Luna: The Shadow Dust; An¨¢lisis

El cada vez m¨¢s floreciente sector independiente del videojuego no deja de darnos alegr¨ªas y sorpresas a cada d¨ªa que pasa. En esta ocasi¨®n, nos encontramos con una peque?a delicia audiovisual en forma de aventura gr¨¢fica con una puesta en escena realmente arrebatadora. Detr¨¢s de este m¨¢s que atractivo juego se encuentra el modesto estudio novel Lantern Studio, originario de la lejana China. Sus integrantes son el director art¨ªstico Beidi Guo,Fox como manager del proyecto, Wang Guan programador con experiencia en varios t¨ªtulos de Ubisoft, y Wang Qian como compositora de todo el apartado sonoro. La idea original del t¨ªtulo se remonta al ya m¨¢s que lejano 2007, cuando Beidi produjo un corto animado estudiantil sobre un hombre que pilota la Luna alrededor de la Tierra. Con dicho corto como inspiraci¨®n y referencia, crearon una peque?a demo conceptual de la obra que ten¨ªan en mente, y tras moverlas en varios c¨ªrculos del sector, decidieron lanzar una campa?a de financiaci¨®n en Kickstarter para poder sacar su obra adelante. Debido a sus obligaciones laborales, los integrantes del equipo se dispersaron por el globo y el desarrollo del t¨ªtulo se resinti¨®, hasta que finalmente en 2017 deciden poner toda la carne en el asador y dejan sus trabajos para dedicarse por entero a finalizar su prometedora aventura gr¨¢fica.

?Una de las principales fuentes de inspiraci¨®n para Luna: The Shadow Dust fue la obra de la afamada escritora de ciencia ficci¨®n americana Ursula Kroeber Le Guin, en concreto las obras pertenecientes al ciclo de Terramar. Lejos de tratar la ya manida lucha entre el bien y el mal, el t¨ªtulo habla del equilibrio entre ambas. Para la promoci¨®n del juego se ha empleado la frase ¡°encender una vela supone invocar una sombra¡±, oraci¨®n perteneciente a una de las novelas del ciclo de Terramar mencionado. A la hora de enumerar las inspiraciones recibidas del sector del videojuego, los creadores del t¨ªtulo mencionan el cl¨¢sico de los 90 The Neverhood, as¨ª como los m¨¢s recientes Machinarium y la trilog¨ªa Samorost de nuestros venerados Amanita Design, junto con el soberbio juego de puzles Gorogoa. Casi nada para un estudio novel que nos presenta su primera obra.

La otra gran influencia mencionada resulta m¨¢s que evidente. Y es que si por algo destaca Luna: The Shadow Dust es por su majestuosa puesta en escena, con un apartado visual delicioso, trabajad¨ªsimo y realmente bello y evocador, y que inevitablemente nos recuerda a la obra de esa fuente inagotable de fantas¨ªa y magia que es el estudio Ghibli. Se nota la pleites¨ªa que los creadores de esta obra sienten por el estudio del genio Hayao Miyazaki y compa?¨ªa. Cada pantalla nos deja estampas de una calidad y belleza admirables, con un trabajo de animaciones tit¨¢nico, y con una serie de secuencias animadas fant¨¢sticas creadas con gran mimo y dedicaci¨®n. La obra de los artistas Shaun Tan y Jean Giraud se nombran tambi¨¦n como fuente de inspiraci¨®n de un apartado visual realmente atractivo.

As¨ª pues, estamos ante una atractiva aventura gr¨¢fica visualmente arrebatadora, que nos ofrece una historia narrada sin absolutamente ninguna l¨ªnea de di¨¢logo, y que nos ofrece un desarrollo sazonado de unas emotivas escenas cinem¨¢ticas que buscan imitar las sensaciones que nos deja la filmograf¨ªa del estudio Ghibli.

El equilibrio entre la luz y la oscuridad

Al comienzo de la aventura, en una secuencia introductoria que ya comienza a lucir todas las bondades audiovisuales que hemos comentado, vemos a un joven cayendo al vac¨ªo desde una gran altura, siendo salvado en el ¨²ltimo instante por una misteriosa luz. Tras unos desconcertados primeros pasos, vemos como ante ¨¦l se alza una misteriosa y oscura torre de herc¨²leas proporciones. Para reestablecer el equilibrio perdido en el m¨¢gico mundo donde transcurre la aventura, nuestro intr¨¦pido protagonista deber¨¢ llegar a la cumbre de la torre para devolver la luna a su lugar en el cielo y devolver el orden al mundo. Al poco de adentrarse en la torre encontrar¨¢ un fiel aliado, en forma de un curioso animal peludo de cuatro patas, del cual resultar¨¢ inseparable.

