotros. Mejor eso que dejar la licencia en un caj¨®n bajo llave y olvidarse de ella. Adem¨¢s, el ¨²nico modo de ir de la cima de una monta?a a otra cima cercana es pasar por el valle que las separa. Bajar y volver a subir. El t¨ªtulo de hoy est¨¢ m¨¢s pulido que WWE 2K20, resultando m¨¢s entretenido y hasta disfrutable en su justa medida. Es decir que ya vamos hacia arriba. El juego puede haber servido para ganar tiempo hasta WWE 2K22 y matar el mono de lucha libre entre sus fans m¨¢s ac¨¦rrimos. Y si 2K Games toma nota, tambi¨¦n puede sacar de aqu¨ª una saga secundaria la mar de interesante. Un WWE 2K Jam. Cualquiera de las opciones es positiva. As¨ª que el ¨²nico consejo que podemos darle para terminar de pasar p¨¢gina es que siga adelante. Que siga intent¨¢ndolo.
Conclusi¨®n
M¨¢s que una opci¨®n real dentro del g¨¦nero, WWE 2K Battlegrounds parece un intento de salir al paso y tener algo, lo que sea, para ofrecer este a?o a los fans de la lucha libre. Es como si despu¨¦s de su ruptura con Yuke¡¯s, 2K Games no supiera muy bien qu¨¦ hacer con la franquicia y anduviera probando cuanto se le ocurre. El resultado de esas pruebas y experimentos es una entrega menor, con recortes abrumadores en cuanto al contenido y la calidad del mismo (ese modo historia y su matchmaking no pueden ser m¨¢s decepcionantes). Al final queda un brawler demasiado simpl¨®n y repetitivo al que se le ven todas las costuras tras un par de horas. Solo funciona como party game para cuando tenemos visita porque es accesible, f¨¢cil y al menos de primeras, divertido. Sin embargo, en vez de estar enfocado as¨ª, como un party game, el t¨ªtulo est¨¢ lleno de pol¨ªticas que le van a la contra y ensucian esa idea, v¨¦ase el caso de los micropagos. 2K ha hecho hallazgos interesantes, como los gr¨¢ficos de aspecto cartoon y los nuevos y exagerad¨ªsimos disparates que ahora pueden ocurrir en combate, pero deber¨ªa haberlos potenciado m¨¢s y acompa?ado mejor. Tal cual est¨¢, la experiencia acaba siendo la de un machabotones insulso y solo recomendable para los fans de la licencia.
Lo mejor
- Sale a precio reducido.
- El apartado gr¨¢fico cartoon le sienta genial.
- Jugabilidad desenfadada, accesible e intuitiva.
- Algunos de los disparates que ahora ocurren en los combates.
Lo peor
- Est¨¢ plagado de micropagos.
- El recorte en n¨²mero de personajes y modos de juego es demencial.
- La historia es floj¨ªsima. Echamos de menos el modo Mi Carrera.
- Acaba convirti¨¦ndose en un brawler machacabotones demasiado lento, tosco y repetitivo.
- Tiempos de carga, tirones, reducci¨®n del n¨²mero de personas en pantalla...
- Un matchmaking muy pobre y limitado.
- A medio camino entre party game y juego servicio.
Mejorable
Puede tener elementos aceptables y entretener, pero en general es una experiencia que no dejar¨¢ huella. S¨®lo recomendable en caso de sequ¨ªa de este g¨¦nero de juegos.