Budget Cuts, an¨¢lisis PSVR, recortes de personal virtual

La realidad virtual no ha sido el gran Boom! en la Historia de los videojuegos que se esperaba en un principio. Las razones son muchas y muy diversas: su usabilidad, los problemas de algunos usuarios que derivan en mala publicidad, un alto porcentaje de juegos que no dan la talla¡­ Budget Cuts esquiva con gracia y soltura algunos de esos contratiempos. Para los usuarios habituales de RV es un apreciable artilugio de diversi¨®n, y para los reci¨¦n llegados puede ser un lugar seguro por el que comenzar en este fant¨¢stico mundo paralelo. Tras un exitoso recorrido de dos a?os en PC y con una segunda entrega para compatibles en 2019, el juego de Neat Corporation llega por fin a consola de la mano de Playstation VR en PS4.

La apresurada salida al mercado mainstream de la tecnolog¨ªa RV

La realidad virtual, de tan revolucionaria, se adelant¨® a su tiempo. Es cierto que ha sido el anhelo de muchos durante d¨¦cadas. Libros, pel¨ªculas y videojuegos nos han hecho fantasear con un futuro repleto de dimensiones paralelas. El desarrollo de la tecnolog¨ªa RV avanzaba a la par en varias empresas, y m¨¢s pronto que tarde esos sue?os que ten¨ªamos muchos se convertir¨ªan en realidad. Tal vez uno de los grandes problemas de la RV es que se lanz¨® antes de tiempo. El ¨®rdago que supuso la compra de Oculus por parte de Facebook aceler¨® todo el proceso. De repente, la investigaci¨®n y el desarrollo se enfocaron a la urgencia por ser el primero en golpear el mercado.

La impresi¨®n que ten¨ªamos muchos cuando las principales piezas estaban sobre el tablero, esto es Oculus, Vive y PSVR, es que a la tecnolog¨ªa le faltaba un hervor. Para los que hab¨ªamos esperado con ansias el momento no result¨® un problema, pero s¨ª para el nutrido p¨²blico potencial. Pantallas con resoluciones y refresco por debajo del umbral necesario para no causar problemas de mareo en el usuario m¨¢s sensible, software en muchas ocasiones anodino que se centraba en mostrar la experiencia en lugar de apostar por contenido completo y complejo, equipos engorrosos por volumen, n¨²mero de elementos y cableado¡­ Las prisas dieron como resultado malgastar una buena carta en el arranque comercial del ansiado producto.

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El impacto inicial se ha diluido, pero igual mucha gente no sabe que algunas de las trabas iniciales tambi¨¦n. Todav¨ªa queda mucho camino por recorrer, pero hay que tener en cuenta que la meta no fue llegar al mercado, como las propias empresas parecieron verlo. No se trataba de los 100 metros lisos sino una etapa m¨¢s en una carrera que en realidad era de fondo. A d¨ªa de hoy los precios est¨¢n mucho m¨¢s ajustados, algunos equipos se han simplificado en usabilidad disminuyendo el volumen, las piezas y el cableado; las pantallas tienen mucha m¨¢s definici¨®n y la tasa de refresco toca cada vez m¨¢s las cifras adecuadas. El software, por su parte, se abastece de titanes como Skyrim o Fallout 4 que ganan enteros con el casco puesto, y ya cuenta con sus propias obras maestras como es el caso de Half-Life: Alyx. (que atesora uno de los contad¨ªsimos dieces que se han dado en esta casa). En medio hay un mont¨®n de t¨ªtulos de relleno pero tambi¨¦n peque?os, medianos y grandes trabajos que rebosan calidad. Budget Cuts se encuadra en alguno de estos apartados, veamos en cual.

Budget Cuts, manejando las limitaciones con inteligencia

El juego de Neat Corporation no es un Triple A, su propuesta es m¨¢s modesta, pero eficientemente focalizada. Se trata de un juego de sigilo en primera persona, uno de los pilares en los que se mueve c¨®moda la realidad virtual. Y hablando de moverse, aqu¨ª lo hacemos por teletransporte. Esta soluci¨®n, que es normalmente criticada por los que queremos desplazarnos con la mayor libertad y comodidad posibles en el plano virtual, pero habitualmente defendida por desarrolladores para evitar mareos en ciertos usuarios, est¨¢ en Budget Cuts perfectamente implementada. En pocos minutos nos damos cuenta de que es la mejor opci¨®n posible. Una opci¨®n que, adem¨¢s, nos brinda un mont¨®n de posibilidades a la hora de planificar nuestros movimientos.

El teletransporte se integra perfectamente en la mec¨¢nica de juego, y se apoya adem¨¢s en todo un cl¨¢sico, el tambi¨¦n modesto en presupuesto pero pleno de ideas Portal. Cuando realizamos el habitual apuntado a un lugar para teletransportarnos, se abre un portal a trav¨¦s del cual vemos lo que nos vamos a encontrar. En un juego de sigilo esto se convierte en un gran hallazgo y deja en pa?ales el habitual asomarse por una esquina. El teletransporte se asimila como una herramienta de juego esencial, porque nos permite planificar la estrategia a seguir para resolver el objetivo de la fase. Esos portales nos dan informaci¨®n sobre parte de la sala que no vemos desde nuestra posici¨®n, nos muestra si hay enemigos y, de ser as¨ª, nos permite predecir su recorrido; podemos estudiar el lugar al que iremos a parar en busca del archivo secreto, de la tarjeta para abrir aquella puerta cerrada o el arma sobre una mesa que nos vendr¨¢ bien para tumbar a ese enemigo que acabamos de ver pasar. Magn¨ªfico.

