Dragon's Dogma, 10 a?os demostrando que el amor no es s¨®lo a primera vista
Mientras perseguimos a Capcom para que saque Dragon's Dogma 2, repasamos las virtudes de un juego ¨²nico en su especie en el 10 aniversario de su lanzamiento.
Admit¨¢moslo: lo de Dragon's Dogma no fue amor a primera vista. Hoy, 25 de mayo de 2022, el juego cumple 10 a?os de su lanzamiento en Europa y todos estamos deseando renovar nuestros votos. Nos da igual que sea por medio de una secuela (el rumoreado Dragon's Dogma 2) o a trav¨¦s de un nuevo lavado de cara a nivel gr¨¢fico. El caso es que Capcom nos permita reencontrarnos con nuestros peones, jurarles fidelidad eterna e irnos de luna de miel con ellos a la isla de Bitterblack, donde est¨¢n los mejores safaris mitol¨®gicos del mundo del videojuego. Pero como dec¨ªamos, esto no siempre fue as¨ª. No hab¨ªa tantos profetas de Cassard¨ªs all¨¢ por 2012.
Podr¨ªamos decir que fue un problema de timing. Dragon's Dogma lleg¨® apenas unos meses despu¨¦s de Dark Souls y apenas unos meses antes de que Capcom anunciara Deep Down. Los focos y las miradas estaban en otro lado, en las desafiantes mec¨¢nicas del primero y en los gr¨¢ficos de pel¨ªcula del segundo. Tambi¨¦n era una ¨¦poca en la que est¨¢bamos hasta el gorro de la fantas¨ªa medieval y en la que hab¨ªa action RPG para dar y tomar. Encima eran action RPG de esos que salen en los libros de historia. The Witcher 2, Skyrim, Dragon Age 2, Kingdoms of Amalur¡ Adem¨¢s, la nueva generaci¨®n estaba a la vuelta de la esquina y, en fin, lo dicho, podr¨ªamos decir que fue un problema de timing. Y sin embargo, si lo dij¨¦ramos estar¨ªamos faltando a la verdad. Porque en realidad lo que pas¨® es que Dragon's Dogma no era lo suficientemente bueno.
Un comienzo complicado
El pasado romantiza y la nostalgia es indulgente, pero Dragon's Dogma tuvo un lanzamiento tormentoso que le llev¨® a no pasar del 75 en Metacritic. A nivel t¨¦cnico era un dolor de muelas. Ten¨ªa efectos y animaciones espectaculares, pero a costa de hacerlos compartir pantalla con clipping, popping y cuantos defectos gr¨¢ficos se os ocurran (no hace falta que acaben en -ing). Texturas pixeladas, problemas grav¨ªsimos de framerate y unas franjas negras horizontales que son una de las piedras con las que tropieza el sector de manera recurrente (que se lo digan a The Evil Within o The Order: 1886). Esto no es cine de autor, amigos.
A dichos problemas hab¨ªa que sumar un mundo vac¨ªo, repetitivo y carente de alma. Sus secundarias eran gen¨¦ricas y parec¨ªan sacadas de un MMO cualquiera. Por su parte, los personajes generaban cero empat¨ªa e inter¨¦s porque carec¨ªan de cualquier clase de background o historia, pero tambi¨¦n qu¨¦ ¨ªbamos a pedirles a los pobres cuando la propia trama principal era inexistente. Y s¨ª, a nosotros tambi¨¦n nos encantaron los giros del final y estar¨ªamos horas debatiendo sobre sus implicaciones, memes y desenlaces alternativos, pero no estamos seguros de que compensen la pereza con la que se trat¨® todo lo previo. Entendemos perfectamente a los que tiraran la toalla.
