Cl¨¢sico Mundial de B¨¦isbol 2017
Puerto Rico se dobla, pero no se rompe en el Cl¨¢sico Mundial
Su fant¨¢stico encuentro en la semifinal contra Holanda no ha hecho sino aumentar su confianza de cara a levantar el trofeo como ganador del torneo.
Hay ocasiones en las que un partido termina convirti¨¦ndose en la prueba de fuego para un equipo o incluso un combinado nacional en concreto como ocurre en este Cl¨¢sico Mundial, y si se puede sacar alguna conclusi¨®n, es que Puerto Rico demostr¨® una entereza, una firmeza incluso cuando llegaban los momentos malos, llenos de dudas, que le convierten en un rival fabuloso para aquel que pase de la otra semifinal entre Estados Unidos y Jap¨®n.
Porque no hay nada m¨¢s temible que un equipo que tiene la confianza por las nubes, que sabr¨¢ encontrar la manera de limitar los da?os y no perder la cara antes de terminar prevaleciendo.
Bueno, si juega fenomenal eso no viene mal.
Esto es lo que le ocurre hoy en d¨ªa a la selecci¨®n nacional de Puerto Rico.
Despu¨¦s de unos primeros compases dubitativos, en los que Holanda se dispar¨® repetidamente en su propio pie con fallos imperdonables corriendo por las bases, fue Yadier Molina, el inmenso catcher boricua de los St. Louis Cardinals quien mantuvo a su selecci¨®n en esos instantes de flaqueza.
Para ser claros, ah¨ª estuvo el encuentro y se sent¨® el tono de un choque extraordinario en el que ambos combinados tuvieron sus opciones, aunque fueron los caribe?os quienes acabaron imponi¨¦ndose pese a recurrir a entradas extra.
La veteran¨ªa es un grado
No es de extra?ar que fuese su catcher, el capit¨¢n quien obrase su magia en ese instante. Ya se lo hemos visto hacer durante muchos a?os con los Cardinals de cara a tener una carrera que presenta un debate muy interesante de cara a una hipot¨¦tica llegada al Sal¨®n de la Fama de Cooperstown.
Y aunque fue su defensa y su atenci¨®n por todos los aspectos del juego lo que sostuvo a Puerto Rico contra los tulipanes, fue su bate lo que marc¨® las diferencias contra Dominicana en la fase previa, e incluso los peque?os detalles como un toque de sacrificio efectivo en entradas extra lo que permiti¨® que Eddie Rosario se convirtiese en el h¨¦roe tras su globo de sacrificio que permiti¨® anotar la carrera del triunfo a Carlos Correa, que hab¨ªa conseguido un home run majestuoso en la primera entrada que todav¨ªa estamos esperando que vuelve a la Tierra.
No ser¨ªa justo olvidarnos de todo el esfuerzo colectivo, ese conjunto que se han te?ido de rubio como se?a de identidad y para hacer grupo, que juega con una pasi¨®n desaforada y con unas ganas de disfrutar sobre el campo que rara vez se ve en las Grandes Ligas, y a buena fe que esto deber¨ªa cambiar, que lo har¨¢ en un futuro no muy lejano visto el creciente porcentaje de jugadores latinos que llegan a las Mayores.
No s¨®lo hay que hacer un buen trabajo, sino pas¨¢rselo bien mientras se hace.
Sin duda alguna, Puerto Rico est¨¢ dando una clase magistral en este sentido, una a la que le falta la guinda.
Sea contra quien sea, disfrutaremos de un espect¨¢culo sin igual que pondr¨¢ un punto y final a un Cl¨¢sico Mundial que quedar¨¢ para el recuerdo.