Dirt Rally 2.0, an¨¢lisis

La firma brit¨¢nica Codemasters es todo un referente en videojuegos de conducci¨®n. De los casi treinta y cinco a?os que lleva en activa la compa?¨ªa m¨¢s de la mitad de sus lanzamientos est¨¢n ligados con el mundo del motor y eso, quieras que no, les otorga una experiencia acumulada bastante generosa. No todos han sido desarrollados por ellos pero s¨ª en cierto modo han sido acariciados por su mano en alguna que otra caracter¨ªstica. Tambi¨¦n han sufrido patinazos ¡ªcomo casi todos nosotros a lo largo de nuestra vida¡ª pero ninguno de ellos les ha hecho cesar en su intento de conseguir los mejores videojuegos de automovilismo. Les han dado fuerza.

Ampliar

Su ¨²ltimo jugueteo con el mundo del rali por parte de Codemasters vino abrazado por Dirt 4, un videojuego que si bien era lo suficientemente divertido y jugable como para atraer a todo tipo de p¨²blico amante de la conducci¨®n en terrenos irregulares, no era lo suficientemente realista como para agradar a los entusiastas de este deporte. Por ello los ingleses han querido dar continuaci¨®n al que ha sido durante mucho tiempo el mejor simulador de ralis en formato multiplataforma con Dirt Rally 2.0.

Dirt Rally 2.0, ?una simple actualizaci¨®n?

Lo que tenemos ante nosotros bien podr¨ªa decirse que es una actualizaci¨®n de lo que vimos en el primer t¨ªtulo. Quiz¨¢s ese 2.0 que se firma en cada caja del producto se refiere a esto mismo. No es un juego que vaya a sorprendernos de buenas a primeras, m¨¢s bien hay que explotarlo para entender las mejoras que trae consigo. Siguiendo la estela de calidad mejor que cantidad, lo cierto es que Dirt Rally 2.0 podr¨ªa tener m¨¢s nota si no fuera porque se repiten los mismos errores que con su antecesor. En el primer videojuego se pod¨ªa perdonar, todo era nuevo para los jugadores y la calidad que atesoraba ocultaba su gran defecto, la variedad, pero en esta nueva entrega ped¨ªamos algo m¨¢s que Codemasters no nos ha otorgado.

Modo Mi Equipo y modo Juego Libre son las dos ¨²nicas pesta?as en las que nos vamos a mover durante las cientos de horas que puede durarnos el software. Dos formas de disfrutar Dirt Rally 2.0 que se nos antojan escasas por varios motivos que a continuaci¨®n queremos resumir. En la modalidad Mi Equipo lo l¨®gico ¡ªy habitual en la mayor¨ªa de productos actuales de conducci¨®n¡ª ser¨ªa que un hilo conductor nos llevara de la mano para que nuestra escuadra mejorara su veh¨ªculo, formaci¨®n o ingenieros a lo largo de varias temporadas. Lo que Codemasters nos propone es una sucesi¨®n de pruebas aleatorias en tramos de rali y Rallycross sin gui¨®n alguno donde competimos contra la IA o contra el marcador online en pruebas diarias o semanales. Seg¨²n la posici¨®n obtenida ganamos cr¨¦ditos para contratar nuevos ingenieros o desbloquear mejoras y coches. Nada m¨¢s. A?adir un modo historia similar al que Fifa incluye en El Camino ser¨ªa quiz¨¢s hilar demasiado fino pero nos conform¨¢bamos con que diera una sensaci¨®n de progreso que nos impulsara a seguir jugando, completando temporadas, mejorando el equipo de forma m¨¢s natural y, en definitiva, a mantenernos pegados al modo Mi Equipo.

