Patrick Green charla con AS sobre Sincelery Los Angeles, un documental en el que repasa el legado de Kobe a trav¨¦s de los murales que llenaron las calles tras su fallecimiento.
"Si muere Superman, ?qui¨¦n nos queda que podamos admirar?". La pregunta la hace el cineasta Patrick Green en un momento de Sincerely Los Angeles, su particular carta para Kobe Bryant; una suerte de homenaje, gu¨ªa sobre c¨®mo convertir en productivo el dolor del duelo y, por qu¨¦ no, c¨¢psula del tiempo que acabar¨¢ conteniendo inevitablemente la amargura y el espanto con los que vivimos el a?o 2020 y las formas que fuimos encontrando para, sencillamente, seguir adelante. 2020, el a?o de la gran pandemia de nuestro tiempo y el a?o de la muerte de Kobe Bryant, su hija Gianna (con 13 a?os) y otras siete personas. Fue un 26 de enero en accidente de helic¨®ptero en Calabasas (California).
Sincerely Los Angeles es Kobe sin Kobe, la vida despu¨¦s del referente en una ciudad, Los ?ngeles, que en su verdadero n¨²cleo es muy distinta a lo que los sue?os de ne¨®n de Hollywood han convertido en una interminable industria del entretenimiento. Los ?ngeles es una tierra dura y aut¨¦ntica, la ciudad de los Lakers y finalmente la de Kobe, que naci¨® en Philadelphia y creci¨® en Italia pero se hizo inmortal en California. Este no es un documental sobre Kobe Bryant sino sobre qu¨¦ y qui¨¦n era Kobe para nosotros. En este caso, para la gente de Los ?ngeles, finalmente su gente. Y, es el hilo conductor, sobre la aparici¨®n espont¨¢nea de murales por toda L.A., un clamor silencioso de homenaje, una manera de recordar y avanzar a medio camino entre el luto y el tributo. Por qu¨¦ el formato mural, por qu¨¦ en esos barrios tan alejados de Hollywood, por qu¨¦ en calles en las que la gente quiere ver a Kobe en cuanto se levanta o justo antes de acostarse.
Esas son las respuestas que busca Patrick Green, primero periodista deportivo y ahora documentalista que ya ha trabajado con el arte callejero (For Your Consideration, que gira en torno a la subversiva estatua de Harvey Weinstein que acab¨® viralizando su amarga cr¨ªtica social) y el deporte (Bundini, un repaso a la compleja vida del entrenador de Ali, Drew Brown). En Sincerely Los Angeles ambas realidades, deporte y arte callejero, se re¨²nen en un espacio que ocupan Katen Jensen, Rev Carl, Slot One, Gabe Gault, Vela, Downtown Daniel, Melary Meza-Dierks¡ todos los que convirtieron L.A. en un gran lienzo sobre el que pintar a Kobe y a Gianna. Primero llam¨¢ndolo a gritos, despu¨¦s como un desgarro de puro dolor y finalmente en un lento proceso de cicatrizaci¨®n colectiva. Catarsis.
Dear Basketball (querido baloncesto) fue el poema de amor con el que Kobe se retir¨® del baloncesto profesional, una ep¨ªstola que cobr¨® vida para ganar el Oscar 2018 al mejor corto de animaci¨®n. Sincerely LA (sinceramente, Los ?ngeles) es la respuesta que el baloncesto env¨ªa a trav¨¦s de Patrick Green y de la voz de quienes se han reagrupado en torno a ese juego y a la figura de Kobe. Un pu?ado de buenos recuerdos en un momento extremadamente dif¨ªcil. La c¨¢lida certeza de que, finalmente, hay otros como t¨² ah¨ª fuera. Tambi¨¦n en 2020 y en, seguramente, el peor momento para toda una generaci¨®n.
