B?DMINTON | CAMPEONATO DE EUROPA
Carolina es infinita
La onubense, emocionada y 337 d¨ªas despu¨¦s de su grave lesi¨®n, logra su sexto Europeo seguido tras imponerse a Kirsty Gilmour en la final de Madrid.
Dinast¨ªa, legado, hegemon¨ªa, reinado. En la jerga del periodismo deportivo, es habitual hablar con grandilocuencia de aquellas gestas que acumulan a?os. Carolina Mar¨ªn justifica todas las hip¨¦rboles, hasta las empeque?ece. 337 d¨ªas despu¨¦s de su grave lesi¨®n en la rodilla izquierda (rotura del ligamento cruzado y de los meniscos interno y externo), la onubense, entre l¨¢grimas, recordando todo el dolor, se ha proclamado campeona de Europa por sexta vez seguida tras vencer a Kirsty Gilmour (21-10 y 21-12 en 42 minutos) en la final de Madrid. No lleg¨® a tiempo para el Mundial de su Huelva natal (en diciembre de 2021), pero su regreso merec¨ªa ser m¨¢gico. El Europeo estaba programado para la ciudad finlandesa de Lahti, pero una renuncia de ¨²ltima hora abri¨® las puertas de la capital, por las que, triunfante, en un Polideportivo Municipal Gallur espl¨¦ndido durante todo el torneo, ha desfilado la jugadora espa?ola ("este oro tambi¨¦n es vuestro", exclamaba Mar¨ªn tras la final). Con aplomo y brillantez, con respeto y ambici¨®n, con la justa medida que s¨®lo tienen los elegidos.
Su lugar, sin embargo, pese a la belleza y lo oportuno del momento, no est¨¢ aqu¨ª. No en un viejo continente en el que ha ganado todos sus partidos (56) menos uno. La danesa Tine Baun, en 2012, cosech¨® la ¨²nica victoria frente a la andaluza, en un Europeo que, a la postre, terminar¨ªa ganando. Lo guardar¨¢ con cari?o. Gilmour, pese a haber disputado, con esta, tres finales continentales contra la espa?ola (tambi¨¦n 2016 y 2017), no puede hacerlo. En Madrid, seguramente, se dio cuenta de que seguir¨ªa siendo as¨ª desde el "Carolina, Carolina" que, antes del primero golpe al volante, ya atron¨® en Gallur. Fue a m¨¢s, el p¨²blico, que aprovechaba el tiempo entre puntos para ampliar el repertorio de c¨¢nticos ("vamos, Carol, vamos", "vamos, campeona", "eres la mejor, Carolina", etc.), y la propia Mar¨ªn, inquebrantable en defensa, como en el rev¨¦s a ras de suelo que le conduc¨ªa al 16-8 del set inicial, y oportuna en ataque, como en el primer parcial importante del partido: cinco puntos seguidos para un 9-4 que romp¨ªa con la monoton¨ªa de los primeros intercambios.
"Me alegra mucho que las rivales me digan que me echaban de menos, luego no s¨¦ si se cansar¨¢n un poco de m¨ª...", revel¨® Mar¨ªn, con gracia, despu¨¦s de vencer a la turca Neslihan Yigit en semifinales. Gilmour, con un abrazo precioso nada m¨¢s caer, fue ejemplo de las dos realidades: le mostr¨® su respeto a la espa?ola, superior en todos los registros. T¨®nica dominante de un torneo en el que Carolina ha ido trazando el camino perfecto hacia su corona. Con la autoridad que demanda su estatus, con las veloces victorias frente a Katerina Tomalova y Maria Ulitina, con el saber sufrir que requiere todo ¨¦xito, en el ag¨®nico partido de cuartos ante Line Kjaersfeldt, y con el mensaje que, antes de toda final, se debe lanzar, con el solvente triunfo ante Yigit. "Con golpes que no hab¨ªamos visto nunca", como el remate en salto para el 20-10 de la primera manga, y con "una caja de herramientas" actualizada, como ha metaforizado la propia campeona ol¨ªmpica. En la segunda manga de la final, todas las posibilidades a relucir: vendaval desde el 2-2 al 15-8, intercambio largo para un 17-11 que deten¨ªa el amago de reacci¨®n escocesa y, de nuevo, defensa brillante antes de caerse al suelo, con las manos en la cara, entre l¨¢grimas, vencida por la emoci¨®n, para engrandecer una historia interminable. Infinita.
Lanzadera hacia Par¨ªs
Tras Madrid y sus ya ic¨®nicas im¨¢genes, como las de todos los familiares de rojo, animando desde las gradas con el lema "vamos, Carolina" luciendo en el pecho, Mar¨ªn pasar¨¢ el mes de junio en Indonesia, donde disputar¨¢ dos torneos. Luego, tras descansar una semana, viajar¨¢ a Malaysia. Tres semanas de entrenamientos en Sierra Nevada, ubicaci¨®n que ya utiliz¨® para preparar el Europeo, servir¨¢n para engrasar la m¨¢quina de cara al Campeonato del Mundo, la tercera semana de agosto en Tokio. Despu¨¦s de su sexto oro continental, Carolina quiere ser campeona del mundo por cuarta vez y oro ol¨ªmpico por segunda. "Lo que no consegu¨ª en Tokio (se lesion¨® a dos meses de los Juegos), lo quiero conseguir en Par¨ªs (2024)", ha reiterado antes, durante y despu¨¦s del torneo. Est¨¢ mucho m¨¢s cerca.
En categor¨ªa masculina, el dan¨¦s Viktor Axelsen se impuso a su compatriota Anders Antonsen por 21-17 y 21-15 en 43 minutos. Llegaban a la final madrile?a empatadas en cuanto a los resultados en sus enfrentamientos directos y el primero, adem¨¢s de conquistar el centro continental, decanta la balanza (5-4). Un golpe encima de la mesa dentro de la mayor rivalidad en un pa¨ªs, Dinamarca, que, a nivel europeo, acapara buena parte de los focos de la ¨¦lite internacional del b¨¢dminton, m¨¢s all¨¢ de Carolina Mar¨ªn. Axelsen, un jugador arrollador desde sus 194 cm de altura, es el n¨²mero uno del mundo y fue campe¨®n ol¨ªmpico en Tokio; Antonsen, m¨¢s t¨¢ctico, pero tambi¨¦n de f¨ªsico imponente, es 3? en el ranking y defend¨ªa t¨ªtulo europeo. La potencia de Viktor, con pleno de sets ganados durante la competici¨®n, y los errores cerca de la red se lo han quitado.