Spinch
- PlataformaPC7.5NSW7.5
- G¨¦neroPlataformas
- DesarrolladorQueen Bee Games
- Lanzamiento03/09/2020
- EditorAkupara Games
Spinch, an¨¢lisis PC y Switch: Una experiencia sensorial
Analizamos un nuevo plataformas tan llamativo como desafiante, obra de Akupara Games y del galardonado animador Jesse Jacobs; ya disponible en PC y Switch.
No hay duda de que el g¨¦nero de las plataformas 2D est¨¢ viviendo una nueva edad de oro gracias a las m¨¢s variadas propuestas, desde ambiciosos t¨ªtulos obra de grandes estudios a las propuestas m¨¢s artesanales a cargo de desarrolladores independientes. Y es en este segundo grupo en el que podemos encajar a Spinch, un plataformas psicod¨¦lico en dos dimensiones con una puesta en escena colorida al m¨¢s puro estilo retro, lo ¨²ltimo del estudio Akupara Games junto con el galardonado animador canadiense Jesse Jacobs y la editora Queen Bee Games. Y el resultado no es otro que un original y desafiante videojuego de plataformas de corte old school, ya disponible en PC y Nintendo Switch a un precio m¨¢s que ajustado de 12,49 euros en ambos sistemas. Veamos qu¨¦ ofrece tan particular propuesta para los amantes de las experiencias retro y los desaf¨ªos al m¨¢s alto nivel.
Experiencia retro-psicod¨¦lica
Spinch nos pone en la piel de -valga la redundancia- un Spinch, un simp¨¢tico organismo de gran agilidad y contenido tama?o que tiene como objetivo recuperar a sus cr¨ªas perdidas en un mundo colorido repleto de burbujeante psicodelia. Ya desde un primer momento nos dejamos llevar por tan sorprendente dise?o art¨ªstico, marcado por una personalidad pr¨¢cticamente ¨²nica en el medio y que bebe directamente de la cultura pict¨®rica y musical de los a?os 60, todo ello a trav¨¦s de la obra del ya mencionado artista Jesse Jacobs y poniendo en pantalla toda una amalgama de colores y formas geom¨¦tricas que mezcla espiritualidad, realidades alternativas, naturaleza y tecnolog¨ªa que no pasar¨¢n inadvertidas para nadie que se deje atrapar por tan sugerente formato, tanto en lo visual como en lo sonoro. Aunque m¨¢s all¨¢ de su original personalidad, Spinch esconde un plataformas de lo m¨¢s tradicional, tanto en concepto como en jugabilidad, y que eso s¨ª, se deja jugar de la mejor de las maneras.
Tanto es as¨ª, que el control es realmente sencillo, con el joystick para movernos, un bot¨®n de salto y otro de dash, una especie de impulso v¨¢lido tanto en el suelo para correr m¨¢s r¨¢pido durante unos instantes como en el aire para que nuestros saltos lleguen m¨¢s lejos. A todo ello debemos a?adir un recurso muy agradecido en juegos de este tipo, donde la agilidad y el frenetismo tienen tanta presencia, que no es otro que el rebote entre paredes estrechas y la posibilidad de escalar superficies verticales a base de peque?os saltos.
El resultado es un peque?o personaje que se mueve a las mil maravillas, de una forma precisa que incluso permite ciertas correcciones en los saltos para as¨ª ajustar nuestros movimientos en las secciones m¨¢s delicadas, que no ser¨¢n pocas. En este sentido, Spinch ofrece las suficientes garant¨ªas a nivel de jugabilidad para que los jugadores m¨¢s t¨¦cnicos -y pacientes- puedan exprimir una propuesta tan desafiante.
Y es que Spinch no es un juego en absoluto f¨¢cil a pesar de su desenfadado estilo; que nadie se deje enga?ar por tan socarrona apariencia. Spinch es un videojuego exigente, con tramos especialmente duros a nivel de dificultad y en los que los saltos milim¨¦tricos en plena carrera y las mec¨¢nicas de ensayo-error se hacen con buena parte del protagonismo a lo largo de su desarrollo, un t¨ªtulo m¨¢s recomendable para jugadores curtidos en plataformas de otras ¨¦pocas que para novatos en el g¨¦nero.
Y es que a pesar de que la primera mitad de la aventura es m¨¢s o menos asequible, no ser¨¢ hasta la segunda mitad y, especialmente, el tramo final cuando las cosas se pongan feas, muy feas; y no en el aspecto visual, precisamente. Adem¨¢s, cada fase est¨¢ cronometrada y esconde diferentes coleccionables, con especial presencia de los beb¨¦s perdidos de nuestro querido Spinch, peque?as criaturas que nos ayudar¨¢n en los enfrentamientos contras los jefes finales de cada mundo. Como curiosidad, tambi¨¦n podremos rescatar beb¨¦s en ciertas fases de bonus desbloqueables, todo para que los mini-Spinch no queden aplastados contra el suelo...
