Divinity: Original Sin 2, An¨¢lisis PS4

Larion Studios nos deleita con su obra m¨¢s excelsa en una versi¨®n definitiva y adaptada a consolas de nueva generaci¨®n que no dejar¨¢ a nadie indiferente.

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Tras el tortuoso camino iniciado con Divinity: Original Sin y Larian Studios al borde de la bancarrota, la empresa belga supo afrontar su continuaci¨®n gracias a un mayor dominio sobre el micromecenazgo y las posibilidades del acceso anticipado. Divinity: Original Sin 2 fue lanzado para ordenadores compatibles hace justo un a?o y, como ya ocurri¨® con su primera entrega, el videojuego recibi¨® una actualizaci¨®n que mejor¨® sustancialmente la propuesta tanto en contenido como en comodidad. Ahora, ¨¦sta Definitive Edition llega a consolas PlayStation 4 -versi¨®n analizada- y Xbox One con las mismas mejoras aplicadas a la versi¨®n de compatibles as¨ª como con un control adaptado a mandos de juego.

Control-ando la adaptaci¨®n

Tenemos mucho que agradecer tanto a Larian Studios como a Bandai Namco -distribuidora- por animarse a traer uno de los RPG m¨¢s importantes de la ¨²ltima d¨¦cada a consolas. Un videojuego de rol a la vieja usanza con m¨²ltiples comandos y posibilidades es harto dif¨ªcil de llevar a un mando que apenas cuenta con ocho botones en contraposici¨®n de los m¨¢s de cien pulsadores de un teclado habitual QWERTY. La tarea era tit¨¢nica pero tal y como nos contaba Swen Vincke, fundador del estudio y director del t¨ªtulo, pasaron un a?o redise?ando los controles para mandos de juego porque se negaban a pensar que un usuario de consola fuera incapaz de jugar a un RPG. Agradecemos pues que tanto desarrolladora como distribuidora hayan apostado por el t¨ªtulo en consolas aplicando un esfuerzo extra sobre el original con el fin de que todos podamos disfrutar de ella.

Si bien Divinity: Original Sin 2 Definitive Edition podr¨ªa considerarse en muchos aspectos una expansi¨®n que a?ade contenidos al original, lo cierto es que la base sigue siendo la misma y, por ello, os invitamos a pulsar este enlace que os llevar¨¢ al an¨¢lisis publicado por esta santa revista de la mano de Francisco Alberto Serrano donde ahonda m¨¢s en otros aspectos como historia, sistema de juego y otras bondades del videojuego.

La Edici¨®n Definitiva

Divinity: Original Sin 2 Definitive Edition toma la idea inicial y la expande para a?adir m¨¢s contenido, m¨¢s modos de juego y, al mismo tiempo y tras recoger el feedback de los jugadores, cambiar algunos tramos de la historia que no encajaban bien con el resto de la trama. Uno de ellos es sin duda aqu¨¦l que se daba hacia las ¨²ltimas horas de juego donde la diversi¨®n quedaba relegada a un segundo lugar en pos de una acci¨®n algo m¨¢s neutra. Aunque este punto pueda parecer insignificante, alterar un peque?o tramo de la narrativa implica adherir a la misma nuevas misiones, nuevas l¨ªneas de di¨¢logo y personajes, cosa que sucede en esta edici¨®n definitiva.

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Al margen de todo esto se ha a?adido un modo llamado Historia para aquellos que no sean extremadamente duchos en el g¨¦nero RPG. Aqu¨ª los jugadores cuentan con una bonificaci¨®n en el sistema de da?o y en la vitalidad o diferentes habilidades que facilitan bastante nuestro avance en la aventura. Durante esta tambi¨¦n encontraremos nuevos encuentros con enemigos y las frecuentes revisiones de da?o en habilidades, balanceo de las mismas o cambios en la econom¨ªa del juego. Lo normal para un t¨ªtulo tan grande que recibe una actualizaci¨®n de este calibre. Pod¨¦is ver algunos de estos cambios a trav¨¦s de este enlace.

Otro de los modos que ha recibido un lavado de cara es la Arena de combate. Adem¨¢s de las posibilidades ya existentes en el original, en la edici¨®n definitiva se ha a?adido cinco nuevas arenas, diversos mapas y diecis¨¦is nuevos personajes, cada uno con habilidades y caracter¨ªsticas propias. Entre ellos podremos manejar a diversos conocidos en la franquicia que har¨¢n las delicias a los aficionados del mundo de Rivellon as¨ª como la posibilidad de utilizar mut¨¢genos en las contiendas para alzarnos con la victoria. Estas batidas online son de lo m¨¢s divertidas y fren¨¦ticas gracias a su genial planteamiento y variedad en sus modos de juego por lo que si en alg¨²n momento queremos dejar a un lado la retah¨ªla de textos del modo principal, nunca est¨¢ de m¨¢s repartir estopa a otros jugadores en la Arena.

