Iago Aspas quiere ser el dolor de cabeza de un Rayo con resaca
El moa?¨¦s liderar¨¢ una vez m¨¢s a un Celta que pretende remontar en LaLiga para llegar a Europa. Enfrente, un equipo rayista que est¨¢ haciendo historia.
La euforia que se vive en Vallecas por el pase a semifinales de Copa provoca una tremenda envidia en Vigo. Y que nadie diga que es sana porque son dos palabras ant¨®nimas. M¨¢s de uno y m¨¢s de dos se acordar¨¢ hoy de aquella tr¨¢gica noche de Reyes en Mallorca, cuando el Celta se despe?¨® por el terrapl¨¦n copero antes de llegar a la curva de la ilusi¨®n. La gesti¨®n de Coudet aquel d¨ªa y, sobre todo, su carrusel de excusas posterior todav¨ªa escuece un mes despu¨¦s. El Chacho debe cerrar esa herida cuanto antes con una remontada en LaLiga (sigue el partido en directo en AS.com).
El Celta, en tierra de nadie, necesita cabalgar con urgencia hasta la zona europea, por donde merodea el Rayo desde que comenz¨® la temporada. Ahora, con la semifinal de Copa a la vuelta de la esquina, Iraola quiz¨¢s piense en las rotaciones, en priorizar la eliminatoria ante el Betis. Ser¨¢ dif¨ªcil incluso para los jugadores borrar durante noventa minutos una oportunidad hist¨®rica de semejante calibre para centrarse en dar la talla en Bala¨ªdos. A pesar de todo, el duelo promete un buen rato de f¨²tbol, con dos equipos que no esquivan el riesgo por ir al ataque.
Coudet dispondr¨¢ de su once de gala, con Ara¨²jo incluido. El mexicano lleg¨® a ¨²ltima hora, con un largo viaje a su espalda, el siempre tedioso jet-lag y la liberaci¨®n por acercar a M¨¦xico al Mundial despu¨¦s de unos compromisos bastante tensos. Si el Chacho no lo ve ¨®ptimo, jugar¨¢ Murillo, pero parece improbable. El resto del once ser¨¢ el que ya se conoce de memoria a orillas del Lagares, con Beltr¨¢n recibiendo a su exequipo en el momento m¨¢s dulce de su carrera, con Denis descontando bailes vestido de celeste y, sobre todo, con Aspas en modo leyenda. El moa?¨¦s tiene el talento en ebullici¨®n, algo que no parece suficiente para Luis Enrique, pero que le basta para generar p¨¢nico entre los rivales. Esta tarde intentar¨¢ ser el dolor de cabeza de un Rayo con resaca.
De todas formas, las resacas se llevan mucho mejor despu¨¦s de una noche m¨¢gica. La del pasado mi¨¦rcoles en Vallecas pasa directamente al olimpo. No fue una eliminatoria m¨¢s, fue un pase a semifinales cuarenta a?os despu¨¦s. Es estar a dos partidos de una final, a tres de un t¨ªtulo. Falta encajar el zapato para que Cenicienta se corone como reina. El vestido est¨¢ encargado, pero antes habr¨¢ que remangarse para hacer la faena dom¨¦stica. Iraola no quiere cuento de hadas todav¨ªa, prefiere empaparse del sudor proletario.
