En llamas al Cl¨¢sico
El Barcelona atraviesa un momento complicado a nivel institucional en plena transici¨®n deportiva. Al Madrid le falla el bloque y suma dos derrotas consecutivas.
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Sin p¨²blico en el Camp Nou, sin pol¨¦mica abierta entre ambos entrenadores pero a¨²n as¨ª, cada casa tiene su particular incendio. El Cl¨¢sico supone el choque de dos transatl¨¢nticos que no cruzan precisamente aguas calmadas. Los blancos, tras dos derrotas dif¨ªciles de asumir, viven un momento deportivo complicado con la sombra de la duda acechando sobre Zinedine Zidane, que a¨²n tiene ese beneficio m¨¢s que ganado. En Barcelona, la crisis institucional contin¨²a en plena transici¨®n deportiva donde los resultados son mejores que las sensaciones y el entrenador tiene casos abiertos en la plantilla con varios de los pesos pesados. La moci¨®n de censura a la vuelta de la esquina y con un equipo que parece haber perdido su solidez, la victoria caer¨ªa como las bombas de agua que caen del hidroavi¨®n pero, solo puede ganar uno. El empate no avivar¨¢ pero tampoco calmar¨¢ la tempestad.?
Alerta en el Bernab¨¦u
La primera parte en Valdebebas ante el Shakhtar hizo saltar las alarmas. El equipo ucraniano, con m¨²ltiples bajas a causa del coronavirus, se fue al descanso arriba por 0-3. Zinedine Zidane apost¨® por la unidad B y nada funcion¨®. Si la solidez defensiva hab¨ªa sido la se?a de identidad del conjunto blanco para hacerse con LaLiga 19/20 en el ¨²ltimo tramo, esta brill¨® por su ausencia.? El examen, que no era de enjundia, sac¨® a relucir las verg¨¹enzas del conjunto blanco. Zidane, que asumi¨® todas las cr¨ªticas al t¨¦rmino del encuentro, agit¨® con los cambios pero no le dio para llegar al empate (2-3). Un reparto de puntos que quiz¨¢ no le hubiera asegurado el suficiente despu¨¦s del vapuleo ucraniano.
Antes estuvo la visita del C¨¢diz, que tambi¨¦n sac¨® tres puntos de Valdebebas y ya mostr¨® a un conjunto blanco ap¨¢tico ante un equipo excelentemente trabajado por ?lvaro Cervera, pero lejos de poder equipararse al Real Madrid en presupuesto, plantilla u objetivos. Un rival, a priori, inferior que en el c¨¦sped puso las cosas en su sitio. El resultado fue hasta ben¨¦volo con los blancos.?
"Soy el responsable y tengo que buscar las soluciones porque no puede pasar eso. Y eso lo que voy a intentar hacer. Ellos est¨¢n en el campo y necesitan soluciones", asegur¨® Zidane tras la debacle europea. La de las rotaciones no le ha funcionado, como evidencian las dos derrotas, y buscar¨¢ nuevas alternativas. El beneficio de la duda esta m¨¢s que ganado pero al franc¨¦s le empieza a acechar la sombra de esta.?
El Cl¨¢sico no es un examen final al uso para Zidane ni para sus jugadores pero si una prueba de alta importancia. De demostrar y demostrarse que los dos anteriores encuentros han sido accidentes graves pero no un 'estado de salud'. El ambiente, por la falta de p¨²blico, no ser¨¢ hostil. La presi¨®n ya llega desde casa aunque los blancos han demostrado manejarse bien a puerta cerrada.?
La mejor noticia es la vuelta de Sergio Ramos al equipo. Se espera que Zidane le saque como titular para cubrir las carencias mostradas en la Champions. Courtois es otro de los nombres propios que aparece con fuerza como principal para optar a la victoria y tambi¨¦n Vinicius, entonado de cara a gol en este inicio y que ya marc¨® al Barcelona en el Cl¨¢sico anterior. En el apartado goleador, los focos apuntan a Karim Benzema. Ante los cul¨¦s ha anotado varios goles en su carrera y, despu¨¦s de un inicio menos acertado de cara a puerta que en temporadas anteriores (solo marc¨® ante el Levante), un tanto ante el Barcelona aupar¨ªa al franc¨¦s que ya da?¨® y mucho entre l¨ªneas en el ¨²ltimo encuentro entre ambos tal y como analiz¨® Sarabia con acierto.?
Si bien la situaci¨®n es complicada, no es nueva. En fechas similares del a?o pasado, el Real Madrid cay¨® ante el PSG y ante el Mallorca, tambi¨¦n reci¨¦n ascendido como el C¨¢diz, fuera de casa. Luego, el empate contra el Brujas en el Bernab¨¦u complic¨® incluso la clasificaci¨®n europea. La victoria ante el Galatasaray sirvi¨® de b¨¢lsamo y, aunque en Europa los blancos no superaron al City, si consiguieron cerrar LaLiga con ¨¦xito meses despu¨¦s. Zidane conoce la senda. Toca volver a recorrerla. El ¨¦xito o no depende de ¨¦l y sus pupilos.?
