Carolina, adi¨®s al dolor

Pareci¨® una victoria sencilla (21-14 y 21-13), pero Carolina Mar¨ªn rompi¨® a llorar como no hab¨ªa hecho en todo el torneo. Tras vencer a Neslihan Yigit, las l¨¢grimas estaban justificadas: alcanzaba su sexta final europea seguida, lo hac¨ªa once meses despu¨¦s de destrozarse la rodilla izquierda (rotura del ligamento cruzado anterior y los meniscos interno y externo) y, adem¨¢s, estaba en casa, en un Polideportivo Municipal Gallur (Madrid) entregada a su campeona ol¨ªmpica. Pero hab¨ªa m¨¢s. ¡°Hizo un partido incre¨ªble, perfecto, pero nadie sabe que jug¨® con la rodilla inflamada, que no pod¨ªa estirarla del todo. Pudimos solucionarle eso para la final y la gan¨® muy bien¡±, revela uno de los fisioterapeutas de la onubense, Carlos de Santos, en conversaci¨®n con este peri¨®dico. ¡°Durante los Europeos (abril de 2022), los meses anteriores y los posteriores sent¨ª bastante dolor. Nunca par¨¦ de entrenar, pero s¨ª lo hac¨ªa con mucha incomodidad por esa inflamaci¨®n que se me generaba¡±, ampl¨ªa la propia Carolina, que esta semana volver¨¢ a competir en la capital, en un Madrid Spain Masters (debuta el mi¨¦rcoles, ante Line Kjaersfeldt) en el que parte como primera cabeza de serie.

El equipo al completo se puso a trabajar. ¡°A falta de una rodilla sana, pudimos emplear una mente privilegiada y un plan de juego muy bien desarrollado para que no sufriera tanto¡±, detalla el entrenador de Mar¨ªn, Fernando Rivas, sobre esa semifinal. En el ¨¢mbito psicol¨®gico, se desarroll¨® un trabajo atencional. ¡°Hab¨ªa seguridad m¨¦dica de que la rodilla no corr¨ªa riesgos. Sobre esa base, trabajamos con los recursos cognitivos para que la mente no visualizara situaciones de peligro. Si se desatan miedos, pensando que la rodilla te puede limitar, el cuerpo realiza movimientos y un control motor destinados a proteger el supuesto elemento en riesgo. El trabajo consisti¨® en dirigir la atenci¨®n y las emociones solamente al juego¡±, explica la psic¨®loga deportiva de la tres veces campeona mundial, Mar¨ªa Mart¨ªnez. Carlos, de forma espec¨ªfica, adem¨¢s de utilizar antiinflamatorios orales, realiz¨® trabajos de drenaje para liberar todo el l¨ªquido que la rodilla acumula con la intenci¨®n de protegerse. El proceso se repiti¨® durante varios meses m¨¢s.

Ampliar

Durante la lesi¨®n, Carolina se vio obligada a infiltrarse con ¨¢cido hialur¨®nico y factores de crecimiento (PRP). ¡°Con ello, se pretende crear una pel¨ªcula para conseguir estabilidad y que la rodilla sienta esa protecci¨®n¡±, desarrolla De Santos. En la vuelta a la competici¨®n, sin embargo, el dolor no cesaba. ¡°Con el ¨²nico con el que se quejaba era conmigo, porque esas cosas las tengo que saber, pero no se ha quejado nunca en p¨²blico¡±, ensalza el fisio de Mar¨ªn. ¡°Carolina ha competido, me consta, con mucho dolor. En los tres o cuatro meses despu¨¦s de los Europeos, sobre todo. No s¨¦ cu¨¢nto, porque eso depende del umbral de cada persona, pero lo hizo¡±, ratifica. Hasta diciembre. ¡°Mi rodilla sigue tocada¡±, avisa Carolina, matizando la alegr¨ªa, pero tambi¨¦n es rotunda. ¡°Finalmente, he dejado el dolor de lado¡±, no duda en afirmar. ¡°El menisco interno sigue tocado y hay que cuidarlo bastante, pero, al menos, el dolor lo hemos podido quitar. Fue entre finales del a?o pasado y principios de este. Eso hace que la manera de afrontar los entrenamientos y de aguantar las cargas sea mucho mejor¡±, celebra. Y con ella, todo el equipo. ¡°Ahora, la rodilla ya es pr¨¢cticamente un mal recuerdo¡±, dice Fernando.