Desde su festejo en el s¨¦ptimo partido frente a los Celtics, en 2010, en el que fuera su quinto y ¨²ltimo anillo, hasta sus adentros m¨¢s ¨ªntimos. Alas de ¨¢ngel, las mismas que, inalcanzables para los sentidos terrenales, tantas veces le hicieron volar; o contornos difuminados, a modo de esa magn¨¦tica energ¨ªa con la que levitaba. Y que contagi¨®. Cuando el tend¨®n de Aquiles agonizaba y consigui¨® mantenerse en pie, tirar los tiros libres frente a los Warriors y transformarlos para acercar los playoffs. Cuando el bal¨®n, tras volar desde sus manos, perfor¨® el aro en el legendario alley oop con Saquille O¡¯Neal, frente a los Blazers. O cuando, en tantas y tantas ocasiones, su mirada se cruz¨® con la de Gianna (Gigi para Patrick, que la menciona con un amor casi paternal), con miles de focos apuntando pero con una intimidad que acog¨ªa a cualquiera que se quisiera cobijar. Todo eso recogen los murales en las 481 paredes que le hacen a¨²n m¨¢s eterno. En m¨¢s de 30 pa¨ªses. Tambi¨¦n en Espa?a, desde Barcelona a M¨¢laga, pasando por Madrid y Valencia, seg¨²n Kobemural.com, una plataforma que localiza las obras y entrelaza a sus artistas con el resto del mundo.
Patrick Green recuerda cada instante con la parte v¨ªvida del que los ha presenciado en primera persona. Se crio con los Lakers del Showtime, vibrando con cada pase imposible de Magic Johnson; pero madur¨® junto a Kobe, con andares paralelos en su cronolog¨ªa. Y qued¨® impregnado de sus valores. Los mismos que, en algunos momentos, la cuarentena marchit¨® y necesitaba regar. Al igual que sus compa?eros de equipo: James T Armstrong, Brian Nguyen y Eric DiMatteo. "Estar encerrado en Los ?ngeles es casi como una sentencia de muerte. Necesit¨¢bamos trabajar juntos de nuevo", recuerda el director sobre el amargo carburante que puso en marcha este proyecto.
Patrick concibi¨® este documental mientras recorr¨ªa Los ?ngeles cuando la pandemia arreciaba y buscaba papel higi¨¦nico y comida para llevar. Acababa de morir Kobe Bryant y ¨¦l acababa de ser padre. La visi¨®n de los murales de Kobe y Gianna, desde su coche, le hicieron ver que una ciudad que, como casi todas, tuvo que cerrarse sobre s¨ª misma, estaba deseando abrirse de nuevo, regresar. Como ¨¦l y su equipo. Todo lo que sigui¨® a la muerte de Kobe fue, en cierto modo, una hermosa met¨¢fora. Su conexi¨®n con Los ?ngeles y su gente, la gente de los Lakers, una buena forma de entender que el baloncesto es mucho m¨¢s que un simple juego. De todo eso, de un recorrido de la oscuridad a la luz a trav¨¦s de la p¨¦rdida de un gigantesco referente colectivo, habla Sincerely Los Angeles. Y de todo eso habl¨® Patrick Green con AS.
"Los murales ayudaron a la gente a superar el dolor"
El verdadero punto de partido de esta historia es su admiraci¨®n por Kobe Bryant, sus recuerdos como aficionado de ¨¦l y de sus Lakers¡
S¨ª, hay tantos¡ Y creo que es as¨ª para muchos de nosotros, para los que le vimos crecer. Soy un poco mayor que ¨¦l, pero cuando Kobe lleg¨® a Los ?ngeles yo todav¨ªa estaba en la universidad, as¨ª que crecimos, pr¨¢cticamente, en paralelo. Mucha gente viene a Los ?ngeles con grandes sue?os: triunfar, convertirse en estrellas¡ Y creo que ¨¦l vino aqu¨ª siendo arrogante, como todos: cuando somos j¨®venes pensamos que lo sabemos todo. Despu¨¦s, vimos c¨®mo cre¨ªa hasta ser campe¨®n siendo el hermano peque?o de Shaquille O¡¯Neal. Y luego, cuando Shaq se march¨®, luch¨®, volvi¨® a la cima, se convirti¨® en la Mamba Negra...
Hasta los 60 puntos de su ¨²ltimo partido.
Vimos c¨®mo envejec¨ªa, c¨®mo llegaron las lesiones y sus movimientos se volvieron m¨¢s lentos¡ pero acab¨® entendiendo mucho mejor el juego. Muchos de nuestros recuerdos transitan en paralelo a su vida, instantes de la vida de muchas personas est¨¢n vinculados a los logros de Kobe. Su ¨²ltimo partido, el de los 60 puntos, lo vi con mi primo, con el que crec¨ª como si fu¨¦ramos hermanos, y era casi como si estuvi¨¦ramos reviviendo nuestra infancia vi¨¦ndole hacer sus movimientos cl¨¢sicos. Fue una experiencia maravillosa. No es lo normal que un deportista llegue a una ciudad y se quede durante tanto tiempo, por eso hay muy pocas personas como Kobe en cualquier ciudad del mundo y en cualquier deporte.
