Los cambios de Final Fantasy VII Remake: Reescribiendo un cl芍sico
El remake de Final Fantasy VII ya est芍 entre nosotros. Profundizamos en sus cambios de direcci車n con un art赤culo cargado de spoilers.
Aunque a lo largo de los a?os hemos visto tanto montones de remakes como infinidad de peticiones para reimaginar juegos todav赤a sin ellos, siempre ha habido algo especial en torno a la posibilidad de reconstruir Final Fantasy VII. Lanzado originalmente en 1997, el JRPG de Squaresoft marc車 谷poca en varios sentidos de la palabra, casando una narrativa potente con espectaculares secuencias, evidenciando las ventajas del formato CD 每con grandes repercusiones para la batalla consolera contempor芍nea每, grabando en millones de memorias su antol車gica banda sonora y catapultando el inter谷s por el g谷nero fuera de las fronteras japonesas. Fue, para muchos, el despertar hacia un nuevo tipo de experiencia interactiva, profunda en posibilidades jugables, pero tambi谷n 谷pica a una escala emocional. As赤 que a pesar de la posterior llegada de VIII, IX o X, as赤 como m迆ltiples exponentes de 谷xito en otras sagas, VII permaneci車 en el consciente colectivo como el JRPG quintaesencial por capturar las ideas adecuadas en el momento adecuado de una forma que era imposible de replicar.
Y Square lo sab赤a. Entre todas sus obras, el magnetismo de FF VII no ten赤a rival. La aventura de Cloud y compa?赤a recibi車 spin-offs, precuelas y hasta una secuela en forma de pel赤cula de animaci車n con altos valores de producci車n. Pero nada de eso rivalizaba con el premio gordo: el remake. En 2005, coincidiendo con la presentaci車n de PlayStation 3, Square ech車 le?a al fuego con una demo t谷cnica de la intro. Fue solo eso, y luego la compa?赤a procedi車 a trabajar en entregas in谷ditas para la consola. Pero los fans no olvidaron. Y durante a?os, pidieron. Hasta que justo una d谷cada despu谷s, en 2015, Final Fantasy VII Remake por fin se hizo oficial. La espera ha sido larga, incluso desde entonces, pero ahora que por fin est芍 a la venta 每o al menos su primera parte每, el escrutinio es inevitable. La semana pasada publicamos el an芍lisis normal, de enfoque multidisciplinar y libre de destripes. Hoy, ya con varios d赤as de reposo, toca profundizar con libertad en los cambios y consecuencias de esta nueva visita a Midgar. Ahora s赤 vamos con ?SPOILERS! (tanto de Remake como del VII original).
Remake: La necesidad del cl赤max temprano
El cambio m芍s evidente de partida es la decisi車n de limitar la primera entrega a los eventos de la propia Midgar. Esta secci車n, originalmente de menos de 8 horas de duraci車n, ha pasado de ser el arranque de una aventura mucho m芍s grande a un juego completo con introducci車n, nudo y desenlace con corte a cr谷ditos. Esto significa que eventos ya presentes necesitan ampliarse y de paso requieren a?adir otros para crear nuevo tejido conector. Pero adem芍s es necesario replantear la estructura para alcanzar un cierre que, si bien temporal, debe ser satisfactorio y relativamente conclusivo por su cuenta. La parte positiva es que Midgar, a pesar de su brevedad inicial 每al menos en comparaci車n每, lega un desarrollo denso, variado y con su propio cl赤max antes de abrir el resto del juego. Desde ese punto de vista, y una vez decidido no abarcar toda la 谷pica en un juego, trazar ah赤 la separaci車n es un movimiento l車gico. La parte m芍s cuestionable es que la nueva direcci車n creativa ha considerado insuficiente mantener a la megacorporaci車n Shinra como antagonista central hasta el final de este arco a pesar de ser su lugar original y natural, creando un efecto cascada hacia atr芍s que altera de forma dosificada pero perceptible todo el desarrollo.
Jessie y el valor del duelo
As赤 que vayamos por partes, paso a paso, antes de meternos de lleno en el final y sus posibles implicaciones de cara a la secuela. Porque en su mayor parte, FF VII Remake es una adaptaci車n fiel de las aventuras en Midgar que utiliza tanto su mayor extensi車n como los avances tecnol車gicos para recrear localizaciones con todo lujo de detalles, humanizar a los personajes y capturar la naturaleza m芍s cotidiana de las barriadas antes de que el conflicto escale hacia cotas tr芍gicas. Uno de los mejores ejemplos tempranos de esto, quiz芍 el mejor, es el ampliado papel de Jessie, dicharachera componente de Avalancha que participaba junto a Cloud y Barret en el asalto al primer reactor de mako para luego pr芍cticamente desaparecer hasta su posterior muerte durante la destrucci車n del sector 7. Al igual que Biggs y Wedge, tambi谷n con roles expandidos, Jessie serv赤a para dar la r谷plica a los protagonistas, mostrar Avalancha como un grupo con una organizaci車n bien definida 每ella era la mec芍nica encargada de fabricar las bombas每 y tener bajas con nombre propio para dar m芍s peso a la destrucci車n del sector a pesar de la supervivencia de los protagonistas principales.
