Estados Unidos: el polic¨ªa antidopaje
La pol¨ªtica antidopaje de Estados Unidos ha tenido alargadas sombras, todav¨ªa hoy aplica un doble rasero que permite a sus ligas profesionales competir sin haber rubricado el C¨®digo Mundial de la AMA. Pero no es menos cierto que cuando se ponen a ello, no les tiembla el pulso. Hay estrellas universales que han sido borradas despu¨¦s de una investigaci¨®n impulsada desde dentro. Lance Armstrong y Marion Jones son dos ejemplos rotundos. Desde all¨ª nos viene ahora una ley penal que trasciende sus fronteras, porque puede condenar con cinco a?os de c¨¢rcel a cualquier dopado en competiciones internacionales o con presencia de atletas estadounidenses. Esta ley entiende el dopaje desde una perspectiva econ¨®mica, como un fraude, igual que en Alemania. El debate sobre la salud queda enterrado: la trampa es un robo.
Hay pocos pa¨ªses con leyes penales antidopaje, Espa?a entre ellos. A¨²n menos los que castigan el consumo. EE UU no s¨®lo lo har¨¢ internamente, sino que se convierte en un polic¨ªa global contra esta lacra. La decisi¨®n del Gobierno de Trump es una reacci¨®n a las violaciones de Rusia, que desde all¨ª se consideran insuficientemente sancionadas. La AMA se ha visto impotente para actuar. Su ¨²ltima Comisi¨®n regres¨® de Mosc¨² sin las pruebas convenidas, porque sus interlocutores rusos se acogieron a sus leyes para impedir el acceso a los ordenadores del laboratorio. La Agencia Mundial tambi¨¦n ha sido incapaz de sancionar a Chris Froome o de rematar la Operaci¨®n Puerto. Ante la ineficacia de la autoridad deportiva, otra vez ha habido que agarrarse a la herramienta penal¡ Pero ahora llega desde USA. Sin temblores.