Debemos destacar la arriesgada apuesta narrativa de la que hace gala el juego, renegando de forma absoluta de cualquier forma de texto o di¨¢logo. Todo lo que se cuenta en el juego se hace a trav¨¦s de unas espectaculares y preciosas escenas cinem¨¢ticas, y a trav¨¦s de los escenarios en s¨ª. Dicha apuesta cumple con creces para contarnos una emotiva y ¨¦pica historia de coraje mientras acompa?amos a nuestro intr¨¦pido d¨²o para desentra?ar el oscuro misterio que se esconde tras esta misteriosa torre al filo del fin del mundo.

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Aventura gr¨¢fica estilo Amanita

A nivel jugable, estamos ante una aventura point and clic que sigue en gran medida las directrices marcadas en los t¨ªtulos del genial estudio checo responsable de Machinarium o la trilog¨ªa Samorost, siendo estos una fuente de inspiraci¨®n para los creadores de esta aventura como ya comentamos unos p¨¢rrafos m¨¢s atr¨¢s. El puntero contextual empleado para manejar el t¨ªtulo? adoptar¨¢ formas distintas para las acciones de andar o interactuar, y en todo momento podremos alternar el control del chico de nombre desconocido o de su peludo y adorable acompa?ante, los cuales deber¨¢n cooperar para resolver muchos de los obst¨¢culos que encontremos. Cada piso de la torre ejercer¨¢ como un puzle cerrado en s¨ª mismo, de forma que nos limitar¨¢ el rango de acci¨®n, simplificando la resoluci¨®n de cada uno de ellos al ser totalmente independientes. Encontramos una buena variedad de mec¨¢nicas en los puzles, pero desgraciadamente no se profundiza apenas nada en cada una de ellas, dejando la sensaci¨®n de que a los puzles les falta chispa y profundidad.

Esto resulta especialmente decepcionante con la mec¨¢nica de luces y sombras, que adem¨¢s de para la narrativa como parte de la historia, adquiere vital importancia como mec¨¢nica jugable para un par de puzles, pero deja la sensaci¨®n de que se pod¨ªa haber profundizado m¨¢s en ella y que daba para plantear rompecabezas m¨¢s interesantes y complejos. Adem¨¢s, el planteamiento de un par de estos puzles resulta algo obtuso y dificulta su resoluci¨®n por razones err¨®neas ajenas al reto que deber¨ªan ofrecer, revocando que nos atasquemos en ellos sin tener porqu¨¦. A nivel de jugabilidad y mec¨¢nicas jugables, Luna: The Shadow Dust ofrece un desempe?o competente pero que queda muy lejos de los grandes del g¨¦nero, dejando la sensaci¨®n de que pod¨ªa ofrecer mucho m¨¢s, especialmente esa introducci¨®n del juego de luces y sombras que se queda en algo meramente anecd¨®tico.

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Desafortunadamente, tampoco estamos ante un t¨ªtulo excesivamente largo. La aventura nos dur¨® en torno a las 5-6 horas, y eso que nos atascamos un par de veces debido al planteamiento del alg¨²n puzle. En general, dichos puzles no son complicados, y pese la escasa duraci¨®n, se disfruta mucho mientras dura. Como ya hemos comentado, el juego no presenta ning¨²n tipo de texto, ni siquiera en sus men¨²s, por lo que no hay que preocuparse por el idioma para poder disfrutar de la aventura, ya que todo lo que aqu¨ª se narra se hace a trav¨¦s de un apartado audiovisual escandalosamente atractivo.

Fantas¨ªa audiovisual al estilo Ghibli

El indiscutible punto fuerte del t¨ªtulo de Lantern Studio es un apartado visual soberbio y simple y llanamente delicioso. El trabajo puesto en el apartado gr¨¢fico es tit¨¢nico y derrocha una pasi¨®n y un mimo tremendos. Se ha realizado un trabajo de animaci¨®n tradicional imagen por imagen, con 12 im¨¢genes por segundo y 3 capas por imagen. La direcci¨®n art¨ªstica, deudora inequ¨ªvoca del trabajo del estudio del se?or Miyazaki, es soberbia y plasma en pantalla una f¨¢bula animada atractiva como pocas. La recreaci¨®n de los escenarios, el nivel de detalle y la imaginer¨ªa de la que hacen gala resultan ser un regalo para la vista. La paleta de colores empleada es c¨¢lida y muy acertada, reflejando de manera estupenda esa dicotom¨ªa entre luz y oscuridad tan inherente al t¨ªtulo en s¨ª. Las escenas cinem¨¢ticas son otra maravilla, dejando momentos ¨¦picos, entra?ables y m¨¢gicos.

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La banda sonora no se queda atr¨¢s, con temas evocadores, emotivos y que saben sumergir por completo al jugador en la aventura en todo momento. Es incre¨ªble encontrar una banda sonora de esta entidad, con tantos matices y tanta calidad, en un t¨ªtulo de un modesto equipo independiente. El envoltorio de esta m¨¢gica aventura no podr¨ªa ser m¨¢s atractivo, y no tiene nada que envidiar a producciones mucho mayores con presupuestos infinitamente m¨¢s inflados que con el que ha contado esta bella f¨¢bula animada de incomparable puesta en escena.