Apex Legends, impresiones: Respawn vuelve al riesgo

Electronic Arts nos sorprend¨ªa el pasado d¨ªa 4 con la llegada de un nuevo Battle Royale de las mism¨ªsimas manos de Respawn Entertainment, quiz¨¢ uno de los mejores estudios en lo que a shooter se refiere. Apex Legends es la demostraci¨®n de la versatilidad del equipo liderado por Vince Zampella, capaz de ofrecer lo mejor de s¨ª mismos y apostando siempre por dar un giro de tuerca al clasicismo.

Ahora, tras nuestras primeras horas en el despiadado Ca?¨®n de los Reyes, os dejamos cu¨¢les son las principales diferencias con su saga troncal, Titanfall, y c¨®mo se eleva como una apuesta de enorme potencial dentro del campo de batalla que es el Battle Royale en estos momentos.

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Ausencia de Titan, misma alma

Los primeros instantes de juego pasan por recrear los mismos movimientos que hicimos como pilotos en las dos entregas anteriores. El control se siente similar, de suave movimiento y menor velocidad, como si de una peque?a evoluci¨®n se tratara dentro del af¨¢n del estudio por pulir toda arista posible. Hay que tener en cuenta la ausencia de dos rasgos caracter¨ªsticos: por un lado, el doble salto, y por otro, todo atisbo de parkour. Ya no podremos movernos por las paredes ni alcanzar la verticalidad de las estructuras simplemente con nuestro hacer.

Pese a ello, la mentalidad Titanfall permanece intacta. Se echan en falta durante los instantes iniciales, pero una vez estamos inmersos en combate poco queda que desear. El principal motivo de ello radica en el traslado de la esencia de las clases ya vistas en la segunda entrega. Si record¨¢is bien, la mayor evoluci¨®n entre el original y la secuela consist¨ªa en la disposici¨®n de habilidades ¨²nicas seg¨²n el arquetipo de personaje elegido. Desde uno capaz de lanzar un gancho, pasando por el t¨ªpico lanzase?uelos hasta la invisibilidad tan demandada.

De esa perspectiva se ha mutado hacia un camino m¨¢s ligado al hero shooter. De lanzamiento, contamos con ocho diferentes, y se expandir¨¢n a medida que pasen los meses. Cada una de ellas cuenta con una habilidad activa, cuyo tiempo de regeneraci¨®n var¨ªa alrededor de los treinta segundos de refresco, otra a modo de ultimate, cargada progresivamente seg¨²n acumulado de tiempo y por nuestro hacer en el campo de batalla, adem¨¢s de un rasgo pasivo. Para ejemplificarlo con claridad, Bloodhound puede ver las pisadas de los enemigos cercanos, pudiendo ver su silueta en la cercan¨ªa al activar su habilidad. Si vamos m¨¢s all¨¢, su ultimate nos da un aumento dr¨¢stico de velocidad y aumenta el alcance de visi¨®n de siluetas durante un breve periodo de tiempo.

Al contrario de lo que cabr¨ªa pensar, las primeras horas han sido mucho m¨¢s equilibradas respecto a la impresi¨®n que daba previamente. No es f¨¢cil dar con la tecla en un videojuego que ofrece tanta variedad de leyendas y rasgos. De la misma manera ocurre si echamos un vistazo al equipamiento; accesorios, armamento y utensilios de combate extra¨ªdos directamente de los anteriores y muy bien diferenciados entre s¨ª. Es toda una gozada disparar, gracias a la herencia de un gunplay privilegiado. Mezcla perfecta entre la acci¨®n directa de Call of Duty y un poquito m¨¢s de exigencia.

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Rompiendo la barrera de los desconocidos

Apex Legends est¨¢ muy lejos de ser un t¨ªtulo hecho con prisas. De hecho, lo depurado que resulta es sorprendente para un desarrollo llevado con el m¨¢s absoluto de los secretos. Si ponemos el foco en Respawn, tal como dec¨ªamos en anteriores l¨ªneas, siempre se han caracterizado por apostar por nuevas mec¨¢nicas dentro de f¨®rmulas con poco margen a la creatividad. En este caso concreto, la principal se?a de identidad en sus inicios consiste en la escuadra de tres jugadores, cuyo planteamiento de juego vive por y para la cooperaci¨®n.