Naturalmente, esas funciones persisten en el remake, pero Jessie en particular se beneficia de la divisi車n para ocupar en cierta medida el hueco dejado por la supervivencia temporal 每o no, volveremos a esto每 de Aeris. Su incremento de l赤neas durante el asalto que abre el juego lleva a una din芍mica de car芍cter juguet車n e inocuamente rom芍ntico con Cloud que culmina en un cap赤tulo donde visitamos su casa y descubrimos su trasfondo como actriz antes de que la enfermedad de su padre la empujase hacia el activismo. FF VII, el original, era un juego con un evidente mensaje ecol車gico, pero tambi谷n uno hilado a nivel emocional mediante la p谷rdida y el duelo. Todos y cada uno de los personajes principales han sufrido o sufren alg迆n tipo de p谷rdida durante el transcurso del juego, sea al nivel m芍s literal 每la muerte de alg迆n ser querido每 o sea de un modo m芍s simb車lico 每la p谷rdida de identidad y pertenencia al mundo每. El asesinato de Aeris, adem芍s de importante por razones de argumento y por reforzar la figura de Sefirot como villano, era un evento minuciosamente orquestado para que el jugador sienta que pierde algo suyo. De ah赤 su efectividad y trascendencia tanto en el contexto interno del juego como a modo de legado cultural que ahora impide reservar esa sorpresa para los jugadores novatos.
Entre los deshechos de Don Corneo
Por desgracia para la nueva Jessie, hay dos factores que juegan en su contra a pesar de la fant芍stica labor con el gui車n, la actuaci車n y la animaci車n. El primero y m芍s importante es que el remake sigue teniendo que hacer el trabajo de fondo con Aeris aunque en esta entrega todav赤a no reembolse todos los beneficios. El segundo, que la narraci車n acaba volviendo a poner entre sus apariciones una cantidad de tierra que no trivializa, pero s赤 diluye algo su arco. Tras un cap赤tulo completo con ella al frente, el ataque de los misteriosos Ecos 每de nuevo, volveremos a esto m芍s adelante每 impide su participaci車n en el asalto al segundo reactor de mako, manteni谷ndola as赤 fuera de pantalla durante horas y horas de desarrollo argumental (siete cap赤tulos si somos exactos) para luego recuperarla justo a tiempo para su sacrificio en el pilar del sector 7. Es una consecuencia derivada de la necesidad de marcar una serie de casillas del juego original, pero tambi谷n del progresivo sobredimensionamiento de eventos que anta?o no exist赤an o eran simples referencias para retomar m芍s adelante.
Matizar que esto no es un problema 每si se quiere ver como tal每 nacido dentro de eventos que por separado, como en el caso de Jessie, claramente gozan de m芍s atenci車n y mimo que sus equivalentes 32-bits. El impacto en el ritmo surge de la yuxtaposici車n. De recrearse o encadenar momentos que se apilan incluso cuando la narraci車n intenta vender la misma urgencia que hay en la fuente de la adaptaci車n. Probablemente la muestra m芍s clara de esta desconexi車n tiene lugar justo antes y despu谷s de la visita a la mansi車n de Don Corneo, ecuador entre las dos mitades del juego. La estancia en el mercado Muro era una de las secciones m芍s memorables del original, y el remake se esfuerza para enriquecerla con mucho m芍s contenido y situaciones alocadas. Los pasos para entrar anta?o en la mansi車n (alegrar al sastre local, hacer flexiones en el gimnasio) ahora se han convertido en tareas opcionales, y en su lugar el desarrollo principal introduce un nuevo entramado con personajes que debemos convencer para que nos entreguen sus cartas de recomendaci車n.