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El engorro que supone para los usuarios de RV disponer de los PS Moves puede resultar un h¨¢ndicap, pero su utilizaci¨®n se muestra esencial en cuanto probamos su implementaci¨®n. Con los pirulos podemos activar de forma sencilla nuestras herramientas esenciales, como es la pistola de teletransporte, o coger objetos y encajarlos en un pr¨¢ctico men¨² radial. Todo funciona de forma precisa, pero os aseguramos que en momentos de estr¨¦s, de autentica locura huyendo o enfrent¨¢ndonos a enemigos, por ejemplo, ser¨¢ f¨¢cil meter la pata. Y esto tambi¨¦n est¨¢ muy bien. Con el juego mostrando ese nervioso caos en la pantalla del televisor, las risas de la familia o de tus amigos est¨¢n aseguradas.

El juego que habr¨ªa hecho Kafka si viviera en el siglo XXI

Bueno, s¨ª, nos hemos pasado de vueltas con el t¨ªtulo de este apartado, pero m¨¢s que nada porque el escritor checo no mostraba mucho humor en sus escritos que digamos, y aqu¨ª lo hay a raudales (de forma voluntaria e integrado en el contexto, o involuntario por las situaciones que hemos descrito). S¨ª que est¨¢ en Budget Cuts la frialdad de una maquinaria burocr¨¢tica que trata con total desd¨¦n y frialdad al sufrido protagonista.

Recibimos como Neo, una llamada en nuestro puesto de trabajo que nos dice que salgamos pitando de ah¨ª porque van a quitarnos de en medio. Sabemos que algunos compa?eros han desaparecido en los ¨²ltimos tiempos, as¨ª que no nos queda otra que confiar en nuestro Morpheo particular. Como en Matrix, recibimos instrucciones de nuestro misterioso interlocutor de c¨®mo movernos por el entramado de pisos y oficinas, pero ya le hubiera gustado a Neo disponer de nuestros recursos. Aqu¨ª no tendremos que hacer malabarismos en la cornisa de un rascacielos, directamente nos teletransportaremos al edificio de enfrente aprovechando el hueco que nos ofrece una ventana abierta. S¨ª que deberemos movernos con sumo cuidado entre espacios cl¨®nicos de trabajo, evitando a los hombres de negro representados aqu¨ª por robots arquet¨ªpicos. Entra en escena el dise?o y el apartado gr¨¢fico.

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Dise?o art¨ªstico que no brilla y dise?o de niveles que deslumbra

La carga gr¨¢fica que en la realidad virtual supone cargar dos veces, una para cada ojo, lo que tenemos delante, se traduce muchas veces en sacrificios. Estos pueden ser de nitidez, de carga poligonal en entornos y personajes¡­ Budget Cuts vuelve a poner de su parte las limitaciones propias del soporte ambient¨¢ndolo todo en unos escenarios as¨¦pticos, limpios, muy de oficina, y robots que no necesitan de la alta carga poligonal que si har¨ªa falta si los personajes fueran seres humanos. Todo parece corresponder a una escrupulosa planificaci¨®n que ha dirigido la direcci¨®n art¨ªstica a la mayor explotaci¨®n posible de los recursos t¨¦cnicos disponibles.

El resultado no deslumbra por su imaginaci¨®n, y s¨ª por su buena implementaci¨®n y eficiencia. El conjunto es pues muy coherente, tanto que no echamos de menos otro tipo de gr¨¢ficos m¨¢s complejos o elaborados. La ligera trama a la que se da empaque con esta direcci¨®n art¨ªstica es la mejor soluci¨®n posible. Cuando llevamos unas horas de juego, nos parecer¨¢ la ¨²nica, adem¨¢s.

El que se trate de un juego independiente trae consigo alguna merma. Aunque viene traducido en sus textos principales, echamos de menos que la localizaci¨®n sea completa. Nos perdemos por ejemplo los divertidos e ir¨®nicos comentarios corporativos que suenan de vez en cuando por megafon¨ªa complementando el lore del juego. Tampoco disfrutamos de la traducci¨®n de los m¨²ltiples carteles con los motivantes (y descacharrantes) lemas de la empresa que se encuentran repartidos por las oficinas.

Por ¨²ltimo, se agradece la inclusi¨®n en el men¨² principal de una recreativa a la que podemos acceder desde el principio. En ella podemos echar partidas r¨¢pidas a cinco niveles, quedando registradas nuestras puntuaciones a la antigua usanza. Conviene acceder a la m¨¢quina arcade una vez nos movamos con soltura en el juego. Os sorprender¨¢ la rapidez con la que podemos llegar a completar esos niveles buscando batir las mayores puntuaciones del crono. Nunca result¨® tan divertivo que lo despidieran a uno de su trabajo.