Rafa Val, Viva Suecia: "Mi padre me quer¨ªa futbolista, pero se cruz¨® una guitarra y..."

La ciudad que duerme a sus pies hace d¨ªas que est¨¢ empapelada con sus caras. ¡°Cuida lo que hacen de ti¡±. ¡°Abri¨¦ndonos el pecho¡±. ¡°Somos la rabia que nos han obligado a sentir¡±. Esas son algunas de las frases que pueden leerse en sus lemas, bajo sus rostros. Viva Suecia presenta as¨ª su ¨²ltimo single, ¡®La voz del presidente¡¯, con carteles y tintes de campa?a pol¨ªtica que inundan Madrid. El m¨®vil de Jess Fabric, bajista, amanece este jueves lleno de alarmas, a las 6:53, a las 6:55 y as¨ª cada dos minutos. Toca madrugar. El grupo est¨¢ en Madrid present¨¢ndolo, en una minigira particular que les llevar¨¢ por radios, por teles, a esta entrevista con el Diario AS.

Abre la puerta de la 2403 Fer, Fernando Campillo, bater¨ªa, con su inmensa mirada azul y su sonrisa t¨ªmida. Entre una entrevista y otra, los cuatro miembros de Viva Suecia hacen tiempo en la habitaci¨®n de Alberto Cant¨²a, guitarrista, en el hotel Riu, Plaza de Espa?a. Desde sus ventanas pueden ver el bullicio de ese Madrid que llenan sus caras. ¡®La voz del presidente¡¯ son muchas cosas a la vez. Una canci¨®n que les ha devuelto al estudio despu¨¦s de pasar, como dice Rafa Val, cantante, ¡°la temporada m¨¢s larga sin tocar desde que empezamos¡±, all¨¢ por 2013, aquel 25 de diciembre en el que se juntaron los cuatro por primera vez y surgi¨® la magia. Una canci¨®n en la que se intuye un sonido diferente, muy ellos pero diferente, m¨¢s piano, menos guitarra, la voz m¨¢s alta. La primera con su nuevo sello, Universal, cuyo fichaje se anunci¨® hace unas semanas. La grabadora se pone en marcha mientras ellos se desparraman en la cama, una Heineken se queda a medias en el alfeizar de la ventana de esa planta 24, sobre la calle Princesa que no entiende de pausas ni paradas, y miran de frente. Las ganas de contar que vuelven ¡°a tope¡±, ¡°a darlo todo¡±, ¡°en conciertos el¨¦ctricos¡±, refulgen en sus ojos, como fuego que quema. Sus ganas de p¨²blico, de gira, furgo, bolos, de regreso.

Rafa: Nuestro ¨²ltimo concierto fue en septiembre y no hab¨ªamos estado nunca tanto tiempo sin tocar. Hemos tenido que descubrir que hab¨ªa una vida antes de todo esto. Y adaptarnos otra vez. En algunos aspectos nos ha venido muy bien. Y ahora empezamos la gira, con canci¨®n nueva, con muchas ganas.

-?C¨®mo ha sido componer durante la pandemia? ?Se han podido juntar? ?O han tenido que hacerlo por videollamada?

Jess: Pues, mira, en Radio 3 esta ma?ana (la raz¨®n de tantas alarmas en su m¨®vil) lo han equiparado a H¨¦roes del Silencio.

-?Por qu¨¦ se reunieron todos en una casa perdida?

(Risa general)

Jess: S¨ª, s¨ª. Porque desde que empezamos hemos estado currando mogoll¨®n y hemos compaginado la vida musical con la familiar, la laboral. Y en el momento en el que empezamos a vivir solo de la m¨²sica compagin¨¢bamos con gira y era imposible parar. Y llega esto (la COVID, la pandemia) y nos planteamos: ¡°Pues es el momento¡±. Y nos hemos ido a una casa en mitad de la nada en Albacete.

