El intrigante futuro de Mercedes

De la mano de Renault, el otro gran fabricante que puede replantearse su futuro en el automovilismo ante la crisis econ¨®mica es Mercedes. Su escuder¨ªa de F¨®rmula 1 acaba un ciclo natural: Lewis Hamilton, Valtteri Bottas y el propio Toto Wolff, director del proyecto, terminan contrato en 2020 y desde el entorno del Gran Circo se vive con cierta incertidumbre y expectaci¨®n los pr¨®ximos pasos del gigante de Stuttgart. Principalmente porque en Daimler, la empresa matriz de Mercedes Benz, ha habido cambio de guardia durante el pasado a?o y el pragm¨¢tico Ola Kallenius sucede como CEO a Dieter Zetsche, un enamorado de las carreras. El nuevo rumbo de la firma alemana pasa por la electrificaci¨®n e implicar¨¢ una enorme reducci¨®n de costes. ?C¨®mo encaja en ese puzle la F1?

Esta semana resurg¨ªa en el pa¨ªs teut¨®n (Autobild) el rumor de que Wolff y Lawrence Stroll, propietario de Racing Point, estudian un intercambio de acciones con Aston Martin y Mercedes para hacerse con el control de la escuder¨ªa de Brackley. No es la primera vez que se publica una historia parecida, aunque desde Daimler se apresuran a desmentirlo a trav¨¦s de un comunicado: "Es infundado e irresponsable. El deporte ha tomado los pasos necesarios para combatir las consecuencias del Covid-19 y damos la bienvenida a esas medidas. Nuestra intenci¨®n clara es conginuar como equipo oficial de Mercedes y hacerlo con nuestro socio director, Toto Wolff".

El dirigente austriaco es tambi¨¦n propietario del equipo en un 30%, aunque su inversi¨®n en Aston Martin (compr¨® menos del 1% en acciones) hace unas semanas desat¨® la rumorolog¨ªa. La realidad es que es amigo de Stroll y un activo inversor (en su momento lo fue de Williams), y es posible que se hayan planteado diferentes escenarios relativos al futuro de Mercedes en la F1. Su continuidad como suministrador de motores est¨¢ garantizada hasta 2025: es una divisi¨®n rentable que el propio Kallenius conoce bien, ya que fue director de la planta de motores de Brixworth.

En cuanto a la escuder¨ªa, dominadora durante las ¨²ltimas seis temporadas tanto en el t¨ªtulo de pilotos como el de constructores, se entiende que la nueva direcci¨®n de la FIA en busca de una F1 sostenible les da un respiro y muchos incentivos: su presupuesto en estos a?os ha rondado los 400 millones de euros anuales y ahora se limitar¨¢ a aproximadamente la mitad (132 m¨¢s el salario de los pilotos y el departamento de m¨¢rketing). Con un buen pellizco del reparto anual de premios de la FIA (m¨¢s de 150 millones) e importantes patrocinadores apoyando el programa (Petronas, Ineos), la inversi¨®n directa de Mercedes no ser¨¢ tan importante y el retorno por sus ¨¦xitos y presencia en los medios de comunicaci¨®n est¨¢ garantizado.

Vettel y el mercado de pilotos

En cualquier caso, Mercedes necesita dos pilotos para 2021. Hamilton est¨¢ pendiente de renovar presumiblemente a la baja ante la crisis econ¨®mica. Puede ser su ¨²ltimo gran contrato, con 35 a?os, aunque el brit¨¢nico tiene inquietudes fuera de los circuitos y est¨¢ por ver si el largo par¨®n por culpa del coronavirus ha cambiado de orden algunas de sus prioridades. Bottas (30 a?os) ha cumplido a la perfecci¨®n el papel de escudero hasta ahora, pero tambi¨¦n debe ampliar su contrato. Sus agentes han hablado con Renault ante la amenaza de George Russell (22 a?os), piloto de desarrollo de la firma alemana. No obstante, el nombre que m¨¢s esquemas altera es Sebastian Vettel: el alem¨¢n, de 32 a?os, dejar¨¢ Ferrari, quiere un coche ganador y no ha dicho que se vaya a retirar. Existe cierta presi¨®n medi¨¢tica para que vaya a Mercedes, con declaraciones de personalidades como Ecclestone o Marko y art¨ªculos a favor en la web oficial de la F1. Un binomio Hamilton-Vettel recordar¨ªa al Prost-Senna de McLaren a finales de los a?os 80, ser¨ªa un giro pirot¨¦cnico que aliviar¨ªa la superioridad de los alemanes en el campeonato. Pero si no satisface a Lewis y tampoco a Wolff¡­ ?hay que convencer a Kallenius?