Hablando de coleccionables, tambi¨¦n podremos recoger peque?os cubos repartidos por los niveles; al alcanzar el n¨²mero 50 se activar¨¢ un modo invencible de forma moment¨¢nea, algo que a?ade algo de estrategia a su desarrollo puesto que no podremos elegir el momento exacto en el que se active este fugaz modo God, sino que lo har¨¢ al alcanzar dicha cifra.
Tanto es as¨ª, que en ocasiones ser¨¢ de gran ayuda en determinados momentos y en otros derrocharemos la oportunidad al recoger demasiados cubos en secciones en las que no se antojan necesarios. Y si nos centramos en la vitalidad de nuestro Spinch, descubriremos ciertas inconsistencias en el da?o recibido por parte de diferentes enemigos y trampas. Algunos nos restar¨¢n un coraz¨®n de 4 o 5 que podamos tener; otros nos matar¨¢n de un solo golpe. Adem¨¢s, y debido a su particular dise?o art¨ªstico, no siempre tendremos la certeza de si un elemento en concreto es agresivo o no, apareciendo de nuevo la recurrente mec¨¢nica del ensayo-error.
Otro elemento vital en el desarrollo de las partidas es el de los puntos de control, con un reparto de los mismos un tanto discutible; y es que en determinadas zonas lo pasaremos realmente mal al morir de forma sucesiva y tener que repetir una misma secci¨®n una y otra vez hasta dar con la combinaci¨®n de movimientos perfecta. Como decimos, Spinch es un t¨ªtulo que puede llegar a desesperar al m¨¢s curtido, con lo que es probable que muchos jugadores, atra¨ªdos por su llamativa personalidad, se den de bruces con una dificultad quiz¨¢s no del todo bien ajustada y que a todas luces resulta injusta en no pocas ocasiones. Aun as¨ª, y con la suficiente perseverancia, es posible avanzar con cierta soltura a trav¨¦s de una experiencia exigente a la vez que gratificante, a lo que debemos sumar una duraci¨®n bien ajustada que no se extiende m¨¢s de lo necesario.
Festival de la policrom¨ªa
M¨¢s all¨¢ de su fren¨¦tica jugabilidad y la apuesta decidida por la velocidad y el desaf¨ªo continuo, Spinch resulta especialmente llamativo por su apartado audiovisual. Ya desde el propio men¨² se deja notar la apuesta decididamente estridente de un dise?o art¨ªstico en el que los colores vivos y las ilustraciones pixeladas m¨¢s desconcertantes nos atrapar¨¢n sin remedio.
Obra del artista Jesse Jacobs, el t¨ªtulo no hace gala de animaciones especialmente depuradas ni elementos muy detallados, pero es tal el bombardeo visual que r¨¢pidamente nos sentiremos c¨®modos en su hipn¨®tico universo. Su apariencia retro es pr¨¢cticamente ¨²nica -menci¨®n especial para los diferentes jefes finales y sus dise?os y patrones-, algo que tambi¨¦n ocurre con su apartado sonoro, con temas electr¨®nicos muy pegadizos que nacen de la mente del artista hip-hop Thesis Sahib. En conjunto, Spinch no es brillante t¨¦cnicamente, pero su arrolladora personalidad deja marca; y para bien.
Conclusi¨®n
Spinch irrumpe con fuerza en el panorama indie a trav¨¦s de una puesta en escena ¨²nica basada en una psicodelia audiovisual muy poco frecuente en el medio y que logra atraparnos gracias a una personalidad arrolladora, como muy pocos t¨ªtulos de caracter¨ªsticas similares han logrado ¨²ltimamente. A todo ello debemos sumar una jugabilidad exigente y muy desafiante a partir de la segunda mitad de la aventura, un hilarante viaje que no resulta especialmente largo pero s¨ª muy intenso, marcado por la ya mencionada mec¨¢nica del ensayo-error. Y si bien Spinch no representa la quintaesencia del g¨¦nero de las plataformas 2D, s¨ª se posiciona como una opci¨®n muy v¨¢lida para amantes de los speedruns o para aquellos jugadores que busquen un reto a la altura, con el a?adido de superarse a s¨ª mismos logrando mejores marcas contrarreloj.
Lo mejor
- Apartado audiovisual arrollador y con mucha personalidad
- Secretos y coleccionables que invitan a su rejugarlo
- Jugabilidad divertida y adictiva...
Lo peor
- ...A pesar del abuso de la mec¨¢nica de ensayo-error
- Algunos puntos de control injustos
- Nivel de dificultad exagerado en su tramo final
Bueno
Cumple con las expectativas de lo que es un buen juego, tiene calidad y no presenta fallos graves, aunque le faltan elementos que podr¨ªan haberlo llevado a cotas m¨¢s altas. C¨®mpralo sin miedo.