En Juego Libre tenemos cuatro opciones, a saber entre; Campeonatos Hist¨®ricos, FIA World Rallycross Championship, A Medida y Contrareloj. El primero de ellos nos da la posibilidad de competir con veh¨ªculos que han hecho historia en el mundo de los ralis como bien podr¨ªa ser el Lancia Fulvia HF, el Alpine Renault A110 1600 S o el famoso Subaru Impreza del fallecido Colin McRae. Es un excelente punto de partida para iniciarse en Dirt Rally 2.0 puesto que su dificultad ¡ªde la que hablaremos m¨¢s adelante¡ª es menor debido a la ¡°escasa¡± motorizaci¨®n y electr¨®nica de los veh¨ªculos comparada con los m¨¢s actuales. El segundo nos deja disfrutar de la licencia oficial de la FIA World Rallycross y experimentar las sensaciones de tama?a competici¨®n por ocho pistas ubicadas en diferentes localidades y cuatro categor¨ªas. En A Medida podemos crear nuestro campeonato a nuestro antojo tanto de ralis como de Rallycross, incluida la posibilidad de buscas salas creadas por otros usuarios o confeccionar la nuestra propia. Contrareloj es, como su nombre indica, un modo en el que competimos contra nosotros mismos con el fin de mejorar nuestros tiempos en cualquiera de las etapas incluidas en Dirt Rally 2.0.

Ampliar

Las carreras contra otros jugadores por medio de la red de redes en las que hemos tenido la oportunidad de participar se han sucedido sin problema alguno de lag o ca¨ªdas repentinas. La b¨²squeda de salas ha sido r¨¢pida y no hemos tenido inconvenientes a la hora de entrar en alguna. Todo nos ha parecido bastante estable aunque es cierto que el videojuego todav¨ªa no est¨¢ en las tiendas y los jugadores con los que nos hemos cruzado eran pocos. No hay demasiadas opciones a configurar a la hora de crear un campeonato pero s¨ª lo b¨¢sico y suficiente como para hacer cada partida diferente.

Los jugadores de PlayStation 4 que renieguen del servicio de suscripci¨®n PlayStation Plus est¨¢n de enhorabuena pues en Dirt Rally 2.0 es posible competir contra otros jugadores sin estar abonados al servicio, aunque con matices. Si estamos suscritos podemos acceder sin restricciones a campeonatos en los modo rali y rallycross, pero si no se da el caso tenemos la oportunidad de competir en ralis ¨²nicamente. La modalidad rallycross ¡ªpor su naturaleza multijugador en circuitos cerrados¡ª queda restringida para aquellos que no posean PlayStation Plus. Sin duda un punto favorable para el videojuego a tener en cuenta.

Ampliar

Estas son ni m¨¢s ni menos las opciones jugables por donde navegar durante la cantidad de tiempo indeterminado que disfrutemos del t¨ªtulo. La alarmante falta de contenido ¡ªb¨¢sicamente la oferta sigue siendo la misma de Dirt Rally¡ª juega un papel en contra a la hora de decantarnos por esta nueva entrega y era algo que esper¨¢bamos que solucionaran. Como ideas a incluir pens¨¢bamos en los mini juegos de Dirt 4, posibilidad de competir a pantalla partida ¡ªno existe en ning¨²n modo de juego¡ª o incluso una suerte de escuela que nos ayudara a entender el comportamiento de los 50 veh¨ªculos que atesora el programa; c¨®mo tomar las curvas, consejos para derrapar sin salirnos de la calzada, estabilizaci¨®n del veh¨ªculo etc.

Porque otra cosa no, pero Dirt Rally 2.0 es un juego complejo per se. Cada veh¨ªculo se comporta diferente al anterior y las f¨ªsicas est¨¢n a un alto nivel. No llega a ser un simulador al uso como iRacing o el multiplataformas Project Cars 2 pero s¨ª se requieren conocimientos de conducci¨®n en terrenos irregulares y de los propios veh¨ªculos ¨Ctracci¨®n, par, ch¨¢sis, motor, cv, etc¨C para disfrutar de la experiencia. Coquetea mucho con la realidad pero no al mismo nivel que los citados previamente. Es algo m¨¢s accesible pero muy duro de dominar y eso puede hacer mella en jugadores poco habituados a este estilo de juego. Es por eso que un modo Escuela o Entrenamiento le vendr¨ªa de perlas a este producto de Codemasters ya que son muchos los aficionados al rali que pueden no contar con la misma pericia de la que disponen los pilotos que siguen.