Ya ha citado esa mentalidad de la Mamba Negra (Mamba Mentality) que Kobe abraz¨® en los momentos m¨¢s oscuros de su carrera. ?Qu¨¦ significa para usted y, por extensi¨®n, qu¨¦ cree que ha llegado a significar para la ciudad de Los ?ngeles?
Es una gran pregunta. Todos, tambi¨¦n nosotros mientras hacemos un documental, debemos preguntarnos qu¨¦ es la Mamba Mentality. En todo. Creo que es algo que perdurar¨¢ incluso m¨¢s que sus logros en el baloncesto. Para m¨ª, como cineasta, como artista¡ cada d¨ªa tienes una p¨¢gina, una pared en blanco en la que trabajar, con la que superarte. Inviertes esfuerzo, trabajas¡ no podemos perder tiempo, tienes que tener una visi¨®n de lo que quieres hacer, incluso si eres el ¨²nico que cree en ella. La llevas a cabo y te conviertes en una mejor versi¨®n de lo que sea que hagas: la mejor versi¨®n de ti mismo.
Tambi¨¦n es muy interesante el otro punto. La ciudad de Los ?ngeles es muy conocida por Hollywood, el star system y todo lo dem¨¢s, pero en realidad es una ciudad de currantes, una blue collar town. Hay mucha poblaci¨®n obrera, poblaci¨®n latina, negra¡ hay un mont¨®n de blue collar people que ama a Kobe y lo que adoraba de ¨¦l era su ¨¦tica de trabajo. Habl¨¦ con una familia que ahorr¨® dinero para tener un mural de Kobe en su patio trasero porque ten¨ªan muchos recuerdos ligados a ¨¦l. ?Y sab¨¦is que me dijeron? Que el mural es lo primero que ven cuando se levantan para ir a trabajar, a las 5 de la ma?ana, y lo ¨²ltimo que ven antes de acostarse. Es duro cargar el cami¨®n a esas horas, est¨¢s cansado, te faltan fuerzas¡ Pero ah¨ª est¨¢ Kobe, y ah¨ª est¨¢ su grandeza, lo que representa para la gente. Se ha convertido en un s¨ªmbolo del trabajo duro, de la dedicaci¨®n y la pasi¨®n por lo que haces.
De hecho, mucha gente que no ha visitado Los ?ngeles no conoce esa otra cara, la esencia de una ciudad m¨¢s dura y aut¨¦ntica de lo que sugiere su nombre. Y puede que en la primera fila del Staples Center est¨¦n las estrellas de Hollywood, pero la afici¨®n de los Lakers est¨¢ hecha en realidad de toda esa otra gente, digamos esa verdadera L.A. con la que conect¨® tan bien Kobe¡
"Kobe se ha convertido en un s¨ªmbolo del trabajo duro, de la dedicaci¨®n"
S¨ª, as¨ª es. Parte de la belleza de estos murales reside en que est¨¢n en las partes de la ciudad donde viven los aficionados que no van a los partidos de los Lakers. Zonas industriales, de clase trabajadora... Barrios de gente que ve a sus Lakers por televisi¨®n porque no puede permitirse ir a los partidos. Kobe, despu¨¦s de veinte temporadas en el equipo, era parte de esa familia. La grandeza de esos murales es que se ubican en partes de la ciudad que, habitualmente, no tienen museos; pero son arte callejero, por lo que cualquiera pueda disfrutarlos. Cualquier ciudadano que pase por delante de ellos durante el trabajo, durante el almuerzo¡ Todo el mundo puede ver estos murales en diferentes partes de Los ?ngeles, lugares que la mayor¨ªa de ese otro p¨²blico de primera fila no pisar¨ªa nunca, a no ser que vayan a ver los murales espec¨ªficamente. Esa es la belleza de los murales de nuestro documental y del arte de la calle, y creo que Kobe encaja perfectamente en este movimiento.
Antes de este Sincerely Los ?ngeles, usted hab¨ªa hecho documentales sobre deporte y sobre arte callejero, pero ahora ha combinado ambas realidades.
