Mafia: Definitive Edition, an¨¢lisis. Un remake a la altura de la leyenda

La familia es para siempre. 18 a?os pasan volando. Desde que Illusions Softworks colocara su gran impronta en The City of Lost Heaven, los jugadores guardan con especial cari?o los recuerdos de las desventuras de Tommy Angelo. El trabajo de los checos supon¨ªa un retrato veraz y crudo de los oscuros a?os 30. Cuando los hombres de gabardina impon¨ªan la ley de la calle, la Estados Unidos previa a la Segunda Guerra Mundial se desangraba por un pu?ado de d¨®lares.

Hay algo especial alrededor de Mafia. Ll¨¢malo nostalgia, carisma, el saber que est¨¢s siendo un espectador de lujo ante los acontecimientos de las familias de Lost Heaven. Los amigos pasan; los amores, tambi¨¦n. Cuando los rifles comienzan a sonar, la sangre desparramada es de igual color. Escoger este modelo de vida era el atajo hacia la riqueza, la grandeza, incluso la felicidad. Una falsa ilusi¨®n de la que despiertas desde el momento en el que te miras al espejo y ves una gran diana pintada sobre la frente.

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Las alabanzas a Mafia: Definitive Edition no coger¨¢n a nuestros lectores por sorpresa. Durante nuestras impresiones, dec¨ªamos que Hangar 13 ¡°redescubre un cl¨¢sico de forma que hace justicia a la palabra remake¡±. Ese aperitivo nos permiti¨® entrar a la versi¨®n final sobre aviso: para sumergirte en esta edici¨®n definitiva hace falta abrocharse el cintur¨®n. Las curvas de la vida del taxista m¨¢s c¨¦lebre del videojuego siguen ofreciendo el mismo nivel de vertiginosidad.

Un remake may¨²sculo

Mafia: Definitive Edition cobra fuerza tras realizar un ejercicio de retrospectiva. Tener fresca la idea original de los checos permite apreciar todav¨ªa m¨¢s lo logrado por sus nuevos responsables. El estudio no solo ha logrado actualizar el aspecto gr¨¢fico a los tiempos que corren, sino que expande con total acierto varios de los elementos sobre los que gira el guion. Si disfrutaste en 2002, al estar a los mandos te invade una sensaci¨®n de descubrimiento constante, a la par de familiar. Este es el Mafia con el que vibraste casi dos d¨¦cadas atr¨¢s, solo que elevado a la en¨¦sima potencia.

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En este tipo de proyectos, especialmente tras un cambio de manos, la tendencia suele ser hacia el cambio desde la perspectiva creativa de los nuevos due?os. Ocurre en parte aqu¨ª, aunque lejos de una manera invasiva o impuesta unilateralmente. Ante todo destila cari?o y delicadeza sobre el producto que tienen entre manos. Los cambios, por fortuna, no llegan para alterar el equilibrio natural de los acontecimientos, sino que su prop¨®sito es el de potenciar los detonantes que llevan a Tommy, Sam y Paulie a trav¨¦s de ese camino de autodestrucci¨®n.

Hangar 13 ha barajado de nuevo las piezas de un puzle brillante para la ¨¦poca, pero con ciertos huecos vac¨ªos. Todos los acontecimientos relevantes permanecen intactos, solo que algunos de ellos se han ordenado de una manera coherente. Como la introducci¨®n de Tommy a la familia. Tras pedirle cobijo al don, este le ofrece como primer encargo destrozar unos veh¨ªculos de la banda rival, capitaneada por Morello. Sin embargo, en 2020 vemos a un Angelo sediento de venganza. Su taxi est¨¢ destrozado, no tiene con qu¨¦ ganarse el pan. Salieri le ofrece el mismo trabajo, y no es hasta que lo completa cuando se le tiende la mano. ¡°Mira, Frank, este chico viene a pedir permiso para pelearse¡±, comentaba con tono jocoso el italiano.