Luego vendr¨ªan cosas m¨¢s concretas como el dichoso loot, el farmeo impl¨ªcito y la imperiosa necesidad de balanceo con la que lleg¨® a tiendas. Porque de salida era demasiado sencillo manipular los stats y crear un personaje roto, muy por encima de los monstruos que nos rodeaban. Muchos conocieron Dragon's Dogma gracias a Dark Arisen y las versiones de PS4 y Xbox One, donde el juego correg¨ªa gran parte de estos problemas, pisaba el acelerador y se aproximaba a ¡°la experiencia From Software¡± (s¨®lo en lo que a dificultad se refiere). A pesar de ello, cabe recordar que la expansi¨®n (una de las mejores expansiones de la historia reciente) no lleg¨® hasta un a?o despu¨¦s de su lanzamiento, en 2013, y en el caso de la edici¨®n por entonces next gen hubo que esperar hasta 2017. Y ya sab¨¦is lo que dicen, la noche es especialmente oscura antes del amanecer y todos tenemos un pasado. Dragon's Dogma: Dark Arisen tambi¨¦n.
Pensar¨¦is que menudo aniversario le estamos dando. Que vaya traje le hemos hecho. ?Pero qu¨¦ hay m¨¢s bonito en esta vida que la sinceridad? ?Y nunca hab¨¦is o¨ªdo eso de que la confianza da asco? Hemos jugado tantas veces a Dragon's Dogma estos ¨²ltimos a?os que no hace falta edulcorar la verdad. No, de primeras no fue amor a primera vista. Tampoco fue un cuento de hadas ni un idilio adolescente. Era un t¨ªtulo nicho que recomend¨¢bamos tras varios avisos y reparos. Pero diez a?os despu¨¦s no importa lo que fue, sino lo que es. Y a d¨ªa de hoy, Dragon's Dogma es una saga que necesitamos de vuelta. Porque a¨²n con todos los defectos citados, el juego tambi¨¦n ten¨ªa muchas virtudes. Virtudes que no han dejado de crecer en este tiempo porque pr¨¢cticamente nadie ha logrado replicarlas. Se han vuelto algo ¨²nico y nos hemos sorprendido pensando en ellas a menudo, con sus correspondientes visitas veraniegas a Cassard¨ªs.
La m¨¢s obvia es el sistema de combate. Nunca hubo un mejor simulador de L¨¦golas ni existi¨® un juego cuyos magos generasen tal sensaci¨®n de poder. Por no hablar de los espectaculares jefes finales y la gozada que supon¨ªa trepar por ellos. Lo de Shadow of the Colossus est¨¢ muy bien, pero trepar por la espalda de un c¨ªclope y reventarle su ¨²nico ojo es otro rollo, como si estuvieras veng¨¢ndote de Homero y de tu profesora de cultura cl¨¢sica. Cada enemigo ten¨ªa su punto d¨¦bil y pod¨ªamos ir ¡°desactiv¨¢ndolo¡± por partes, como si fuera una de las m¨¢quinas a las que se enfrenta Aloy en la saga Horizon. Las habituales quimeras, por ejemplo, eran como cerberos, pero con cabezas de le¨®n, cabra y serpiente. Lo suyo era acabar con el reptil primero para evitar que nos envenenara, pero seguro que no ¨¦ramos los ¨²nicos que liquidaban ante a la cabra por lo gracioso que resultaba ver su cabeza colgando durante el resto del combate.
Era un sistema ¨¢gil y fluido, con un feedback para ense?ar en los colegios y botones para todo. Ten¨ªamos un control absoluto del personaje y un sistema de agarre maravilloso que pon¨ªa a nuestra disposici¨®n una enorme paleta de posibilidades... a menudo reducida por nuestra simpleza a pasar tardes enteras lanzando goblins por distintos barrancos. Variado en t¨¢cticas, con un buen n¨²mero de clases (arquero m¨¢gico, the best), armaduras, accesorios y armas para ir mezclando y probando, la mayor¨ªa con cambios est¨¦ticos significativos (el equipo de Gatsu y Berserk, un sue?o cumplido). Quiz¨¢s los jefes fueran esponjas y acabase dependiendo de los stats m¨¢s que de los reflejos y la t¨¦cnica, pero era un enfoque, no tiene nada de malo. Una alternativa perfecta a la escuela Souls que hoy lo invade todo. No es de extra?ar que Ryouta Suzuki, dise?ador del combate, llevara despu¨¦s su talento a Devil May Cry 5, ni que haya sido contratado ahora para Final Fantasy XVI. Vistoso, complet¨ªsimo y lo m¨¢s importante, divertido.