Alberto: En Riopar, vamos a decirlo¡­

Jess: Hemos estado ah¨ª m¨¢s a gusto¡­

Alberto: a ver si nos invitan a las fiestas del pueblo¡­

Jess: Y hemos descubierto que se trabaja muy bien y es una forma de componer¡­

Rafa: Y lo mejor es que hay ventanas. En nuestro local de ensayo en Murcia no hay y eso en Murcia es un pecado. Pero te metes ah¨ª en una casa que est¨¢ en medio de la sierra, con un lago peque?o, no hay nada alrededor y es otra historia.

Fer: No tienes otra cosa en la que pensar que ¡°me levanto y vamos a hacer m¨²sica¡±.

Rafa: Hemos compuesto de manera muy libre. Por primera vez no hemos para hacer un disco. Nos hemos puesto a hacer canciones.

-?Y cu¨¢ntas les han salido?

Rafa: Pues hay un buen pu?ado, un buen pu?ado ya (r¨ªe).

-¡®La voz del presidente¡¯ suena diferente a lo que han hecho antes.

Alberto: Bueno, eso est¨¢ bien, que alguien se d¨¦ cuenta (sonr¨ªe).

Rafa: La ha producido Santos y Fluren con nosotros y busc¨¢bamos ciertos cambios. No es radicalmente diferente a lo que ven¨ªamos haciendo pero, en el sonido, yo de repente me he quitado la guitarra y me he sentado mucho al piano, sobre todo en las primeras canciones que he empezado a componer. Entonces hay menos foll¨®n de guitarras y todo respira un poco m¨¢s.

Alberto: Hay m¨¢s huecos.

Rafa: La voz se entiende m¨¢s, est¨¢ m¨¢s arriba. Y luego Fluren, en la Casa Murada¡­, es un placer trabajar.

Alberto: La bater¨ªa tambi¨¦n¡­ A lo mejor la gente no lo percibe pero el cambio con la bater¨ªa es bastante radical. Una bater¨ªa muy agresiva .

¡°La voz del presidente¡± es la ¨²ltima frase que Viva Suecia escribi¨® de la canci¨®n. De ah¨ª el t¨ªtulo. ¡°No quer¨ªamos que se entendiese como una canci¨®n pol¨ªtica porque no lo es, pero ten¨ªa como peso¡±. Ese t¨ªtulo, que dio pie a una campa?a que les ha llevado hasta el Congreso. ¡°La ¨²ltima broma pol¨ªtica de murcianos en Madrid¡±, r¨ªe Alberto. ¡°S¨ª, s¨ª, ah¨ª fuimos, a elegir qu¨¦ despacho nos gusta m¨¢s¡±, le sigue Rafa, antes de ponerse serios. Porque en la conversaci¨®n aparece un milagro, el suyo, el disco que Viva Suecia lanz¨® al mercado el 4 de octubre de 2019, ¡°nuestro disco m¨¢s ambicioso¡±, con canciones como ¡®Lo que te mereces¡¯, ¡®Necesitarnos tanto¡¯ o ¡®F¨®llame¡¯, donde la banda comenzaba a explorar esos nuevos sonidos que les ped¨ªa el cuerpo, las guitarras, y que era un paso m¨¢s, de llenar La Riviera a llenar Ifema. Pero cuando iban a comenzar a girar con ¨¦l lleg¨® la pandemia, el encierro en las casas, una cancelaci¨®n tras otra, la situaci¨®n sanitaria mandaba. En el verano de 2020, El Milagro s¨®lo girar¨ªa en los miles de tocadiscos que lo auparon al n¨²mero 2 de ventas en Espa?a, nada m¨¢s salir al mercado.