S¨ª. Uno de mis documentales anteriores fue sobre una obra callejera de Plastic Jesus, que gener¨® un terremoto en la opini¨®n p¨²blica con su estatua criticando a Harvey Weinstein en plena semana de los Oscar. En Los ?ngeles los ves en todas partes cuando creces, es la capital mundial de los murales. El arte callejero es parte de nuestra cultura, algo que ya hab¨ªa empezado con el graffiti, y siempre ha habido espacio para los murales, como en los a?os sesenta y setenta durante en el Movimiento Chicano. Despu¨¦s, cuando los Juegos Ol¨ªmpicos de 1984, florecieron murales por toda la ciudad, m¨¢s recientemente con el movimiento Black Lives Matter y todo lo que gener¨® el asesinato de George Floyd¡
As¨ª que vengo de ah¨ª pero tambi¨¦n empec¨¦ en el deporte. Fui periodista para Eleven Sports y mi anterior documental fue Bundini, sobre el entrenador de Muhammad Ali. Tiene una vida que mucha gente no conoce y me encantan las historias como esa, que hablan de personas que est¨¢n en un segundo plano pero que son parte esencial de lo que sucede. En ese sentido los murales son una combinaci¨®n de dos cosas: cari?o y deporte. Realmente, Sincerely Los Angeles no es un documental sobre Kobe Bryant, trata sobre su legado y sobre c¨®mo inspir¨® a una ciudad que es dura, que todav¨ªa est¨¢ muy triste por su p¨¦rdida¡ Luego lleg¨® la pandemia, que hizo m¨¢s duro un a?o horrible que hab¨ªa empezado con su muerte. En cierto modo, soy la persona perfecta para combinar arte callejero y deporte, tengo experiencia en ambos mundos.
Tuvo la idea para hacer el documental en plena pandemia, cuando ve¨ªa los murales mientras recorr¨ªa Los ?ngeles buscando papel higi¨¦nico, comida para llevar¡ Esa atm¨®sfera de un a?o tan marcado para todos como fue 2020, tan imposible de olvidar, le va a dar a Sincerely Los Angeles, seguramente de forma inevitable, una sensaci¨®n de c¨¢psula del tiempo: todo el que lo vea evocar¨¢ 2020, como un deja vu.
"2020 fue el a?o del ?c¨®mo convertimos la tragedia en triunfo?, ?c¨®mo superamos cosas que parecen insuperables?"
S¨ª. El documental, como dec¨ªa, es sobre el legado de Kobe, sobre los artistas y los propietarios de peque?as empresas que encargaron y financiaron los murales. Es sobre los fans de los Lakers y de Kobe ayud¨¢ndose los unos a los otros a superar el dolor. Todos se re¨²nen en estos murales y reconstruyen la ciudad, de manera que el legado de Kobe y de Gigi se mantendr¨¢ vivo para siempre en sus paredes.
Cuando grabas durante la pandemia, ves a la gente con mascarillas, todo lo que ha conllevado esta situaci¨®n¡ todo esto quedar¨¢ en la memoria y no podemos escondernos de ello. 2020, realmente, fue el a?o del ?c¨®mo convertimos la tragedia en triunfo?, ?c¨®mo superamos cosas que parecen insuperables? Muchas veces, se trata de mirarnos los unos a los otros y creo que los murales son una excelente manera de hacerlo.
Y una forma ¨²nica de vivir el duelo¡
Muchos de sus creadores trabajaron gratis, solo quer¨ªan hacer algo como artistas por Kobe y Gigi; y todo ello hace que se cree comunidad, que la gente se ayude. Tenemos tantas y tantas im¨¢genes de personas dejando velas y flores en los murales¡ Ese es el principio del proceso, cuando comienzas a canalizar el dolor. Recientemente, hemos vuelto a la calle a grabar, y nos hemos encontrado un ambiente todav¨ªa sombr¨ªo pero tambi¨¦n un mejor estado de ¨¢nimo. La gente ha ido aprendiendo a lidiar con el dolor, y los murales han ayudado en el proceso. La p¨¦rdida de Kobe y Gianna quedar¨¢ para siempre en nuestros corazones, pero los murales ayudan. Como en cualquier muerte, las personas no regresan, pero hay formas de sentirlas m¨¢s cerca: los murales ayudan a que sea as¨ª.
