Los Dallas Cowboys echaron mucho de menos a Tony Romo
Los Giants fueron muy irregulares, pero tuvieron mucha m芍s pegada y dejaron en entredicho la capacidad de Prescott para sustituir al veterano quarterback.
Todos quer赤amos ver a Elliott, a Prescott y el ataque vertical de los Giants. Y todo eso lo vimos, no hay duda. Lo hicimos con cuentagotas, pero algo es algo. Lo que seguimos deseando ver es la l赤nea ofensiva de los Giants, que sigui車 de vacaciones gran parte del partido, y dos defensas a las que se lo pusieron f芍cil casi siempre, pero que aun as赤 mostraron sus limitaciones. Y sobre todo, los aficionados de los Cowboys terminaron deseando volver a ver a Tony Romo.
La defensa de los Cowboys lo tuvo muy claro desde el primer minuto. Para sobrevivir a un ataque de los Giants demasiado unidimensional en vertical, salieron con la lecci車n bien aprendida: cuatro hombres presionando y mucho tr芍fico en secundaria. Cuando la f車rmula empez車 a fallar, cambi車 el plan y lleg車 la presi車n a Manning, que durante el tercer cuarto se llev車 una aut谷ntica paliza. Los Giants tienen un problema en su backfield, con un Jennings que definitivamente se ha quedado estancado, y con una l赤nea que suda sangre para abrir una puerta. Odell Beckham, Victor Cruz, Shepard y compa?赤a podr芍n ser un peligro profundo letal, pero si solo sabes hacer eso, no hay sorpresa posible.
Sin embargo, durante el segundo cuarto, cuando el gigante despert車, la defensa de los Cowboys termin車 desarbolada y no hubo plan que valiera. Touchdown de Donnell y touchdown de Shepard. Como dos pu?aladas que dejaron fr赤a la grada de Dallas. La labor de Buld車zer del ataque vaquero, paciente pero muy pr芍ctico hasta entonces, pod赤a quedarse en nada con la explosividad de Nueva York.
La defensa de los Giants se vio superada hasta el tercer cuarto. Los Cowboys no se metieron en ning迆n l赤o. Pase, carrera, pase, carrera. Nula imaginaci車n pero m芍ximo rendimiento. Y nada de Dez Bryant ni de frivolidades. Pases a go-go a Witten y a Beasley. Cuanto m芍s cortos y menos arriesgados mejor. Facilito y a la mano con un solo mandamiento: no equivocarse. El 迆nico problema fue que en la primera parte Elliott no consegu赤a romper. Se estrellaba una y otra vez contra el front seven de los Giants, que tambi谷n lo ten赤an sencillo ante un planteamiento tan conservador. El corredor termin車 la primera mitad con 31 yardas en 15 intentos. Dos m赤seras yardas por carrera. Y ese fue el motivo fundamental por el que las largu赤simas series de los Cowboys, interminables, terminaban irremediablemente en field goal. Tres series en la primera mitad, tres patadas a palos. 9-13 en el marcador. Los Giants por delante por la falta de repr赤s de sus rivales y Tony Romo cada vez m芍s en la memoria de los habitantes del AT&T Stadium.
La segunda mitad empez車 con Manning haciendo una de las suyas. Pase completo a Carr, con el problema de que ese se?or es cornerback de Dallas. Intercepci車n que coincidi車 con la irrupci車n de Ezekiel Elliott. Que nadie piense que el corredor lleg車 para quedarse: arrancada de ocho yardas en la red zone y galopada de otras ocho para touchdown (16-13). La actuaci車n del corredor elegido con el pick 4 no debi車 hacer muy felices a sus seguidores, que esperaban a un jugador mucho m芍s efectivo. Al menos les dej車 de regalo su primer touchdown# aunque a la larga no fuera suficiente, e inexplicablemente Garrett decidiera prescindir de sus servicios hasta el final del partido.
A partir de esa anotaci車n, y mientras la defensa de Dallas pudo presionar a Manning, el partido entr車 en una fase de colapso ofensivo. La din芍mica se rompi車 moment芍neamente con un nuevo field goal de Dallas (19-13), pero siempre con la sensaci車n de que la ineficacia se deb赤a m芍s a la inoperancia de los ataques que a la labor de unas defensas que boqueaban tras cada jugada.
Todo el gui車n se rompi車 cuando McAdoo decidi車 sentar a Jennings y darle el bal車n a Vereen. El &no huddle* de los Giants hab赤a hecho su labor de desgaste durante todo el partido y la l赤nea defensiva de Dallas se derrumbaba, mientras el corredor la atravesaba limpiamente una y otra vez y Eli terminaba conectando con Victor Cruz, resucitado, que volvi車 a bailar salsa sobre un emparrillado como solo 谷l sabe (19-20). Los visitantes estaban solo un punto arriba, quedaban m芍s de 6 minutos, pero parec赤a imposible que los Cowboys pudieran volver a levantarse. El repertorio de Prescott es demasiado corto y los Giants ya se hab赤an aprendido que con defender a Witten era suficiente. Elliott segu赤a sin ser utilizado y a Dez Bryant solo le llegaban balones inatrapables. La imagen de Romo sobrevolaba el estadio mientras las c芍maras le enfocaban en la banda.
A falta de un 1:12 los Cowboys recuperaron el bal車n porque los Giants no se atrevieron a intentar un cuarta y uno en la yarda 37 rival. En otra 谷poca esa indecisi車n habr赤a sido la tumba de los de la Gran Manzana, y m芍s con Romo delante. Sin embargo, Prescott no est芍 preparado aun para realizar misiones imposibles.
Hoy en Dallas ya no hay nadie que no eche de menos a Tony Romo.