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No hay mejor triunfo para los desarrolladores que lograr que su reimaginaci¨®n se convierta en un homenaje interactivo a Illusions Softworks. Los momentos icono permanecen intactos, no hay un solo cambio que sea a peor. Incluso la recta final cobra un nuevo significado gracias al simbolismo logrado por una direcci¨®n audiovisual espectacular. Cualquier calificativo se queda corto.

Antecedentes, ?qu¨¦ nos encontramos?

Para muchos j¨®venes (y alguno que peina canas), Mafia: Definitive Edition es la puerta de entrada a descubrir el particular El Padrino en formato videojuego. Quienes se aventuren por primera vez deben saber qu¨¦ tipo de juego tienen en sus manos. Aunque pueda parecer el t¨ªpico mundo abierto de corte tradicional, no lo es en absoluto. Estamos ante una aventura narrativa que combina la acci¨®n en tercera persona con un movimiento semilibre, es decir, tenemos la ciudad de Lost Heaven a nuestra completa disposici¨®n, pero no encontraremos ning¨²n elemento secundario que nos desv¨ªe del ritmo impuesto por el guion.

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Ese patr¨®n de aventura cl¨¢sica se ha repetido en las dos entregas posteriores, incluso tras el abrazo del tercero a un sandbox cercano a los tiempos que corren. Ya en 2002 se sent¨ªa un empuj¨®n hacia el camino de los primeros pasos del g¨¦nero en 3D. Lo que, quiz¨¢, era una limitaci¨®n tecnol¨®gica o de dise?o, se convirti¨® por su propio peso en se?a de identidad. Identidad construida sobre una serie de componentes que le permiten crear esa experiencia que solo podemos encontrar en ¨¦l.

Nos referimos a la conducci¨®n, por ejemplo. La brusquedad al manejar los b¨®lidos de los a?os 30 se traslada a la perfecci¨®n. Son chasis que aceleran sobre ruedas finas y crean ese efecto deslizamiento tan caracter¨ªstico. Dado su peso, incluso el balanceo al girar est¨¢ bien reflejado. No son coches que responden de manera artificial, todo lo contrario: hay una gran variedad de comportamientos seg¨²n su rendimiento, que podemos conocer desde el garaje de la familia.

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Por otro lado, ocurre lo mismo en la forma en la que se desenvuelve el gunplay. Angelo est¨¢ lejos de tener la capacidad de un marine. Es una persona corriente con un arma en la mano: le tiembla el pulso, erra en momentos de mayor tensi¨®n. Los tiroteos son un intercambio de plomo violento, que no escatima en mostrar c¨®mo nuestros rivales pierden el hilo de la vida. El armamento, escaso, nos lleva por las armas que acompa?an al imaginario del gangster. Escopeta corredera, pistola M1911, el famoso subfusil Thompson (conocida como Tommy Gun), entre otros. Eso s¨ª, su comportamiento est¨¢ muy marcado entre los modelos, lo que nos lleva a ir cambiando constantemente sobre la marcha.

Puesta al d¨ªa

Gran parte de las sensaciones que transmite en t¨¦rminos jugables son parecidas a las que encontramos en Mafia 3. Es natural. La edici¨®n definitiva se ha construido en base a una versi¨®n actualizada del motor que utilizaron para construir la aventura en New Bordeaux, incluso en las animaciones. Pod¨¦is esperar la misma contundencia que caracterizaron sus combates, tanto con un arma en la mano como cuando estamos tras el volante.

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Es el ¨²nico paralelismo que comparte Tommy con Lincoln Clay. Incluso en el sistema de salud, Mafia: Definitive Edition rompe las costumbres de la corriente moderna. Vuelven los botiquines y la cl¨¢sica barra de salud, que incluso en dificultad normal no se regenera por secciones, solo un porcentaje suficiente para aguantar otro impacto. Encontraremos habitualmente las cajas de salud esparcidas por las secciones de combate, aunque en dificultades altas, especialmente en cl¨¢sico, debes gestionar muy bien tus movimientos. Pasaba en el original.