?Por qu¨¦ los murales tienen tanta capacidad para mostrar el dolor y para, a la vez, transmitir respeto y admiraci¨®n? Cuando elabor¨¢bamos nuestros peri¨®dicos los d¨ªas posteriores a la muerte de Kobe, recuerdo que seleccion¨¢bamos muchas fotograf¨ªas de murales, casi de forma inconsciente, as¨ª que puede que no sea tanto un fen¨®meno de Los ?ngeles como global.
Los murales tienen un gran poder. Muchas de las personas que aparecen en ellos, para nosotros son, literalmente, h¨¦roes, incluso superh¨¦roes. Tienen una textura incre¨ªble. Cuando miras algunos de los dedicados a Kobe, tienes que mirarle a los ojos, eso es siempre lo primero que yo hago. Compruebo si siento esa conexi¨®n, como si estuviera volviendo a la vida. Sabes que ya no est¨¢ aqu¨ª, pero cuando miro estas im¨¢genes, veo que a¨²n queda parte de ¨¦l dentro de ellas.
Habl¨¦ para el documental con Arash Markazi, periodista que sigui¨® a Kobe para ESPN durante diez a?os y que le hizo la ¨²ltima entrevista para Los Angeles Times. Lo llevamos a Boyle Heights y vio el mural que hay all¨ª, uno muy realista de Kobe y Gigi mir¨¢ndose. Y volvi¨® al pasado. Volvi¨® a la Final de 2009 contra Orlando Magic, cuando Kobe gan¨® su primer t¨ªtulo sin Shaquille. ?l estaba en esos partidos y empez¨® a recordarlo mientras habl¨¢bamos. Volvi¨® a sentir todo lo que sinti¨® en ese momento, era como un espejo en el que se miraba y lo ve¨ªa todo igual: Kobe, vestido de campe¨®n y con una camiseta sobre el hombro, mirando y sonriendo a Gianna¡
Eso es precioso.
Cuando habl¨¦ con Daniel, el artista que lo hizo, me dijo que los ojos fueron lo ¨²ltimo que dibuj¨®; ya que si sent¨ªa que los ojos transmit¨ªan, el mural iba a ser bueno. Era lo m¨¢s importante, lo que har¨ªa emerger sentimientos en la gente. Despu¨¦s de ganar el campeonato, Arash y Kobe se encontraron en el hotel, a las dos de la madrugada, y todav¨ªa llevaba la camiseta de campeones con la otra colgando del hombro. ?l, como periodista, no pudo resistirse a sacar una foto, y en ella sale Kobe, con las camisetas, con Vanessa y las dos ni?as cuando eran peque?as. Arash regres¨® all¨ª. Son momentos que llevan a otros momentos. Al hablar con ¨¦l, yo tambi¨¦n me traslad¨¦ a aquella Final. Volv¨ª a cuando estaba vi¨¦ndolas con mi padre, o a los partidos de la eliminatoria contra Phoenix Suns, por ejemplo, con ese momento ya m¨ªtico de Kobe agarr¨¢ndose la camiseta celebrando un triunfo. Una imagen que han captado muchos murales. Son grandes recuerdos que vuelves a vivir, el momento en s¨ª y todo lo que lo rode¨®, y esa es una de las grandes bellezas del arte. Y s¨ª, Los ?ngeles es la capital de los murales, pero tambi¨¦n hay murales maravillosos en Espa?a, Italia, China¡ Hay murales preciosos de Kobe Bryant en todas partes, su figura trasciende todas las culturas.
Por mucho que L.A. sea la capital de los murales¡ ?recuerda algo de tanta magnitud como esto?
No. Es curioso (r¨ªe). Seguramente, la ¨²nica persona que se le puede acercar es la Virgen Mar¨ªa. Hay v¨ªrgenes por toda la ciudad. A la gente le gusta acercar a sus fallecidos a la Virgen, porque saben que nadie va a tocarla. Lo ir¨®nico es que, ahora, entre los artistas, han aparecido las reglas Kobe Bryant: nadie puede tocar tampoco estos murales. Todo el mundo lo respeta, y eso demuestra el poder que tiene Kobe sobre la ciudad; es intocable para todo el mundo, trascendente.
?Qu¨¦ quiere que sienta la gente cuando vea el documental? ?Qu¨¦ le gustar¨ªa escuchar para sentir que ha logrado exactamente lo que quer¨ªa conseguir?
