Triple-doble de Westbrook, 37 de Beal... y derrota de los Wizards

La traves¨ªa en el desierto de los Wizards no tiene fin. Encadenar un desastre tras otro es el pan de cada d¨ªa de una franquicia que no juega los playoffs desde 2018, que se ha deshecho de su ¨²ltima gran referencia, un John Wall que no ha jugado un partido con ellos tambi¨¦n desde (finales de) 2018 y que ahora, ya sano, ha puesto rumbo a los Rockets; y, sobre todo, que no parece tener fin en una crisis pantagru¨¦lica, con movimientos carentes de sentido, un entrenador (Scott Brooks) que no es el problema pero jam¨¢s ha sido la soluci¨®n, y una crisis formal y estructural que es, adem¨¢s, vertical, acaparando despachos, banquillo y jugadores. La llegada de Westbrook, un todoterreno que parece un velociraptor (s¨ª, como el dinosaurio), parec¨ªa venir acompa?ada de cierto optimismo. Su uni¨®n con un prol¨ªfico anotador como Bradley Beal (m¨¢s de 30 puntos por partido el curso pasado y 35 en este) y su capacidad para correr y generar estad¨ªstica dio como resultado tres participaciones en playoffs en los Thunder post Durant. Ahora, Russ tiene 32 a?os, ha perdido explosividad, se ha resentido todav¨ªa m¨¢s en un lanzamiento en el que nunca ha destacado y tiene su reputaci¨®n definitivamente destrozada, y no s¨®lo por culpa propia. Harden y sus cosas.

Nada, obviamente, ha salido como se preve¨ªa en un inicio. Los Wizards est¨¢n con un r¨¦cord de 4-13 y son el peor equipo del Este y de toda la NBA, un dudoso honor para el que han tenido que superar a aut¨¦nticos bochornos como Timberwolves o Pistons. Han ganado dos partidos a los Nets que nadie entiende (uno en Brooklyn y el otro, hace unos d¨ªas, en Washington y de milagro) y no hacen m¨¢s que perder ante rivales menores o mayores, pasando por los partidos sin pena ni gloria, con alg¨²n r¨¦cord anotador de Beal y alg¨²n que otro triple-doble de un Westbrook que lleva 150 y est¨¢ a 31 del r¨¦cord absoluto (181), en manos de Oscar Robertson. Eso es lo que le queda al playmaker, un jugdor que ha promediado triple-doble en tres temporadas consecutivas (algo hist¨®rico), que ha conseguido el segundo doble-triple-doble de la historia (al menos llegar al 20 en las tres principales categor¨ªas estad¨ªsticas) y ha batido un sinf¨ªn de r¨¦cords que no le han permitido acceder al anillo (al menos, desde que se separ¨® de Durant, cuando era candidato y disput¨® las Finales de 2012) ni le han dejado en buen lugar de cara a la opini¨®n p¨²blica, ese lugar en el que se ganan las batallas que deciden las guerras.

Ante los Blazers, Westbrook se fue a 17 puntos, 12 rebotes y 10 asistencias, adem¨¢s de finalizar con un 7 de 15 en tiros de campo. Y Beal consigui¨® 37 puntos, los mismos que en la victoria ante los Nets, y con una serie de tiro espectacular: 14 de 24, con 6 de 12, a lo que a?adi¨® 4 rebotes y 2 asistencias. Eso s¨ª, acab¨® con un -12 y Westbrook con un -14, adem¨¢s de sumar 8 p¨¦rdidas entre los dos (4 por barba) y hacer, en lo colectivo, el mismo rid¨ªculo defensivo al que se llevan apuntando toda la temporada. En el primer cuarto ya recibieron 40 puntos y en el segundo anotaron los propios, pero les endosaron otros 35, 75 al descanso. Un aut¨¦ntico bochorno del que no salieron ni intentaron salir. Entre eso y el sainete en torno a Beal, al que muchos sit¨²an fuera de los Wizards y con intenciones de recalar en un equipo competitivo (algo que, por cierto, han negado franquicia y jugador), la franquicia tiene cuerda para rato, sobre todo por el lado negativo. Nunca es bueno verte afectado por este tipo de rumores, pero si eres el colista de la Liga, la sensaci¨®n de entrar en un pozo del que no hay salida se magnifica hasta l¨ªmites insospechados.

Y los Blazers, claro, ganaron. El desastre de los Wizards les quita cierto protagonismo, pero la victoria era necesaria para los intereses del equipo de Oreg¨®n, que se acomoda (relativamente) en la s¨¦ptima posici¨®n del Oeste con un r¨¦cord de 11-9, por delante de unos Rockets post Harden que ocupan el octavo puesto de una forma tan inopinada como merecida y empatados con los Grizzlies en el sexto, a solo medio partido de Phoenix y a uno de los Nuggets. Desde luego, est¨¢ apretada la cosa. Ante los Wizards, por cierto, Lillard se fue a 32 puntos (con 4 de 14 en triples), Carmelo record¨® al de sus mejores d¨ªas (21 puntos con 8 de 16 en tiros), Gary Trent Jr. consigui¨® 26, Kanter un doble-doble de 14+15 (sigue sumando sin Nurkic) y Hood y Covington finalizaron con 15 y 19 respectivamente. Un gran esfuerzo colectivo, un poco de todos y no demasiado esfuerzo para ganar a un equipo que es un cuadro y que sigue con su particular descenso a los infiernos. Un lugar que, por desgracia, conocen muy bien.