Novedades, mejoras y ausencias

Sin dejar a un lado el tema de las ausencias en Dirt Rally 2.0 tenemos que destacar que en esta ocasi¨®n las etapas con hielo o nieve han desaparecido. En su lugar ahora solo encontramos tierra, barro, grava y asfalto con la posibilidad de correr a cualquier hora del d¨ªa o a?adiendo lluvia como componente climatol¨®gico adverso. No se entiende c¨®mo han desechado la idea de a?adir dos condiciones que ofrecen tanta diversi¨®n en este tipo de juegos. No obstante es cierto que se esperan diferentes contenidos v¨ªa descarga as¨ª que esperamos que en alguno de ellos se incluyan dichas condiciones.

Ampliar

Pasamos ahora a las novedades y entre ellas tenemos los diferentes veh¨ªculos que se han a?adido a esta continuaci¨®n as¨ª como los entornos donde vamos a domar a dichas bestias de cuatro ruedas. Nueva Zelanda, Argentina, Espa?a, Polonia Australia y Estado Unidos son las escogidas en esta ocasi¨®n y son espectaculares, no solo por la variedad de entramados que contienen si no tambi¨¦n por la vistosidad de las mismas. Contienen etapas largas, algunas de m¨¢s de 10 minutos, pero tambi¨¦n otras m¨¢s cortas donde la carrera contra el tiempo se hace algo m¨¢s amena. En la categor¨ªa Rallycross se nos emplaza a Barcelona, Montalegre, Mettet, Loh¨¦ac Bretagne, Trois-Rivieres, Hell, Holjes y Silverstone. Aqu¨ª, como ya conocer¨¦is de la anterior entrega o si sois aficionados a esta disciplina, competimos contra otros corredores dirigidos por una IA bastante competente y agresiva a lo largo de un circuito cerrado que puede presentar diferentes tipos de asfalto. Es el escenario perfecto para las grandes bestias de Dirt Rally 2.0 y donde se viven los momentos m¨¢s fren¨¦ticos.

Pero sin duda la mayor mejora recibida en esta nueva iteraci¨®n la hallamos en las f¨ªsicas y en el control de los veh¨ªculos. Ambos apartados han recibido una actualizaci¨®n sorprendente y que hacen por transmitir al jugador una fidedigna recreaci¨®n de c¨®mo se siente un piloto de ralis. Los veh¨ªculos de tracci¨®n trasera y delantera son m¨¢s fieles en comportamiento, los derrapes son ahora m¨¢s complejos y tienen m¨¢s en cuenta la superficie donde se realizan, las aver¨ªas en los coches abordan mejor la problem¨¢tica real que ello supone y el terreno que pisamos cuenta con m¨¢s posibilidades f¨ªsicas. Pisar hierba, un charco, asfalto mojado, un peque?o bad¨¦n o barro hace que el coche se comporte de forma a¨²n m¨¢s realista que en el primer Dirt Rally. Todo ello mejorado gracias al feedback de los jugadores y a los consejos del reputado piloto de ralis Jon Armstrong que ha ofrecido sus servicios a Codemasters para afinar el videojuego.

Ampliar

Como dec¨ªamos anteriormente, no estamos ante un simulador hecho y derecho, pero s¨ª ante un t¨ªtulo que ha simplificado esa definici¨®n hasta convertirla en un simil a efectos pr¨¢cticos. Todas las f¨ªsicas se recrean como en la vida real sin ahogar al jugador, al mismo tiempo que lo estrangula. Es un vive y deja vivir constante que obliga al usuario a memorizar todas las etapas, desniveles, curvas y comportamientos del coche si quiere superar al crono. Adem¨¢s las diferentes ayudas a la conducci¨®n que se nos proponen pueden quiz¨¢s no ser suficientes para un jugador poco experimentado, al contrario que ocurre en otros productos donde pr¨¢cticamente el usuario poco o nada controla el veh¨ªculo. El resultado final en Dirt Rally 2.0 es inmejorable, digno de alabanza y el mejor ejemplo de c¨®mo trasladar una experiencia real a nuestros hogares. Una aut¨¦ntica bestialidad.