Cuando haces un trabajo audiovisual, esperas que la gente lo sienta de cierta manera. Y es emocionante cuando es as¨ª. Creo que el mensaje es que gente muy distinta, de diferentes culturas, clases y pa¨ªses, grandes o peque?as ciudades, amaba a Kobe. Incluso los que son de los Clippers. Sus dos grandes estrellas, Kawhi Leonard y Paul George, tambi¨¦n crecieron siendo grandes admiradores de Kobe.
Es un mensaje de unidad.
Espero que la gente, despu¨¦s de ver el documental, se inspire. Quer¨ªa hacer una pel¨ªcula inspiradora, a pesar de la COVID y de tanta tragedia. Encontrar una manera de triunfar por encima de esa tragedia. Creo que es algo realmente dif¨ªcil si se afronta en solitario. Pocas personas son capaces de iniciar un cambio de tal magnitud. Una situaci¨®n as¨ª se supera con un sentimiento compartido, siendo parte de un vecindario, de una gran familia¡ Creo que lo m¨¢s bonito es que Kobe sigue uniendo a la gente, incluso despu¨¦s de su muerte. As¨ª que realmente me gustar¨ªa que la gente se inspirara, que mantuviera su Mamba Mentality y que siguiera intentando convertirse en la mejor versi¨®n de s¨ª misma en lo que sea que quiera hacer. Todo el mundo lo puede aplicar en su vida.
?C¨®mo se sinti¨® durante todo el proceso de realizaci¨®n de Sincelery Los Angeles?
Este a?o ha sido muy duro. Tambi¨¦n para m¨ª, claro. He sido padre, tengo un hijo de un a?o que ha tenido que pasar sus primeros meses de vida en cuarentena. Mi esposa y yo trabajamos desde casa, como lo ha hecho gran parte de la poblaci¨®n, y estar encerrado en Los ?ngeles es casi como una sentencia de muerte. Estamos tan acostumbrados a pasar tanto tiempo al aire libre¡ Fue muy duro, y creo que, con todo ello, me puse m¨¢s sensible. Es peligroso ponerse a pensar en cosas negativas, porque, entonces, s¨®lo enlazas una tras otra. De ah¨ª surgi¨® la necesidad de hacer una pel¨ªcula que fuera inspiradora: el hecho de volver a salir con mi equipo y conocer a estas personas que se sent¨ªan como nosotros, que estaban atrapados por la tristeza. Me hicieron sentir que segu¨ªan intentando ser mejores, me enamor¨¦ de la ciudad nuevamente y volv¨ª a apreciar lo maravilloso que es estar conectado con la gente. Cuando volv¨ª a salir, vi que hay mucha gente genial, muchas personas resilientes, compasivas y de voluntad fuerte. Y que muchas estaban conectadas por el amor hacia Kobe. He vivido historias geniales, he descubierto cosas sobre Kobe que no sab¨ªa, hemos conocido a personas que trabajaron en los murales como si tuvieran a alguien gui¨¢ndolos. Todo lo que ha sucedido ha sido tan genuino, con tanta pasi¨®n¡
?Por qu¨¦ los deportes y el documental maridan tan bien? Es un subg¨¦nero que nos ha dado productos extraordinarios.
Totalmente. Los deportes son como tragedias griegas. Tienes el ascenso de personas que vienen desde abajo, que se convierten en campeonas, que pueden caer y volver a levantarse. Son una pel¨ªcula en s¨ª mismos. El poder del deporte est¨¢ en que es universal. La gente no s¨®lo supera a sus oponentes, tambi¨¦n se supera a s¨ª misma, y esas son las historias que gustan.