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Una gran mayor¨ªa de t¨ªtulos creados para ordenador tienen la inmensa suerte de contar con modificaciones hechas por el usuario de a pie que suelen enriquecer de una u otra manera el contenido jugable. De hecho incluso el reciente Monster Hunter: World ya cuenta con mods que cambian texturas, ofrecen informaci¨®n del da?o causado por el usuario y su grupo e incluso mejoran la optimizaci¨®n del juego. En Divinity: Original Sin 2 Definitive Edition para consolas de sobremesa no solo no podemos utilizar mods para mejorar la obra belga si no que adem¨¢s se pierde por el camino la modalidad Dungeon Master que s¨ª dispon¨ªa la versi¨®n para PC. Una aut¨¦ntica pena porque el hecho de crear nuestras propias mazmorras, con di¨¢logos ideados a nuestro antojo y con un amplio abanico de posibilidades a nuestra disposici¨®n para vomitar sobre el terreno hubiera sentado genial a este bluray dom¨¦stico.

La potencia sin control no sirve para nada

El control de Divinity: Original Sin 2 Definitive Edition toma parte del trabajo realizado en la primera iteraci¨®n en consolas y lo mejora para que sea m¨¢s accesible al jugador. Se han a?adido atajos, las barras de acceso directo siguen presentes y el famoso men¨² radial ¨ªdem de ¨ªdem. Es cierto que en ocasiones las filigranas que nos instan a realizar pueden colapsar al jugador menos experimentado pero tan solo es cuesti¨®n de horas de juego navegar entre tantos atajos y hacernos con el control. Ayuda mucho tambi¨¦n que las batallas sean por turnos y que la aventura, en s¨ª mismo, sea pausada en la mayor¨ªa de sus situaciones. Cuando completamos nuestro grupo se torna un poco m¨¢s ca¨®tico dominar los controles aunque en este aspecto tambi¨¦n se han facilitado cosas como unir el inventario de todos nuestros compa?eros en uno solo para as¨ª omitir pasos innecesarios.

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La experiencia jugable en t¨¦rminos generales es agradable. Con los sticks anal¨®gicos controlamos tanto el movimiento del protagonista y su grupo as¨ª como la c¨¢mara. Con la botonera principal la b¨²squeda de objetos, las barras de acceso r¨¢pido (hasta cinco disponibles) y un men¨² contextual que permite realizar acciones sobre elementos del entorno. Con el panel t¨¢ctil abrimos el mapa, con los superiores tenemos acceso a la ficha de personajes y el men¨² radial -principal-. Por otra parte la cruceta la han configurado para que el jugador acceda a la c¨¢mara t¨¢ctica, entre en sigilo o machaque objetos del escenario. Nos ha gustado bastante la adaptaci¨®n al mando de PlayStation 4 y adem¨¢s un detalle que acompa?a muy bien a este objetivo es que los textos tienen un tama?o adecuado, lo que ayuda a que entre tanto men¨² no acabemos ciegos por una min¨²scula fuente.

Un port a la altura

Aunque Divinity: Original Sin 2 en ordenadores no sea un vadem¨¦cum de c¨®mo hacer videojuegos potentes para ordenador s¨ª tiene algunos detalles punteros que dotan al t¨ªtulo de una gran calidad visual. La edici¨®n para la m¨¢quina de Sony conserva la mayor¨ªa de cualidades de su hermana mayor y apenas notaremos cambios gr¨¢ficos entre una y otra pero esto implica que la obra de Larian Studios tan solo funcione a 30fps independientemente del modelo de consola en el que juguemos. Por otra parte hemos presenciado algunas bajadas en la tasa de im¨¢genes por segundo aunque eso s¨ª, pr¨¢cticamente imperceptibles, que gracias a la t¨®nica general del t¨ªtulo no molestan en absoluto. Estos ¡°tirones¡± pueden darse bien por el gran c¨¢lculo de datos que tiene que procesar la m¨¢quina en determinados momentos como en ¨¢reas donde el poligonaje y la f¨ªsica es m¨¢s abundante. Pero repetimos, no empa?an en ning¨²n momento la experiencia de juego.

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Una de las facetas tremendamente aceptadas de la propuesta original era la posibilidad de jugar junto a otro amigo en modo cooperativo a la campa?a principal. Para esta Definitive Edition la cantidad de jugadores aumenta a cuatro haciendo uso de la red de redes pudiendo de esta manera manejar al equipo completo junto a otros amigos o con dos si jugamos en la misma consola gracias a una funcional pantalla partida. Adem¨¢s en este ¨²ltimo formato el motor gr¨¢fico rinde estupendamente bien y el juego se mantiene estable pr¨¢cticamente de la misma manera que jugando en solitario.