No pod¨ªamos cerrar este apartado de mejoras sin hablar del control. Codemasters se ha empleado a conciencia para trasladar la experiencia de pilotar un coche de ralis a nuestros mandos DualShock 4. El coche responde mejor a los impulsos de nuestro anal¨®gico, la vibraci¨®n juega estupendamente con los niveles de intensidad y el control en general es exquisito, mucho mejor que en su antecesor. Pero, obviamente, la cosa cambia mucho m¨¢s si usamos un volante donde las mejoras son mucho m¨¢s evidentes, sobre todo si el perif¨¦rico cuenta con Force Feedback. Desde las imperfecciones del terreno, la falta de potencia del motor, el pinchazo de una rueda, la falta de par, las curvas cerradas¡­ todo est¨¢ deliciosamente recreado. Si quer¨¦is disfrutar al cien por cien de Dirt Rally 2.0 os aconsejamos m¨ªnimo un volante con motor para aseguraros la mejor experiencia en carretera.

Apartado t¨¦cnico

Ampliar

De Dirt Rally dijimos en su an¨¢lisis que era ¡°bestialmente realista¡± y esa definici¨®n es doblemente v¨¢lida en su edici¨®n 2.0 no solo por las evidentes mejoras jugables si no tambi¨¦n por la t¨¦cnica. Puede que gr¨¢ficamente no sea lo mejor de la generaci¨®n pero lo que aparece en pantalla est¨¢ a un nivel sobresaliente, lleno de realismo y perfectamente construido. Las texturas est¨¢n a una gran calidad, la distancia de visi¨®n es magn¨ªfica y los coches est¨¢n llenos de detalles. Hay algunos errores con el sombreado y en la carga de elementos del escenario pero para nada empeora la experiencia de juego y sabemos que est¨¢n trabajando en ello. Adem¨¢s Dirt Rally 2.0 funciona a 1080p y a unos muy estables 60fps que tan solo se resienten t¨ªmidamente en muy pocas ocasiones ¡ªcomo cuando entramos en un tramo con edificios¡ª.

Calificaci¨®n summa cum laude para el apartado de iluminaci¨®n y sombreado. Incre¨ªble. Los rayos del todopoderoso sol atravesando las hojas, los faros del veh¨ªculo iluminando el entorno ¡ªo la falta de uno de ellos¡ª , las sombras din¨¢micas de los ¨¢rboles proyectadas sobre el coche, la espectacular recreaci¨®n de las diferentes horas del d¨ªa en carretera¡­ est¨¢ todo a otro nivel. Esto unido al excelente trabajo en general en materia gr¨¢fica hacen de Dirt Rally 2.0 un videojuego muy vistoso y agradable de ver.

Ampliar

En el apartado sonoro contamos con los diferentes sonidos de los motores de cada veh¨ªculo a muy buena calidad, voces en castellano para el copiloto y una banda sonora bastante discreta que no echaremos de menos. En el primer t¨ªtulo hubo problemas con las voces del copiloto y a veces cambiaban de registro, algo que en esta ocasi¨®n no ocurre. Adem¨¢s las se?as que ofrece nuestro ayudante son claras, con diferentes tonalidades de voz que acompa?an a la perfecci¨®n al momento y son muy ¡ªpero que muy¡ª ¨²tiles en carrera. En m¨¢s de una ocasi¨®n hemos visto c¨®mo en pruebas nocturnas y sin faros apenas pod¨ªamos divisar la carretera pero tan solo escuchando a nuestro copiloto hemos podido salvar la situaci¨®n.

Hemos hecho este an¨¢lisis en base a una versi¨®n descargable para PlayStation 4.