Muchas veces, cuando est¨¢s obcecado en ser el mejor en algo descuidas lo dem¨¢s. Es muy enriquecedor escuchar historias sobre c¨®mo creci¨® Kobe, c¨®mo canaliz¨® el hambre de juventud, su perfil engre¨ªdo, y la mantuvo ya de manera m¨¢s sana a trav¨¦s de la Mamba Mentality: aprendi¨® que hab¨ªa cosas en la vida m¨¢s all¨¢ de convertirse en el mejor en las pistas de baloncesto. Que tambi¨¦n se trataba de compartir sus conocimientos con otros jugadores, de convertirte en el mejor padre¡ se trataba de muchas cosas m¨¢s que trascend¨ªan las pistas, y se dedic¨® a ello. ?Si incluso gan¨® un Oscar! Acab¨® siendo una de esas personas capaces de canalizar toda esa energ¨ªa de diferentes maneras. Tenemos otros ejemplos de deportistas muy grandes que, fuera de las pistas, no llegaron a tanto. Kobe se podr¨ªa haber quedado en genio deportivo, pero fue m¨¢s all¨¢. ?l ten¨ªa muchas inquietudes, es una de esas personas que surgen, si acaso, una vez por generaci¨®n. Esto tambi¨¦n lleva a una de las partes m¨¢s tristes, la de plantearse qu¨¦ estar¨ªa haciendo ahora Kobe, qu¨¦ proyectos estar¨ªa impulsando. Y no s¨®lo ¨¦l, ?Qu¨¦ estar¨ªa haciendo Gigi ahora? Te sientas y te pierdes en una inmensidad de posibilidades sobre todo lo que ten¨ªan para darnos a nosotros y al mundo. Es muy duro pensarlo.
Suponemos que habr¨¢ visto The Last Dance, el superdocumental sobre Michael Jordan que arras¨® la pasada primavera.
Es maravilloso (se r¨ªe). Quiero decir, ?s¨ª! Fue genial revivir todos esos momentos, y m¨¢s con el propio Jordan como narrador. Ha habido tantas cosas a su alrededor¡ Creo que una de las claves, o al menos es mi parte favorita, est¨¢ en ese iPad que le acompa?a durante toda la serie. As¨ª, no es s¨®lo ¨¦l recordando cosas, es ¨¦l vi¨¦ndolas y nosotros viendo las reacciones m¨¢s viscerales que tiene sobre su propia vida. Puede que s¨ª, que s¨®lo se muestre la historia desde su perspectiva, pero me encant¨®. Me gustan las historias como esta, que ponen la mirada en el pasado. Si alguien decide hacer un documental de este tipo sobre Kobe Bryant ser¨¢ igual de maravilloso que The Last Dance, estoy seguro.
Pero Sincerely Los Angeles es otra cosa¡
S¨ª, habla m¨¢s sobre la gente de Los ?ngeles, sobre el legado de Kobe. Claro que Kobe tendr¨ªa cabida en un formato como el de The Last Dance, pero Sincerely se centra en la gente y todo lo que Kobe significa para ellos.
?Ha conocido un impacto mayor en Los ?ngeles que el que tuvo Kobe Bryant?
Creo que, para la actual generaci¨®n, no. Yo me crie con los Lakers del Showtime y Magic Johnson, mientras que Kobe creci¨® en paralelo a m¨ª, como un hermano peque?o. Y Magic tambi¨¦n tuvo y tiene un gran poder, tambi¨¦n es todo un fen¨®meno social. Pero deportivamente representan cosas distintas. Magic era, claro, el talento, ese Showtime; Kobe, por su parte, representa el esfuerzo, el trabajo duro.
"Magic Johnson era el Showtime, Kobe Bryant el trabajo duro, el esfuerzo"
El propio Magic lo dijo: ¡®Creo que Kobe es el mejor laker de siempre¡¯. Y si Magic dice eso¡ No creo que lo diga por ser amable, realmente lo piensa. Los Lakers tienen una tradici¨®n maravillosa, han sido tan grandes durante tantos a?os¡ y no solamente eso, hay tanto drama a su alrededor, tantas historias¡ S¨ª, creo que Kobe es la persona con mayor impacto en Los ?ngeles en los ¨²ltimos a?os, es uno de los corazones de la ciudad.
?Cu¨¢l es tu historia favorita de las que has descubierto detr¨¢s de los murales y sus artistas?
Hay tantas¡ No quiero destacar una. En general, me parecen incre¨ªbles las historias de la gente que ahorra dinero para conseguir un mural, para personalizarlo; ya sea para su negocio, para su casa¡ Eso significa mucho. Es tenerlo siempre cerca, es conmovedor. Querer que sea de las primeras cosas que ves cada d¨ªa dice mucho. Hay muchas historias geniales detr¨¢s de los murales. Hemos elegido no s¨®lo los mejores t¨¦cnicamente, tambi¨¦n las mejores historias. Porque, para m¨ª, se trata de la gente. En todos los que hemos elegido subyace algo que conecta con qui¨¦n era Kobe. Ha sido un desaf¨ªo, pero nos hemos encontrado con todas sus facetas, con c¨®mo ha influido su legado en las personas, c¨®mo ha cambiado sus vidas¡