Al entrar en matchmaking, se nos unir¨¢ a otros dos jugadores, y uno del grupo har¨¢ las veces de lider de escuadr¨®n. Antes de la pantalla de carga, podremos elegir nuestro rol en el equipo seg¨²n el orden en el que estemos, como si de una transici¨®n de picks and bans se tratara. Una vez realizado, pasamos a la pantalla de salto, cuyo lugar de salto lo decidir¨¢ el l¨ªder siguiendo las indicaciones que podemos dejar por el mapa presionando el bot¨®n R1 (en el mando de PlayStation). Durante la mitad del trayecto permaneceremos ligados a ¨¦l; sin embargo, si tarda demasiado, se nos abrir¨¢ la oportunidad de poder saltar en solitario, aunque no conviene hacerlo.

?Por qu¨¦? Pues porque el empaste de las clases es crucial si queremos salir con vida de los tiroteos. La docena de partidas que hemos disfrutado hasta el momento han tenido un denominador com¨²n: la cooperaci¨®n. Si bien el resto de Battle Royale deja un poco a su suerte el juego entre escuadrones, Apex Legends sumerge a los jugadores en una experiencia de ayuda forzada entre ellos. Y funciona.

Aunque Realm Royale, propuesta de Hi-Rez por hacerse un hueco, ya planteara esquemas similares, la regeneraci¨®n de compa?eros funciona de mejor manera aqu¨ª. Cuando un compa?ero muere, su cuerpo pasa a ser un caj¨®n de bot¨ªn con su esquela. Si nos acercamos, podremos recoger su bandera, un dispositivo capaz de revivirlo si nos acercamos con ella a las m¨¢quinas de regeneraci¨®n repartidas por el mapa. Como es natural, estos enclaves estar¨¢n bastante concurridos por los jugadores; ah¨ª entra el juego la estrategia personal. ?Merece la pena que me juegue el cuello para revivir y contar con m¨¢s ayuda, o intento ir por m¨ª mismo a ver si encuentro una mejor oportunidad? Las pantallas de espectador cobran m¨¢s sentido que nunca, ya que podemos y debemos esperar a que nuestros aliados hagan algo por nuestro cad¨¢ver.

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Una base perfecta sobre la que construir la alternativa a Blackout

El equipamiento tambi¨¦n ha sufrido peque?as modificaciones, como las armaduras. Las inyecciones de salud van m¨¢s all¨¢ de la curaci¨®n, por lo que tambi¨¦n encontraremos c¨¢psulas de energ¨ªa vitales para restablecer los segmentos de la armadura. En vez de romperse una vez desgastada, la recompensa radica en reutilizarla para poder llenar los n¨²cleos de nuevo. Como es natural, las diferentes rarezas siguen presentes a raz¨®n de b¨¢sica, rara, ¨¦pica y legendaria.

En conclusi¨®n, Apex Legends se postula como una fant¨¢stica alternativa a su gran competidor: Blackout. Al final y al cabo, tanto por mec¨¢nicas como por estilo, la obra de Treyarch es el m¨¢ximo rival de este free to play. Pero lo cierto es que desde Electronic Arts han hecho una campa?a de lanzamiento perfecta. En vez de desvelarlo a semanas de llegar al mercado (lo cual alimentar¨ªa las habladur¨ªas y comparativas), les da la oportunidad a los jugadores de que lo descubran por s¨ª mismos al momento. Esa es la raz¨®n por la que lleva m¨¢s de dos millones de jugadores por sus servidores.

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El futuro est¨¢ por definir. Ya se ha especificado el compromiso de los pr¨®ximos meses: ligar la monetizaci¨®n al apartado cosm¨¦tico, dejando que las leyendas y equipamiento sean completamente gratuitos. Todav¨ªa queda por revelar su hoja de rota, el contenido del pase de batalla y c¨®mo afrontar¨¢n el apasionante reto por conquistar los primeros puestos del g¨¦nero. Creednos: estamos ante la propuesta m¨¢s seria de la ¨²ltima oleada.