Pasar del enfado a campe¨®n del mundo en Moto GP: el caso Quartararo

Cu¨¢ntas veces hemos escuchado decir aquello de que: ¡°si te enfadas, tienes dos problemas: enfadarte y desenfadarte¡±. Fabio Quartararo, flamante campe¨®n del mundo de MotoGP, ha tenido esos ¡®dos problemas¡¯ durante mucho tiempo. Su trayectoria no es la de un piloto que asciende de forma apabullante, rutilante e incontestable. Al contrario, lleg¨® a MotoGP sin haber destacado especialmente en Moto2, donde sustituy¨® a Alex Rins (sus mejores resultados fueron un 7 ? en Qatar, Catalu?a y Malasia y un 6 ? en San Marino). De hecho, toc¨® fondo con un 28? en Argentina.

Fue en la temporada 2019 cuando ingres¨® en MotoGP teniendo a Morbidelli como compa?ero de equipo. En las sesiones de clasificaci¨®n del Gran Premio de Espa?a debut¨® sorprendiendo con la primera pole position de su carrera en Moto GP. Pero su trayectoria no dejaba de ser difusa, err¨¢tica por momentos. Y brillante, en otros.

El diablo (como le llaman, por el diablo dibujado que llevaba en un casco cuando era peque?o) tiene muy buen car¨¢cter, es uno de los m¨¢s extrovertidos y es dif¨ªcil no verle sonriendo. Pero tambi¨¦n ha sido v¨ªctima de sus propios enfados. Y es que el enfado siempre ha sido un tal¨®n de Aquiles para el piloto franc¨¦s, protagonista de algunas de las im¨¢genes m¨¢s emblem¨¢ticas de la temporada, como cuando finaliz¨® el Gran Premio de Catalu?a con la cremallera del mono bajada y el pecho al descubierto. O su doloroso ¡®mano a mano¡¯ con una abeja que se le col¨® en el casco.

La trayectoria de Fabio es la mejor muestra de c¨®mo un cambio de actitud ante la adversidad (se clasific¨® 15? antes del ¡®match-ball¡¯ que le acercaba a su primer gran t¨ªtulo) es clave en el triunfo. En palabras del piloto: ¡°Aprend¨ª que mantener la calma te aporta resultados¡±. Y es que los problemas que se ha ido encontrando a lo largo de su periplo deportivo -que no han sido pocos- se han traducido a menudo en enfados y frustraci¨®n. Cuando ha sido consciente de que ese camino solo lo alejaba m¨¢s de la mejora, Quartararo ha ganado. Ha ganado constancia, ha ganado concentraci¨®n. Y la suma de ambas lo ha llevado hasta su primer gran t¨ªtulo. ¡°Este a?o nunca he llegado a enfadarme. Mantener la calma me ha hecho crecer much¨ªsimo", apuntaba en los medios.

A Quartaro no se le esperaba, no se le tuvo demasiado en cuenta porque lleg¨® sin aspavientos, por lo bajini, ganando un d¨ªa, pero perdiendo al siguiente. Pero lleg¨® y supo convertir un problema en un aliado. Ahora, adem¨¢s, es m¨¢s met¨®dico gracias, en parte, a los ejercicios de auto-control que le recomend¨® su psic¨®logo en su momento.

?Por qu¨¦ es importante no enfadarse?

Aprender a no enfadarse cuando no se gana es b¨¢sico en el mundo del deporte. M¨¢s si tenemos en cuenta que solo gana uno. Es mucho m¨¢s rentable y provechoso perder y aprender que perder y enfadarse. Cualquier deportista sabe que un enfado no cambia un resultado. Pero un enfado a menudo tambi¨¦n sirve para ponerte en acci¨®n, para hacerte reaccionar, para impulsarte. Gestionar esa rabia contenida es algo com¨²n, pero si no se hace correctamente puede terminar convirti¨¦ndose en un harakiri. Porque en lugar de impulsar tu energ¨ªa, puede hundirte. Se necesita una mentalidad a prueba de todo desaf¨ªo para no perder el control y Quartararo ya est¨¢ en ese camino, lo que le hace a¨²n m¨¢s temible para el resto de sus rivales, M¨¢rquez incluido. La historia del deporte nos ha dejado grandes muestras de los efectos de un mal enfado. Quiz¨¢, la derrota de McEnroe frente a Lendl en el Roland Garros de 1984.

?Qu¨¦ sucedi¨®?

Fue un duelo de titanes completamente opuestos en car¨¢cter y esa enorme diferencia entre ellos fue lo que hizo que saltaran las chispas. McEnroe no hab¨ªa perdido ni un solo partido ese a?o. Pero la preparaci¨®n mental de Lendl le dej¨® fuera de juego y le hizo perder los nervios. Tanto que se enzarz¨® en una largu¨ªsima pelea con el ¨¢rbitro, y el p¨²blico comenz¨® a abuchearlo y a levantarse de los asientos indignados por la incapacidad del tenista para centrarse en el juego.

Si quieres saber m¨¢s sobre c¨®mo gestionar el enfado, te recomiendo que profundices un poco m¨¢s en la historia de este cap¨ªtulo hist¨®rico del deporte en general y del tenis en particular. Entra si quieres revivir el d¨ªa que la mentalidad de Lendl hizo mortal a McEnroe.