Las opciones de accesibilidad permanecen presentes para ajustar con precisi¨®n qu¨¦ tipo de Mafia quieres vivir. M¨¢s all¨¢ de la dificultad, puedes cambiar la respuesta de la polic¨ªa, el modo conducci¨®n (simulaci¨®n est¨¢ presente, igual que en Mafia 3), la transmisi¨®n de los veh¨ªculos y varias opciones de c¨¢mara. Puedes seleccionar tambi¨¦n la posibilidad de omitir los viajes intrascendentes, pero no os lo recomendamos: apetece pasear por esta Lost Heaven.

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Una vez completes los 20 cap¨ªtulos principales, que os tomar¨¢ aproximadamente 14 horas (seg¨²n la dificultad), podr¨¢s saltar al modo libre. En ¨¦l tendr¨¢s toda la ciudad a tu libre albedr¨ªo, sin objetivos y metas. Es un modo ideal para poder reunir los coleccionables restantes, la ¨²nica tarea opcional que encontrar¨¦is, entre alguna sorpresa que preferimos no revelar. Si eres un amante de los coches, en el men¨² principal podr¨¢s acceder a una galer¨ªa de todos los que has conducido por la ciudad gracias a la cochepedia.

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Dentro de esa puesta al d¨ªa hay ciertos aspectos que se siguen haciendo bola incluso a d¨ªa de hoy. El alto n¨²mero de persecuciones en veh¨ªculo, o la forma abrupta en la que terminan algunos cap¨ªtulos, son una herencia de la que no pueden huir. Tras el avance, esper¨¢bamos que personajes como Sarah tomaran m¨¢s protagonismo; sus apariciones, escasas, complementan a Tommy. Nos hubiera gustado que los saltos temporales vinieran acompa?ados de una mayor presencia.

Cada imagen cuenta

La direcci¨®n de las secuencias de v¨ªdeo en Mafia: Definitive Edition logra aportar matices que no podemos encontrar en el original. Hay multitud de planos que revelan m¨¢s por los silencios que por las palabras. Retrata a unos personajes humanizados, en la cuerda floja de la moralidad. El honor permanece a un lado cuando la soga aprieta al cuello. Ciertos personajes ganan much¨ªsima fuerza.

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Como las primeras reuniones de la familia don Salieri. El don da una oportunidad a Tommy de poder ganarse la vida bajo su paraguas. Nunca le revela directamente sus dudas, o la desconfianza que se le presupone a un reci¨¦n llegado. Esa prudencia en la cadena de mando se distingue por una mueca, por un ce?o fruncido. Y as¨ª constantemente. Incluso en la relaci¨®n entre Sam, Paulie y Tommy, la desaprobaci¨®n de ciertos eventos ocurre en silencio.

Esa fuerza, de nuevo, se logra con una direcci¨®n y producci¨®n cuidada hasta el extremo. Volvemos a insistir en la conclusi¨®n: La Muerte del Arte. Cobra un nuevo matiz imposible de extraer en la entrega sobre la que han trabajado. La inseguridad de un hombre ambicioso como Sam, o la lealtad sin escr¨²pulos de Paulie, frente a un Angelo que evita apretar el gatillo frente a quienes no est¨¢n involucrados con este juego de mayores.

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Tambi¨¦n ayuda una versi¨®n en castellano a la altura de las mejoras del remake. Los actores que prestan su voz a personajes como Sam o Tommy son los mismos que hicieron lo propio en el original. La sincronizaci¨®n labial est¨¢ a un grand¨ªsimo nivel, ayuda a crear una imagen cre¨ªble de lo que ocurre en pantalla. Pocos peros podemos sacarle en este sentido.

La versi¨®n a la que hemos tenido acceso corresponde a Xbox One X. El aspecto gr¨¢fico es sensiblemente superior al de Mafia 3 con las mejoras en la consola de Microsoft. Especialmente los modelados, que est¨¢n a un alto nivel. El juego de iluminaci¨®n y los reflejos son de lo m¨¢s destacado en lo visual. No hay problemas de rendimiento severos; s¨ª algunos bugs, como texturas que se solapan. Nada relevante.