S¨®lo un piloto se march¨® de la presentaci¨®n sin firmar el mural

Los pilotos llegaron en ferry a trav¨¦s del R¨ªo Yarra al centro neur¨¢lgico de Melbourne. Les hab¨ªan pedido que se quedasen por los laterales para que pudieran ser vistos f¨¢cilmente, aunque no todos lo captaron as¨ª, y una vez tomaran tierra deb¨ªan subir hacia la plaza, donde estaba el escenario, y esperar a su turno despu¨¦s de haber firmado unos cuantos aut¨®grafos a los aficionados que all¨ª esperaban. Adem¨¢s, la F1 fij¨® un mural con un hueco reservado para que cada uno de los pilotos estampara all¨ª su firma, un tr¨¢mite por el que pasaron todos¡­ menos uno, Lewis Hamilton.

Hubo aplausos para el pentacampe¨®n brit¨¢nico cuando le toc¨® agarrar el micr¨®fono, tambi¨¦n alg¨²n leve abucheo, entre los miles de aficionados locales que presenciaron el evento, aunque eran varios los que esperaban escuchar rugir los motores adem¨¢s de encontrarse cara a cara con los pilotos. Por lo dem¨¢s, pocas revelaciones entre los protagonistas antes de que los coches toquen el asfalto m¨¢s all¨¢ de Vettel, que mantiene su tradici¨®n de poner nombre femenino a sus monoplazas y bautiz¨® p¨²blicamente al Ferrari SF90 como Lina.