Un cambio de plantillas, clave

¡°Hemos tocado muchas teclas¡±, anticipa Carolina. Adem¨¢s de seguir con las infiltraciones y de quitar l¨ªquido, en el camino hacia la ausencia de dolor fue clave un cambio de las plantillas para los pies. ¡°Dos o tres veces¡±, puntualiza, contabilizando las pruebas hasta dar con las indicadas. En el proceso, fue vital Manoli, la m¨¦dico del Consejo Superior de Deportes, al lado de la onubense desde que esta ten¨ªa 15 a?os. ¡°Acert¨® de lleno¡±, agradece el entrenador de la medalla de oro en R¨ªo de Janeiro, que reparte los m¨¦ritos. ¡°Guille (Guillermo S¨¢nchez, preparador f¨ªsico), Carlos... todos han dado en el clavo. A nivel mental, tambi¨¦n est¨¢bamos sufriendo mucho¡±, ampl¨ªa. Ah¨ª, entr¨® Mar¨ªa, que estructura el trabajo psicol¨®gico de los ¨²ltimos meses en tres ejes: el desarrollo de la paciencia, el control de la frustraci¨®n y el autoconocimiento del cuerpo. ¡°Me conozco mucho mejor a m¨ª misma y expreso emociones que antes conten¨ªa. Tambi¨¦n he desarrollado much¨ªsimo los niveles de paciencia. Una quiere avanzar m¨¢s de lo normal y no puede porque la rodilla se lo impide. A veces, es peor correr, porque eso te hace dar pasos hacia atr¨¢s¡±, expresa Mar¨ªn, evidenciando que el trabajo de Mar¨ªa ha dado sus frutos.

¡°Las etapas de superaci¨®n tienen m¨¢s que ver con objetivos cumplidos que con tiempos. Carolina deb¨ªa esperar a que su cuerpo se fuera restaurando a nivel f¨ªsico y fisiol¨®gico. Ha habido etapas de convivir con mucho dolor. Las ha superado todas y, por fin, puede afrontar el b¨¢dminton liberada de cualquier tensi¨®n f¨ªsica¡±, desmenuza la psic¨®loga deportiva. Esa idea, esa forma de entender el trascurso de los procesos ha sido vital durante la recuperaci¨®n, pero tambi¨¦n lo fue antes, con una reaparici¨®n que se retras¨® m¨¢s de lo deseado. Lo ut¨®pico era volver para ¡®sus¡¯ Mundiales de Huelva, en diciembre de 2021. Y no estuvieron tan lejos. ¡°En una rehabilitaci¨®n de cruzado, el tiempo m¨ªnimo son seis meses. Luego, hay estudios que indican un plazo m¨ªnimo de ocho. Era muy justo. Esa semana que estuvo en Huelva entren¨® muy bien, pensamos incluso que podr¨ªa haber competido, pero era m¨¢s ilusi¨®n que otra cosa¡±, recuerda Carlos. Los Mundiales se fueron como ya lo hab¨ªan hecho los Juegos de Tokio, el gran golpe. ¡°Esos Juegos no eran para m¨ª¡±, ha repetido Carolina en multitud de ocasiones, pensando ya en Par¨ªs 2024. ¡°A veces, salimos de las situaciones agarrados a una idea que nos conecta, que nos ilumina el camino. ¡®No eran para m¨ª¡¯ funciona como un salvavidas¡±, explica Mar¨ªa, d¨¢ndole sentido a la frase.

Una nueva Carolina... al 90%

Desde diciembre, los entrenamientos han cambiado por completo. ¡°Siempre hab¨ªa un peque?o dolor al que hab¨ªa que destinarle muchos recursos. Ahora, esos recursos se pueden destinar para otras cosas¡±, dice Fernando, con una nueva Carolina en construcci¨®n. En los Europeos, asegur¨® que la ¡°caja de herramientas¡± de la onubense se hab¨ªa llenado tras la lesi¨®n. En los ¨²ltimos meses, lo ha seguido haciendo. ¡°Hemos trabajado un tipo de ataque diferente, que jam¨¢s se ha hecho y que sale totalmente de su zona de confort, que requiere de mucha confianza y de muchos recursos mentales. Y lo hemos acompa?ado de algunas habilidades en la red, un punto del juego que hemos mejorado y puesto en pr¨¢ctica en los ¨²ltimos meses¡±, detalla. En Madrid, tambi¨¦n asegur¨® que su pupila s¨®lo estaba a un 60 o 70%. Ahora, asegura que incluso apunt¨® demasiado alto. ¡°Eso cre¨ªa yo. A toro pasado, creo que estaba incluso a menos¡±, admite. ?Y ahora? ¡°Al All England lleg¨® a un 90% de sus posibilidades f¨ªsicas y mentales¡±, no duda en afirmar.

En suelo brit¨¢nico, un proceso gripal (que a¨²n se intuye con una tos puntual y mocos) fren¨® el ascenso. ¡°Parece que nos hayan echado un mal de ojo¡±, lamenta Fernando, intentando quitarle hierro al asunto. ¡°En enero, me encontr¨¦ mucho mejor en cuanto a nivel de juego y sensaciones. En el aspecto f¨ªsico, notaba un d¨¦ficit, porque necesitaba ese puntito m¨¢s que me falta contra las jugadoras que est¨¢n ahora mismo en el top-3 mundial. En la preparaci¨®n para el All England, sin embargo, lo hab¨ªamos llevado muy bien. Desafortunadamente, entonces, lleg¨® la gripe¡±, desarrolla Carolina. Durante la gira asi¨¢tica que realiz¨® para iniciar el a?o, Rivas la vio en su mejor momento desde la lesi¨®n. ¡°Fue muy positiva. Gan¨® a las que ten¨ªa que ganar, con cuadros dif¨ªciles, y perdi¨® con las que pod¨ªa perder, entendiendo esto como que eran las que ahora est¨¢n m¨¢s fuertes. A nivel competitivo, estamos donde hay que estar. A detalles de esas jugadoras¡±, celebra el entrenador. Adi¨®s dolor, hola Carolina.