Nuestros mejores amigos, los peones
Dejando a un lado el combate, destacaba tambi¨¦n el sistema de peones, esos ¡°no humanos¡± que actuaban a nuestro lado de manera aut¨®noma y a quienes sac¨¢bamos de una especie de limbo que ni el de Final Fantasy X. Es ver en la actualidad sistemas como el de crear a nuestro jomsviking en Assassin's Creed Valhalla y entrarnos la risa tonta. Dragon's Dogma sali¨® diez a?os antes y parece estar veinte adelantado a su tiempo. Sigue impresionando el comportamiento de sus NPC y lo importante que era elegir a unos u otros. Se desarrollaban con independencia del jugador, como el resto del mundo, donde las misiones iban y ven¨ªan, se bloqueaban o entregaban en funci¨®n de nuestras acciones.
Es imposible no pensar en dicho mapeado al recorrer las Tierras Intermedias de Elden Ring y dar sus equivalentes saltos por los tejados de ciudades abandonadas, o al entrar en cuevas a oscuras o sumergirse en una tormenta de nieve. Qui¨¦n no se pone en guardia al pensar en las noches de Dragon's Dogma, con esa oscuridad pegajosa que no dejaba ver a m¨¢s de dos palmos de distancia, inc¨®moda y peligrosa. Uno de los pocos juegos donde el ciclo d¨ªa / noche ten¨ªa resonancias en el gameplay e iba m¨¢s all¨¢ de la est¨¦tica.
Y no podemos olvidarnos del editor. Ese inolvidable editor que nos permit¨ªa jugar como un gigante, un ni?o, un b¨¢rbaro o un anciano, puede que hasta una recreaci¨®n a nuestra imagen y semejanza (es decir, barbudos de barriga incipiente que se quedan sin estamina al correr m¨¢s de treinta segundos). Las caracter¨ªsticas f¨ªsicas ten¨ªan consecuencias e impacto en nuesto estilo de juego. Parecer¨¢n obviedades. Todo el mundo espera que una partida con un espadach¨ªn musculado sea distinta a una en la que manejamos a una peque?a y delgada arquera, pero casi nunca es as¨ª.
La mayor parte de los t¨ªtulos permiten algo intermedio para que toquemos de todos los palos durante la aventura. En Dragon's Dogma la constituci¨®n era clave. Por ejemplo, los personajes peque?os eran m¨¢s r¨¢pidos y en¨¦rgicos, m¨¢s silenciosos, pero eran incapaces de llevar ciertas armaduras y las arp¨ªas pod¨ªan agarrarles y llev¨¢rselos volando. Cuantas veces nos arrepentimos de ser tan bajitos al meternos en el agua hasta la cadera, donde llev¨¢bamos el candil, y ver c¨®mo ¨¦ste se apaga y nos dejaba a oscuras. A buen seguro muchos de vosotros tendr¨¦is miles de an¨¦cdotas semejantes. Estaba sorprendentemente trabajado.
Por tanto no, quiz¨¢s no fue amor a primera vista, pero el tiempo nos ha hecho valorar las virtudes de un juego sin las resonancias y los sucesores que merec¨ªa. Un t¨ªtulo ¨²nico en su especie, y en esta industria donde abundan las propuestas cl¨®nicas, no existe mejor cumplido. Cu¨¢ntas veces nos hemos acordado de ¨¦l mientras jug¨¢bamos a otras sagas y cuantas veces se ha cumplido eso de que no valoramos lo que tenemos hasta que lo perdemos. Por eso, en el d¨ªa de su d¨¦cimo aniversario y tras tres este peque?o tributo, venimos a pedirle a Capcom que nos permita renovar nuestros votos. M¨¢s a¨²n a los pobres usuarios europeos y americanos, a quienes nunca permiti¨® probar Dragon's Dogma Online. Si la historia va de un h¨¦roe sin coraz¨®n, ?por qu¨¦ no perpetuarla en un mundo que tampoco lo tiene? Este mundo necesita Dragon's Dogma 2.
- Acci¨®n
Ambientado en un enorme mundo abierto, Dragon's Dogma presenta un juego de combates excitante y pleno de acci¨®n junto a la libertad de explorar e interactuar en un entorno de juego vivo, rico e impactante. Con tu equipo de tres compa?eros, partes en la b¨²squeda y destrucci¨®n de un misterioso drag¨®n.