Incendio institucional en Barcelona
El 2-8 prendi¨® la mecha del polvor¨ªn y estall¨® el polvor¨ªn de Can Bar?a. El incendio, aunque atenuado, sigue teniendo sus focos. A nivel institucional, el Bar?a sigue inmerso en mil l¨ªos que enfrentan a la plantilla contra una junta directiva que, a su vez, est¨¢ m¨¢s preocupada de otro frente: la moci¨®n de censura.
Desde el club se espera que el Voto de Censura se celebre el 15 y 16 de noviembre por razones log¨ªsticas que se discuten con la Generalitat ante las dificultades presentadas por la pandemia. Con un margen de menos de un mes antes del final del cuento, el club tiene un enfrentamiento abierto con la plantilla por una rebaja salarial del 30% y los modos en los que esta se ha aplicado. Las arcas del club blaugrana atraviesan un momento realmente delicado a causa de la pandemia y como esta ha variado el negocio del f¨²tbol y trata de ajustar cuentas.
?El problema? Las maneras. Seg¨²n inform¨® la Cadena SER, el Barcelona marc¨® un plazo para aceptar la rebaja que, en caso de no aceptar, se podr¨ªa imponer de forma unilateral. Piqu¨¦, desde la Vanguardia, expresaba p¨²blicamente el malestar de la plantilla. "Las formas del club han sido muy malas, estamos en total desacuerdo", asegur¨®.
De fondo, solo aparecen m¨¢s problemas como el Bar?agate, el caso abierto en el que presuntamente el club contrat¨® a diferentes empresas para atacar a jugadores y a opositores a Bartomeu en redes sociales, o el futuro de Messi. Salvado el primer matchball en forma de burofax, el siguiente est¨¢ al llegar al final de la pr¨®xima temporada. Eso, parece, le tocar¨¢ gestionarlo a otros.
Deportivamente, la llegada de Ronald Koeman abri¨® una transici¨®n m¨¢s agria que dulce. La salida de Luis Su¨¢rez no gust¨® por las formas y el neerland¨¦s se complic¨® convencer a Messi, del que asegur¨® en la rueda de prensa previa ante el Ferencvaros que "est¨¢ feliz" pero tambi¨¦n que su rendimiento "puede ser mejor". Dos goles y tres asistencias llenan el casillero del 10 que ha sido espoleado por Koeman antes de El Cl¨¢sico, su territorio favorito.
El principal caso abierto es el de Griezmann. El franc¨¦s no encaj¨® con Valverde, tampoco con Seti¨¦n y no ha empezado bien con Koeman. El franc¨¦s suma 264 minutos con el Barcelona en lo que va de temporada y no ha visto puerta. Si as¨ª con Francia y aprovech¨® la ocasi¨®n para mandar un mensaje al m¨ªster d¨¢ndole a entender que Deschamps le cuidaba mejor y que estaba fuera de posici¨®n en Barcelona. Koeman se lo explic¨® en privado (reconoci¨® que hablaron) y tambi¨¦n, en p¨²blico. "Cada uno tiene derecho a decir cosas. [...] Le dije que yo busco lo mejor para el equipo y s¨ª pienso que su posici¨®n es por la derecha con libertad, porque no juega en banda juega m¨¢s adentro, y puede jugar de 10 y de 9, y al final decido yo lo que es lo mejor para el equipo, y luego cada jugador tiene que sacar el m¨¢ximo rendimiento. Hubo cuatro o cinco jugadas ofensivas que tuvo que sacar m¨¢s rendimiento, pero se puede discutir mucho m¨¢s sobre su posici¨®n. Cuando estuve de seleccionador, en el Holanda-Francia, jug¨® por la derecha. [...] El entrenador manda y el jugador tiene que sacar el m¨¢ximo rendimiento", explic¨® antes de enfrentarse al Getafe. En la Champions no jug¨® ni un minuto y en El Cl¨¢sico apunta al banquillo. En clara p¨¦rdida de peso en este inicio de temporada, Ansu Fati y el reci¨¦n llegado Pedri parecen un pasito por delante.
Tres victorias (Villarreal, Celta y Ferencvaros), un empate ante el Sevilla y una derrota ante el Getafe en un Bar?a para el que Koeman "tiene cr¨ªticas" pero que no le "decepciona". El rendimiento, entendiendo el contexto de transici¨®n y adaptaci¨®n a un sistema nuevo (4-2-3-1) y sin demasiados refuerzos (Depay se qued¨® en el alero), no es nada desde?able. Una victoria en El Cl¨¢sico podr¨ªa ser el pegamento perfecto que acabe de convencer al vestuario. Lo del palco no se resolver¨¢ en el verde.?