¡°Creo que nosotros podemos llorar con un ojo. Realmente se ha parado el mundo. Pensar que todo lo hemos perdido nosotros que, a pesar de todo, nos siguen pasando cosas buenas, cosas muy buenas durante la pandemia, igual es demasiado ego¨ªsta. Pues ya est¨¢, ha pasado as¨ª y ahora retomamos. Nuestra vida sigue y lo hace con m¨¢s ilusi¨®n todav¨ªa que antes¡±. Ha hablado Jess y, por un momento, se detienen las risas, el buen rollo y hasta el sonido de los claxon que vienen de abajo. Silencio. ¡°Estamos sanos, nuestras familias tambi¨¦n...¡±, dice Alberto. ¡°Y nos podemos sentir muy afortunados. Porque nosotros no creo que podamos decir que lo hemos pasado realmente mal comparado con la cantidad de cosas extremas por las que ha pasado todo el mundo este a?o. Y nosotros, insisto, busc¨¢ndole el lado positivo a esto, todav¨ªa sacamos El Milagro e hicimos 20 conciertos. Mucha gente ha sacaba el disco el a?o pasado, que ha sacado el disco durante la pandemia, que me parece un acto de valent¨ªa total. Pues bueno. Nosotros era nuestro gran disco, tuvo muy buena acogida y ahora le vamos a dar un poco la despedida que merece¡±, completa Rafa. Y entre frase y frase, sigue instalado ese silencio pesado.

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Alberto: Hay mirar para adelante. Esto sigue por ah¨ª revoloteando pero hay que seguir. Vamos a hacer la gira m¨¢s ambiciosa que nos pod¨ªamos imaginar quiz¨¢ en uno de los peores momentos, pero es que tambi¨¦n se lo debemos a la profesi¨®n y a la gente que nos sigue. Ya tenemos que apuntarnos al gimnasio porque hay que empezar a pegar botes en los conciertos.

Rafa: Tenemos que empezar a olvidarnos del sol y vamos a empezar a pensar en la noche.

En dos d¨ªas, en el Granada Alive, comienza su gira. De momento con 12 fechas confirmadas, ir¨¢n saliendo m¨¢s, van dando detalle en sus redes casi cada d¨ªa, con un ¡®sold out¡¯ ya colgado de una ciudad, ¨¦sta hoy a sus pies, Madrid, 22 de julio, Noches del Bot¨¢nico. Sintieron hasta v¨¦rtigo. Lo desvela Alberto, con voz firme y mirada franca: ¡°Siempre tienes miedo porque al final no tienes una percepci¨®n exacta de lo que a la gente se le pasa por la cabeza¡±. ¡°?Pero se vendieron 1.500 entradas en una hora! S¨ª, s¨ª, brutal¡±, se cuela Rafa. ¡°Nuestro m¨¢nager nos enviaba pantallazos y nosotros dec¨ªamos: ¡®Eso se ha roto, se ha roto Internet¡±. Los asientos volaron, todo convertido en grises de ocupados en 24 horas. ¡°Y no se hab¨ªa anunciado a¨²n la nueva canci¨®n¡±, a?ade Alberto antes de que Rafa vuelva a hablar, en chorro, con esa voz que acaricia. ¡°Entonces ten¨ªamos miedo. Con toda la que hay encima y todo el tiempo que llevamos desaparecidos, que para nosotros, como te dec¨ªa, ha sido mucho, ?con qu¨¦ ¨¢nimo estar¨¢ la gente?, ?se acordar¨¢n de nosotros? Y de repente sucede esto. Y es la parte m¨¢s bonita de eso. Que salga cualquier cosa y la gente te de tanto cari?o. Porque no es s¨®lo comprar las entradas, es ese cari?o manifiesto y constante, brutal¡±. A veces, finaliza, no se lo explica. Que sean capaces de tanto, s¨®lo por esgrimir ¡°un par de instrumentos y cantar cuatro cosas¡±. Pero es que los cuatro chicos de Murcia tienen esa palabra detr¨¢s que empuja el vuelo. Trabajo. En bucle.

Alberto: A ver, todo es as¨ª, nosotros, trabajo, trabajo y trabajo, como en cualquier profesi¨®n. Pero s¨ª que es verdad que hay algo ah¨ª que nadie sabe qu¨¦ es. Porque hay mucha gente que trabaja y no lo consigue. Lo vemos muchas veces. ¡°Joe, lo est¨¢n haciendo todo bien y no acaba de levantar el proyecto¡±. Y ese algo que falta es muy dif¨ªcil de saber.

