Los juegos m¨¢s esperados de 2021 y m¨¢s all¨¢: Breath of the Wild 2

Estrenado en septiembre de 2019, el remake de Link's Awakening para Switch cuenta como la ¨²ltima entrega de la saga Zelda lanzada hasta la fecha. Una que, adem¨¢s, mantiene el tipo de forma elogiable a pesar de sus humildes or¨ªgenes en Game Boy. Pero eso no cambia que los fans esperen con ansia el siguiente paso evolutivo de la serie. La secuela de un juego, Breath of the Wild, que no solo nos dej¨® vivir una ¨¦pica in¨¦dita, tambi¨¦n replante¨® todos y cada uno de los fundamentos, volviendo a los or¨ªgenes, tirando muros viejos y recuperando una clase de libertad perdida tras a?os de condicionamiento y motivaci¨®n con aventuras m¨¢s secuenciales.

Desde el tutorial abierto de la Meseta de los Albores, regi¨®n donde tendr¨ªa cabida alg¨²n mapa completo de entregas anteriores, hasta el acceso inmediato al enfrentamiento final contra Ganon y la naturaleza opcional ¡ªpero beneficiosa¡ª de todo el contenido intermedio, Nintendo mostr¨® una confianza at¨ªpica en una franquicia tan longeva y de orientaci¨®n a un p¨²blico tan amplio. Los ¨ªtems de usos limitados se convirtieron en mec¨¢nicas polivalentes (im¨¢n, paralizador, etc.) que a?os despu¨¦s siguen encontrando aplicaciones nuevas en manos de los m¨¢s diestros, y la interrelaci¨®n de sistemas como planeo, escalada, fen¨®menos meteorol¨®gicos, cocina o desgaste de armas cuajaron un bucle de exploraci¨®n donde se premiaban la curiosidad ¡ªdijo adi¨®s a los omnipresentes marcadores¡ª y la capacidad de adaptaci¨®n. A partir de ah¨ª, la siguiente pregunta es tan obvia como dif¨ªcil de contestar: y ahora, ?qu¨¦?

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Desarrollo silencioso

Que habr¨ªa nuevo Zelda despu¨¦s de Breath of the Wild era un hecho sabido antes del lanzamiento del propio Breath of the Wild. En un caso como este, las inc¨®gnitas se centran en la plataforma, la preservaci¨®n o cambio de la direcci¨®n art¨ªstica, las mec¨¢nicas de transporte y tantas otras variables con las que ha jugueteado Nintendo entrega tras entrega. Siendo juego de lanzamiento, la l¨®gica inicial siempre invit¨® a pensar en una continuaci¨®n para la h¨ªbrida (aunque a medida que ha pasado el tiempo, aumenta la especulaci¨®n sobre su revisi¨®n), aunque fue algo que no se confirm¨® hasta el E3 de 2019, m¨¢s de dos a?os despu¨¦s de su estreno. Por supuesto, no fue una espera vac¨ªa, ya que 2017 a¨²n estuvo marcado por el contenido descargable, con el plato fuerte, La Balada de los Elegidos, llegando en diciembre.

Ese mismo mes, Eiji Aonuna confirm¨® en el libro Master Works (con ilustraciones y conceptos descartados del juego) que no habr¨ªa m¨¢s DLC y que la siguiente entrega ya estaba en marcha. Por supuesto, no fue ninguna sorpresa, pero tocar¨ªa esperar bastante por novedades tangibles. En 2018, el silencio estuvo entrecortado por el runr¨²n al que llevaban los comentarios sobre la intenci¨®n de preservar esa renovada libertad y los anuncios para reclutar personal. En 2019, se confirm¨® de forma indirecta que Monolith Soft volv¨ªa a estar involucrada tras su participaci¨®n en varias entregas previas y, llegado junio, por fin se revel¨® el primer tr¨¢iler. El juego ya no solo era una realidad un poco m¨¢s tangible, sino tambi¨¦n una secuela formal en el mismo Hyrule ¡ªal menos de partida¡ª, con las mismas encarnaciones de Link, Zelda y... ?Ganon?

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Un tr¨¢iler, muchas teor¨ªas

Incluso sin rastro de gameplay que dejase echar un vistazo a la exploraci¨®n, el combate o los puzles del venidero juego, el v¨ªdeo dispar¨® las expectativas y las especulaciones gracias a un tono m¨¢s siniestro ¡ªalgo que, seg¨²n sus creadores, se extender¨¢ al resto de la obra¡ª y tambi¨¦n a la tan desordenada como meticulosa edici¨®n del encuentro entre los dos protagonistas y el cuerpo momificado que recobra vida ante sus ojos. Breve como es, el metraje viene cargado de detalles como la presentaci¨®n de un vasto entorno subterr¨¢neo, el nuevo peinado de Zelda, la imaginer¨ªa Gerudo que invita a asociar el cad¨¢ver revitalizado con un Ganondorf humano como el que conocimos por primera vez en Ocarina of Time o la elevaci¨®n del castillo de Hyrule en un ¨²ltimo plano que presagia consecuencias no anticipadas por los h¨¦roes.