Esta reformulaci車n da pie, entre otras cosas, a un coliseo y a un minijuego de baile delirante, que es la clase de frivolidad que tambi谷n caracterizaba al original cuando no buscaba crear tensi車n (?qui谷n no recuerda a Hojo tomando el sol entre muchachas en bikini?). Y, matiz importante, encaja en el contexto de ayudar a Tifa, que en el remake explica con antelaci車n su plan y?ni por asomo requiere el nivel de urgencia que despu谷s adquiere el juego cuando Don Corneo revela que Shinra est芍 a punto de destruir el sector 7 dejando caer la placa superior sobre el barrio de los miembros de Avalancha. En PSX, esto lleva al r芍pido recorrido por un par de zonas breves, la alcantarilla a la que nos hace caer Don Corneo y el cementerio de trenes adyacente. En PS4, t谷cnicamente tambi谷n, pero ambas zonas se convierten en mazmorras de mayor extensi車n, el n迆mero de jefes escala de uno a tres, e incluso se introduce una nueva subtrama sobre fantasmas que quiz芍 perfila un poco mejor el pasado de Aeris, pero est芍 totalmente desligada del objetivo central en ese momento de la aventura.
Restricci車n redirigida: Mordiendo sin dientes
Es imposible se?alar el punto exacto en el que decir que Remake acusa la conversi車n de Midgar a juego completo se deja de percibir como cinismo porque variar芍 de persona a persona. En algunos casos ni siquiera existe tal punto. Pero tras la destrucci車n del sector 7 parece dif赤cil no notar que pasa algo, sobre todo porque aqu赤 el estudio da muestras de una restricci車n que no tiene en otros momentos y reduce considerablemente tanto los da?os materiales como los humanos: Wedge, anta?o baja de ese evento, sobrevive y ayuda a Aeris a evacuar la zona antes del desplome, lo que se salda con la posterior reaparici車n de m迆ltiples secundarios con nombre propio y la idea de que el barrio ya se empieza a reconstruir al tiempo que los protagonistas se aventuran m芍s all芍 de Midgar. No es un cambio menor, y es uno que adem芍s afecta al desarrollo cuando, tras el secuestro de Aeris en medio del caos, su madre insiste en no rescatarla para que nuestros h谷roes visiten las ruinas 每escena tr芍gica y efectiva, insistimos en que el juego muy rara vez falla en los momentos singulares每 y de paso recorran una mazmorra nueva que nos lleva de vuelta al punto de partida sin avanzar m芍s de unos pocos mil赤metros la trama.
Esta tendencia se mantiene con el regreso a las alcantarillas bajo mercado Muro, otra vez de la mano de una subtrama in谷dita que seguramente tenga relevancia para un juego futuro 每tanto por la reaparici車n de Don Corneo como la de Leslie每, aunque aqu赤 sigue retrasando una ascensi車n antes casi inmediata al edificio de Shinra. Ya arriba el juego s赤 encauza hacia el cl赤max con exposici車n pendiente, algunos homenajes y la brillante puesta en escena de la que hace gala de forma constante 每?que quede claro que la intenci車n no es quejarse, sino se?alar consecuencias del cambio de enfoque!每, no sin antes sumergirnos en un largo recorrido por el laboratorio de los horrores del doctor Hojo. Pero es a la llegada al despacho del presidente Shinra cuando definitivamente se caen todas las m芍scaras y Remake empieza a revelar con claridad su plan mediante la aparici車n de Sefirot, que esta vez no solo asesina al propio presidente delante de los protagonistas 每en el original ocurr赤a fuera de c芍mara, antes de su llegada每, tambi谷n ensarta a Barret como un pincho moruno. Aunque el shock dura poco porque, tras superar un combate, los Ecos reaparecen y lo curan.
Ecos y metanarrativa: La historia como reacci車n
Antes de descender, ahora s赤, por la madriguera final, vale la pena tomarse un segundo para recordar la perogrullada de que el FF VII original fue una obra expresiva. Sea de forma m芍s superficial o profunda, el juego aborda los temas y emociones que los autores estimaron oportuno, y que luego pasaron a formar parte de la audiencia para crear un caldo de cultivo del que ahora brota Remake. Esto significa que s赤, el nuevo juego tambi谷n vuelve a ser una obra expresiva, pero adem芍s tiene un alto componente reactivo. Por si no hubiese quedado claro hasta entonces, el t赤tulo no se limita a narrar los eventos ya conocidos con algunas florituras extra, tambi谷n comenta activamente sobre las expectativas de los fans, que se manifiestan a trav谷s de los Ecos. Estos espectros encapuchados aparecen en varios momentos para asegurarse de que la historia no se desv赤a. Son ellos, por ejemplo, los que lesionan a Jessie cuando el juego hace el amago de no llevar a Cloud al segundo reactor de mako, facilitando as赤 su encuentro con Aeris en la iglesia. O los que luego permiten que los Turcos destruyan el pilar del sector 7 a pesar de que ya casi parezcan derrotados.