?Quiz¨¢ s¨®lo sea que ellos son tan de verdad que, los escuchas, y se te quedan. Porque al final son las cosas de verdad las ¨²nicas que permanecen, como su m¨²sica. Hasta en estos tiempos, llenos de ¡®me gusta¡¯ pagados y filtros de Instagram.

Rafa: Nosotros desde dentro lo vivimos m¨¢s paulatino que lo que parece desde fuera. Fue en pocos a?os, pero poquito a poco. ?bamos a una ciudad, toc¨¢bamos y volv¨ªamos, a veces en menos de un a?o, y hab¨ªa un poquito m¨¢s de gente. Y volv¨ªamos y otro poquito m¨¢s. As¨ª.

¡®La fuerza mayor¡¯ fue su primer EP, autoeditado en 2014, despu¨¦s de juntarse aquel 25 de diciembre (¡°reunirnos un 25 de diciembre en vez de estar con las familias cuenta la clase de cala?a que somos¡±, r¨ªe Jess) inicio de todo. Despu¨¦s de bautizarse como Viva Suecia en una noche de fiesta, cuando alguno grit¨® esa proclama por la insistencia de Fer en que los dem¨¢s escucharan el sonido sueco pop-rock. Ya es historia de Murcia, como el libro El dolor de los dem¨¢s, Anagrama, del escritor Miguel ?ngel Hern¨¢ndez, fiel seguidor de la banda. ¡°Bueno, en realidad fue una cosa muy rara. Ese d¨ªa nadie ten¨ªa que currar ni nada y dijimos: ¡®Pues ensayamos¡¯. ¡®Pues guay¡±, arguye Rafa. ?l acababa de llegar, Alberto y Jess ya estaban.

-Porque ustedes, Alberto, Jess, son el germen de todo¡­

Alberto: Jess y yo nos conocemos de m¨¢s tiempo que el resto. Fue por eso, las casualidades.

Ya andaban los dos enredados en la m¨²sica, las manos siempre buscando las guitarras, en proyectos, grupos, locales de ensayo, tambi¨¦n en 2013, pero a principios, no en diciembre.

Alberto: A m¨ª me llam¨® un d¨ªa un bater¨ªa que ten¨ªamos, Jos¨¦ ?ngel: ¡°Vamos a contratar a un bajista barbudo, como t¨²¡±. Esa fue la presentaci¨®n entre Jess y yo.

Rafa: Que lo cogieron por la barba, vamos.

Alberto: S¨ª (sonr¨ªe). Era un proyecto como country, rock country. Pero el proyecto se fue disipando y nos quedamos ¨¦l (Jess) y yo, y como somos muy pesados, ah¨ª los s¨¢bados, domingo y lunes en el local. Y al final, despu¨¦s de probar a mucha gente, armamos Viva Suecia.

-S¨ª, porque antes de que llegara Rafa vieron a muchos m¨¢s cantantes.?

Alberto: Uf.

Jess: ?A Treinta?

Alberto: A todos los que hab¨ªa en Murcia. De hecho lo de Rafa fue una casualidad. Realmente ah¨ª donde le ves, con esa voz, era guitarrista. Y nosotros cogimos al cantante de su grupo.

Rafa: S¨ª, porque Dani, el cantante de mi banda anterior y gran amigo, fue a currar a Barcelona y dijo: ¡°Pues el guitarrista de mi grupo¡­¡±. Y naci¨® Viva Suecia. No hab¨ªa ninguna movida country ni wester. Y luego cuando lleg¨® Fernando se confirm¨® toda la historia, no se pod¨ªa hacer ni country ni wester (r¨ªe).

Ese grito en la noche. "Viva Suecia".

En su primer concierto, en Murcia, tuvieron que encender ellos mismos la mesa de sonido. En su primer concierto fuera, C¨¢diz, tuvieron que compartir BlablaCar con unas chicas, por eso de los gastos. Su primera boda juntos fue la de Jess y coincidi¨® con el Atl¨¦tico-Real Madrid de Lisboa, para lamento del padre del novio, ferviente madridista. Por ese recuerdo se cuela el f¨²tbol. Y ya no se ir¨¢. Porque tanto Jess como Rafa aqu¨ª llevan vidas paralelas. Progenitores enamorados del f¨²tbol que regalan las equipaciones a sus hijos buscando contagiar, pero una guitarra se entromete y el camino al c¨¦sped lo llena la m¨²sica.