Un a?o y medio despu¨¦s de aquel E3, el tr¨¢iler se ha estudiado y reinterpretado hasta la saciedad, y cualquier hip¨®tesis que podamos a?adir aqu¨ª, adem¨¢s de haber sido tratada seguramente antes, puede ser validada o refutada en cuesti¨®n de pocas semanas o meses. ?Es el brazo verde que agarra el c¨¢daver el mismo poder que luego cambia el color de Link para convertirse en una nueva mec¨¢nica central como la telequinesis? ?Responde el corte de pelo de Zelda a un rol m¨¢s activo en la jugabilidad y no solo la historia? ?La diferencia entre Ganon el Cataclismo y Ganondorf surge de una historia sin contar que recontextualizar¨¢ el juego antecedente? De momento, vuestras conjeturas son tan buenas como las nuestras, aunque hay algunas cosas interesantes a considerar sobre el mapa y las mazmorras.

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Nuevas mazmorras...

Uno de los puntos contenciosos de la entrega previa, aun alabada como fue de forma casi un¨¢nime, reside en la cantidad de atenci¨®n puesta en el mundo exterior frente a las mazmorras. Con 120 santuarios y cuatro bestias divinas, Breath of the Wild nos dej¨® docenas y docenas de puzles, muchos de ellos brillantes, y algunos replanteados como situaciones para resolver en campo abierto (laberintos, islas donde nos privaban temporalmente de todo el equipamiento, bosques sumergidos en la m¨¢s absoluta oscuridad, etc.). No obstante, tambi¨¦n es cierto que no destac¨® por ofrecer la misma experiencia mazmorrera que caracterizaba a entregas tan emblem¨¢ticas de la ?f¨®rmula cl¨¢sica? como A Link to the Past, Ocarina of Time o Twilight Princess.

Las cuatro bestias divinas desempe?an un rol similar a los cuatro templos principales de Majora's Mask, con localizaciones y arcos agumentales propios (relacionados con los campeones Zora, Goron, Gerudo y Orni), pero son relativamente breves, no escalan de forma progresiva la dificultad (todas ellas pueden ser la primera o la ¨²ltima), comparten estilo visual y culminan en jefes tambi¨¦n faltos de identidad propia (son simples variantes de Ganon). Si bien ingeniosas en su construcci¨®n, usando mecanismos que requieren entender su dise?o como un todo en vez de estudiando sala a sala, no capturan qu¨¦ hac¨ªa especial a desaf¨ªos como el Templo dle Bosque de Ocarina, el Templo de la Torre de Piedra de Majora's o las Ruinas del Pico Nevado de Twilight, por poner solo unos ejemplos. Algo que, por tanto, para muchos se ha quedado como la primera cuenta pendiente que saldar a la hora de encarar la secuela.

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M¨¢s all¨¢ de la oscura entrada que se ve durante apenas un segundo en el tr¨¢iler y parece exclamar ??Mazmorra!? a la pantalla, otro de los anuncios sobre reclutamientos tambi¨¦n ha aludido espec¨ªficamente a su dise?o, as¨ª que, si bien nada implica m¨¢s que lo dice o deja ver de forma manifiesta ¡ªque es poco¡ª, intentar reforzar ese aspecto suena como algo razonable. Volviendo a Aonuma, el productor (Hidemaro Fujibayashi repite en la silla de director) ha dejado claro que la intenci¨®n es seguir apostando por la faceta creativa en los puzles, en los enigmas con m¨¢s de una soluci¨®n como aquellos favorecidos por la manipulaci¨®n de objetos y f¨ªsicas en el juego original, pero eso tampoco tiene por qu¨¦ excluir a otros ¨ªtems m¨¢s tradicionales ni la aparici¨®n de nuevas habilidades multiusos. Sobre todo despu¨¦s de haber exprimido ya los m¨®dulos de la piedra sheikah actuales durante decenas ¡ªo cientos¡ª de horas.

...?en la vieja Hyrule?

Hablando de ello, lo que ha dado de s¨ª el juego anterior, cabe a?adir que en la misma entrevista Aonuma tambi¨¦n confes¨® que la secuela tuvo origen como posible expansi¨®n que fue descartada a medida que crec¨ªa su ambici¨®n. Esto nos lleva a otra inc¨®gnita clave, y es si la Hyrule de esa iteraci¨®n concreta repetir¨¢. El regreso de Link y Zelda a priori impide un salto en el tiempo que cambie de forma dr¨¢stica el mundo, pero, como todos los fans de la saga bien saben, eso no es impedimento para que los dise?adores transformen el mapa: el Mundo Oscuro de A Link to the Past, el Reino de Lorule en A Link Between Worlds o la invasi¨®n crepuscular de Twilight Princess ya jugaron con la idea de explorar dos variantes en un mismo t¨ªtulo, y Skyward Sword plante¨® varias pruebas (los juicios de Hypnea, los recados de los dragones) para sacar partido a escenarios que ya hab¨ªamos explorado horas antes.

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Otra de esas ofertas laborales de las que los medios se hicieron eco tiempo atr¨¢s alud¨ªa a dise?adores de terreno, lo que, aunque suene a perogrullada, constata que la secuela tambi¨¦n requiere trabajo extra en entornos y no solo puzles. Si eso se traduce en un mapa nuevo, en la Hyrule de 2017 transformada total o parcialmente, o en una combinaci¨®n de ambas opciones solo lo sabremos cuando Nintendo vuelva a soltar prenda. Pasados tres a?os desde el inicio del desarrollo (aunque el ¨²ltimo, marcado por el covid, haya podido ser menos productivo de lo deseado), y teniendo en cuenta que el estudio parti¨® de una base s¨®lida en vez de desde cero, hay razones de sobra para esperar algo grande. En poco m¨¢s de un mes, el pr¨®ximo 21 de febrero, la saga cumplir¨¢ 35 a?os, as¨ª que no ser¨ªa mal momento para demostrarlo.