Dentro del universo del juego, su presencia se atribuye a la corriente vital del planeta, que tiene voluntad propia e intenta llevar a los personajes por el camino que desemboca en la misma conclusi車n que el original. Un recurso eminentemente metanarrativo porque la actuaci車n de estos Ecos va ligada a eventos reescritos adrede para subvertir las expectativas y justificar su presencia: atacan a Jessie porque primero el gui車n hace que Barret prescinda de Cloud para la misi車n, curan a Barret porque es puesto al alcance de Sefirot cuando antes no era el caso, etc谷tera. En funci車n de su futura implementaci車n, esta nueva visi車n del destino podr赤a recontextualizar el original, ya que desplazar赤a el locus de control desde una posici車n interna a una externa. Adem芍s, la nueva direcci車n tambi谷n implica que el rumbo predefinido conduce a un desenlace negativo que se debe evitar: durante la pelea contra Presagio, la manifestaci車n final del destino, los protagonistas tienen visiones en forma de flashforward hacia sucesos que te車ricamente deber赤an ocurrir en la segunda 每o tercera每 parte, pero son interpretados de viva voz como un fracaso, as赤 que derrotan a la criatura para liberarse y escribir su propio futuro.
Remake 2.0: Aeris (No) Morir芍
Seguramente no haga falta especificar que si los Echos equivalen a los fans que atesoran la historia original, durante esta batalla el grupo de h谷roes representa a la c迆pula creativa del proyecto luchando de forma simb車lica 每y poco sutil每 para conseguir un mayor grado de libertad en el desarrollo de las siguientes entregas. Final Fantasy VII Remake no es, por tanto, un remake en el sentido tradicional de la palabra, sino un juego nuevo que se solapa sobre el original y act迆a como pseudo secuela de un modo similar a las pel赤culas de Evangelion respecto a la serie, que adem芍s necesita como suplemento por utilizarla como atajo para ahorrar exposici車n narrativa. La parte positiva para puristas es que lo que ocurri車 en PSX ya ha ocurrido y no se va a borrar. Aunque de una forma algo m芍s cr赤ptica, los propios creadores se aseguran de introducir la supervivencia de Zack, que tambi谷n est芍 ligada a la derrota del destino a manos de nuestros h谷roes, pero surte efecto en una l赤nea temporal 每o dimensional每 diferente a la que estamos jugando durante Remake, evidenciando as赤 la existencia de varios planos, universos, lo que sea, entre los que por l車gica se encuentra el juego de 1997.
Huelga decir que esto abre su propia caja de los truenos, ya que a partir de ahora el estudio no solo tiene carta blanca para alterar eventos clave como la muerte de Aeris, o reintroducir a una Jessie cuya cinta del pelo podemos ver sobre la mesa junto a la que se recupera Biggs durante la secuencia final. Tambi谷n puede cruzar diferentes universos, algo que ya queda patente en esta entrega mediante la implementaci車n de un Sefirot que definitivamente sabe m芍s que el original, aparece desde casi el principio y juguetea en otro tono con Cloud, al que ve m芍s como potencial aliado que como rival. El hecho de que el estudio exprima de forma tan prematura su enfrentamiento, e incluso la imaginer赤a del duelo final en el horizonte de la creaci車n, es una se?al casi inequ赤voca de que tienen otros planes para el futuro de estos personajes. Es a la vez una genialidad y una temeridad cuyos resultados pueden ser desastrosos, pero que solo se podr芍n valorar a la larga, cuando veamos la imagen completa. De momento toca aceptar que Remake ya no es tal y que, como la frase antes del corte a cr谷ditos adelanta, a partir de ahora nos adentramos en un Final Fantasy nuevo.
- RPG
- Acci車n
Final Fantasy VII Remake es una nueva versi車n del c谷lebre J-RPG de Square Enix para PlayStation 4 con un apartado t谷cnico de nueva generaci車n para un t赤tulo que se lanz車 por primera vez en 1997 y se considera universalmente como t赤tulo de referencia del g谷nero RPG. A la cabeza del desarrollo estar芍n los miembros clave del proyecto original: el productor Yoshinori Kitase, el director Tetsuya Nomura y el guionista Kazushige Nojima. El mundo est芍 dominado por la compa?赤a el谷ctrica Shinra, una siniestra corporaci車n que controla la energ赤a mako, la fuerza vital del planeta. En la enorme ciudad de Midgar, una organizaci車n contraria a Shinra llamada Avalancha intensifica su resistencia. Cloud Strife, un antiguo miembro de la unidad de 谷lite Soldado convertido en mercenario, presta su ayuda al grupo sin saber las 谷picas consecuencias que esto acarrear芍.