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Rafa: Mi padre jug¨® como profesional f¨²tbol, en Tercera Divisi¨®n. Lo mismo que yo amo la m¨²sica, ¨¦l amaba el f¨²tbol. Quer¨ªa que yo fuera futbolista profesional. Y jugu¨¦ muchos a?os al f¨²tbol y, seg¨²n dice, era mejor, pero tampoco iba a llegar a ning¨²n sitio. Y adem¨¢s a m¨ª me regalaron una guitarra y ya se me fue la cabeza.

Alberto: Yo he jugado con ¨¦l y es un chup¨®n¡­ De estos que chupan todas y luego falla. Lo que pasa es que es tan grande, tan tocho, que luego¡­ Yo le he defendido y dices: ¡°Yo me aparto que aqu¨ª¡­¡±.

Rafa: Aqu¨ª hay calidad, hay calidad.

Alberto: Ves a la gente apart¨¢ndose¡­

?-¡°Viva Suecia es como un equipo de f¨²tbol¡±, dec¨ªa Alberto en una entrevista con la revista Panenka hace un tiempo. ?C¨®mo se reparten los roles?

?-Fer: Jes¨²s (Jess) el portero.

?(Risa general)

?Jess: Yo no creo que sea el portero, tronco.

?Rafa: Fernando, central. Y Alberto y yo, a Alberto lo veo como el t¨ªpico delantero que no baja al centro del campo para atr¨¢s ni para¡­

?Alberto: Benzema.

?Rafa: Benzema no porque crea juego. T¨² eres el que est¨¢ ah¨ª para chuparla cuando cae. Yo es que he jugado de centrocampista mucho tiempo.

?Alberto: T¨² eres Zidane, t¨ªo.

Jess: Yo soy el que va con la ri?onera y la cerveza, el que va llevando balones.

Alberto: Jess es como esos futbolistas que son buenos y a la vez hacen pi?a.

Rafa: Yo lo veo un poco Cazorla. O Villlalibre.

Jess: Ey, con Villalibre ya me compararon una vez.

Toc, toc. Unos golpes en la puerta de la 2403 interrumpen esas pullas entre ellos que les cuentan como si AS no estuviera presente, la grabadora encendida. Son hermanos de vida y eso tambi¨¦n se palpa en su m¨²sica, en sus conciertos que una vez pruebas, repites. Un taxi espera a la puerta como la carroza a Cenicienta en el cuento. El tiempo termina, la minigira del grupo estos dos d¨ªas sigue, hacia la pr¨®xima entrevista. No sin antes confesar que en el Espa?a-Suecia que abrir¨¢ la Eurocopa a La Roja, ¡°tienen el coraz¨®n dividido¡±, ese nombre de Suecia les ha dado tanto, y de que Jess, de nuevo, hable para instalar un silencio emocionado entre los cuatro. Love of Lesbian y ese concierto en Barcelona ante 5.000 personas en marzo, casi como antes, con la gente de pie, mascarilla en boca y test de ant¨ªgenos previo en mano, abriera un claro en todo lo negro que ha vivido la cultura este a?o. ¡°Fue emocionante y una demostraci¨®n de que se pueden empezar a hacer cosas, de que la cultura es segura. Lo vivimos, adem¨¢s, con una emoci¨®n tremenda porque estuvimos con alguno de ellos en el estudio cuando est¨¢bamos grabando 'La voz del presidente' y que formaran parte de eso, de ese paso¡­¡±.

Sus palabras flotan en el aire mientras la habitaci¨®n se vac¨ªa, la cerveza de Heineken se queda a medias y ese grito que parti¨® de una casa perdida en Riopar ya llena el Youtube, los Spotify, la radio y las redes (¡°somos la rabia que nos han obligado a sentir¡±) como su rostro las calles.

No dejar¨¢n de o¨ªrlos, y de verlos, este verano.